La cancha de baloncesto estaba iluminada por las luces de la ciudad, creando un ambiente acogedor en la fresca noche de verano. Izuku driblaba el balón con habilidad, mostrando destreza en cada movimiento, mientras Tenya y Mineta lo seguían de cerca, listos para interceptar el balón en cualquier momento.

Tenya Lida: ¡Vamos, Izuku! ¡No te detengas ahora!

Mineta: Sí, necesitamos ganar este juego para demostrar quién es el mejor.

Izuku: ¡Lo sé, chicos! ¡No bajaré la guardia!

Con un movimiento rápido y preciso, Izuku lanzó el balón hacia el aro, viendo cómo se elevaba en el aire con la esperanza de que alcanzara su destino. El balón giró en el aire antes de caer limpiamente a través del aro, desatando los gritos de celebración de los tres amigos.

Mineta: ¡Lo hiciste, Izuku! ¡Eres imparable!

Tenya Lida: ¡Increíble tiro! ¡Eres un verdadero campeón!

Izuku: Gracias, chicos. ¡No podría haberlo hecho sin su apoyo!

Con sonrisas radiantes, los tres amigos se dieron un fuerte abrazo, disfrutando del momento de camaradería y amistad mientras continuaban jugando bajo la luz de la noche.

El aro de baloncesto se tambaleaba peligrosamente, amenazando con caer sobre Mineta y causarle daño. Sin embargo, antes de que pudiera ocurrir algo, Izuku actuó con valentía y rapidez, empujando a Mineta fuera del peligro inminente justo a tiempo.

Izuku: ¡Mineta, cuidado!

El sonido metálico resonó en el aire cuando el aro se desprendió por completo, cayendo hacia Izuku con una velocidad alarmante. En un acto instintivo, Izuku se interpuso entre el aro y Mineta, recibiendo el impacto directo en lugar de su amigo.

El ruido sordo del metal al estrellarse contra el suelo fue lo último que escuchó Izuku antes de que todo se volviera negro a su alrededor. Cuando recuperó el conocimiento, se encontraba en un lugar desconocido, rodeado por una atmósfera misteriosa y opresiva.

Izuku se incorporó lentamente, frotándose la cabeza mientras trataba de entender lo que había sucedido. Fue entonces cuando notó la figura imponente de un hombre parado frente a él, emanando una presencia poderosa y sobrenatural.

Lucifer: ¿Te encuentras bien, joven héroe? Parece que has tenido un encuentro bastante desafortunado con mi antiguo dominio.

Izuku: ¿Lucifer... Morningstar? ¿Qué estás haciendo aquí? ¿Dónde estoy?

Lucifer: Ah, así que has oído hablar de mí. Interesante. Estás en un lugar que trasciende los límites de tu realidad, un lugar donde los destinos se entrelazan y las verdades se revelan. Pero no te preocupes, no te haré daño. De hecho, estoy aquí para ofrecerte una oportunidad única.

Izuku miró con cautela al hombre frente a él, sintiendo una mezcla de temor y curiosidad ante la figura legendaria que tenía ante sus ojos.

Lucifer: Bien, joven héroe, tengo una propuesta para ti. Como verás, este lugar no es precisamente lo que podrías llamar "amigable". Pero tengo el poder de ofrecerte una salida. Sin embargo, como es costumbre en este tipo de situaciones, necesito algo a cambio.

Izuku: ¿Qué tipo de trato estás proponiendo?

Lucifer: Simple. Te ayudaré a regresar a tu mundo, ileso y salvo, sin una sola rasguño. Pero a cambio, necesito tu ayuda con un pequeño asunto en mi dominio. Algo que está fuera de mi control y que requiere la intervención de alguien como tú.

Izuku frunció el ceño, considerando cuidadosamente las palabras de Lucifer. Sabía que hacer tratos con seres sobrenaturales siempre venía con un precio, pero también se dio cuenta de que no tenía muchas opciones en ese momento.

Izuku: ¿Qué es lo que quieres que haga?

Lucifer sonrió con satisfacción, sabiendo que había ganado la atención del joven héroe.

