En medio de un campo de flores, cerca de un gigantesco árbol de hojas color frambuesa, comenzaron a aparecer pequeñas chispas blancas. 

Pronto, un gigantesco destello blanco apareció y de este salieron los Mane 5 junto a Twilight, Thunder y un bebé dragón, envueltos en una especie de escudo amarillo que descendió lentamente hasta tocar el suelo. Sunny poco después cayó rendida y el escudo desapareció, al igual que sus alas y su cuerno.

—La próxima vez, avisa antes de hacer eso— Dijo Zipp, un tanto mareada y desorientada.

—¿Estamos muertos?— Preguntó Izzy con inocencia.

—No... pero un poco más y lo habríamos estado— Aclaró Hitch. 

—¿Estás bien?— Preguntó Thunder, acercándose a Pipp y extendiendo su caso.

—Ah... s-si...— Respondió la pegaso, aceptando el casco del pony y poniéndose en pie. —G-Gracias, Thunder—

—De nad... ¡Princesa Twilight!— Exclamó Thunder, que corrió a auxiliar a la alicornio mayor.

La Princesa de la Amistad se puso de pie con dificultad, pronto fue auxiliada por Thunder y Pipp, quienes la ayudaron a mantenerse de pie, fue el guardia quien sacó de debajo de su ala un kit de vendajes, vendo el ala de la alicornio para intentar detener el sangrado, al acabar se apartó un poco de la princesa.

—Te lo agradezco, Thunder, a ti también, Pipp—

Zipp verificó que su novia estuviese bien y viceversa. Por su parte, Hitch se sorprendió de que Sparky siguiese dormido en su espalda, a pesar de todo el ruido y la conmoción que vivieron hace unos minutos. 

Y Sunny, que aún se sentía algo adolorida, trató de levantarse, pero terminó cayendo en el suelo de todas formas. Hitch notó esto y sin pensarlo corrió a su lado y le ayudó a ponerse en pie, sirviendo como apoyo en caso de que ella se tambalease.

—Gracias Hitch...— Agradeció Sunny.

—No es nada— Dijo el sheriff.

—Bueno, ahora que estamos a salvo... ¿Alguien tiene la más remota idea de que acaba de pasar?— Preguntó Zipp.

—Creo nosotros no, pero ellas si— Dijo Hitch, mirando a la terrestre y luego a la alicornio. —¿No es así, Sunny, Princesa Twilight?—

—Ese... sujeto... era el Rey Sombra— Dijo Sunny, aún agotada y adolorida.

—¿Rey Sombra?— Repitió Izzy.

—¿"Rey" de qué exactamente?— Preguntó Pipp.

Sunny consiguió levantarse por completo, con algo de ayuda de Hitch, y sacó el diario de su padre con la estrella de 6 puntas para buscar rápidamente una página. 

Al encontrarla, se detuvo y mostró la página al resto de ponis, mientras comenzaba a narrar, pero fue Twilight quien empezó a hablar.

—El Rey Sombra es un unicornio con un corazón podrido y lleno de egoísmo— Comenzó a explicar la Princesa de la Amistad. —Mucho antes de que mis amigas y yo llegáramos al mundo, el Rey Sombra fue el gobernante de un antiguo reino llamado el Imperio de Cristal, donde todo estaba, literalmente, hecho de cristal, sus habitantes incluidos—

—¡¿Un Imperio hecho solo de cristal?!— Exclamó Izzy con entusiasmo.

—El problema era que Sombra tenía a todos los habitantes esclavizados, y su brillo desapareció durante años. Entonces, las princesas gobernantes de Equestria de esa época, Celestia y Luna, lanzaron un hechizo sobre él que lo convirtió en una sombra. Pero con su último aliento, Sombra lanzó una maldición que hizo desaparecer el imperio por mil años. Un día, el Imperio volvió, y la Princesa Celestia nos encargó a mis amigas y a mi: defender el Imperio de Cristal del Rey Sombra—

—Supongo que lo lograron, ¿No?— Preguntó Zipp.

—Es difícil de explicar— Continuo Sunny hablando. —Había otra Princesa llamada Cadance, a la cual se le encargó reinar el Imperio, y fue ella junto a un dragón llamado Spike que lograron derrotar al Rey Sombra usando un artefacto mágico llamado "Corazón de Cristal", alimentado por el amor de todos los ponis de cristal. El Corazón hizo que Sombra se quebrara en mil pedazos y él... bueno... ya saben...—

—Pero si fue derrotado, ¿Como volvió?— Cuestionó Hitch.

