Jessica

Aiden vuelve a unir sus labios con los míos, el beso continúa siendo intenso, pero a la vez resulta tierno y dulce para los dos, su boca abandona la mía y baja por mi barbilla, deja trazos de pequeños besos por mi cuello haciéndome olvidar de todo, solo somos nosotros dos en esta habitación, no pienso en nadie más que él, con cada roce de sus labios mi pulso se acelera, deslizo mis manos por sus hombros acariciando la suavidad de su delicada piel, sus músculos se contraen con mis caricias, su respiración es cada vez más agitada y ambos sabemos que no nos detendremos, ninguno de los dos quiere hacerlo.

Juego con los botones de sus pantalones y le ayudo a despojarse de ellos, aunque él hace el mayor trabajo, una de sus manos recorre mi espalda erizando mi piel de nuevo, desabrocha mi sujetador, de un momento a otro, ambos estamos desnudos, somos un manojo de besos y caricias, su mano acaricia mi abdomen y un gemido sale de mí cuando baja más allá de mi ombligo, me arqueo hacia él ante su cálido tacto, mis manos aferrándose a sus hombros y dejando pequeñas marcas en su piel, su boca busca la mía, entre el beso atisbo una sonrisa y su mirada busca la mía, el azul de sus ojos es tan intenso como el marrón de los míos y puedo ver amor, ternura y una pizca de lujuria en ellos, sus dedos se hunden en mí, haciéndome explorar una sensación nueva y placentera, otro gemido se me escapa y me veo suspirando por Aiden, deseando más.

Su aliento me hace cosquillas al rozar mi piel mientras explora mi cuerpo, sus labios recorren mi abdomen, siento mi cuerpo rendirse ante él cuando hunde su cabeza entre mis piernas, un grito de placer se me escapa, su lengua se desliza con suavidad, probándome, llevándome al límite, sus manos sujetan mis caderas con firmeza y su lengua de nuevo me derrite, mis manos se vuelven puños mientras sujeto las sábanas de la cama y me arqueo, Aiden se toma su tiempo, una explosión de placer recorre por todo mi cuerpo, dejándome delirando.

Aiden vuelve a ascender por mi cuerpo, su cuerpo se encuentra sobre el mío, su torso presionando mi pecho, su miembro, duro, contra mí, sus ojos me miran de vuelta con gran intensidad, sus dedos se aferran a mi cintura mientras se coloca sobre mí, impulso mis caderas hacia él, deja escapar un gemido cuando se resbala en mi interior, me besa con aquella intensidad y amor que solo él sabe dar, nos aferramos el uno al otro queriendo romper con cada mínima distancia, es como si el tiempo se ha detenido y solo somos nosotros dos, explorándonos, exigiendo más, dándonos todo, amándonos.

***

Por la mañana siguiente, el cuerpo de Aiden yace a un lado del mío en la cama, nuestros cuerpos cubiertos por las sábanas, no hay mucha distancia entre los dos, uno de los brazos de Aiden se aferra a mi cintura mientras su respiración choca en mi cuello, aún es lenta y pesada debido a que duerme, me giro en sus brazos para quedar frente a él y contemplar su rostro. Se ve relajado y para nada tenso mientras duerme plácida mente, recuerdo los sucesos del día anterior y una sonrisa se dibuja en mi boca, solo pienso en que es imposible apartarme de Aiden, hoy más que nunca sé que lo quiero dentro de mi vida sin importar qué.

Siempre he tenido en cuenta que a veces hay que arriesgarse, la vida es impredecible y a veces es bueno dejarse llevar por la curiosidad, tomar riesgos, pues no todos ellos resultan tan malos.

—Hm... ¿en qué piensas? —murmura su voz, un tanto somnolienta, una risita se me escapa al saber que me ha atrapado mirándole.

—Solo cosas.

—¿Solo cosas? —cuestiona enarcando una ceja, sus ojos aún continúan cerrados, está luchando con el sueño.

—Ajá.

Respondo y un gruñido sale de él, se las ingenia para estrechar su cuerpo contra el mío y hacernos rodar por la cama para él quedar sobre mí, un grito de sorpresa se me escapa, Aiden deposita un beso en mi frente y sus ojos se abren para encontrarse con los míos, tienen un lindo brillo por la mañana.

—Dime, señorita ¿esas cosas que piensas tienen que ver conmigo?

—¿Por qué cree que todo gira alrededor de usted, alteza?

Inquiero y una risita sale de él, su rostro se oculta entre mi cuello, provocando que mi piel se erice.

—Creo tener una respuesta a ello —dice entre broma, aunque ambos conocemos la respuesta.

