-¿Cómo conseguiste eso, KyungSoo? -Preguntó al tener la revista-. Ni siquiera es un ejemplar reciente.

Ahí pudo notarlo, ChanYeol no era como él.
Su forma de hablar, su manera de ser, tenía que ser un Príncipe o un sueño.

-E-eso no importa.

Claro que si importaba.

Cuando ChanYeol y su madre se fueron se despidieron sin profundizar, pero la señora Park alcanzó a decirle «Kelso» una vez más.

ChanYeol rodó los ojos y se disculpó mentalmente con KyungSoo, mientras él tan sólo giró lentamente la cabeza, sonriendo de forma penosa.

Salieron de la sala y para Kyung fue como un balde de agua fría, un prefacio, una compuerta hacia la triste realidad.

La vida de ChanYeol a la que KyungSoo no pertenecía volvía lenta, pero certeramente. Él quizás tan sólo era una tangente, un respiro o un pasatiempo.

Esos pensamientos hicieron que su corazón se oprimiera dolorosamente, Dae sólo lo observaba mientras tomaba un poco de café, olía levemente el aroma que expedía las pequeñas ondas de vapor.

-¿Crees que a Minnie aun le gusta el café? -No volteó a ver a KyungSoo y se concentró en el decanto de la taza.

KyungSoo se volteó desconcertado.

-¿Cómo? -Era muy estúpido, pero por ahora el cerebro Kyung estaba más concentrado en otra cosa-. El chico que me hace feliz acaba de salir por esa puerta y pienso que no va a regresar... ¿Tú crees que yo tengo tiempo de siquiera pensar en alguien que no sea ChanYeol?

Chen dejó su taza en el mueble más cercano, comenzaba a sentir esa misma incertidumbre que KyungSoo tenía hace unos minutos.

-Disculpa si te molesto con mis problemas, no sé, no has sido muy buen amigo últimamente -Bien, eso era lo que pensaba desde que ChanYeol se había mudado a su departamento, sin que KyungSoo se lo consultara.

Sí, tal vez había sido un poco mal educado por parte de KyungSoo, pero él no pensó que le incomodaría sobretodo porque Irene solía quedarse con ellos por semanas y nunca pedían la opinión del chico.

Además, había suficiente espacio como para que no se vieran las caras en días, de no quedarse con KyungSoo, la estancia de ChanYeol posiblemente seguiría en la estación, descansando incómodamente en la bodega o en la misma oficina de JongDae.

Aún mejor, estando en la oficina de KyungSoo, en la que se podía palpar su personalidad. Aunque bueno, el dueño de la oficina se daría cuenta de que un gigante torpe había pasado toda la noche en ella.

-¿Qué? -Contestó crispado mientras no podía aceptar que JongDae, su mejor amigo, estuviese diciendo esas palabras en su contra-. ¿Dices qué no he sido un buen amigo?

Se dio un segundo para poder calmarse pero pasó lo contrario, él también tenía muchas cosas que decir.

-Por primera vez pienso en mí al estar con ChanYeol, soy inmensamente feliz y soy yo mismo cuando estoy a su lado. Entiendo que lo de Minseok te haya afectado mucho, pero yo estuve ahí para ti, apoyándote, como he estado los últimos cinco años, cubriéndote en el trabajo, mientras tu te ibas de fiesta con Irene, haciendo tus deberes para que tú cobraras el doble de sueldo que yo, rechanzando el puesto de mis sueños porque yo creía que mi ascenso te lastimaría y ahora que creo perder a la persona que amo mas que a nada... ¿Tú quieres que yo piense en ti, una vez más antes que mis intereses? -El propio Kyungsoo se asombró de saber que todo eso se había guardado en su alma, pero aún así su molestia no decayó-. ¿Y yo he sido mal amigo por querer tener una relación? Sinceramente, no sé si lo que sientes por Minseok sea amor, pero en dado caso si te ha dejado ciego y te has vuelto injusto conmigo.

KyungSoo trató de alejarse de allí sin decir nada más pero JongDae lo detuvo.

-¿Ciego yo? -Rió un poco en voz baja-. Has pasado más de tres meses con un chico que no conoces, ¿Acaso no lo notaste? Su forma de hablar, comer, de caminar... ¿No te dicen nada?

KyungSoo se volteó hasta poder establecer contacto visual con su amigo, y resultaba dolorosa por la reciente capa de honestidad destructiva que los rodeaba.

-¿Notar qué? -Preguntó preocupado.

-ChanYeol no es de tu estatus social, ni siquiera de un cercano. El chico tiene quien le ponga los zapatos por dinero, tiene un emporio, una empresa que es bien reconocida en toda Corea... -Dae no quería lastimarlo pero si todo resultaba como él creía respecto a ChanYeol y KyungSoo, era mejor empezar a poner los pies sobre la tierra-. Y es más que probable que ustedes no terminen juntos.

El corazón de KyungSoo se detuvo por unos segundos. Su boca comenzó a resecarse, fue todo un idiota.

¿Cómo no lo notó antes?

El auto moderno, el apartamento lujoso, su rectitud al caminar. No eran más que señales.

Pasó poco hasta que volvió a levantar la vista, pero ésta ya no tenía nada de brillo.