—Bueno, meses antes de que Twilight Sparkle se convirtiera en la gobernante de Equestria, un carnero llamado Grogar lo revivió con el fin de hacerlo unir fuerzas con otras amenazas de aquel entonces para dominar Equestria, pero eligió hacerlo solo. Y casi lo consigue de hecho, pero las Guardianas lo derrotaron y lo encerraron en un cristal que quedó en cascos de la princesa Cadance. Eso es lo último que hay escrito de Sombra en el diario de mi padre...—

—Pero si Sombra fue encerrado en un cristal y ahora es libre, entonces...—

—Alguien lo liberó de su prisión— Terminó Pipp por su hermana.

—Y lo hizo sabiendo lo que eso significaba— Dice Twilight.

—...Tyler...— Murmuró Izzy, pero fue escuchada por Zipp.

—¿Quién es Tyler?— Preguntó la pegaso blanca un tanto confundida.

—...—

—¿Izzy?— La llamó Sunny. —¿Tú sabes algo de esto?—

—....Tal vez...— Respondió la unicornio, un tanto preocupada. —Sombra dijo que "Tyler tenía razón", y eso me dejó pensando que... quizás fue él quien lo liberó...—

—No quiero sonar grosera, pero... ¿Realmente importa este Tyler?—

—Si por él es que ese tal Sombra es libre y causó todo un caos en Zephyr Heights y Maretime Bay, entonces sí que importa— Dijo Thunder.

—Thunder tiene razón— Añadió Hitch —Muy bien Izzy, ¿Qué sabes sobre ese Tyler?—

—Tyler es un unicornio que nunca salía de su casa. Pero él no era así. Éramos amigos de potros, y aunque siempre decía que odiaba las historias sobre la antigua Equestria y como resolvían todo con la amistad, él siguió conmigo por un tiempo, pero...—

Izzy tragó antes de seguir hablando.

—Un día encontró un libro muy extraño. Lo poco que logré leer de él no me gustó y se lo dije a Tyler, pero me hizo a un lado al decirle lo malo que era ese libro. Dejamos de hablarnos y se encerró en su casa. Las pocas veces que me crucé con él después de no volvernos a hablar, le oía murmurar sobre cuanto odiaba la amistad y cuanto deseaba usar magia para mostrarle algo a todos... Supongo que nunca consideré que podría llegar a hacer algo así...—

Izzy sintió un ala de Zipp posarse sobre su espalda, lo cual la calmó un poco.

—Si este tal Tyler fue el que lo liberó, entonces quizás también deberíamos detenerlo a él, ¿no?— Comentó Thunder.

—Tyler muy seguramente es el Rey Sombra/Creo que Sombra es Tyler— Dijeron Twilight y Sunny de pronto.

—¿Qué cosa?— Dijeron los otros cinco ponis al unísono.

—Estoy leyendo un poco más de estas notas, y dicen que incluso si Sombra era liberado, solo podía ser una amenaza real al adentrarse en el cuerpo de un unicornio con un corazón tan oscuro como el suyo— Explicó la terrestre. —Supongo que Tyler es ese unicornio—

—Entonces, si derrotamos a Sombra, derrotamos a Tyler— Supuso Hitch

—¿Pero como vamos a vencerlo? Por más buena que sea Sunny peleando, Sombra sigue siendo un unicornio de millones de años de edad— Dijo Zipp. —Ni tú ni la Princesa Twilight pudieron hacerle frente ¡Y eso que ambas son alicornios!—

—Usaremos el Corazón de Cristal— Dice Twilight.

—...Un momento... Oye Sunny, ¿Tu no dijiste que una de las princesas y un dragón lo derrotaron con un Corazón de Cristal?— Pregunto Pipp.

—¿Si?— Respondió la terrestre, para luego jadear al darse cuenta de a donde querían llegar su mentora y la pegaso. —¡Es cierto!—

—Uh... me perdí un poco— Dijo Izzy.

—Si el Corazón de Cristal es la que venció al Rey Sombra hace millones de años, quizás ese mismo corazón sea la clave para detenerlo otra vez— Explicó la terrestre. —Literalmente fue destruido por el poder de ese Cristal, lo que significa...—

—¡Lo derrotaremos!— Exclamó Izzy emocionada.

—Liberando a todos los ponis bajo su control en el proceso— Añadió Hitch.

—Umm... no quiero sonar como el aguafiestas, pero... ¿Saben siquiera en dónde puede estar ese Corazón de Cristal?— Cuestionó Thunder.

De pronto hubo silencio absoluto y no hubo respuestas por parte de nadie. 