Lucifer: Ah, eso es fácil. Solo necesito que me ayudes a resolver un pequeño... inconveniente en mi reino. Nada demasiado complicado, solo un pequeño favor para un amigo. ¿Qué dices, héroe? ¿Aceptas mi oferta?

Izuku vaciló por un momento, pesando las opciones y considerando las posibles consecuencias. Finalmente, asintió con determinación.

Izuku: Está bien, Lucifer. Acepto tu oferta. Ayúdame a regresar a casa y estaré encantado de ayudarte con tu problema.

Lucifer asintió con aprobación, satisfecho con la respuesta del joven héroe.

Lucifer: Excelente. Entonces, tenemos un trato.

Después de sellar el trato, Lucifer extendió su mano hacia Izuku, con una expresión decidida en su rostro.

Lucifer: Muy bien, joven Midoriya. Es hora de que recibas tus nuevos poderes. Prepárate para experimentar algo... celestial.

Izuku miró la mano extendida de Lucifer con asombro y algo de nerviosismo, pero sabía que no podía retroceder ahora. Con determinación, estrechó la mano de Lucifer y sintió una oleada de energía recorrer su cuerpo.

La escena se desvaneció lentamente mientras el poder fluía a través de Izuku, y de repente se encontró despertando en las gradas de la cancha de baloncesto, como si nada hubiera pasado. Se tocó el pecho, sintiendo una extraña sensación de poder latente dentro de él.

Izuku: ¿Fue todo un sueño... o fue real?

Miró a su alrededor, buscando alguna señal de lo que acababa de suceder, pero todo parecía volver a la normalidad. Sin embargo, en lo más profundo de su ser, sabía que algo había cambiado para siempre.

Tenya y Mineta corrieron hacia Izuku cuando lo vieron levantarse, preocupados por su bienestar.

Tenya: ¡Izuku! ¿Estás bien? ¡Esa fue una caída bastante fea!

Mineta: ¡Sí! ¡Pensamos que te habías lastimado gravemente!

Izuku se levantó lentamente, sintiéndose un poco aturdido por lo que acababa de experimentar, pero trató de mantener la compostura frente a sus amigos.

Izuku: Estoy bien, chicos. Solo fue un pequeño accidente. Gracias por preocuparse.

Tenya: ¿Estás seguro? Deberías ir a la enfermería y que te revisen.

Mineta: Sí, no sabemos qué tan fuerte fue ese impacto.

Izuku asintió, agradecido por la preocupación de sus amigos, pero sabía que no podía explicarles lo que realmente había sucedido. Simplemente sonrió y asintió.

Izuku: Está bien, iré a la enfermería para asegurarme. Gracias, chicos.

Izuku sintió un escalofrío recorrer su espina dorsal cuando vio a Amenadiel frente a él, el tiempo parecía detenerse en ese momento.

Amenadiel miró fijamente a Izuku con una expresión seria en su rostro, como si estuviera evaluando algo importante.

Amenadiel: Tú eres... diferente. Puedo sentirlo en tu alma.

Izuku tragó saliva nerviosamente, preguntándose cómo este encuentro cambiaría su vida.

Izuku: ¿Quién eres tú? ¿Y por qué siento que algo extraño está sucediendo?

Amenadiel: Soy Amenadiel, el hermano de Lucifer. Y has sido elegido para un propósito mayor de lo que puedas imaginar.

Izuku se sintió abrumado por la revelación, sin saber qué pensar o cómo reaccionar.

Izuku: ¿Elegido? ¿Para qué?

Amenadiel: Todo será revelado a su debido tiempo. Pero por ahora, debes venir conmigo. Hay mucho que necesitas aprender.

Izuku asintió, sintiendo que su destino estaba tomando un giro inesperado y emocionante.

Amenadiel miró a Izuku con seriedad mientras le entregaba un papel con la dirección de la enfermería.

Amenadiel: Si vas a la enfermería y la enfermera analiza tu sangre, descubrirá algo divino en ti. No sé por qué te estoy diciendo esto, ya se lo dije a Lucifer.