Antes de que pueda decirle algo, golpes a la puerta principal de mi dormitorio, hacen que Aiden quite su cabeza de mi cuello y comparta una mirada curiosa conmigo.

—¿Esperabas visitas? —me pregunta y mi ceño se frunce al tiempo en que niego.

Los dos nos quedamos en silencio escuchando como se intensifican los golpes a la puerta, son cada vez más fuertes que parecen que van a derrumbar la puerta en cualquier momento.

Aiden se aparta de mí y se recuesta en la cama, soltando un suspiro pesado y pasándose las manos por su desaliñado cabello.

—Bien, iré a atender si te parece.

Doy un asentimiento y sale de la cama, trae su ropa interior y termina de buscar sus pantalones para colocárselos, su playera aún se encuentra tirada en la entrada y probablemente húmeda, pero a Aiden no parece importarle porque va hacia la entrada a abrir la puerta.

—Buenos días, alteza, he estado buscándolo toda esta mañana.

—¿William? ¿Qué haces aquí?

—La reina requiere de su presencia en el palacio.

—¿Cómo es que...? Olvídalo —escucho a Aiden bufar por el hecho de que han invadido su privacidad, aunque estoy sorprendida, Aiden no parece estarlo cuando regresa a la habitación con una gran mueca en los labios, sus ojos me miran decepcionados—. Tengo que irme, yo...

Me siento sobre la cama al tiempo en que niego para restarle importancia.

—Adelante, ve. Seguro que debe ser importante.

—Espero que sí, ha mandado a cinco hombres más junto a William —se queja con cierta ironía, me lleno de asombro ante ello porque lo que para Aiden parece algo común para mí no lo es. Aiden busca su playera por la habitación y me rio ante lo tierno que es buscándola, sale de la habitación para ir por ella, y colocársela de vuelta, como es de imaginarse, luce como que sigue húmeda y no se ha secado por completo, Aiden arruga el ceño ante ello—. Bien, tengo que irme ahora. Te veré después.

Se acerca a mí y me da un fugaz beso en la mejilla antes de colocarse los zapatos con apuro porque han comenzado a tocar la puerta de nuevo.

No vuelvo a saber de Aiden por el resto del día, imagino que debió ocuparse con sus asuntos reales y solo espero que el que haya pasado la noche en el dormitorio no le haya ocasionado ningún problema. Mi jornada en el hospital transcurre tranquila, decido salir a comer con mis amigas y después regreso a mi dormitorio para estudiar para los exámenes de las semanas, pero antes de eso, limpio el dormitorio y me deshago de los viejos periódicos, no hay duda de que no olvidaré esas notas, las he leído todas más de una vez, pero si decido mantenerlas conmigo, solo conseguiré crearme nuevas inseguridades entre Aiden y yo.

Cuando creo que podemos tener un momento normal, siempre surge un deber al que debe atender del palacio, recordándonos a ambos que las cosas están muy lejos de ser normales por mucho que los dos tratemos de que sean así, no tengo idea de las cosas que nos deparen a los dos en nuestra relación antes de que la coronación suceda, pero estoy dispuesta a tomar el riesgo de seguir entregándole mi corazón, porque sé que lo que siento por él es real, me he enamorado otras veces, he aprendido que el amor se vive de miles de formas distintas, el amor nunca es igual y se presenta en el momento menos oportuno, cuando menos te lo esperas, cuando crees que lo tienes todo, parece que viene a demostrarte que en realidad te falta algo más, te falta llenarte de nuevas sensaciones que alimentan tu vida mientras le entregas el corazón a la otra persona de manera inesperada. Porque el amor es así, inesperado.

---------------------------------------------

¡Hola! ¡Feliz Sabado! Primero, quiero darles las gracias por las 130k lecturas en la historia, las aprecio mucho❤️

Segundo, no sé que decir sobre este capítulo, es la primera vez que les comparto una escena como esta, si ya me han leído antes, mis historias no tienen escenas como esta pero aquí era necesario y como todos los capítulos, espero que les guste. Creo que a veces es bueno intentar algo nuevo y estoy algo conforme con el resultado, como les dije, tenía que plasmar la dulce y atenta actitud de Aiden

Bien, ya por último, faltan pocos capítulos, la historia en sí tendrá 50 capítulos cuando mucho 52 pero no más, al menos no serán 60 como las demás, es más probable que se quede en 50. Mi plan es terminarla esta semana y sí, me pone nostálgica pero ansiosa a la vez porque ya quiero que lleguemos al final!! Al final de la historia, haré un en vivo para que todas comentemos la historia y pueden hacer las preguntas que quieran, pueden seguirme en mi cuenta de instagram, me encuentran como "andreabonnelll" ❤️

Pasen un buen fin❤️