- ¡¿Se transformo en un Ozaru?! ¡Pero si no tiene cola! - comentaría el príncipe con mucho asombro.

Su mano derecha, también se mostraba asombrado.

- Su poder es de . . . un millón seiscientos mil Kiris - dijo el soldado Zarbon, midió el poder de Nishikata.

El hermano mayor de este también estaba asombrado por su hermano, pues con su nueva transformación, superaba su poder en la fase Super Funghi.

- El príncipe Nishikata tiene un poder de doscientos treinta y un mil unidades de Kiris - comentaría el peliverde.

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Nishi estaba muy asustado, no creía lo que veía. Mas lastimado estaba su orgullo, pues el poder de esa bestia lo abrumaba completamente.

Mewtwo un se estaba transformando, medía casi veinticinco metros de altura. Su color era amarillo, tenia una vestimenta que lo cubría, tal como Baby Ozaru.

-  Es enorme - diría el gran guardián del sur.

Mewtwo se estiraría, pegaría un gran rugido que podía escucharse hasta África, América del sur o Oceanía, este asustaría a todos los presentes.

- Rayos, tendré que usar mi nueva técnica - el pelinegro puso una mueca de disgusto - pero tendré que reunir mucha energía e ir a la otra isla - concluyo en su mente.

Mewtwo miraba con odio al joven alienígena, deseoso de destruirlo y cobrar su venganza por la humillación recibida, confiado en su enorme poder.

El gran mono se prepararía para atacar al alienígena, pero este lo detendría.

- ¡Espera Mewtwo! - gritaría este, dejando a su enemigo confundido - ¡Te demostraré que soy el guerrero mas fuerte del universo! - Diría el joven, usando su propia personalidad para convencer a la bestia.

Nakai lo miraba, se preguntaba que técnica usaría este individuo. El mono gigante extendería sus brazos.

Puso una sonrisa.

Mostrando que lo recibiría.

- ¡Escapen de este lugar! - diría Nishi mirando a todos sus aliados en el combate.

Nishikata se elevó rápidamente, a una altura aceptable para lanzar su nuevo y poderoso ataque, y con eso tratar de eliminar a ese bicho enorme.

- ¡¿Que vas hacer Nishikata?! - preguntaría Houjou, tratando de analizar lo que iba a pasar.

Nishi extendió sus brazos hacia cada lado, al igual que sus piernas. Tendría que reunir la máxima energía en sus manos, mientras tanto, Mewtwo contemplaba todo sin moverse.

Su poder aumentaba por su técnica, este se podía sentir desde la distancia. Cada segundo que pasaba, todo el lugar empezaba a temblar (aún si consideramos que él estaba volando).

Era tanto el poder concentrado en su manos, que rápidamente liberaría su aura. Tan poderosa que destruyo parte del templo.

Mas o menos cincuenta metros de diámetro (la destrucción) y la misma cantidad de metros en profundidad. Sorprendiendo a sus amigos pero no a su Rival.

Se estaba jugando toda su energía y en sí la vida, una técnica que solo la uso en la teoría y no en la practica, pues su poder destructivo era muy grande.

- ¡Detente abuelo! ¡Destruirás la . . . Destruirás la tierra por completo! - comentaría Takao, asustado por el poder del príncipe.

Gine, miraba todo lo que pasaba, ella sostenía que había que irse.

- ¡Hay que escapar Takao! - diría ella, pero el no le presto atención, no despegaba su vista por esa nueva técnica.

Pues esta nunca la hizo en el futuro (además que se sentía muy poderosa).

Juntaría sus manos, provocando que varios rayos salieran de él y estos impactaban en el suelo, producto del inmenso poder que utilizaba.

- ¡Mewtwo! ¡Aunque te hayas transformado en un mono gigante! ¡No tienes el valor suficiente para recibir este gran ataque! - le gritaría el pelinegro al mono gigante.

Muchas baldosas se levantaban y se desintegraban al acercarse a él. A todo esto, Mewtwo sostenía una cara confiada, no tomaba en serio el futuro ataque de su enemigo.

Una esfera se estaba formando en las manos de Nishikata.

- ¡Es imposible que me ganes, eres un cobarde! - diría el joven, provocando al mono gigante.

Pero a los ojos de los demás, la situación era diferente.

- ¡Mewtwo quiere demostrar que lo recibirá directamente! - diría Hamaguchi, cubriéndose de las pequeñas piedritas de cemento que iban a la dirección del pelinegro como si fueran balas

Era tanto el estruendo que no se podían comunicar normalmente, tenían que gritarse.

- ¡Hama ¿No lo estas diciendo en serio? ¿o si? ¿Realmente quiere lanzar ese poder sobre La Tierra? Esta loco, la destruirá! - comentó gritando Nakai.

Pero era claro lo que haría ese chico.

- ¡Hay que huir de aquí! - diría Nakai, preparándose para escapar.

Pero era tarde.

Ya no podía escapar.

- ¡Resplandor final! - fritaría el príncipe.

Un gran poder se direccionaba al Mewtwo convertido en Ozaru.

La mitad de los edificios en la otra isla colapsarían, parte del hermoso templo se vino abajo, muchos glaciares en el continente se largaron al mar. Incluso se pudo sentir el temblor desde Islandia o Canadá.

Aparte de eso, dado a su nombre, un gran resplandor dejo por corto tiempo, ciego a todos los que miraban (menos los que lo hacían por TV).

El poder con la técnica era incalculable, talvez llegaba al millón de unidades o tal vez no, pero lo que si pasaba, era que esto sorprendía tanto a su hermano (quien era uno de los mas poderosos del universo) y a todo el mundo (incluido los jerarcas de la asociación de héroes).

La expresión de Mewtwo paso de confianza a una de confusión y miedo.

- ¡Oh no! - dijo viendo como todo ese poder le venia encima.

Puso sus dos manos para frenar el ataque, tal como lo hizo antes de que lo tiraran al espacio.

Trataba de detenerlo, sin embargo no podía retroceder.

Usando toda su energía para no morir en el ataque. Pero si aguantaba un poco mas, Nishikata moriría por el uso excesivo de energía y por sobrepasar los limites de su cuerpo.

¿Cómo terminara la historia?

¿Quién ganara?

¿Qué les esta pareciendo?