Capítulo 16: El personaje secundario que irrumpe el amor entre los protagonistas
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Las cosas que hace uno por amor. Las grandes tonterías que uno comete por amor.
Xiao Zhan tenía a la persona que amaba en su cama, lo estaba abrazando y podía oler el ligero aroma de su pelo, sentía la calidez de su cuerpo y sus brazos rodear su cintura mientras escondía su cabeza en su pecho.
Tenía a Wang Yibo una vez más en su cama y se sentía la persona más desafortuna en el amor.
Porque Wang Yibo dijo lo que sentía, porque Wang Yibo se sentía solo y sólo buscaban un poco de compañía.
- Si necesito consuelo y sentirme seguro y tú eres la única persona presente que puede darme eso; no quiere decir que en un futuro voy a ponerte bajo una luz diferente. No importa lo que hagas, no voy a cambiar mis sentimientos hacia ti, no voy a dejar de odiarte.
Pero había una oración que nunca dijo en voz alta:"- Te odio porque me recuerdas a él, la persona que me abandonó".
Aún así, Xiao Zhan podía sonreír y apresarlo más en su pecho, no importaba si sus ojos se nublaron con las lágrimas que amenazaban con salir, no importaba si su corazón sólo se lastimaba cada día más.
Cuando Wang Yibo se quedó dormido al fin pudo declarar sus propios pensamientos acompañados de su voz quebrada y su dolor:
- No te preocupes, te sientes solo y no soy nadie para negar tu tranquilidad. Al final, son las cosas que uno hace por amor. Estar siempre ahí para cuidar y proteger e incluso dar su propio cuerpo para consolar a la persona que aman, sólo porque no quieren verlo triste. Pero está bien, si puedes romper este compromiso, puedes ser libre, casarte con la persona que amas, recibir todo el cariño y consuelo de esa persona, tener un hijo con esa persona, vivir una vida a su lado. Porque aunque te amo, a ti no te importa lo mucho que llore y ruegue por tu mirada, nunca vas a voltear a verme, está bien, algún día tendré que superarlo.
Lentamente sus ojos se cerraron y todo fue oscuridad.
La noche era silenciosa y triste, dos personas estaban acurrucadas juntas como una pareja amorosa durante una noche de tormenta, sólo que la tormenta estaba en sus propios corazones y esas, y el amor había sido destruido hasta que no pudo ver, escuchar o caminar.
Había un sueño donde el cielo era nublado, el llanto de un pequeño no cesaba y el miedo era cada vez más. Una voz llamó su nombre y lo abrazó con ternura, Wang Yibo buscó el rostro de Liu Tingyu para sentirse seguro, pero ya no era ella.
Su suave mirada y esa hermosa sonrisa en sus labios adornados por un lunar a un costado, sus brillantes ojos oscuros lo miraban con amor.
Xiao lo sostuvo en sus brazos y Wang Yibo ya no era ese niño de cinco años, era un adulto que también le devolvió el abrazo con una dulce sonrisa, lo apartó un poco y llevó su mano hacia el abdomen del doncel, acariciando suavemente su vientre.
En ese sueño ya no habían lágrimas, sólo sonrisas.
Cuando el sol salió por la mañana Xiao Zhan abrió los ojos y soltó un ligero suspiro porque estaba solo en la cama, la persona que durmió a su lado durante toda la noche ya se había ido sin dejar rastro de su presencia.
Se dijo una vez más que sólo eran las tonterías que uno hacía por amor y que en un futuro no tenía porqué repetirlo.
Bajó a la cocina y fue recibido por el personal, Xiao Zhan quería comer algunos pasteles y ver televisión dando vida al cliché de un perdedor, pero sólo quedaban tres pasteles de todos aquellos que preparó la noche anterior; quería preguntar por el resto pero pensó que no tenía importancia y era mejor dejarlo así.
Cuando Meng Ziyi terminó la jornada universitaria salió del campus para tomarse la tarde en buscar nuevamente un empleo.
En la puerta de salida habían varias muchachas interfiriendo el paso mientras se susurraban unas a otras, todas con la vista hacia una misma dirección.
