~10~ "Distinto"


■Línea original
Domingo 26 de agosto
Acuario de Station Square, Show del pingüino y la orca.

Sonic y sus amigos se acomodaron en primera fila para ver el espectáculo acuático, la erizo rosa y el equidna acordaron ir por golosinas y algo para tomar, el calor estaba en su punto más alto con el sol sobre ellos.

Tails Nine no se atrevía a ver a Sonic, sentado junto a él incómodo prefería ver a otro sitio, y fingir que lo pasado en la piscina no le había significado nada, sin embargo, en su mente todo pasaba una y otra vez: Amy abrazando a Sonic, Sonic viéndola embobado y solo teniendo ojos para ella...

-Buddy...

Sonic se atrevió a romper el silencio, la tensión que había entre ellos dos era casi palpable, Tails no reaccionó, prefería ignorar su voz, si le miraba ahora... rompería a llorar.

-Hace mucho calor, toma.

Muchas personas lo hacían, usar un sombrero o una gorra para cubrirse del sol, el Show estaba comenzando dando su entrada ambos protagonistas de éste.

Tails Nine por fin miró a Sonic, al sentir la sudadera de este sobre él, la sensación electrizante de sentirse tocado por él, lo sonrojó de sobre manera.

-¡Bienvenidos damas y caballeros! ¡Humanos y Mobians! Tenemos el gusto de presentarles a la pareja más especial del acuario.

Sonic quería decir algo más, pero las palabras, no salían fácilmente.

-Gracias.

Consiguió decir Tails Nine, con la voz seca tomó entre sus dedos los extremos de la prenda la cual olía a Sonic, sus mejillas se sonrosaron más, sintiendo como ese aroma inundaba sus fosas nasales y relajaba su cuerpo.

-...Tails... ¿Qué piensas de...Amy?

Su felicidad, duró tan poco, Tails Nine regresaba a la fría realidad que ver la acrobacia del pingüino saltando a su amiga orca, fue insípido.

-¿A dónde quieres llegar? La conocemos desde hace años, la pregunta es algo... atemporal.

-...Lo sé, lo sé amigo... pero... quisiera saber... ¿Qué piensas de ella?

Sus preguntas eran navajas que atravesaban su piel, ¿Por qué le preguntaba eso? ¿Por qué? ¿Por que le decía esas palabras con esa voz nerviosa? Sentía que a continuación vendría una explicación dolorosa.

-¡Un aplauso para el pingüino! ¡Bravo!

*Sonido de aplausos y gritos de multitud*

-...Pues... me cae bien, es todo.

Estimaba a la eriza, pero lo que vio hoy, le hacía sentir una emoción que era nueva para él... y se sentía la peor persona sobre la tierra.

-... ... Sí... ... ... ¡Cuidado!

La orca y el pingüino se coordinaban en saltos circulares impresionantes, el agua salpicaba incluso a los de más lejos, así que los dos héroes irremediablemente se mojaron, pero Sonic mucho más. El golpe de agua fue brutal, su espalda sintió el impacto, la presentadora se disculpaba pues la orca había dado un coletazo muy cerca de ellos provocando un disparo que de no haberse atravesado, Tails Nine abría sufrido en toda su cara.

-Ah... ah...

-... ...

El rostro de Sonic estaba tan cerca, Tails Nine enmudecido sólo juntó sus manos al pecho, completamente asustado y nervioso, el erizo le había salvado, lo tenía literalmente sobre él y la respiración agitada del héroe azul chocaba con la suya, lenta, casi inexistente, estaba olvidándose incluso de respirar pensando sólo en esos labios, ¿Debería besarlos? ¿Debería sincerarse y decirle lo que siente?

Por un momento sólo existieron ellos, y el zorro se llenó de valor para tomar los brazos del erizo y tocarlos, ¿lo haría? ¿Un abrazo... un... beso?

Pero Sonic se apartó, brusco y cabizbajo volvió a su asiento, sonrió al público y saludó, todos le reconocieron y preguntaban por su estado, él respondió todo con una breve explicación y una amplia sonrisa.

◇♧◇

Aquello no lo recordaba Nine, cegada por su odio hacía la erizo rosa, había bloqueado el recuerdo más bello que tuvo de ese día, no valía nada ahora, pues Sonic había tomado su decisión ese domingo.

■Línea actual
Domingo 26 de agosto
Acuario de Station Square, Show del pingüino y la orca.

Sucedía lo mismo, primera fila, mismos asientos, un poco apurados pues se les estaba haciendo tarde por lo de la piscina. Amy y Knuckles se ofrecían nuevamente a ir por las golosinas y bebidas, Tails se sentaba junto a Sonic y Nine del otro extremo, intimidando al erizo que estaba bastante diferente a su Yo de la línea original.

Nine lo sabía, notaba el nerviosismo del erizo ante su presencia, e iba a atacar sin cuartel. El sol seguía siendo igual de insoportable, la zorro miraba el cielo sintiendo que algo, algo se le estaba olvidando, sentía que algo importante ignoraba.

