Capítulo II: Rumbo al infierno.

Las noticias hablaban del pueblo del Castillo Negro. El pueblo fantasma casi abandonado en la actualidad. Parecía increíble como el pueblo se había quedado obsoleto y esto avivó su leyenda oscura de algún modo.

En el pueblo solo quedaba gente muy aferrada al pasado, turistas que venían por esas historias de miedo que se contaban del pueblo o brujos que querian disfrutar el hermoso otoño que pintaban las hojas secas y naranjas en las viejas calles de lastre.

Las brumas invadían el pueblo viejo.

No quedaba casi ningún negocio, los pocos que habían, la mayoría se encontraban en el centro. La población en ese lugar era de 100 habitantes y su mayor parte de terreno era bosque o callejones adentro del bosque. Lo que una vez fue el reino de los humanos, ahora era polvo. Un pueblo que apenas se sostenía por lo mismo que lo mató... el castillo.

La cafetería del pueblo era lo único que salía del centro y estaba casi en medio de la niebla, pero aún así era un retundo éxito. Tenía clientela considerable a pesar del lugar en el que se ubicaba.

Ir a la cafetería era hermoso. Era contactar con vida en un lugar que no la tenía. La gente iba a tomar tipos de cafés que les quitaran el frío otoñal, talvez con sabor agridulce a calabaza. Y en verano se refrescaban con cafés fríos o bebidas dulces con hielo.

El pueblo parecía maldito, como si alguien o algo le hubiera lanzado un hechizo de desolación.

Habían casas abandonadas y el famoso bar del pueblo había cerrado hace años.

Aún quedaba una plaza donde los niños iban a jugar, pero era espeluznante ver como la plaza era tocada superficialmente por la niebla y humedad. Los fantasmas vagaban por todo el pueblo y se comentaba por todo el reino.

Nadie se acordaba del misero pueblo si no era por su aura fantasmal y la mayor atracción turística del lugar era el mismo castillo, que justo el día de hoy había sido noticia en todo el reino.

Las cadenas de noticias ya estaban anunciando que una muerte había embrujado el pueblo de nuevo. Unos pocos turistas, admiradores de lo macabro, visitan el pueblo y mantienen vivo el turismo de la zona. La tour guide era una señora del pueblo, que se ganaba la vida dando recorridos por el interesante pueblo a la gente que aún le interesaba.

Uno de esos recorridos, en el hogar de las hermanas del reino.

Ya abandonado de hecho y un lugar terrorífico.

Tres turistas llegaron en la mañana, uno termino brutalmente muerto, los testigos no han dado declaración pero el cuerpo ya fue descubierto.

La policía interrogará a todos en la escena, incluida la pobre tour guide.

Había vuelto a pasar, ¿que pasá con ese pueblo? Desde años siempre pasan cosas horribles en ese pueblo ¿Tiene una maldición?

No se sabe con certeza

Lo que habían dicho es que la princesa Zelda estaba tomando ya cartas en el asunto.

Lo que el reino no sabía es que la princesa no tenía idea de que hacer.

¿Que haría con un pueblo que tiene problemas desde antes que ella naciera?

Pediría que lo desalojaran?

No, sería cruel para la gente que no tiene a donde más ir o simplemente le tiene cariño a ese lugar.

Link estaba ahí con ella, y le quería hablar pero ella seguía pensando en el problema.

Talvez si Link iba al pueblo, podría averiguar que pasaba con el castillo...

Después de segundos de pensarlo parecía una terrible idea mandar a tu novio a un castillo paranormal donde acaba de morir alguien.

Mmmh...

Link: Pasa algo malo, Zelda?

Zelda: No has visto noticias? No has escuchado las voces del pueblo? Todas hablan de lo lo mismo. El antiguo castillo de los humanos en Hyrule.

Link: Ya. Y por qué?

Zelda: Hubo un asesinato hoy ahí. Digo un "asesinato" porque no se sabe realmente qué paso.

