Los días pasaron y comencé a darme cuenta del Sensei tan exigente que teníamos, lo que para mi era perfecto. Entre entrenamiento y entrenamiento conocí mejor a Lee, le tengo mucha admiración, si comparamos su caso con el mío, las cosas son muy fáciles para mi. No le tuve que dar muchas explicaciones de mi motivación, lo entendió a la perfección y me apoya.

Neji era otro caso. Era el que menos convivía, siempre tomando su distancia.
Se cerraba a hablar amenos que fuera necesario o se burlara de lee. Me preocupaba que el equipo no fuera a funcionar. Y al parecer Gai Sensei pensaba lo mismo.

A pesar de que tenía muy claro mi objetivo de ser una de las mejores kunoichis de toda la aldea, no podia evitar tener en mis pensamientos a Neji. Aceptaba tener un pequeño flechazo por el, pero desde que éramos equipo no podía evitar no verlo, y lo más vergonzoso era que creo que el lo sabía perfectamente, aún cuando era de reojo.
Aveces me reprimía a mi misma y juraba que no volvería a pasar, que tenía que concentrarme, que ya habría tiempo para romances. Y otras veces me digo que no pasa nada, cualquier chica que fuera estado en equipo con Neji, le pasaría esto.
Seguí pensando eso por un tiempo, entrenar arduamente, animando a Lee a seguir su sueño, que por cierto estaba haciéndolo sorprendentemente rápido. Y si se daba la ocasión me permitía tener pensamientos de chica con Neji y observarlo.
Todo iba bien, más o menos equilibrado hasta que llego una misión de un rango más alto. Nuestra primera misión que duraba más de un día.
Se habían mandado unas cargar importantes a una aldea vecina, pero estas no habían llegado. Se pensó que la persona encargada de ello se perdió, ya que era un principiante en viajar a largos recorridos.
Nuestra misión era encontrarlo y llevarlo a la aldea donde se dirijia, luego nosotros nos regresaríamos a konoha de regreso.
Fácil.
Cuando Gai Sensei nos explico la misión, menciono que era perfecto porque había comprado una tienda de acampar nueva.
Perfecta para nosotros.

Claro que no era tan distraída para no entender, hasta Neji pudo notarlo rápidamente.
Una tienda de acampar en el bosque sería blanco fácil para cualquiera, como asaltantes. No es que pensara en nosotros como ninjas con tan bajo rendimiento y para no poder con una situación así, pero el equipo no estaba en mejores condiciones de coordinación, podía retrasar la misión.
Gai Sensei nos mostró la tienda de acampar era completamente transparente, perfecta par que pudiéramos vigilar desde adentro a los oponentes, no necesitaba de varillas para sostenerse, sólo lo hacía con chakra.
Y fue cuando Neji y yo entendimos el verdadero propósito de la tienda para acampar. Era un truco para unirnos como equipo, estaríamos literalmente más cerca, dormiríamos hombro con hombro. Para que sí tuviéramos suerte Lee y Neji harían las pases. O por lo menos este último se abriera.

Lee estaba muy emocionado por la misión de un rango así.
Neji sostenía mala cara entendiendo a la perfección el plan.
Gai Sensei le sostenía la mala cara de el con una sonrisa impecable que sólo sensei sabe dar.
Y yo, pensando en lo difícil que sería estar con el ambiente tan tenso por parte de mis compañeros.

— ¡Tenten!— Lee estaba agitando su mano en la entrada de la aldea. Gai Sensei y Neji también estaban parados. Cada uno llevaba una mochila. — ¡me muero por empezar! — la emoción de Lee era la de siempre.

Neji estaba parado con los brazos cruzados. Los tonos Naranjas del amanecer lo hacían lucir más maduro de lo usual. Aún así parecía sereno  como siempre, ropa impecable, piel impecable, cabello impecable. Todo de el lucía excelente.

— muy bien chicos, hay que hacerlo— apunto hacia el camino con decisión Gai Sensei.