Izuku tomó el papel, sintiendo una mezcla de confusión y curiosidad. ¿Qué significaba esto? ¿Por qué su sangre revelaría algo divino?

Izuku: ¿Qué quieres decir con "algo divino"? ¿Qué hay en mi sangre?

Amenadiel parecía reacio a explicar más, pero finalmente habló con cautela.

Amenadiel: No puedo decirte más por ahora. Solo sé que hay algo único en ti, algo que te hace especial. Ahora ve a la enfermería antes de que alguien más se dé cuenta.

Izuku asintió, guardando el papel en su bolsillo y siguiendo las indicaciones de Amenadiel hacia la enfermería.

Después de que Amenadiel se retiró, el tiempo volvió a la normalidad y Izuku se sintió aliviado. Sin embargo, su mente estaba llena de preguntas sobre lo que acababa de suceder. Decidió tomar un taxi para ir a la enfermería y resolver el misterio sobre su sangre divina.

Tenya Lida lo miró con sorpresa cuando vio a Izuku llamando a un taxi en lugar de dirigirse directamente a la enfermería.

Tenya Lida: ¿Izuku? ¿Por qué no vamos juntos a la enfermería?

Izuku miró a Tenya con una expresión extraña en su rostro, una mezcla de determinación y confusión.

Con un gesto de despedida, Izuku se deslizó en el asiento trasero del taxi y se alejó hacia la enfermería, dejando a Tenya Lida aún más desconcertado por la extraña actitud de su amigo.

Tenya Lida: ¿Qué está pasando con Izuku? Parece diferente... casi como si... ¿fuera otra persona?

Mientras tanto, Izuku se sentó en el taxi con una sonrisa sutil en los labios, sintiéndose momentáneamente imbuido con la actitud confiada y decidida de Lucifer Morningstar.

Izuku: Bueno, parece que tengo un misterio que resolver. Y no voy a dejar que nada ni nadie se interponga en mi camino.

Izuku se sentó en el asiento trasero del taxi y le indicó al conductor que se dirigiera al aeropuerto. Sacó su billetera y buscó entre sus billetes.

Izuku: Aquí tienes, amigo. Te doy 10 dólares extra si me llevas al aeropuerto lo más rápido posible.

El conductor asintió con una sonrisa y tomó el dinero de Izuku.

Conductor: Por supuesto, joven. ¡Prepárate para un viaje rápido y seguro!

El taxi arrancó con fuerza, avanzando velozmente por las calles mientras Izuku se aferraba al asiento, ansioso por llegar a su destino lo antes posible.

Izuku se encuentra en el PenHaus del Lux, un elegante y lujoso club nocturno, vistiéndose con un atuendo similar al de Lucifer. A pesar de ser de día, el ambiente del lugar sigue siendo sofisticado y con estilo, con luces tenues y música de fondo creando una atmósfera única.

Izuku elige cuidadosamente cada prenda, buscando capturar el estilo distintivo de Lucifer. Opta por un traje negro perfectamente ajustado, con una camisa blanca impecable y una corbata a juego. Se asegura de que cada detalle esté en su lugar, desde el nudo de la corbata hasta el brillo de sus zapatos.

Izuku: (mientras se ajusta el cuello de la camisa) "Hmm, creo que esto debería hacer el truco. Si quiero parecerme a Lucifer, tengo que asegurarme de lucir impecable en todo momento." (mira su reflejo en el espejo con determinación) "Es hora de poner en práctica algunos de esos trucos de estilo de Lucifer. Quién sabe, tal vez incluso pueda aprender algo sobre cómo moverme con su confianza característica".

Las puertas del ascensor se abren con un suave zumbido, revelando la figura de Mazikeen. Ella entra con su habitual porte fiero y seguro, luciendo un atuendo oscuro y llamativo que refleja su naturaleza demoníaca. Su cabello oscuro cae en cascada sobre sus hombros, enmarcando su rostro marcado por cicatrices y su mirada penetrante.