Link: Si alguien apareció muerto, por obra de magia no será.

Zelda: Pues el problema es que es probable que sea por obra de magia, ese castillo tiene un historial tan negro como el carbón.

Verás todo empezó con dos hermanas:

La mayor, la reina, no pudo aguantar no ser amada de la misma forma en que su hermana menor, la pobre Lucillè, la menor, tenía que lidiar con la envidia de su hermana ya que sus padres nunca fueron buenos con Angèlie. Cuando Angèlie llegó al trono, Lucillè prometió a sus padres que cuidaría de su hermana para que nunca le pasara nada malo, pocas semanas después murieron en un viaje por negocios. Lucillè cumplió su promesa y se quedó en el castillo, pero la presión volvió loca a Angèlie y los recuerdos de como hablaban de sus padres todos con ella, así que fue saliendosé cada vez más de sus casillas y a la pobre Lucillè le tocó pagar los platos rotos, quedó con traumas por años.

Link: Sobrevivió a su hermana?

Zelda: Sí, pero estuvo al borde de la muerte
En cuanto se recuperó se mudó y rehizo su vida en otra parte. Tengo entendido que incluso se cambio el nombre.

Link: Bueno eso es bastante jodido...

Zelda: Sí... ¿creés que puedas ir a darle una pequeña vuelta?

Link: Qué?

Zelda: Después de todo, tú eres el heroé de Hyrule.

Link: No veo ningún motivo para ir ahí. Nunca he ido a ese lugar en mi vida.

Zelda: Claro, este reino es grande y abarca fronteras incluso, por eso debes de estar dispuesto a visitar nuevos lugares.

Link: Para qué? Para que me maten?

Zelda: No seas tonto. Quiero que descubras el misterio que esconde toda la mierda que hay en ese pueblo.

Un pueblo embrujado por años.

Link: Okay. Iré. Pero no voy a ir solo.

Avisaré a Mario y a Sonic y que esten aquí cuanto antes.

Partiremos mañana por la mañana.

Zelda: Magnifico!

Link: Eso si te digo. Si te llegamos a ocupar quiero que llegues rápido y que no te de miedo.

Zelda: Así será.

Zelda procedió a darle un abrazo a Link.
Este salió de la habitación. Lo siguiente sería llamar a Mario y Sonic. La verdad era que quería verlos y dentro de algunos días sería dia de todos los santos.

¿No creés que sería buena idea? - dijo Link por telefonó.

Segundos pasaron.

No, llevaremos lo necesario, lo juro, pero los quiero a los dos aquí hoy.

No. Hablaré con él, sí.

Adios, Sonic. - dijo antes de colgar.

~

Mario! Tengo tiempo de no hablar contigo, amigo. Quisiera proponerte algo.

Mira. Quisiera que me acompañes mañana, iré a un pueblo embrujado y como se acerca Halloween ¿no creés que sería buena idea?

-

Hoy en la noche.

Sonic aceptó. Tienes que ir tu también.

No me abandones!

No no no, dile a Peach que lo hagan después, en serio es urgente, sí.

Bueno, que no se te olvide que te espero.

Hasta luego.

Link volvió a subir a donde Zelda. Y le contó que creía que tanto Mario como Sonic habían aceptado el viaje:

Zelda: Gracias, amor. Realmente te lo agradezco, empieza a empacar.

Link: ¿Qué creés que sea buena idea llevar?

Zelda: Una linterna.

Link: Hablo en serio.

Zelda: Cuantos días iras?

Link: Eso te lo pregunto a ti.

Zelda: Empaca para un mes entonces

Después de bromear comenzó a reir y acercandosé a Link sutilmente comenzó a besarlo.

Zelda: Pedire una camioneta para ustedes.

Después de decir esto, salió del cuarto y Link empezó a empacar sus cosas.