Caminamos a las afueras de la aldea, poco a poco las puertas comenzaron a perderse entre los árboles, y los cantos de los pájaros eran cada vez más altos.
Lee y Gai Sensei caminaban hasta enfrente hablando sobre algo, yo iba detrás de ellos .Neji iba a unos metros al lado de mi, estaba serio y parecía relajado ya que no tenía sus brazos cursados.
Espero que el plan de Gai Sensei de unir a Neji funcione.

Caminamos todo el día, nos detuvimos dos veces, para desayunar y para comer, hasta el anochecer. Justo antes de que el sol se ocultará encontramos un buen lugar juntó a un pequeño lago.
Tomamos agua y comimos algo ligero antes de dormir.
Lee se ofreció de voluntario para hacer la primera guardia. Aunque Gai Sensei prefirió comenzar el, después Lee, yo y Neji al final.
Con su chakra la tienda se alzó y para nuestra sorpresa era más pequeña de lo esperado.
El primero en entrar fue Lee, quien sólo dejo su saco de dormir y comenzó a hacer unos ejercicios afuera. Neji me dejo pasar primero, puse mi sacó de dormir y me senté. El entro después haciendo lo mismo. El silencio se apoderó de la pequeña tienda para acampar.
Sentía que no era correcto mirarle, si lo mirara en este momento no podría con la intensidad.
Trate de pensar en temas de conversación lo más rápido que pude pero escuché como Neji soltó un suspiro, se movió dentro de su saco de dormir y pronuncio algo con áspera voz apenas audible.
— Buenas noches Tenten.

Me sentí rígida y inmóvil por unos instantes. Podía sentir mi corazon palpitar rápidamente contra mi pecho. ¿Desde cuándo neji me hacia sentir así?, un inquietante y agradable cosquilleo sentía en el estómago.

Tomando una profunda respiración me gire a mirarlo presionando esa sensación hacia abajo, estaba acostado de lado dándome la espalda. — descansa.

Horas después no podía dormir. Era muy probable que en una hora me tocara mi turno y no he descansado nada. Sigo sintiendo ese cosquilleo molesto en mi estómago. Neji no se había dado la vuelta en ningún momento, lo cual agradecía. No creo poder aguantar su mirada.
Había tratado de enfocarme en algo más, en mi entrenamiento, en las armas, en Neji...
Su espalda ancha y bien definida acaparaba mi visión, aunque no tanto como su cabello. Su cabello castaño que siempre uso largó, había visto a más hyugas por la aldea, todos llevaban en cabello largó y peinado hacia atrás. Sin embargo el de Neji me gustaba incluso más que el mío. Era un castaño obscuro, largo que hasta el final sujetado en su lugar por una liga de goma. Siempre quise tocar su cabello aunque me era inconcebible preguntárselo.
Pero ahora, que está dormido no suena tan descabellado.

Con cuidado de no hacer ruido alargue mi mano fuera de mi saco de dormir, mi corazón resonaba por mis oídos y aunque esta acción no tener nada de peligroso me ponía los nervios de punta pensar que Neji se diera cuenta de lo que estoy por hacer.
Apenas las yemas de mis dedos tocaron su cabello, se sintió bien. Era suave, tanto como el de una mujer, era agradable el tacto así que pase mis dedos hasta las puntas de su cabello. Estas estaban ligeramente rasposas y entre la oscuridad pude imaginar que necesitaba una despuntada.
Me permití relajarse al notar que Neji no parecía afectarle el sueño, incluso incline un poco mi rostro y poder oler. No olió a un producto en sí, y era poco probable que Neji usara alguna fragancia, simplemente era su olor en combinación con el ambiente fresco de la noche.
No supe cuanto tiempo estuve acariciando su cabello que pase mis dedos más arriba y cuando hundí mis dedos entre su cabello un dedo se atoró en un pequeño nudo. No le jale el cabello tan fuerte como para jalarle la cabeza pero si como para que la espalda del genio Hyuga se estremeciera. Dando por hecho que se despertó.