Capítulo 16: Nunca dejaré que caigas.

Narra Elle.

Me duelen las piernas y brazos, me siento sumamente mareada y estoy sudando como una loca ¿Y todo porque? Por los arduos entrenamiento de la señorita Harris.

Estoy en el centro de artes ensayando para una presentación a motivo del aniversario de el centro que tenemos planificada para dentro de un mes, así que la señorita Harris nos tiene entrenando tarde y noche para dicho evento.

—¡De pie todos! —Aplaude con fuerza llamado la atención de todos, siento que voy a desfallecer.

—Tranquila, yo creo que no eres la única que está cansada —Me da aliento Sophie, una de mis pocas amigas en este lugar, le brindo una sonrisa de labios cerrados.

Me pongo de pie acercándome al centro del estudio, todos los presentes lo hacemos.

—Quiero verlos dando lo mejor de todos, andando ¡Finesse!.

La maestra se dirige al equipo de sonido, todos los demás nos ubicamos en nuestros respectivos puestos para llevar a cabo la coreografía, Finesse de Bruno Mars nos anima a bailar sus movidas notas musicales al ritmo del break dance, hacemos el muy famoso paso que representa la canción incluso me destaco en mi pequeño solo en la parte en que canta Cardi B.

La canción termina y mi respiración está totalmente errática por lo agitada que estoy, ya es la hora de irme a mi hogar así que tomo mis cosas guardandolas en mi bolso y salgo del estudio junto a los otros estudiantes y me despido de todos. Conecto mis audífonos a mi celular y dejo que las canciones se reproduzcan aleatoriamente.

El camino a casa es aburrido, son aproximadamente las siete de la noche y mamá está en el trabajo y llegará mañana, por lo tanto estar sola hoy.

Apesar de ser un sábado siento que estoy desaprovechando mi adolescencia ya que no salgo a ningún lado, no tengo un amplio grupo de amigos que les guste salir, y a las chicas les gusta las cosas que a mí me desagradan, por lo tanto, estoy sola aquí en casa.

Tomo mi celular y momentáneamente pienso en escribirle a Ashton, momentáneamente, o bueno, a quien engaño, por todos los dioses que quiero escribirle a Ashton pero mi grado de pena y timidez me hace cuestionarme mucho acerca de hacerlo.

Desisto de hacerlo, quizás esté ocupado o alguna de esas cosas. Me doy la vuelta para subir las escaleras pero eso como si hubiera una voz en mi cabeza que dice 'Vamos Elle, llámalo, llamalo' y en menos de unos segundos ya me encontraba con el celular en la mano escribiéndole un mensaje rápido al chico.

¿Dónde quedó eso de desistir? Sip, totalmente en el olvido.

Pasa el rato y hago uno que otro quehacer de la casa para mantenerla en orden, incluso tomo una larga ducha y me pongo un pijama sencillo. Miro un reloj que está colgado en la pared que muy pocoas veces suelo mirar y son las 8:03pm, las horas me pasan demás de lentas.

Me acuesto en el gran sofá de la sala con una bolsa de Doritos en mano para comenzar a comerlos, enciendo el televisor pasando los canales para ver que podría interesarme, pero el timbre resuena, anunciando la llegada de alguien.

Dudo que sea mamá ya que está en el trabajo y además debe de tener consigo su juego de llaves, Tania está en una cita con Mattew y no hay otra persona que pueda visitarme.

El timbre vuelve a sonar recordándome que no me e acercado aún, deja la bolsa de Doritos en la pequeña mesa frente al sofá y me dirijo a abrir la puerta. Ya una vez frente a ella la abro y el fuerte olor de la loción que Ashton suele usar es lo primero que noto.

Él está aquí, él vino a visitarme.

Ashton está de pie frente a mi con un pantalón de jean azul oscuro combinado con una camisa blanca de mezclilla y unos zapatos a juego, noto que se hizo un nuevo corte de cabello que es degradado a los lados y más abundante en la parte superior, sus rizos azabaches caen por encima de su frente dándole un toque linda a su rostro que en estos momentos tiene una amplia sonrisa.