Por curiosidad, Meng Ziyi volteó la mirada y se sorprendió bastante cuando vió a Wang Yibo ignorando a las jóvenes y revisando su teléfono mientras se apoyaba en su coche, la ropa que traía puesto era un conjunto simple de calle dando un aire juvenil.
La atención de Meng Ziyi se distrajo cuando su teléfono sonó por un mensaje, ella leyó el mensaje y sonrió ligeramente, respondiendo a la pregunta de Wang Yibo.
" Estoy a un par de pasos cerca de ti"
Cuando envió el mensaje vió cómo Wang Yibo la buscaba con la mirada y se detuvo al encontrarla entre la multitud de personas que iban pasando, él levantó la mano indicándole que se acerque y ella lo hizo.
-¿ No deberías estar trabajando?
-¿ No deberías estar estudiando, ratón de biblioteca?
Meng Ziyi soltó un par de carcajadas. Ambos se subieron al deportivo rojo y Wang Yibo condujo.
- Hoy me enteré que llamaste pero no tuve oportunidad para devolverte la llamada¿ Todo bien?
- Eso ya no importa.
Wang Yibo quitó una mano del volante para sacar la cajita de terciopelo del bolsillo de su chaqueta y se lo tendió a ella.
- Ten.
Meng Ziyi tomó la cajita y la abrió, los dos pendientes eran muy hermosos y habían estado guardados por un buen tiempo, ahora, después de tanto volvían a ver la luz del día brillando frente a los ojos de la joven.
Meng Ziyi sonrió acariciando los pequeños diamantes.
- Tarde pero seguro¿ No? Voy a aceptarlo porque es el regalo de cumpleaños más hermoso que he recibido.
Wang Yibo sonrió complacido volteando a ver a la joven mientras ella trataba de ponerse los pendientes. Normalmente, Meng Ziyi se rehusaba a aceptar los regalos de costo elevado, pero ésta vez ya no dijo nada y aceptó con un gracias.
Meng Ziyi era joven, era hermosa, era inteligente y sus divertidas y alegres a palabras eran la forma de olvidar los malos ratos que Wang Yibo pasó el día anterior.
Se sentó a comer con ella y escuchó atentamente las anécdotas de la joven y las enseñanzas aprendidas en clases y con lo que siempre solía mezclar sus conversaciones.
Poco después una llamada al teléfono de Meng Ziyi interrumpió el ambiente, ella miró el remitente y guardó su teléfono molesta, sacando un poco de curiosidad en Wang Yibo.
-¿ Quién es?
- Nadie importante.
Poco después el teléfono volvió a sonar.
- Contesta, parece ser muy importante.
- No es necesario.
A la tercera llamada Meng Ziyi tomó el teléfono y lo aproximó a Wang Yibo.
- Contesta por mí y dile que eres un compañero de clase y que olvidé mi teléfono en la universidad.
Wang Yibo la miró extrañado y luego al teléfono, pero hizo lo que le pidió, tenía curiosidad por saber quién era el insistente.
-¿ Puedo preguntar con quién hablo?
- Oh, mi nombre es Wang Zhoucheng.
- Claro, hasta luego.
Cuando colgó la llamada su mirada era más curiosa y pícara.
- Ziyi,¿ Algún pretendiente?
Meng Ziyi trató de no escupir su bebida pero terminó torciendo por un rato.
- Wang Yibo, no digas tonterías.
-¿ Segura?
- Es el fastidioso doctor de mi hermano.
- Un doctor, no estaría mal.
-¡ Wang Yibo!
Habían cosas extrañas en la vida y ese momento era uno de ellos, dos personas que se consideraban novios. El novio se burlaba de su novia mencionando a un supuesto pretendiente y lo bueno que sería salir con él, la novia reía y se quejaba de los chistes.
Después de mucho tiempo dos personas volvían a reunirse y a recordar el pasado como dos simples amigos, recordar cosas del pasado como si sus vidas fuesen tranquilas y hermosas, sólo momentos felices para ellos.
Era recordar ese día que se conocieron e igual que antes, Wang Yibo ya no quería hablar porque estaba avergonzado pero siempre estuvo agradecido de conocerla ese día. Si Meng Ziyi nunca hubiese llegado, si ella se hubiese rendido en el primer intento de hablar con él, si ella no se hubiese quedado; entonces Wang Yibo no tendría a la única persona que lograba sacarle sonrisas incluso en los peores momentos de su vida.