Zipp volteo a ver a Twilight. —¿Tu sabes dónde puede estar?—

—No, la verdad es que no...— Contesto la mayor. —Si lo supiera lo habría buscado apenas sentí la magia oscura de Rey Sombra, pero no sé dónde es que pueda estar oculto—

Los Mane 5 y Twilight intentaron pensar en algún sitio en el que empezar a buscar el dichoso Cristal, pero nadie tuvo ideas. 

Al menos, no hasta que Sunny volvió a hablar.

—Tal vez no sepamos dónde buscar... pero sé quién puede ayudarnos...—

—¿Quién?— Preguntó Hitch, el cual solo obtuvo una mirada de "adivina" por parte de Sunny, y entonces cayó en cuenta de a quien se refería. —¡Oh no! ¡No no no no no no no! ¡De ninguna manera! ¡Ese sujeto está loco de remate!—

—¿De quién hablan?— Preguntó ahora Zipp, pero al recibir la misma mirada por parte de Hitch, también cayó en cuenta de a quién iban a buscar. —Ah, ¿Qué? Sunny, ¿Estás segura? Nos causó muchos problemas cuando robó el Cristal de la Unidad—

—Y no es el más cuerdo que digamos— Añadió Izzy.

—Y ni hablar de su gusto por la moda— Dijo Pipp, sintiendo un escalofrío.

—¿Tienen alguna mejor idea?— Preguntó Sunny.

Al no recibir respuesta, la pony logró invocar de nuevo su cuerno y alas al ya sentirse algo más renovada que antes, e hizo brillar su cuerno.

—Um, estoy algo perdido— Dijo Thunder, quien volteo a ver a la Princesa de la Amistad. —¿A quién vamos a buscar?—

—No tengo la menor idea— Contesto la Princesa, que tampoco entendía a quien iban a buscar, solo comprendió que a quien buscarían era alguien que en el pasado robo uno de los Cristales de Unidad.

Canterlot, Antigua Capital De Equestria.

Una extraña criatura, cuyo cuerpo estaba compuesto de varias partes de distintos animales, se miraba en un espejo mientras tronaba sus dedos e intentaba cambiarse el look. 

Su aspecto actual era de sus cejas y cabellera blancas siendo demasiado largos, algo que quería cambiar tras siglos de no haberse cuidado en lo absoluto. 

Primero probó con un aspecto afro.

—Nop—

Tronó sus dedos y ahora cambió a varias colas de caballo.

—Muy femenino—

Volvió a tronar sus dedos, mostrando ahora un look parecido al de Elvis Presley.

—Muy anticuado—

Probó con un look que se asemejaba al de los sombreros de los guardias de Londres.

—Muy británico—

Otra vez tronó sus dedos, mostrando sus cejas algo cortas y su cabello muy corto y de color negro. Un ataque de nostalgia alcanzó a la criatura, quien no pudo evitar sentir tristeza e incluso soltar unas cuantas lágrimas.

—...Muy nostálgico—

Tronó los dedos nuevamente y su look actual apareció nuevamente. 

De pronto todo su cuerpo se movió a manera de escalofrío, y detrás de él un destello blanco apareció y le cegó por un momento. 

Cuando el destello se fue, se encontró con siete ponis y un bebé dragón tirados en el suelo.

—Creo... que nunca me acostumbraré a eso— Dijo Hitch, sacudiéndose.

Sunny hizo desaparecer sus alas y cuerno y miró a sus alrededores, mirando algo melancólica la ciudad de Canterlot, aún en un lamentable estado de desgracia. De pronto, fue rodeada por una serpiente que se transformó en la criatura de antes y no dudó en abrazar a Sunny con fuerza.

—¡Sunny querida!— Exclamó el draconequus con alegría. —¡Me alegro de verte de nuevo!—

—H-Hola... ¡AY!... Discord— Pronunció la terrestre con dificultad. —M-Me alegra verte... ¡TAMBIÉN!—

Discord soltó de pronto a Sunny al notar que sobre Hitch había un bebé dragón, el cual apenas se venía despertando.

—¡UY! ¿Quién es esta criaturita tan adorable?— Preguntó la criatura.

—Él es Sparky. Encontré su huevo un día en la playa y me he hecho cargo de él desde que nació— Explicó Hitch.

Discord no pudo evitar notar que, a pesar de ser un bebé dragón, este ya contaba con alas.

—Um... qué curioso— Dijo Discord.

—¿Qué cosa?—

La criatura se multiplicó, ahora había dos Discord y ambos vestían con batas de doctor, mientras examinaban a Sparky, quien miraba a los dos Discord con emoción.