—Linda pijama —De inmediato bajo la vista a mi atuendo, mi pijama de shorts y camisa de tirantes con lunas es lo único que tengo—, buenas noches Elle.

—Buenas noches Ashton.

Este momento incómodo que sucede cada que me veo con Ashton dónde nos saludamos y luego no sabemos que hacer suele ser inquietante, no sé que hacer acontinuación así que solo le sonrió y él me devuelve la sonrisa.

En estos momentos noto cuánto me gusta la sonrisa de Ashton, sus comisuras se alzan lo más que pueden dándole vida a una amplia sonrisa que me muestra sus dientes, sin duda alguna una de las sonrisas más bonitas que e visto.

Recuerdo que Ashton aún está afuera y de seguro debe de hacer frío, ¿Dejarlo pasar estaría bien? Sería lo correcto.

—Ven, pasa —Me hago a un lado dejándole el camino libre.

—Gracias.

El entra y mira todo a su alrededor, cierro la puerta y no puedo pasar por alto los nervios que siento en este momento, nervios que siento a causa del chico que está aquí, aquí conmigo, a solas.

—¿Que hacías antes de que llegara?.

—En realidad no estaba haciendo nada —Comenté—, solo miraba que reality podría ver para entretenerme.

—¿Y tú mamá?.

—Esta en una guardia nocturna...

—Cierto que tú mamá es enfermera.

—¿Recuerdas todo lo que te digo? —Pregunto divertida, cruzándome de brazos.

—Recuerdo todo lo que me dices —Afirma.

—¿Porque lo haces?.

—Me gusta recordar lo que me importa —Tal declaración me da un indicio de algo.

—¿Y yo te importo? —Susurré, pero creo que el alcanzo a escucharme porque ladea su cabeza y me mira con dulzura.

—Si lo haces Elle.

Sonrió ampliamente, me rasco con nerviosismo la cabeza y luego me doy la vuelta para sentarme en el sofá, se que Ashton aún está de pie en donde estaba hace un rato pero avanza un poco y se sienta justo a mi lado en el sofá, miro un jarrón de porcelana que está a un lado de nuestro televisor como su fuera la cosa más interesante del mundo, pero la verdad es que estoy tratando de relajarme y pensar que puedo decirle a Ashton para que no note lo nerviosa que estoy.

—¿Quieres salir a algun lado? —Volteé tan rápido mi cabeza en su dirección que siento un leve mareo, trato de enfocarme en su pregunta.

—¿Ir a dónde?.

—No lo sé —Se encogió de hombros— A dónde nos lleve el viento.

—Que poético.

—Mucho. Pero enserio ¿Vamos a algún lado?.

Lo pienso por un breve segundo, buscando sus pros y contras.

—¿Me esperas a que me valla a cambiar?.

—Por mi está bien, por lógica no irás así en pijama.

Me levanto dándole una última mirada y subo a mi habitación, no estaba preparada para salir con Ashton, y mucho menos hoy. Miro en mi armario que podría ser lo más indicado para hoy y la verdad que no se que elegir ¡AAAAAAA! ¿En qué momento tengo tantas camisas? ¿Y jeans?. Para no darle más largas al asunto tomo un short de cuerina negro que me llega a la mitad de los muslos, un suéter que me queda super ancho— me encanta los suéteres así —con un estampado de algún disco de Lady Gaga, elijo unos nike blancos que combine con el atuendo y dejo mi cabello suelto. No me agrego maquillaje porque en lo personal ni me gusta, solo que me aplicó unas roseadas super exageradas de perfume, me miró en el espejo tratando de encontrar algún fallo pero no lo veo.

Respiro profundo, recordandome a mi misma que no pasará nada malo, que es solo una salida con Ashton.

Una inesperada salida con Ashton.