Aquella vez que lloraba en la sala de música una niña entró y preguntó el por qué lloraba. Él le regañó, le insultó y la empujó, pero ella no se fue y le dijo que sea cual sea el problema todo pasaría, y luego se quedó a tocar el piano.
Fue ahí que Wang Yibo escuchó la suave molodía del piano, una a una el sonido de las teclas se escuchaban tan tranquilas y la canción era tan hermosa que dejó de llorar para observar a la niña tocar, sólo así, ese niño se sentó junto a ella para dar su opinión con respecto a la canción:
- Lo estás haciendo mal, si no sabes tocar ni siquiera lo intentes porque sólo arruinas una canción hermosa.
- Nadie me enseñó a tocar, estoy aprendiendo por mí misma- respondió ella.
- Entonces te enseño yo, golpearé tus manos cada vez que te equivoques.
Wang Yibo sonrió recordando el pasado. Ese día golpeó las manos de Meng Ziyi tantas veces que las dejó tan rojas como dos tomates, pero la niña nunca lloró, y en cambio agradeció la tutoría gratuita.
Fue así que una amistad comenzó y él fue felíz olvidando con ella todas las cosas malas de su vida.
Así pasó el tiempo y la alegría temporal.
Xiao Zhan se quedó en casa y fingió que en realidad no esperaba a la persona que no llegó durante todo el día, fingió que no le importaba que aquella persona lo estaba ignorando incluso más que antes, tanto que ya no estaba cuando despertaba y llegaba cuando él ya estaba dormido.
Así pasó el tiempo hasta el regreso de los señores Wang, sólo así, después de tantos días de ser abandonado volvió a verlo una vez más cuando llegó a recibir a sus padres con una brillante y calmada sonrisa en el rostro, pero aún si ya estaba ahí, nunca volteó a verlo; era suficiente con ver la pantalla de su teléfono cada que un mensaje le llegaba y sonreía contento mientras respondía los mensajes.
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Al poco tiempo llegó la fecha del año en la que toda la familia Wang regresaba a la casa principal para pasar algunos días a la compañía del anciano Wang. Toda la familia empacó su equipaje y regresaron a la gran mansión.
Cómo era el primer día habían algunos invitados extra y varios miembros familiares aún no habían llegado. Sólo los primos se reunieron junto a lo invitados y Wang Haoxuan tomó a Xiao dando un par de vueltas con él entre sus brazos luego de recibir a los recién llegado en la casa que habitó desde pequeño, donde vivían sólo él y su abuelo como dos ancianos abandonados tratando de hacerse compañía el uno al otro.
Para alguien como él era realmente felíz recibiendo a la familia en casa porque todo se volvía más animado y alegre.
- Zhan Zhan, cómo has estado desde la última vez que nos vimos- preguntó soltando al ligeramente mareado doncel.
- Muy bien, ¿ Y tú?
Wang Haoxuan sólo se limitó a sonreír.
Wang Yibo no prestó mucha importancia y pasó por un lado de ambos subiendo los escalones al segundo piso. Sólo Xuan Lu vió el mal humor de su primo y no dudó en preguntar:
-¿ Y ese qué tiene?
- No lo sé, se veía muy contento últimamente.
- No sé ustedes pero yo voy a quedarme a terminar de ver mi drama coreano- dijo Xuan Lu dirigiéndose a la sala.
- Está bien, ya es de noche y no se me ocurre nada que hacer, veamos todos,¿ Qué drama estás viendo?- preguntó Wang Haoxuan con una actitud muy animada.
- Boys Over Flowers.
-¿ Es en serio Xuan Lu? Eso se estrenó hace cuántos años¿ Y tú lo verás recién?
- Oye, no me juzgues, ya lo vi antes pero hace poco me entró ganas de verlo en todas sus versiones, ésta es la última versión que me falta por ver- se defendió Xuan Lu.
- Ya que, como todos lo conocemos será más fácil verlo desde donde te quedaste.
- Bien, quiero vino para soportar la tortura- comentó Cao Yuchen tomando la primera botella que encontró en el mostrador de la sala-, me ha hecho ver sus viejos dramas creo desde el primer capítulo de la primera versión.