Dae se acercó preocupado en cuanto vio su palidez, hasta ahora pensó que hablar, hubiera sido mejor desde antes y no ahora que su amigo parece estar encantado con el chico de grandes orejas.

Lo sostuvo de los hombros cuando pensó que iba a desvancerse.

-¿Estás bien? -Preguntó mientas se maldecía mentalmente por ser el amigo mas egoísta de la historia y sentaba a KyungSoo en el sofá-. No quería decirte esto, no ahora... pero como que es hora de despertar del sueño. Y-yo iré a la estación.

KyungSoo asintió, tampoco estaba molesto con JongDae, era más importante lo que él había dicho.

«Es más que probable que no terminen juntos.»

Su pecho comenzó a doler un poco más y se dio cuenta de cuanto anhelaba un futuro con ChanYeol, aunque antes él lo hubiese negado:

-Las historias de amor no duran para siempre.

-¿Cómo es que estás tan seguro? -Preguntó a Kyungsoo mientras disfrutaban de un helado caminando por el parque en su segunda cita.

-Un autor no se pasaría la vida entera narrando la vida de una pareja casada, con hijos y envejeciendo.

Le dolió pensar en ello, pero cuando ChanYeol se volteó hacia él con una enorme sonrisa, la tristeza desapareció.

-Yo estaría dispuesto a escribir una historia así contigo -el otro rió levemente, pero no burlándose, más bien estaba un poco impresionado de la enorme imaginación que ChanYeol tenía.

Pero el timbre sonó sacándole de sus pensamientos, él caminó hasta la puerta y la abrió.

Más no había nadie afuera, sólo una pequeña caja café de cartón, con una nota: «Para: Do Kyung Soo.»

Vio hacia ambos lados de la calle, también se aseguró de que no había nadie fuera, tomó la caja entre sus manos y la llevó hacia adentro.

Cogió uno de los cutter del escritorio que estaba en su habitación y la dejó justo ahí.

La vio por unos segundos y luego pensó en lo que ChanYeol dijo antes de irse.

"Volveré pronto".

¿En realidad iba a volver? Y si no lo hacía... ¿KyungSoo podría continuar sin él?

Es que era patético, siempre se burlaba de las personas que quieren matarse por amor, pero por estos días, eso no suena tan descabellado.

Sacudió la cabeza negándose a esos pensamientos, insertó el objeto punzocortante en la pequeña caja, lo movió hasta la última parte de la derecha y entonces abrió la caja.

Una revista, una de esas que nunca leía y mucho menos estar al pendiente con ellas.

Pero está tenía algo especial, tenía a su novio en la portada, anunciando una boda próxima.

No precisamente con el, sino con Byun BaekHyun.

No pudo evitar que una lágrima cayera por el ojo derecho y después una por el izquierdo, hasta que empapó su rostro completo.

Algo si le molestaba de todos los enamorados suicidas es que necesitaban de alguien para poder ser felices, ahora KyungSoo dependía de ChanYeol y le hizo sentirse débil.

Si alguien había dejado esa caja fuera del departamento para herir a KyungSoo, lo había conseguido.

Lloró recostado en la cama, lloró como nunca había pensando que lo haría y menos por amor.

Dios, prefería un golpe de los que recibía en alguna misión que algo como eso, le dolía el pecho y era inexplicable pero ciertamente con ese malestar no se podía vivir.

Se quedó allí por mucho tiempo, hasta que el viento comenzó a soplar y se tapó con la manta más gruesa que encontró en la cama, pronto se quedó dormido.

Porque dormir era menos doloroso.

Hasta que escuchó pasos que venían desde la sala, y supo que ChanYeol había llegado, su corazón se liberó un poco.

-Eso es noticia vieja, de verdad, KyungSoo -se acercó hasta él y gateó en la cama hasta tener el cuerpo de su novio lo suficientemente cerca para hablarle-. Debes creerme.

KyungSoo no le dirigió su mirada, y ChanYeol se sentó frente a él.

-Hablé con mi madre, ella sabe de ti, ella sabe que te prefiero a ti antes que a todo, todo estará mejor ahora -ChanYeol se acercó más al pequeño, y lo abrazó lentamente, anticipando un rechazo avanzó con sigilo, pero KyungSoo cerró los ojos-, lo prometo.

-¿Prometes que todo estará bien? ¿Qué no te vas a ir de mi lado?

-Kyungsoo, jamás -dijo susurándole al oido y depositando besos pequeños en cerca de su oreja-, jamás voy a dejarte solo.

-¿Jamás? -Preguntó un poco mejor a ChanYeol.

-No señor.

KyungSoo sonrió de forma efímera, sin que ChanYeol lo notara, se recostó plácidamente al lado de su novio, para cerrar los ojos, y también dejar atrás este mal día.

¡LLEGAMOS A LAS 2K LEÍDAS!
*Llora de emoción* ya saben... los feels❤.
Gracias por seguir esta historia hasta donde va, espero no decepcionar a nadie, y por todo el apoyo de cada uno.
No lo puedo expresar en palabras, lo cual es extraño porque hago fanfics😂😂😂.
Mñn... ¿Algo más? ¿Les está gustando esta historia? ¿Demasiado drama?
Tengan una bonita noche y lets love!❤