Mazikeen: (con un gesto de sorpresa al ver a Izuku) "¿Qué demonios estás haciendo aquí, Midoriya? Este lugar no es para ti." Izuku: (sonriendo con confianza) "Oh, solo estoy probando algo nuevo. ¿Qué te parece mi estilo luciferino?" Mazikeen: (frunciendo el ceño) "No me importa cómo te vistas. Solo asegúrate de no meterte en problemas aquí." Izuku: (asintiendo) "Lo tendré en cuenta. Pero ¿qué hay de ti? ¿Estás aquí en una misión de Lucifer?" Mazikeen: (con una mirada misteriosa) "Algo así. Pero no es asunto tuyo. Ahora, ¿puedo confiar en que no causarás ningún alboroto mientras estés aquí?" Izuku: (levantando las manos en señal de rendición) "Por supuesto, Mazikeen. No tengo intención de causar problemas." Mazikeen: (asintiendo con aprobación) "Bien. Entonces mantente fuera de mi camino y todo estará bien." (ella se aleja con paso firme, dejando a Izuku reflexionando sobre su encuentro)

Mazikeen se vuelve hacia Izuku con una expresión seria, sus ojos brillan con una intensidad que indica la importancia de su mensaje. Su postura es firme y decidida, lista para cumplir con cualquier tarea que se le encomiende.

Mazikeen: "Hay dos personas abajo que preguntan por ti. Parecen ansiosas por verte, pero no parecen amistosos."

Izuku: "¿Alguna idea de quiénes podrían ser?"

Mazikeen: "No tengo ni idea. Pero lo descubrirás pronto si decides bajar."

Izuku: "Entendido. Gracias, Maze. Aprecio la advertencia."

Mazikeen: "No hay problema. Solo ten cuidado, Midoriya. Las cosas pueden ponerse feas rápidamente."

(Izuku asiente en comprensión mientras Mazikeen se aleja, dejándolo contemplando sus palabras con seriedad)

Al bajar por el ascensor, Izuku ve a Tenya Lida y a Mineta esperándolo en el vestíbulo del PenHaus. Ambos lucen preocupados y tensos, como si estuvieran esperando algo importante.

Izuku: "¿Qué están haciendo aquí, chicos? ¿Pasa algo?"

Tenya Lida: "Izuku, nos enteramos de que habías sido visto aquí y pensamos que deberíamos venir a comprobarlo. ¿Estás bien?"

Mineta: "Sí, ¿qué está pasando? ¿Por qué estás aquí solo?"

Izuku: "Estoy bien, solo necesitaba un cambio de aire. ¿Por qué están ustedes dos aquí?"

Tenya Lida: "Recibimos una extraña llamada de un número desconocido que decía que te buscaba. Nos preocupamos y vinimos a asegurarnos de que estuvieras bien."

Mineta: "Sí, y además, ¿qué estás haciendo en este lugar tan lujoso? No parece tu estilo, Izuku."

Izuku: "Es una larga historia. Pero gracias por venir a verme, chicos. Aprecio la preocupación."

Tenya Lida: "Por supuesto, Izuku. Si necesitas algo, no dudes en decírnoslo."

Mineta: "¡Sí! Estaremos aquí para ti, ¡como siempre!"

(Izuku sonríe ante la preocupación de sus amigos, sintiéndose reconfortado por su apoyo)

Izuku se dirige a la barra del PenHaus, se sirve un vaso de whisky y comienza a beberlo mientras observa a Tenya Lida y Mineta con una mirada penetrante. Con el 10% de la actitud de Lucifer, parece más seguro de sí mismo y desafiante.

Izuku: "Bueno, chicos, estamos aquí, disfrutando de la vida. Pero dime, ¿qué es lo que realmente desean en este mundo?"

(Tenya Lida y Mineta intercambian miradas sorprendidas ante la pregunta directa de Izuku)

Tenya Lida: "Bueno, yo... creo que lo que más deseo es justicia en este mundo. Quiero poder hacer una diferencia y asegurarme de que todos sean tratados con equidad."

Mineta: "Para mí, sería... ¡ehm!... Quiero... quiero ser famoso y tener todas las chicas que desee a mis pies. Sí, eso es lo que deseo."