—¿Tu pequeño nació con las alas?— Cuestionó un Discord.

—Ah... si— Contestó el sheriff.

—Extraño. Se supone que no les crecen hasta llegar a la muda en la adolescencia— Explicó el otro Discord, midiendo con una cinta métrica las alas del bebé dragón.

—¿"La muda"?... La Princesa mencionó algo al respecto hace unas semanas...—

—Supongo que es una estrategia de marketing para que el juguete se venda más rápido— Exclamó el primer Discord, con el segundo asintiendo energéticamente. El segundo draconequus arqueó una ceja. —¿"La princesa mencionó algo al respecto"? ¿Hablas de una de tus amigas pegaso?—

—No, él habla sobre mi...— Hablo alguien desde detrás del draconequus. 

Ambos Discord se voltearon de golpe al escuchar aquella conocida voz, una que hacía miles de años no había oído.

—...Twilight...— Murmuraron ambos Discord's.

—Discord— La Alicornio le dio una pequeña sonrisa a su amigo, aunque está se desvaneció en menos de un segundo. Sus orejas se pegaron a su cráneo evidenciando su sentir, jamás pensó ver a uno de sus mejores amigos tan demacrado, no desde que Fluttershy murió... Su corazón punzaba de manera dolorosa, se sentía horrible por su amigo, él debió sufrir de una horrible soledad, sin amigos en los que apoyarse para superar el dolor de su perdida. —...Yo...—

La Princesa de la Amistad no pudo seguir hablando cuando recibió un fuerte abrazo. La yegua derramó varias lágrimas y correspondió al abrazo que le estaba dando el draconequus, era cálido y reconfortante, lleno de cariño.

—Eres tu... Bueno, casi...— Susurro el amo del Caos.

—¿Tu sabes que yo...?—

—¿No eres de este mundo? Lo sé, pero aún así, me alegra poder verte una vez más, aunque no seas la Twilight a la que conocí hace tantas lunas, aquella que me brindo su casco en amistad, sigues siendo ella, de otro mundo o una línea de tiempo alterna, pero sigues siendo ella...— Discord soltó a la Princesa alicornio e hizo aparecer una lupa gigante, observando con ella a la Princesa de la Amistad. —Umm... Por lo que puedo ver, tú altura es como la de Luna y tu gama de colores es la que tuviste cuando derrotaste a aquel absorbedor de magia, ¿Por qué ahora tienes ese patrón de colores si se puede saber?—

Twilight soltó una pequeña risa al ver la enorme lupa y limpio sus lágrimas, luego procedió a contestar la pregunta que el draconequus le había hecho. —Lo adquirí cuando vencí al trio junto a las demás criaturas y vencimos a los Windigos...—

Los ojos Discord se desviaron hasta el ala herida de Twilight, iba a preguntarle al respecto pero fue interrumpido.

—...¿Qué está ocurriendo?— Preguntó Thunder.

—Descuida, Discord siempre es así— Aclaró Pipp. —Te acostumbrarás... Tal vez...—

—Les agradezco por haber arruinado un hermoso reencuentro... Ummm... ¿Qué tenemos aquí?— Pronunció la criatura apareciendo detrás de Thunder, el cual se llevó un buen susto. —Tú eres alguien nuevo, nunca te había visto por aquí...—

El hecho de que uno de los ojos de Discord literalmente saliera y se acercara mucho al pegaso asustó al mismo, y seguía sin entender que diablos estaba ocurriendo.

—Discord, este es Thunder, un guardia real de Zephyr Heights— Explicó Pipp. —Aunque ahora es el guardia personal de la Princesa Twilight, al menos hasta que ella consiga a alguien más—

—Definitivamente eres guardia, tu vestimenta te delata— Dijo Discord. —Bueno, supongo que debo presentarme como es debido—

—Espera, Discord, no vayas a hacer...— Intento decir la Alicornio.

Tronó sus dedos y de pronto los cinco ponis estaban sentados en sillas en frente de un escenario. A pesar de que a estas alturas ya deberían estar acostumbrados a todo lo que es Discord y lo que hace, seguían confundidos por el repentino cambio de ambiente. En el escenario, apareció otro Discord vestido con traje de gala negro. Este se aclaró la garganta e hizo aparecer un micrófono en una de sus patas.

El telón del escenario trasero se abrió y otros Discord vestidos en trajes de gala color blanco aparecieron marchando hasta dividirse en dos filas y dejar paso libre en medio de ellas. 