-Oigan... hace mucho calor, usen esto.

Sonic se levantaba de lugar y se sentaba a un lado de Tails, dejando el centro para el zorro macho y la oportunidad de que ambos zorritos se cubran con su sudadera, Tails la tomó nervioso y Nine le miró furiosa, no era su plan estar a lado de su doble masculino, pero se tragó su furia y sus pensamientos esbozando una dulce sonrisa.

Sonic se sentó con unos centímetros de buena distancia de su amigo, le dedicaba una mirada de soslayo completamente nervioso, observó el rostro de su amigo y se detuvo en su clavícula, donde su pelaje blanco y abultado comenzaba para cubrir su pecho; cerró los ojos olfateando su aroma, alcanzaba a sentirlo, el aroma del zorro incluso con aquel olor a cloro podía percibir la esencia de su amigo.

Los protagonistas del Show entraron en escena, la presentadora feliz se presentaba:

-¡Bienvenidos damas y caballeros! ¡Humanos y Mobians! Tenemos el gusto de presentarles a la pareja más especial del acuario.

Pero Sonic no estaba ahí, su mente luchaba contra ese aroma, contra esa chica, dos zorros que sentía como si fueran uno mismo, un ser que ahora mismo estaba dividido en dos, y... abriendo los ojos comprendió que, debía alejarse de esos dos.

-¡Un aplauso para el pingüino! ¡Bravo!

*Sonido de aplausos y gritos de multitud*

O al menos... de Tails...

-¡Cuidado!

-¡Eh!

Sonic no pudo reaccionar a tiempo, su mente ocupada y abrumada entre tantos dilemas fue incapaz de notar que un golpe de agua venía directo.

Nine abrió los ojos completamente impactada, nada era como debía ser y apenas recordando ese momento íntimo que vivió con el erizo sus ojos se llenaron de lágrimas:

Ahí estaba, el momento que dejó pasar por no recordarlo, Tails ahora lo había tomado, aunque no de la manera en la que ella en su vida pasada lo hizo.

-¿Estás bien Nine?

Su corazón dolió al mismo tiempo que se aceleró, la oportunidad, la maldita oportunidad de tener a Sonic sobre ella o viceversa... la tomó Tails.

《¡¿POR QUÉ?! ¡¿POR QUÉ EL FUE QUIEN ME SALVÓ?!... ¿Por qué fui yo...quién recibiría el impacto?》

Tails estaba completamente empapado, su espalda había recibido el impacto de agua que por instinto bloqueó para proteger a su nueva amiga, ambos zorros se miraron a los ojos, unos ojos idénticos que se asustaban de verse entre sí, Nine desvío la mirada evitándo llorar, se sentía una inútil y además víctima del destino que se burló nuevamente de ella, nada estaba saliendo como ella quería, incluso Sonic no pudo evitar reaccionar por Tails a quien tomó por el brazo derecho y con esa mirada llena de genuina preocupación le preguntó:

-¿Hey Tails tú estás bien?

La presentadora se disculpó, pero eso no importaba; ¿Qué era eso? ¿Por que éste Sonic era tan diferente a su Sonic? ¡¿POR QUÉ ÉSTE SONIC SÍ QUE VELABA POR TAILS?!

Frustrada ante lo que veía, prefirió apartar al zorro y salir volando del lugar.

Todo estaba saliendo mal, la atención de Sonic era demasiado pareja respecto a su contra parte; a éste punto, tenía sí o sí que lastimar a Tails.

La zorro se detuvo suspendida en vuelo sobre el edificio de Casinopolis, el lugar donde se atrevió a confesarse por fin y también el lugar donde Sonic le rompió el corazón por primera vez y, en una segunda e última vez. Ese lugar por muy extraño que fuera, significaba tanto para ella, sus fracasos y lágrimas, su cobardía y vergüenza, y el corazón dolía nada más de recordar que aún a ese maldito 26 de agosto... le faltaba mucho por restregarle en la cara.

-Casinopolis... me has visto fracasar y llorar entre tus colores y sonidos alegres, un lugar de diversión y felicidad donde se han divertido todos burlándose de mí y siendo felices a costa mía.

Nine apretaba los puños, decidida a dejar de ser considerada.

-¡Basta! Ni siquiera tendré piedad de ti, Tails, caerás como Amy y todos quienes se atrevan a arrebatarme a Sonic, ¡Éste Sonic es MÍO! ¡solamente mío! Seré feliz, porque me lo merezco.

Nine volvía a con sus amigos, maquinando su plan despejada de cualquier culpa, si ella sufrió en el pasado como Tails, éste Tails también lo haría, aunque ella sea quién más le lastime.

Continuará...

Bien, Nine ya no subestimará ni a su otro yo y no piensa permitirle a nadie robarle más momentos con Sonic. Ya estamos por terminar este día, pero aún hay más que contar respecto a lo que se refiere Tails en Casinopolis. Una noche que lo marcó de por vida.

Gracias por leer.


Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top