(Izuku sonríe de forma enigmática mientras observa a sus amigos, utilizando por primera vez el poder de Lucifer para conocer sus deseos más profundos)

Justo cuando Tenya Lida se prepara para preguntar si Izuku fue a la enfermería, llega Lucifer al PenHaus, creando una atmósfera de sorpresa y expectación.

Lucifer: "¡Buenas tardes, queridos amigos! Veo que están disfrutando de este maravilloso lugar. ¿Qué tal les va?"

(Izuku, Tenya Lida y Mineta miran sorprendidos a Lucifer, sin saber qué esperar de su presencia en ese momento)

Izuku presenta a Mineta y a Tenya Lida a Lucifer como su mentor, aunque Tenya Lida muestra incredulidad ante la afirmación.

Izuku: "Chicos, permítanme presentarles a mi mentor, Lucifer Morningstar."

Tenya Lida: (con escepticismo) "¿Tu mentor? ¿De verdad?"

Lucifer: (con una sonrisa socarrona) "Así es, soy el mentor de este joven aquí presente. ¿Algún problema con eso, chico?"

Izuku, Mineta y Tenya Lida observan a Lucifer con asombro y confusión, sin saber cómo reaccionar ante su presencia inesperada)

Mineta, inicialmente creyendo que Lucifer es un héroe profesional, se sorprende al ver tanto a Lucifer como a Izuku desplegar sus alas de ángel desde sus espaldas.

Mineta: (con asombro) "¡¿Qué demonios?! ¿Ángeles de verdad?"

(Izuku y Lucifer comparten una mirada cómplice mientras observan la reacción de Mineta)

Después de desplegar sus alas de ángel, Izuku le dice a Mazikeen que ha noqueado a Tenya y a Mineta.

Izuku: (dirigiéndose a Mazikeen) "Por cierto, he noqueado a Tenya y a Mineta. Creo que necesitaremos un poco de tiempo a solas para hablar sin interrupciones."

Mazikeen: (asintiendo con complicidad) "Entiendo. Les diré que están descansando en la enfermería."

Lucifer menciona que es hora de entrenar a Izuku en el infierno.

Lucifer: "Izuku, ha llegado el momento de que comiences tu entrenamiento en el infierno. Necesitas aprender a controlar tus nuevos poderes y entender mejor tu naturaleza divina."

Izuku: (asintiendo) "Entiendo, Lucifer. Estoy listo para aprender y mejorar mis habilidades."

Mazikeen: (mirando a Izuku con interés) "Será interesante ver cómo te desenvuelves en el infierno, Midoriya."

Lucifer: "Bien, entonces prepárate. Nos vamos al infierno ahora mismo."

Izuku le menciona a Mazikeen que si Tenya Lida y Mineta despiertan, ella deberá seducirlos, ya que es su especialidad. Además, le informa que estarán en el infierno durante 5 días.

Izuku: "Mazikeen, si Tenya Lida y Mineta despiertan mientras estamos en el infierno, será tu trabajo seducirlos. Sé que es tu especialidad."

Mazikeen: (asintiendo con una sonrisa) "Entendido, Izuku. Haré lo que sea necesario."

Izuku: "Y recuerda, estaremos en el infierno durante 5 días, así que prepárate para todo."

Lucifer: "No te preocupes, Mazikeen sabe cómo manejar estas situaciones. Estaremos bien."

Mazikeen: "Por supuesto, señor Morningstar. Estoy lista para cualquier desafío que se presente."

Lucifer y Izuku despliegan sus alas y comienzan a volar hacia el infierno. El viento azota sus rostros mientras atraviesan el cielo, descendiendo hacia el reino infernal.

Izuku: "¿Cómo será el entrenamiento en el infierno, Lucifer?"

Lucifer: "Será una experiencia única, Izuku. Te enseñaré todo lo que necesitas saber para manejar tus nuevos poderes y habilidades."

Izuku: "Estoy listo para cualquier desafío que se presente. Quiero dominar mis poderes y ser capaz de proteger a los demás."

Lucifer: "Eso es lo que me gusta escuchar, chico. Con tu determinación y mi guía, seguro que nos convertiremos en un equipo imparable."