Cuando llegó la hora, Sonic fue el que llegó primero, pero tuvieron que esperar a Mario por su orgullo. Tuvo un conflicto con Link hace tiempo y sabe que realmente no le habla genuinamente:

Sonic: Zelda, Zelda. Baja la seguridad de este castillo, saben quien soy y aun así no me dejaban entrar los malditos guardías.

¿Cómo estás, Link? Listo para Halloween?

Link: Quisiera decir que sí, pero no sé muy bien.

Sonic: Si? Pues Mario tampoco. Donde diablos está? Le dijiste que fuera puntual?

Link: Sí, siempre intento decirselo.

Sonic: Nos agarrará la niebla por madrugada y quien sabe que más. Esto no lo haría por nadie mas que por ti.

Link: Lo sé y muchas gracias.

Sonic: Quieres ir explicandomé para donde exactamente vamos?

Link: Prefiero hacerlo cuando llegue Mario.

Sonic: Pues deberías llamarlo o a este paso nos va a salir un puto hombre lobo en la madrugada de camino, por el amor de dios.

Link: Yo... ya vengo ¿sí?

Link en seguida se fué para el baño y comenzó a pensar en que había pasado con Mario. El orgullo le ganaba. Mario simplemente era un maldito narcisista.
Pero le estaba haciendo el favor. No podía darse el chance de enemistarse con él ahora.
A pesar de que a veces tienen sus diferencias y estaba convencido de que esa era la causa de la llegada tardía de Mario, lo mejor era llevar la fiesta en paz. Eran amigos ¿o no?

Mario: No.

Sonic: Mario! ¿Cómo que no llegaras hoy?

Mario: Nunca le dije a Link que llegaría hoy.

Sonic: Ya estoy aquí, Mario

Mario: Sonic, entiende. No dejare que Link se salga con la suya esta vez. Él siempre me quiere dejar en mal, cuestiona lo que hago y ha tenido intenciones de traición hacia mí.
Los malditos problemas que tenga con una casa fantasma son nada más que suyos.

Sonic: Entiendo tu molestia, Mario. Pero al menos hazlo por mí. Soy tu mejor amigo.

Mario: Me tendrías que convencer.

Sonic: Cuando volvamos nos iremos de fiesta. Solo tú y yo, como en los viejos tiempos.

Mario se rió.

Mario: Que remedio. Dile a ese idiota que llegare en una hora.

Después de decir eso, Mario colgó la llamada. Sonic no podía creer que Link y Mario siguieran molestos por una discusión estúpida que habían tenido hace tiempo.
Los dos se habían dejado de hablar.
Esperaba que arreglaran sus diferencias antes o durante del viaje.

En la hora de espera, la princesa Zelda le había ofrecido té a los dos. Un té negro. Delicioso. Esa mujer hacía un té de locos.
La cafeína era necesaria para no caer dormidos como moscas.
Cuando por fin. Mario había llegado al castillo... pero no solo Mario.

Link: Mario! Y Luigi? Que haces tú aquí?

Mario: Me lo traje. De todos modos, tiene experiencia con casas encantadas.

Hola Zelda. Un gusto verte.

Zelda: Tanto tiempo, Mario, estás mas flaco.

Luigi: Es que Peach ya no le hace tartas.

Mario: Callaté.

Link y Sonic rieron.

Link: Bueno, bajemos todos. Vamonos.

Mario: Ehh si. Quieres decirnos para donde exactamente vamos?

Link: Bajemos primero.

Mario, Luigi, Sonic y Link subieron a la camioneta.

Link de piloto

Sonic de copiloto

Cuando se disponía a empezar el viaje el silencio fue interrumpido:

Sonic: Y? Si nos diras?

Link: Más tarde. Por ahora duerman. Yo los despertaré por si ocupan algo.

Después de decir esto, Link observó el reloj de la camioneta.

El viaje había empezado a las 11:10 P.M.

Continuará...