Quizá la rareza de la que te hablé era hereditaria, pues mi abuela era una persona extraña, ahora que lo pienso y medito lo recuerdos que tengo de ella, cantante y actriz, obsesionada con el esoterismo y las ciencias ocultas, de niño siempre la vi como una superheroína de los cómics, pero para los demás era una persona que se hubiese vivido en la edad media la inquisición la hubiese quemado en la hoguera.

Su carácter, su raro saber, su belleza singular, y la penetrante y cautivadora belleza de su voz profunda y musical se abrieron camino en mi corazón con pasos tan constantes y cautelosos que me pasaron inadvertidos e ignorados. Ella me enseñó a cantar y actuar, me mostró la belleza de la teatralidad como modo de expresar emociones ocultas y crear mundos e historias que influyen en los corazones de la audiencia, pero lo más importante, me enseñó a amar la música y el arte, y que dentro de los profundos y secretos lugares de tu alma siempre hay una historia que contar, una historia que con esfuerzo, disciplina y amor por lo que te apasiona puedes salir a la luz y dar vida a un mundo inspirará a miles.

La erudición de la energía profunda, no era de índole común y el poder de su espíritu era gigantesco, tocaba varios instrumentos pero sus favoritos eran el violín y la guitarra, sus composiciones estaban cargadas de un aura de tempestuosa vida y disonancia que a su forma tenía algo inefablemente atrayente. Los momentos que pasé a solas con ella, sus largas improvisados cantos fúnebres resonarán eternamente en mis oídos.

Poseía un feeling único , enfermizo que arrojaba un fulgor sulfúreo sobre todas las cosas. Ella escribía sus partituras, tenía un enorme conocimiento teórico y técnico de la composición musical, pero también le gustaba tocar covers, pero no de bandas conocidas, sus covers eran muy peculiares. Era entre un extraño músico que nunca se había hecho famoso, pero todos inconscientemente lo conocían, me decía, estaba en todos lados, aquí y allí, era temido y amado, más temido y venerado. Elena alguna vez lo conoció, y este extraño músico le obsequió un libro con partituras de su propia creación, Elena nunca tocaba estas canciones en público, solo cuando estaba sola o cuando yo era su único espectador.

Debo decir que cuando Elena tocaba estas canciones en particular, había una extrañeza única en su ejecución, era otra, como si un ser de las tinieblas se apoderaba de ella, y valiéndose de su cuerpo, tal como el artista tomó una pluma para dibujar, este ser tomaba Elena y le utilizaba para materializar su arte aquí en la Tierra.

Pero Elena no destacaba únicamente como música y cantante, en ese aspecto era más bien estimada en su cerrado círculo que tenía de audiencia; destacaba en que se decía que era una bruja, capaz de realizar conjuros y maldiciones entre sus enemigos, y que fuerzas extrañas la protegían de amenazas terrenales. Estas ideas originaron en un hecho particular, Elena estaba a punto de casarse, pero su novio nunca llegó, la abandonó justo el día de su boda, pero su novio murió en un accidente aéreo una semana después junto a la mujer con la que se fue.

Quizá el principio este triste suceso y ha sido hoy calificado como justicia divina o karma, pero la idea de que a redor de mi abuela había algo oscuro y misterioso se reforzó con sucesos posteriores que hacían temer a sus conocidos com por lo que la mayoría optó por alejarse de ella coma pues intuían que era peligroso estarle en su entorno.

Solo un hombre la acepto tal y como es, y ese fue mi abuelo con quien tuvo una bonita relación, acepto sus extrañezas y compartía su interés por lo oculto y el misterio. Aunque por motivos de su trabajo no siempre podía acompañar a mi abuela en su extraña ciencia y con el tiempo se fue alejando de ese interés para dedicarse en su trabajo y a la subsistencia de su familia. Creo que mi abuela disfrutaba de esa soledad, amaba mi abuelo, pero también añoraba el arte, que el arte de mi abuela era de ese tipo especial que sólo puede florecer del silencio y de la soledad. Todas esas cosas creo que ya las sabemos todos, es público, lo hemos conversado muchas veces pues Selena ha sido una influencia musical muy potente para la banda, pero creo que es vital mencionarlo para poderle entender lo que viene a continuación, lo que está escrito en su diario cosas que hasta el momento nadie sabía, y que da luz para entender lo que me pasó a mí y a todos en esos meses se pandemia.