Capítulo 36
Jessica
No tengo la menor idea qué clases de respuestas estoy buscando, pero entre más consigo leer artículos sobre Edward Mountbatten, más insegura me siento sobre él, en su mayoría, los sitios web alaban el gran trabajo que ha hecho en el país al lado de la reina, pues según lo que he leído, Edward es como el brazo derecho de su hermana mayor, además de que tiene una excelente trayectoria en el mundo empresarial. Investigo más sobre la monarquía al recordar la nota del periódico que Ana me mostró.
Puedo ver que hay un sinfín de artículos sobre la realeza, sin embargo, me detengo en un artículo viejo que llama mi atención:
"¿RIVALIDAD ENTRE PRÍNCIPES? ARCHER MOUNTBATTEN ASCENDERÁ A LA CORONA EN LOS PRÓXIMOS MESES, LO QUE DEJA A EDWARD MOUNTBATTEN MUY LEJOS DE LA LÍNEA DE SUCESIÓN AL TRONO".
Todos sabemos que dinastía Mountbatten es una de las dinastías más importantes entre los reinos y en los próximos meses, el príncipe heredero al trono, Archer Mountbatten estará ascendiendo a este, convirtiéndose en nuestro nuevo rey. Como todos sabemos, es el único hijo de la reina Cristina, nuestra actual reina, quien tiene un hermano al cual todos conocemos como el príncipe Edward Mountbatten.
Edward Mountbatten es el hermano menor de la reina y uno de los príncipes más exitosos de Inglaterra, un hombre con mucha experiencia en el ámbito laboral y en la corte real, se le conoce como uno de los mayores aportadores para las nuevas leyes y propuestas para la mejora del país, se podría decir que por mucho tiempo —más bien desde su niñez—, se le ha educado para que respete a la monarquía y la conozca completa como un miembro digno de la realeza.
Por mucho tiempo hemos pensado que Edward Mountbatten lo tiene todo para ser un buen rey, sin embargo, la oportunidad de ascender al trono es complicada, ya que, por derecho, Archer Mountbatten es nuestro siguiente rey. Debido a esto, se cree que, por mucho tiempo, ha existido una pequeña rivalidad entre ambos familiares, Edward Mountbatten siempre ha aspirado ser el siguiente rey de Inglaterra mientras que Archer Mountbatten tiene el trono más por obligación y derecho, lo que deja en desventaja al segundo príncipe.
Gracias a ello, podemos notar en algunas fotografías e informes políticos que estos dos miembros de la realeza siempre muestran una relación distante, se saludan cordialmente y quizá intercambian una que otro comentario, pero lamentablemente creemos que no existe una buena relación entre ambos y esto se debe al trono británico, incluso ahora que Archer Mountbatten ha revelado estar saliendo con una chica no perteneciente a la realeza, ha generado gran polémica y controversia entre el reino y aunque hemos tratado de entrevistar a Edward al respecto, el príncipe se muestra renuente a compartirnos su opinión, sin embargo, fuentes nos dicen que no está contento con ello y también, como muchos otros miembros de la realeza, considera que es una deshonra para el país y la monarquía pues Edward Mountbatten sigue las leyes del país al pie de la letra a diferencia de su sobrino, además, podemos decir que cada vez que se hace mención de este, Edward suele tensarse, dejando en claro que su único sobrino no es de su agrado.
Mientras más investigo, encuentro otros artículos similares donde dicen que Edward Mountbatten siempre ha tenido aspiraciones al trono y que, tras la muerte de los reyes, esperaba poder ascender a este, pero fue imposible cuando la reina Cristina decidió volver a tomar el trono, así, impidiendo que su hermano ascendiera y Aiden pueda convertirse en nuestro siguiente rey de Inglaterra.
Intento investigar más sobre los reyes y su muerte, pues hay un sinfín de artículos relacionados a la muerte de ellos, en su mayoría aseguran que fue un accidente casual que cualquier familia puede tener con un mal clima, sin embargo, en otros sitios existe el rumor de que todo fue planeado por la misma reina. Encuentro curioso que todas las acusaciones sean hacia ella, además de que un poco ilógico pues no imagino a una madre que quiera asesinar a su hijo.
El timbre de mi celular me sobresalta y me apresuro a atender la llamada de Aiden.
—¿Hola? ¿Jessica? —murmura del otro lado de la línea.
—Hola —es lo único que consigo decir, me paso una mano por el cabello y trato de ordenarlo aun cuando no está desordenado, se debe a que su llamada me ha tomado por sorpresa y saber que estoy investigando sobre su familia me hace sentir incómoda al escucharlo.
—¿No estás en tu dormitorio? Quise venir a verte, pero he llamado a tu puerta y parece que no estás, ¿continúas en el hospital?
Mi boca se abre y se cierra de inmediato, observo la biblioteca para darme cuenta de que solo somos cuatro personas las que nos encontramos aquí, checo la hora en la computadora y compruebo que me he pasado aproximadamente tres horas investigando en internet. Comienzo a balbucear mientras cierro las ventanas de internet y apago la computadora.