- Yuchen, no exageres, bien que te gustó verlo- refutó la joven.
Cuando comenzó el drama los personajes ya estaban al tanto del compromiso del protagonista. Xiao Zhan también vió muchos dramas en el pasado gracias a su madre y ese había sido uno de ellos, no era de sus favoritos porque siempre consideró a la protagonista como una tonta por arriesgar a toda su familia por un hombre con el que tal vez al final no se quedó, ya que de todos modos, tarde o temprano la madre del protagonista haría de las suyas una vez más, era lo más probable, era una tonta porque creía en la posibilidad de corresponder a un hombre rico e incluso dejó sus estudios de lado, pero con la magia de los dramas igualmente se graduó, eso o su novio rico tuvo que ver ahí.
- Ah... Cómo me encantaría tener un Yoon Ji Ho- dijo Xuan Lu muy atenta a la televisión que no se dió cuenta el ensombrecido rostro de su prometido.
- Y yo estoy pintado o qué.
- No trates de encajar donde no entras.
- Si tanto te gusta ese sujeto ve a casarte con él.
- Con cuál,¿ El personaje o el actor?
- Tú dime.
- El actor ya se va ha casar y el personaje... No sé, siento que es muy aburrido.
- y entonces para qué lo quieres.
- Para que cuide de mí cuando tú me haces a un lado.
- Yo jamás hice eso.
La pareja continuó discutiendo mientras el resto trataba de seguir enfocado en el drama.
Xiao Zhan bebió otro sorbo de vino cuando apareció la prometida del protagonista interrumpiendo su propia boda por el bien de la persona que le gustaba y su nueva amiga.
Xiao Zhan también pensaba que ella era una tonta, creyéndose capaz de romper un compromiso por contrato sin causar mayores daños a futuro, bueno, esas eran cosas de dramas televisivos donde todos vivían felices al final.
Además, sintió que ese personaje tenía cierto parecido con él.
Xiao Zhan tenía un compromiso por contrato, estaba enamorado de su prometido pero él ya tenía a su Geum Jan Di, entonces, tanto la prometida como Xiao Zhan salían sobrando como un par de idiotas a quienes les vieron la cara.
Si fuera un drama,¿ Xiao Zhan renunciaría a Wang Yibo por el bien de su felicidad? Lo haría? Él sólo era un personaje secundario en la historia, no había escuchado muchas historias sobre un prometido odiado que terminaba ocupando el lugar de la persona que el protagonista amaba, no había escuchado de muchas historias donde un prometido llegase a quedarse con la persona que amaba. Sólo era esa persona que interfería en la felicidad del protagonista y la persona que amaba, él era la Ha Jae Kyung en la vida de Wang Yibo, era alguien que fue impuesto, no era alguien que fue tomado por elección, eso realmente dolía.
Dolía ser el personaje secundario que a nadie le importaba, el personaje extra que fastidiaba el romance de los protagonistas.
Mientras Xuan Lu y Cao Yuchen continuaban peleando y Wang Haoxuan y Song Ji Yang trataban de prestar atención al drama unos ligeros sollozos interumpieron todo. Nadie sabía cuándo, pero Xiao Zhan estaba ebrio y llorando.
En seguida Xuan Lu detuvo el drama llevando toda su atención al doncel.
- Zhan Zhan¿ Qué pasa?- preguntó Xuan Lu bastante confundida por la actitud del doncel.
Xiao Zhan trató de sonreír y secar sus lágrimas pero édtas no se detenían y continuaban bajando por sus mejillas, trató de hablar y decir que todo estaba bien, pero había un nudo en su garganta que sólo le permitía soltar sollozos.
- Yo...
Trató una vez más de hablar, pero no lo consiguió y se echó a llorar más fuerte que antes, podía sentir que su corazón realmente dolía, dentro suyo se repetía la clase de persona que estaba siendo, sabía que estaba actuando de una manera muy estúpida y vergonzosa, pero no podía dejar de llorar.
Nadie en la sala sabía qué hacer al ver al doncel llorar y todos se quedaron quietos y mudos, mirándose los unos a los otros como si así pudiesen encontrar una solución.
