Estábamos corriendo en los árboles pero el peso de Lee sobre mi hombro y el de Neji se volvió más pesado. Lee no debería de cargar con todo ese peso debajo de los calentadores todo el tiempo. Habían pasado unas horas horas después de lo de Lee y aún seguía débil.

— Estamos avanzando lento— dijo Neji al detenernos sobre una rama lo suficiente ancha para recargar un momento a Lee.— Hay que llegar lo antes posible.

— No podemos obligar a Lee a ir más rápido. Podría ser contraproducente.— le recordé.

— Tiene que intentarlo — Neji parecía firme en su decisión.

— Te estoy diciendo que está débil.— subí el volumen de mi voz un poco más alto.

— no podemos darnos el lujo de ir lento, llegará un punto en donde todos los equipos estén cerca y podrían crear alianzas contra los menos expertos, seguramente habrán equipos esperando a los que lleguen tarde para quitarles pergaminos, inclusive no dudo que estén tratando de quitar más de los que necesitan, ¿es que acaso los quieres enfrentar?— Neji me miró fijamente.

— Claro que así no, pero ...— me giré a Lee quien todavía tenía sin limpiar las heridas.— Ni siquiera le hemos revisado las heridas.

— Es un ninja de konoha, puede con eso.— Neji parecía restarle importancia.

— ¡Llevo al limite todos sus músculos!, no todos lo ninjas de konoha hacen eso— lo dije recordándole que ni el ni yo pudimos con la técnica.

— Fue su responsabilidad.

— ¡No seas idiota!.

— Tu no seas tan cabeza dura.

—Chicos...— hablo Lee.— Puedo intentarlo, gracias por preocuparte Tenten...— intento levantarse pero sus piernas temblaban.

Camine hasta el impidiéndole avanzar.—No Lee, podrías lastimarte más.

— Tiene que ser fuerte por sí solo Tenten, en una misión de verdad no siempre te tendrá.

— ¿Cuál es tu problema?— me estaba cansado.

— Estoy tratando de que mi equipo sobreviva.

—¿En serio?— pregunte sarcástica.— porque no lo parece.

— Tenemos que avanzar— insistió.

— No me voy a mover hasta que Lee este mejor.

Me gusto sonar tan Segura como estaba. Cruce mis brazos sobre mi pecho mientras sostenía una larga mirada con Neji y justo cuando sentía que no podía más contra esos hermosos ojos perla, Neji desvió la mirada.

— Chicos estoy bien...solo...— Hablo poco Lee.

—¡Cállate Lee!— lo apunte con mi dedo índice.— Siéntate voy a limpiar tus heridas.

— Que sea rápido, vigilaré el alrededor.— Neji me dio la espalda y activo el Byakugan.

— Gracias a los dos— los ojos de Lee parecieron cristalizarse— Lamento ser una carga por mi irresponsabilidad.

— Esta bien, somos equipo, no tienes la culpa de ser tan amable y considerado con las personas.— las últimas palabras las marque en dirección a Neji.

Parecía una estatua, no sólo por su posición cruzada de hombros, cuerpo rígido y casi mínimos movimiento, también por sus sentimientos. Aveces, solo aveces quisiera que fuera un cómo menos frío, aún que ahora que lo pienso eso sería quitarle su encanto.

Sonreí negando con la cabeza. No Tenten. Debes de concentrarte. Fije mi mirada a Lee primero debería de empezar por su cara. Al terminar de limpiar las heridas y aplicar una pomada para la hinchazón lo ayude a apretar las vendas de sus brazos y manos, de alguna manera me recordó cuando le ayudaba a Neji.
Sin embargo no pude evitar comparar que debajo de las vendas Lee tenía muy deterioradas las manos y las vendaba para evitar más daños, a comparación de Neji quien las cubría más para protegerlas, después de todo depende mucho de ellas.
Justo cuando iba a terminar la última vuelta de la mano derecha un sonido llego a mis oídos. Casi minúsculo.

Entonces un kunai con lo que pude divisar un extraño hilo amarillo rozó mi cabello rompiendo mi liga soltando un mi chongo derecho. Al caer mi cabello al lado de mi cara ya estaba con kunai en mano y intentando proteger a Lee.

— Están en aquellos árboles— hablo Neji  quien apuntaba a la izquierda. También note que tenía varios kunai a su alrededor por lo que pude deducir que lo habían atacado.— ¡Salgan cobardes!