—¿Hola? ¿Está encendido? Probando, 1, 2...— Dijo el draconequus. —Yeguas, caballos, Princesa Twilight y bebé dragón: ¡Permítanme presentarme!—

—...Nada exagerado...— Twilight se cubre su rostro con su ala sana.

El Discord con el micrófono nuevamente se aclaró la garganta y estaba a punto de hablar, pero una mini explosión de polvo en medio del escenario no se lo permitió y apareció Discord, con su apariencia normal.

—Soy el señor del caos, amo del sinsentido y dueño de las más caóticas locuras que se te puedan imaginar— Anunció la criatura.

Los demás Discord se transformaron en fuegos artificiales y salieron volando hacia el cielo, formando el nombre de la criatura en el mismo. De pronto, otro Discord apareció al lado de Thunder, y este se asustó por la repentina aparición de la criatura.

—Pero tú puedes llamarme Discord—

Tronó nuevamente sus dedos y todo lo que había hecho recién desapareció de golpe. Los siete ponis nuevamente se encontraban en el suelo, y Discord de pronto levantó uno de los cascos de Thunder y lo agitó alocadamente.

—Un placer conocerte, amigo— Dijo Discord.

—Uh... ¿Igualmente?— Respondió Thunder con incertidumbre. —Perdón la pregunta, pero ¿Qué eres exactamente?—

—Descuida, nadie lo sabe al principio— Dijo Discord, para que luego aparecieran otros 4 a su alrededor vestidos de científicos mientras lo "examinaban". —Soy un draconequus, una criatura con cabeza de pony y cuerpo de distintos animales. Encaja con mi descripción del amo del caos, ¿No te parece?—

—Discord...— Intervino Sunny. —Quizás no sea un buen momento para decir esto, pero...—

—Sunny, querida, no es necesaria tanta formalidad. No eres una Princesa, a diferencia de las pegasos y de Twilight— Dijo la criatura, levantando a la terrestre.

—Si, no necesitas ponerte tan formal— Dijo otro Discord, apareciendo a su lado.

—...¿Okey? Escucha, necesitamos tu ayuda para resolver algo...—

De pronto, Sunny apareció recostada en un sillón grande, mientras que Discord estaba en otro asiento vestido de terapeuta con un portafolios y un lápiz en sus garras.

—¿Y cuál sería el problema, señorita?— Preguntó el draconequus de forma seria. —¿Problemas parentales?—

—¿Traumas infantiles?— Preguntó otro Discord, apareciendo del lado contrario.

—¿Un chico?— Preguntó un tercer Discord, con una sonrisa burlona y pestañeándole a Sunny.

—¡¿Qué?! ¡No!— Respondió la terrestre. —¡No me refiero a ese tipo de problema!—

—Querida, si tanto querías ser la terapeuta, solo tenías que pedirlo— Dijo el draconequus.

Tronó sus dedos y cambió de lugar con Sunny, ahora ella tenía el portafolios y el lápiz, y Discord estaba recostado sobre el sillón.

—De todas formas necesito tratar varios traumas— Dijo la criatura con un tono triste, muy seguramente bromeando.

Sunny tiró el lápiz y el portafolios, y luego literalmente agarró al draconequus de la barba y lo obligó a verla directo a los ojos.

—Pues de verdad quisiera ayudarte, pero como no me quieres decir qué sucede, no ayudaré— Dijo la criatura, para luego flotar en el aire y comenzar a limarse las uñas de su garra de águila.

—¡Pero si ni siquiera...!— Sunny iba a decir, luego respiró profundo y finalmente lo soltó. —Necesitamos tu ayuda...—

—El Rey Sombra regreso— Termino de decir Twilight con voz y mirada sería.

Discord había hecho aparecer un vaso con agua, pero antes de siquiera hacer la locura de tomarse el vidrio en lugar del agua, soltó el vaso de inmediato al escuchar el nombre de Sombra. El vaso se quebró, y Discord miró entre molesto y aterrado a Twilight.

—¿Qué quieres decir con "el Rey Sombra regreso"?— Preguntó el draconequus, sus ojos de enfocaron en la herida que tenía la princesa de la amistad.

—El Rey Sombra ha regresado, y tiene a todos en Zephyr Heights y Maretime Bay... nosotros somos los únicos que se salvaron— Explicó Sunny, mirando a sus amigos.

Discord miró al suelo con tristeza, para luego poner una expresión seria en su rostro.

—Vengan conmigo— Dijo el Draconequus con seriedad.

Tronó sus dedos y un portal apareció frente a él. Este lo cruzó sin pensar, Twilight lo siguió, pero los demás dudaron un poco antes de entrar por fin al portal.