Bajo a la sala y Ashton está recostado en el sofá, pero... Noto que no se mueve, me acerco con cautela a él, está con los ojos cerrados y sus manos sobre su pecho; se quedó dormido.

Me parece muy divertida está situación, me siento a su lado para sercionarme de que en realidad este dormido y estoy en lo cierto. Pienso en como despertarlo y el primero impulso que tengo es tomar su rostro entre mis manos, sus mejillas están frías por el aire acondicionado de la sala, sus labios algo entreabiertos por dónde exhala el aire que tenía retenido.

Quedó unos largos segundos así mirándolo, poco a poco abre los ojos, sus castaños me miran, siento mi corazon latir con rapidez.

—Te habías quedado dormido, y no sabía cómo despertarte —Me excusé.

—Tranquila, no pasa nada —Su voz algo ronca por su pequeña siesta.

Vuelve su mirada a mi y se percata de que ya estoy lista. Se pone de pie y me señala la puerta, me pongo de pie igual y guardo mi celular en mi bolsillo y tomo las llaves de casa, el se dirige a la puerta y abro para que pueda salir, salgo detrás de él cerrando la puerta con seguro.

Caminamos en dirección al centro uno al lado del otro, en total silencio. No sabía a dónde iríamos, solo caminaba a su lado absorta en mis pensamientos y creo que él igual.

—Let's take our time tonight, girl, above us all the stars are watchin' —Comenzé a cantar con suavidad— There's no place I'd rather be in this world Your eyes are where I'm lost in.

»Underneath the chandelier we're dancin' all alone, there's no reason to hide what we're feelin' inside, right now —Traté de alzar un poco la voz como en la canción original, pero soy verdaderamente mala para cantar, Ashton soltó una pequeña risita.

—So baby let's just turn down the lights and close the door, oooh I love that dress but you won't need it anymore, no you won't need it no more let's just kiss 'til we're naked, baby —Cantamos ambos a dúo, él demostrando que se sabe la canción, y que es bueno para cantar.

—Versace on the floor —Ashton hizo un extraño movimiento con sus hombros y brazos causando que yo ría abiertamente—, ¿Que? ¿Tan mal lo hago?.

—Pareces una cosita rara —Seguia riendo.

—Gracias por bajarme el autoestima en mi intento de baile, Elle —Se hizo el ofendido, avanzo un poco más rápido y yo corrí detrás de el para alcanzarlo, tomando su brazo para deternerlo.

—¿Cómo te aprendiste Versace on the floor?.

—No debería decirte.

—¿Porque?.

—Porque... ¡Porque te ríes de mi!.

—Eso no es cierto —No recordaba que aún lo sostenía del brazo, así que al detenerme yo, el se detuvo conmigo, quedando frente a mí.

—Si lo es.

—Dime Ashton.

—No.

—¿Porque?.

—Porque no.

—Porque no es una respuesta.

—Eres difícil de persuadir, eh.

—Mucho, así que dime —Setencié.

Él me miró unos segundos y comenzó a caminar, yo retome el paso caminando a su lado.

—Cuando me dijiste que te gustaban las canciones de Bruno Mars quería saber un poco de él, me interese de su música por medio de ti, si habían una que otras que ya había escuchado pero no sabía que el las cantaba. Siempre que escuchas sus canciones te recuerdo, más que todo por The Lazy Song —Tarareé el característica silbido de la canción—, esa. Pues, comenzé a escucharlas y hubieron muchas que me llamaron la atención, siendo Versace on the floor una de ellas.

—Es lindo que las recuerdes por mi —Y verdaderamente lo era.

—Muchas cosas me recuerdan a tí, Elle.

—Puedo saber cuáles son...

—Mmm —Hizo el amago de pensar y golpee su brazo con suavidad—, siempre que paso por una librería tu sueles venir a mis pensamientos, recuerdo lo mucho que hablas acerca de libros, y no porque me moleste, sino que nunca había escuchado a alguien hablar con tanto amor e ilusión hacia algún hecho en específico.