—He venido a la biblioteca, pero ya iré a los dormitorios —digo levantándome de mi silla, hoy, definitivamente no hemos tenido oportunidad de vernos y tengo ganas de verlo para conversar un poco. Quizá me arme de valor y le pregunte sobre la nueva noticia que circula en los periódicos sobre él y la princesa. Aiden no es la clase de hombre que evade una pregunta fácilmente, por lo que no tengo miedo de encararlo.
—Bien, si quieres voy para allá —dice y niego aun cuando no puede verme.
—No, descuida, estoy yendo ahora mismo hacia los dormitorios, puedes esperarme allí.
Hay un pequeño silencio.
—En realidad, ¿te parece bien si nos vemos en el estacionamiento? —sugiere, un poco dudoso—. Me gustaría ir a otro lugar donde podamos conversar.
Su voz se torna seria, lo que me hace pensar que probablemente esté al tanto de la noticia que circula en los periódicos.
—De acuerdo, nos vemos en el estacionamiento.
Digo y cuelgo la llamada. Diez minutos más tarde, los dos nos encontramos dentro de su auto mientras Aiden conduce al palacio de sus padres, al principio me sorprende mucho que estemos yendo a aquel palacio, pero pienso que encuentra ese sitio mucho más tranquilo para tener una plática seria.
Cuando llegamos, bajamos del auto y entramos al palacio, Aiden enciende las luces y cuando el lugar está todo iluminado, todo parece estar en su lugar como la última vez que estuve aquí.
—No sé si has comido, pero le pedí al personal del palacio que guardaran dos platillos de la cena de hoy para nosotros —dice mientras nos encaminamos hacia la cocina, por alguna razón, encuentro cierto desasosiego en él.
Al entrar a la cocina, veo la mesa ya preparada y los platos de comida servidos, seguramente algún empleado del palacio real debió venir hasta acá a preparar la mesa o quizá Aiden lo hizo antes. Aiden me hace una seña para que tome asiento y después él lo hace, sirve un poco de vino en las únicas dos copas que hay en la mesa y cuando comenzamos a comer, me veo suspirando de lo exquisita que está el cordero asado al tomillo que han preparado.
—¿Te ha gustado? —pregunta Aiden con curiosidad, doy un asentimiento antes de beber un poco de vino.
—Está realmente bueno —digo y él sonríe.
—Al chef le hará gusto oírlo.
Me cuenta mientras continuamos comiendo, después, ambos nos movemos en silencio a limpiar nuevamente la mesa y lavar los platos sucios, cuando terminamos y los ojos de Aiden se encuentran con los míos, es como si el tiempo entre los dos se detuviese y de pronto se volviese pesado y complicado dejando en claro que algo no anda bien. Tomo una profunda respiración y la dejo caer en un suspiro, aquello me tranquiliza un poco.
—Jess... —pronuncia mi nombre con cautela, como si decirle fuese ocasionar que me vaya, le sostengo la mirada, el azul de sus ojos es intenso y quisiera descifrarlos, entender su mirada, en su lugar, doy un paso hacia él, acortando un poco la distancia entre los dos y ahora es Aiden quien suspira pesadamente.
—Sé sobre lo de la princesa y tú —murmuro en un tono de voz que apenas es casi audible para ambos. Por mucho que trato de que no sea de esa forma, me siento un poco insegura, Aiden de nuevo suspira antes de hablar.
—No sucede nada entre ella y yo —dice y me armo de valor para levantar mi mirada, la cual se ha enfocado en nuestros zapatos por unos segundos, en la mirada de Aiden encuentro seriedad al igual que en su rostro—. Al menos no en mucho tiempo.
Aiden traga con fuerza y mi cuerpo se tensa, acaba de dejar en claro que hubo algo entre él y la princesa Arlene tiempo atrás, cosa que de pronto me hace sentir un poco insegura. Alguna vez todas las chicas nos hemos sentido inseguras de otras cuando el chico que nos gusta o nuestro novio confiesa haber tenido algo con otra chica, es un sentimiento normal y casi imposible de no experimentar, es una pequeña clase de celos por la que todos pasamos tarde o temprano.
No encuentro forma de hablar porque no sé qué decir con exactitud y Aiden suspira ante ello.
—Arlene y yo salimos por un tiempo hace años —confiesa con algo de timidez, aunque está no es la clase de cosas que me gustaría escuchar del todo, agradezco que sea sincero. Aiden se lleva las manos a los bolsillos de su pantalón y suspira—. No fue una relación sería, pero fue una.
—Entiendo —murmuro en un susurro y una mueca se dibuja en mis labios, Aiden se apresura a hablar de nuevo.
—No tenía idea de que vendría la familia real completa, honestamente, creí que solo vendría el rey, pero me sorprendí cuando mi abuela dijo que debíamos de estar presentes cuando su avión llegara. —Me quedo callada procesando sus palabras y haciendo memoria en la noticia del periódico, los medios siempre hacen que las cosas simples parezcan mucho más complicadas de lo que uno piensa—. Como futuro rey, debo atender a todas estas visitas sin importar de quién se trate, no es buena rechazarlas.
