AQUHAMA

Higuchi, Akutagawa llevaban a todos, seguían a Shibusawa en un tubo de agua atravesó de un hundimiento submarino, podían ver dragas nadar, aquaferos flotar, algunas algas, moluscos, y lo que más les sorprendió, las sirenas. Higuchi estaba maravillada de ver sus aletas fosfórenles, brillosas, elegantes, todos llevaban algo diferente. Hasta que la guardia se acercó – dragón – le hablo un hombre pez o tritón al otro lado de la capsula. Su imagen sorprendió a los humanos pero Shibusawa solo se mantuvo serio. - ¿Qué haces en propiedad de Poseidón?

― Mil disculpas príncipe wuawua, pero debo atravesar hasta llegar con el doppelganger de su esposo, es de suma importancia

― Si es así, Sushi lo permitirá. Recuerda al príncipe de Yokohama con mucho cariño. – miro a Akutagawa y después a Shibusawa – Síganme. No perdamos el tiempo

Shibusawa suspiro y miro a los chicos – tendremos que desviarnos por el permiso del príncipe

― ¿otro príncipe?

― ¿Qué es doppelganger?

― El doble – respondió Shibusawa serio.

Su recorrido era mágico, los moluscos brillaban, el agua era cálida, los rayos de luz adornaban aquellos colores únicos en los caracoles, prestaban mágica, música y armonía al reino.

Los peces como las sirenas andaban curiosos por los invitados el príncipe.

El castillo, una montaña rocosa llena de agujeros llamadas puertas que conducían a habitaciones, al centro de todo y lleno de peces, algas y medusas fue donde encontraron al príncipe de Aquhama.

...

Si, los traje de vuelta, soy la mejor en re-usar personas

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