—Eres la primera persona que se interesa porque me guste leer.

—¿Porque no debería Elle?. Todos somos libres acerca de la elección de lo que nos gusta, ya sea pintar, bailar, jugar algo o incluso solo mirar una pared, pero es lo que a tí te gusta y nadie debe cuestionar eso, porque lo importante es que te sientas feliz haciendo algo que tanto amas, y en tu caso es leer.

Y está en todo lo cierto.

Seguimos caminando, y Ashton me toma de la mano para que me dirija a un lugar en específico.

—¿Sabes patinar Elle?.

Estábamos en frente de la pista de hielo de la ciudad, aún es temprano así que está abierta en su horario nocturno, algunas personas entran y salen de dicho local.

Y respondiendo a la pregunta de Ashton, tampoco se patinar.

Ashton me miró esperando una respuesta y mi cara de horror creo que fue la mejor respuesta que pude haberle dado ya que él comenzó a reír.

—¿Ahora quien ríe? Mi pequeña Ellie.

—Esto es venganza ¿cierto?.

—Algo así —Me cruze de brazos y arrugue mi cara, incluso hago un puchero—, te ves tan adorable —Me apretó las mejillas y no pude evitar reír.

Entramos al local y Ashton paga las entradas para ambos, nos acercamos a la repisa con los respectivos patines para el público, me pregunta mi talla de calzado y se la digo, él me pasa unos que me quedan a la perfección y también se pone unos para él.

Ambos son blancos con las cuchillas de plata para un mejor desplazamiento. Camino de la mano de Ashton hasta la pista de hielo y él me suelta para adentrarse a ella, veo como se desplaza con tranquilidad ya que si sabe patinar, yo solo me quedo en la entrada mirando la pista con duda.

—¡Hey! ¡Entra!.

Los nervios no me dejaban moverme, no sé absolutamente nada sobre patinar y no quería entrar e hacer el ridículo. Ashton se acercó a mi con una agilidad que me sorprendió, ladeó su cabeza mirando, hizo una nueva con sus labios hasta que estuvo a poco centímetros de mí.

—Ellie, ven aquí —Negué con mi cabeza, el miedo siendo mi mejor compañero en estos momentos—, ¿Enserio no sabes patinar? —Negué otra vez, él miraba a todos lados pensando que hacer, de pronto su rostros se ilumino—, quiero que me escuches Elle, quiero que confíes en mí en estos momentos ¿Ok?.

Había algo en la voz de Ashton que particularmente solía darme tranquilidad, ese tono dulce que solía estar presente en cada palabra que me decía, su mirada cálida y esa sonrisa.

»Dame tus manos, Elle —Las extendí con lentitud, él las tomo entre las suyas, las palmas de ellas frías por la temperatura ambiente—, Poco a poco vas a avanzar pero sin levantar los pies ¿Ok?, No voy a soltarte, siempre estaré aquí, tranquila, cada que vayas avanzando quiero que te sientes relajada, sin miedos ni nada que te atormente, porque eres solo tú, eres...

—Solo yo.

—Exacto.

Ashton con lentitud tiro de mi hacia adelante, seguí sus indicaciones deslizando un pie y luego el otro, cada segundo que pasaba me sentía más en confianza, momentáneamente cerraba mis ojos dejándome llevar por el momento.

Se que estaba avanzando de la mano de Ashton, al igual que se que me estoy desenvolviendo más, pero en cierto momento cuando abrí mis ojos y me di cuenta que estaba en el centro de la pista, entre en pánico.

Comenzé a hiperventilar y mis manos comenzaron a sudar en abundancia, estaba asustada ¿Y si me caía? ¿Y si hacia el ridículo y todos se reían de mi? ¿Y si me lastimaba?.