Tres ninjas salieron en un salto posicionándose en la rama del árbol frente a nosotros.
Un chico de aspecto fachoso y con un abrazo entablillado estaba a la derecha sosteniendo algo que parecía una lanza realmente alta. Una chica con el cabello largo y castaño sostenía un kunai con mirada fija en mí. Mientras que el chico del centro, era shioto sonriendo de lado.

— ¿Shioto?— pregunte un poco sorprendida.

— Te dije que estando aquí seriamos rivales.— apuntó a Neji con determinación — Quiero una batalla con el genio Hyuga.

Neji lo miró con el ceño fruncido y sin importancia — ¿Al menos sabes que pergamino tenemos?

— Eso no me importa, pero si a ti sí...— metió una mano dentro de su chaqueta y saco su pergamino.— Tenemos el pergamino del cielo.

— Nosotros el de la tierra.— dije

— Perfecto.— shioto tenía extraño listón que le cubrían los brazos, estos listones lo atravesaban una perlas de color marrón.
Comenzó a deshacer los nudos que impedían que él listos se soltara de su brazo.

— Cuando quieras —Neji se posicionó. Ahora su mirada era que lo tomaba en serio.

— Pero antes de comenzar, mi amigo de la lanza está lesionado— dijo apuntando al chico de su equipo.

— Lee también.— dije

— ¡No!— hablo Lee— ¡Yo puedo pelear también!.— se levanto tan rápido que pensé que caería. Pero se detuvo de pie un poco tambaleando aunque sus piernas ya no temblaban.— Muchas gracias por todo Tenten, pero déjame pelear, tu sabes lo que me he esforzado. Días y noches entrenador duro. ¿Para nada?, no lo creo. — ya no parecía tambalear pero se mira débil. — confía en mí.— me levanto su pulgar y sonrío.

— Eres idiota.—Le dije.

— Bien. Si ese chico patético pelea yo también lo haré — hablo el chico de la lanza.— después de todo está tan débil que acabaremos rápido, será como un pestañeo, hasta te podré ayudar con él Hyuga shioto.

— No. Él es mío, sin embargo si alguien lo ayuda a él aceptaré un poco de ayuda.— sonrío y corrió directo a Neji quien esquivo el primer ataque.

Una nube espesa cejo mi visión de ellos y una patada salió en mi dirección. La esquive con agilidad y sostuve con mi mano su tobillo haciendo que la chica del equipo de shioto cayera.

Sin embargo está desaparecido dando a entender que era un simple clon.
Muchos más comenzaron a salir de todas parte, tantos que se me hizo difícil la tarea de esquivarlos todos. Pronto mis ojos comenzaron a picar hasta arder por completo.
No era una simple neblina.
Cerré mis ojos por completo, no dejaría que el dolor me distrajera podía esquivar los golpes agudizando mis oídos lo más que pude, pero después ya no sólo golpees me atacaban también shurikens salian de todas las direcciones. Era buena su técnica, pero ya se había equivocado de chica a la cual atacar con armas.
Ellas eran mi especialidad. Y como experta en armas sabia como localizar al atacante.
A pesar de que las armas estén saliendo de todas partes estoy segura que la atacante solo se encuentra en un solo lugar.
Analicé los ataques con la fuerza que me los lanzaba y me di cuenta que los kunais y shurikens que venían en la dirección de atrás tenían menos fuerza que los de enfrente.

Ella estaba enfrente.
Te tengo.

Corrí aún con los ojos aún cerrados recto hacía en frente para ver si la Neblina tenía un fin. Mientras corría intentaba esquivar todos los ataques posibles hasta que mi pie sintió un relieve extraño, a pesar de que no podía ver por completo, supe que estaba un árbol frente a mí por el cambio de relieve. Concentre mi chakra en mis pies para escalarlo.
Al llevar a cierto punto la neblina se desvaneció.
Y salí con un pergamino en mi boca y haciendo un movimiento de manos los suficiente rápido para sacar un arma de el pergamino.

Frente a mí la chica me miraba un poco impresionada. Tenía unos shurikens en mano con los mismos hilos amarillos.

El arma que salió de mi pergamino fueron unos chakos con los que la golpee con agilidad en la cabeza una vez para dejarla inconsciente — Eso fue por romper mi liga.

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Este capítulo exigió mucho a mi cerebro ;~;