—No, supongo que no lo encuentran agradable.
—No, eso solo puede ocasionar cierta discordia con algún otro miembro de la realeza —dice y de nuevo suspira—. Lamento que los periódicos hagan ver que entre Arlene y yo pueda existir algo de nuevo, pero te juro que no es así, entre ella y yo hay pasado, pero no futuro.
Una diminuta mueca se dibuja en mí y Aiden acorta la distancia entre los dos, su mano se coloca en mi mejilla y con su pulgar acaricia mi boca, borrando la extraña mueca.
—Jess, no tienes nada de que preocuparte —asegura, su mirada busca la mía, es tierna—. No necesito a otra chica en mi vida porque te tengo a ti y si de algo estoy seguro es que te quiero en ella.
Su pequeña confesión me hace sentir un revoltijo de emociones en mi interior, no viendo venir sus palabras, Aiden ladea su cabeza y de pronto siento su respiración chocar con la mía gracias a los escasos milímetros que nos separan, poco a poco sus labios se unen con los míos, fundiéndonos en un lento y dulce beso que me deja en claro que sus sentimientos son sinceros, me dejo llevar por el beso envolviendo mis brazos sobre su cuello, atrayendo su cuerpo más al mío, Aiden coloca una de sus manos sobre mi cintura y se las ingenia para cargarme y colocarme sobre la barra de la cocina, donde ambos continuamos besándonos, la temperatura sube y nuestro beso deja de ser lento para volverse un poco rápido y hambriento.
Continuamos besándonos por unos minutos, los dos jugando con nuestras bocas hasta que su celular nos interrumpe, Aiden gruñe en desagrado cuando muerde mi labio inferior y se aparta un poco tirando de este para atender su mensaje.
—Dios, juro que no odio a William, pero parece que tiene un radar para saber en qué momento escribir cuando no debe —se queja de su asistente por arruinar nuestro pequeño momento y encuentro graciosa y tierna la forma en que esto le desagrada, como sea, parece que lo que William le ha enviado es importante porque Aiden se queda escribiendo en su celular, me bajo de la barra y me acerco un poco a él.
—¿Está todo bien?
No me sorprendería que dijera que debe de irse, por lo general así sucede.
No responde hasta que termina de teclear.
—Sí, no es tan importante —dice ignorando el celular—. Le he pedido ayuda en un asunto personal con unos papeles y al parecer recién ha ido a recogerlos a mi habitación.
—¿Necesitas irte?
Se apresura a negar.
—No, si tenemos suerte, nadie va a llamar ahora, al menos que sea una emergencia real.
—¿Cómo cuál?
Cuestiono y Aiden se acerca a mí, abrazando mi cintura.
—Como la del puente de Londres ha caído —dice y enarco una ceja.
—¿Qué significa eso?
Aiden me da un pequeño y casto beso antes de explicar, volviendo a tomar un semblante serio.
—Significa que la reina ha muerto. —Su mirada se pierde y una pequeña mueca aparece en la comisura de sus labios—. Es el mensaje que usaron cuando mis padres murieron.
—Vaya, no tenía idea de ello —digo apenada, pero Aiden niega.
—Tranquila, creo que no es algo malo, por lo general, se prefiere que la muerte de un rey o reina se avise primero a los familiares antes que a cualquier otra persona o medios por lo que usamos eso como clave.
—El puente de Londres —repito y él asiente.
—Así es, y estoy seguro de que no la escucharé en mucho tiempo —dice algo esperanzado, aunque la muerte siempre es impredecible—. Como sea, ¿quieres pasar la noche aquí? Podríamos relajarnos y ver alguna película juntos o algo por el estilo.
Estoy segura de que la idea de hacer algo bastante casual anima a Aiden, quien no tiene mucha oportunidad de realizar cosas casuales por lo que asiento. Una buena distracción después de los sucesos de ayer vendrían bien y quizá encuentre oportunidad de contarle las cosas más tarde.
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¡Hola a todos! ¿Cómo están? Quiero darles las gracias porque ya somos +70k de lecturas en está historia! me alegra ver que cada vez más vamos creciendo, gracias por todo su apoyo y por ser pacientes con las actualizaciones, la verdad estoy tratando de avanzar en ellas y así tener más capítulos listos y poder actualizar luego<3
Les tengo una pregunta, ¿Qué creen que pasará con Edward?
Para las que se leyeron Una Noche Royal, el siguiente capítulo no es el que están esperando jajajaja (en instagram también siempre me preguntan sobre ello asi que espero no hacer mucho spoiler y comprendan de que hablo), aun falta para ese capitulo detallado
Bien, espero que disfruten la lectura y gracias por su apoyo! Sé que no lo digo seguido pero los quiero, gracias por todo<3
instagram: andreabonnelll (por cierto, atentos porque en esta semana que inicia haré un anuncio sobre está historia y el resto de la serie de principes peculiares, no diré mucho por aquí, ya pronto sabrán!)
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