Estaba en pánico y tan asustada, pero un tacto en cada lado de mi rostro me hizo espabilar por un segundo, mira al frente subiendo un poco mi vista para mirar a Ashton a los ojos, estos me miraban comprensivos, preocupados por mi repentino ataque de pánico y un tanto arrepentido.

—Estas bien Elle, ¿Quieres irte de aquí?.

Quería hacerlo, pero Ashton tenía tan buenas intenciones al traerme aquí que no quería irme, no quería irme por él.

—Tú... Sígueme enseñando.

Una pequeña sonrisa dibujo su rostro, este me soltó para pararse a mi lado y tomar una de mis manos.

—Escúchame Elle, vas a desplazar los pies cuando yo lo haga, primero el derecho y luego el izquierdo, no lo alargues tanto porque allí si nos podríamos caer.

Asiento entendiendo todo, él arrastró su pie y yo lo hize después con un poco de cautela, luego el otro, y el otro, y el otro. Me repetía a mi misma que yo podía hacerlo, que Ashton esta conmigo, que él no me dejaría sola y de verdad que nunca lo hizo, él siempre estuvo allí.

Estaba tan absorta en qué lo estaba logrando qué... Estiré demasiado uno de mis pies causando que mi peso se fuese hacia detrás, de inmediato sentí como unos fuertes brazos me envolvieron y cayeron junto conmigo.

Nuestros cuerpos recibieron el impacto contra el suelo, Ashton me miraba con ojos muy abiertos y paso lo inesperado, comenzé a reír. Él me miró algo sorprendido por mi reacción, así que comenzó a reír igual.

—Estas loca Elle —Me dijo divertido.

—¿Tu crees?.

—Si lo creo, ¿Sabes que más creo?.

—¿Que?.

—No lo creo, lo sé.

—¡Pero dime!.

—Eres muy impaciente.

—Lo sé, pero ¡Dime!.

—Está bien, está bien —Ashton acercó su cuerpo mucho más al mío, una de sus manos acunó mi rostro, cerré los ojos por la increíble sensación—, Cada día... Estoy mucho más seguro de cuánto me gustas Elle, y ¡Maldita sea! Cuánto me gustas Elle Camille.

Y allí está, aquél chico que me preguntó porque lo miraba de mala manera, él chico con el que comenzé a discutir por mensaje, el chico que comenzé a encontrarme por casualidad, él chico que me ha hecho sonreír con sus ocurrencias, él chico que siempre me ha escuchado y me apoyado en cualquier cosa, él chico que ya tenía casi toda mi confianza, él chico que no soltó mi mano y a la hora de caer... Cayó conmigo.

Ese chico que me tiene sonriendo como una boba, y puedo admitir que... Ashton cada día comienza a enamorarme más.

•••

Nota de autora: Juro que desde que comenzé a escribir este capítulo e estado llorando. Es lindo saber cómo alguien que conoces por casualidad puede volverse tan importante para tí, estando contigo en cualquier momento, sea bueno o sea malo.

La manera en la que Ashton no dejo sola a Elle, la dulzura con la que le explicó cada paso para que pudiera patinar, como nunca soltó su mano y hasta prefiero caer con ella a dejar que lo hiciera sola, fue... Totalmente emotivo para mí.

Tod@s en nuestras vidas necesitamos a un Ashton, a alguien que sujete tu mano y te diga 'Tranquil@, yo confío en tí y se que lo harás bien' alguien que confíe plenamente en ti, alguien que crea en lo que eres.

Y tengo la dicha de decir que tengo mi propio Ashton, porque a estado conmigo en mis peores momentos y a creído en mi hasta cuando no yo misma lo hago, me a impulsado a ser mejor persona y me a amado tal y como soy, así como yo lo amo a él.

Deseo que tod@s puedan encontrar a su Ashton que crean en ustedes y los apoye, porque no hay nada mejor que él apoyo proveniente de alguien que amas.

Sin más nada que decir deseo que hayan disfrutado este capítulo al igual que yo, cada una de sus leída son totalmente importantes para mí, ¡Se les quiere!.