Wang Haoxuan podía ver a través de sus ojos la tristeza por la que el doncel estaba pasando en ese momento, volteó a ver una vez más hacia el televisor y creyó saber cuál era el problema.
Creía conocer a Xiao Zhan como una persona alegre y fuerte, pero había visto que últimamente esa actitud se iba derrumbando poco a poco, él se estaba lastimando bastante porque amaba a un idiota.
Wang Haoxuan quería consolarlo pero fue Xuan Lu quien se apresuró primero y abrazó al doncel tratando de calmarlo, ella no sabía qué hacer y sólo susurró al par de muchachos para ir en busca de Wang Yibo; pensó que tal vez él sabría queé hacer.
-¡ Vayan!- susurró molesta al ver que las dos personas no se movían.
Cao Yuchen no tardó en obedecer a su prometida, arrastrando con él a Wang Haoxuan mientras las otras dos personas se quedaron a tratar de consolar al doncel.
Cuando llegaron al dormitorio de Wang Yibo fue Cao Yuchen quien llamó a la puerta y salió Wang Yibo molesto.
- Qué.
- Pues... estábamos viendo boys over flowers y zhan comenzó a llorar- resumió Cao Yuchen.
Wang Yibo continuó indiferente, se quedó a verlos un instante y respondió:
- Y a mí qué.
Estaba por cerrar la puerta pero Wang Haoxuan lo detuvo.
- Geum Jan Di, Gu Jun Pyo, Ha Jae Kyung, entiendes a lo que me refiero¿ Verdad?, y si no lo haces tú lo haré yo.
Wang Yibo no respondió por un instante adaptando mentalmente el resumen de Cao Yuchen con los tres personajes en el drama, una vez que cayó en la cuenta de la referencia levantó la mirada y respondió:
- No me importa.
Al final Wang Yibo cerró la puerta frente a ellos. Cao Yuchen n conocía otro método así que se rindió. Wang Haoxuan caminó de regreso a la sala donde aún podía escucharse al doncel llorar, tan frágil y débil.
También sentió que su corazón dolía bastante.
-¿ Y Yibo?- susurró Xuan Lu aún abrazando al doncel y acariciando suavemente su espalda.
-¿ Pueden dejarnos a solas?
Las dos personas tenían dudas al respecto, pero como no sabían qué otra cosa intentar para calmar al doncel ambos obedecieron dejando la sala sólo con ellos.
Al fin Wang Haoxuan se hincó frente al doncel y sacó su pañuelo para secar las lágrimas que no se detenían, él tampoco estaba preparado para un momento así.
-Cuando Zhan Zhan necesite de un pañuelo, Haoxuan estará ahí para secar sus lágrimas- habló-. Puedo ser un pequeño personaje extra que te cuide cuando lo necesites- realmente no estaba preparado para consolar de dolor de alguien más, pero esa persona era la que le gustaba y no podía corresponder a sus sentimientos, dolía verlo llorar por alguien más y sólo liberó su corazón en sus palabras acariciando suavemente el cabello del doncel-, quiero cuidarte y secar tus lágrimas, no me importa si sólo hay un Gu Jun Pyu para ti, tampoco necesitas de él para vivir.
Xiao Zhan lo miró un instante tratando de mantener silencio a pesar de sus suaves gimoteos, se veía tan hermoso con sus ojos rojos como los de un tierno conejito, era sorprendente cómo podía mantenerse tan bello y adorable incluso cuando estaba ebrio y lloraba, pero era más sorprendente cómo el idiota de Wang Yibo podía lastimar un corazón hermoso y frágil.
Wang Haoxuan abrazó al doncel y acarició sus cabellos hasta que Xiao Zhan se quedó dormido.
Pero la persona que luego cambió de opinión y fue a ver el por qué su prometido lloraba sólo vió a dos personas abrazándose con ternura. La imágen frente a él era tan conmovedora y a la vez hermosa. Inconscientemente presionó sus puños y apretó los dientes, estaba por voltear cuando notó que no era la única persona viendo la escena; al otro lado estaba Song Ji Yang, quien sonrió ligeramente tratando de ocultar su propio dolor y la decepción amorosa que tuvo al ver que la persona que amaba tenía a alguien más en su propio corazón, alguien que tampoco le correspondería.
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