Narra Natalia:

Allí estaba yo cenando con mis padres  《obligada》ya que debido a mis salidas estoy castigada. Evan había venido hace dos semanas pero luego no volví a verlo, pensar en todo lo que puede o pudo haber hecho, me sentía vacía y lo único que quería hacer era salir para olvidar todo por unos minutos. Como las últimas dos semanas me las pase de fiesta mis padres se enfadaron y terminé sin celular ni salidas.

Nesecitaba saber algo de Evan, lo nesecitaba a él. Mi plan era simple, no me importaba nada, solo olvidar mis obligaciones por un día. Ser reina es algo que siempre soñé pero tener que dejar todo por eso me parecía injusto.

Además lo peor casi toda mi familia estaba presente, por qué? Ni yo lo sé.

Estuve hablando con mi amiga Hanna, aunque desde que me coronaron actuaba muy extraño. Era una de mis damas de compañía, mis padres aún no entendían que eso ya no se usaba. Antes era mi compañera de fiestas, ya que al no tener tantas cosas para hacer era la primera en llevarme allí.

Era hora de distraerme y no lo haría sola!. Tomé mi celular y marque el número de mis amigas. Intenté hablar con Mar pero nada, ni siquiera sonaba su celular, raro.

─Hola?...─Dijo la voz de Firella medio dormida. Tan temprano se dormía?!.

─Firella! Quería invitarte a venir con migo a ya sabes, una fiesta  mañana.─Escuché un suspiro de su parte y agregué.─No aceptaré un no como respuesta. Nesecitas volver a divertirte! Habrá una fiesta épica! Casi todo el mundo irá!...Las chicas irán... ─ No escuchaba nada seguramente lo estaba pensando.

─Está bien. Mañana a las nueve de la noche estaré allí, sólo debes mandarme la dirección. Adiós nos vemos mañana Nat.─Una sonrisa de oreja a oreja se me había dibujado yo me despedí y haci llame a todas,  que por supuesto aceptaron. Aunque admito que Alice y Zoé fueron muy difíciles de convencer.

Sin más que hacer me puse mi ropa para dormir y me quedé completamente dormida.

Narra Alice:

Me encontraba hablando con mi primo, Alex con quien me llevaba estupendo aunque por supuesto su hermana me odiaba, quien sabé porqué.

Siempre me gustaba estar con él, me hacía reír a carcajadas, cosa con la que su hermana Caitlin me fulminaba con su mirada y a veces me advertía que no me acercará. Éramos familia, pero no lo parecía.

─Ali! Ven, iremos a usar nuestros poderes al bosque.─Lo mire sin creer lo que dijo. Eso sólo significaba problemas.─ Vamos será divertido! Además me debes un favor recuerdas?─Genial! Me tenía atrapada. Como mis padres de seguro se negarian a que fuera a esa fiesta a la que me invito Nat tuve que pedirle a Alex que me cubriera.

─Bien, Bien...Vamos.─Me tomo de la mano y jalando de ella me llevo hasta el bosque.

La verdad lo admito fue muy divertido, aún más cuando él me asusto y terminé dejando a Caitlin lejos debido a que "por accidente" desate mi poder y le dio a ella.

─Idiota! Ten más cuidado, quieres?!─ Aguantaba mi risa, debido al viento su cabello era un desastre, Alex no aguanto y estalló en risas.

─Vamos Caitlin! Fue un pequeño accidente, además deja de culpar a Alice yo la asuste.─Como rayos estaba aguantando la risa? Era épico, en estos momentos desearía no haber olvidado mi celular.

─Claro! Un accidente! Qué conveniente no?!─Ambos no páramos de reír, mi prima al notar eso se fue furiosa dejándome sola con Alex.

Él tenía el poder de la telekinesis. Y su hermana no tuvo suerte, de su familia  fue la única en no heredar poderes, no se cómo su hermano pudo traerla.

─No debiste traerla Alex, sabes que no tiene poderes, eso le afecta.─Su rostro cambio rotundamente, él sabía que yo tenía razón.

─Nesecitaba que se divirtieran, además de que por lo menos se lleven mejor.

─Ella y yo?! Sigue soñando.─El negó riendo y haci volvimos al castillo ya que estaba por oscurecer y tenía una fiesta a la cual asistir.

Narra Zoe:

El aburrimiento era notable, mis amigas y yo saldríamos esta noche pero el resto del día ni yo sabría lo que iba a hacer.

─Aburrida Natasha?─Lo fulmine con la mirada al escucharlo decir mi segundo nombre.

─Qué te he dicho sobre decir mi segundo nombre? Soy Zoe.─Por si fuera poco tenerlo debía escucharlo.

─Ok. No te molestes. Qué dices si hacemos algunas bromas?─Ese era Jeremy, un presumido y divertido chico, estaba con nosotros porque era hijo de algunos socios de mi padre.

─Estoy aburrida, pero no. Mi padr me matará si se enteran.─El sonrió y acercándose a mi dijo.

─No tiene porque saberlo...─Yo me pare de donde estaba sentada y le dije.

─Tengo novio Jeremy, no estoy para juegos.─Soltó una leve risa y yo sólo me limite a mirarlo.

─No lo mal intérpretes, sólo quiero que te diviertas. Vamos! O acaso tienes miedo? Me lo esperaba.─Me estaba diciendo covarde?!

─No tengo miedo. Vamos! Te lo demostrare.

Jeremy sonrió ampliamente y haci lo seguí por los pasillos, no sabía cual era su plan pero estaba preparada para verlo. El entró a la sala de reuniones y comenzó a hacer algo que no alcancé a ver, en fin sólo debo esperar.

─Toma.─Me dio su teléfono y en el estaba una aplicación donde un botón decía, comience.─En cuanto yo te lo diga tocas el botón entendido?─ Asenti y entonces todos los socios de mi padre entraron mientras nosotros veíamos todo desde nuestro escondite.

Ellos hablaban y hablaban, más aburrido. Al ver unos papeles en la gran mesa todos tomaron su pluma listos para firmar.

─Ahora!─Con esa orden toque el botón e inmediatamente todas las plumas estallaron dejando a todos pintados de azul, provocando que estallaramos en risas.

Salimos corriendo de allí ya que al parecer nos habían escuchado, y lo peor sería que me descubrieran.

─Eso fue muy divertido! Viste la cara de tu padre?! Fue epica!─Al entrar a mi habitación ambos nos quedamos mirando por unos minutos, era muy incomodo.

Cuando iba a decir algo Jeremy me besa!. Pero al besarlo me imaginaba que era él, Andy. Disfrute ese beso recordando el de nuestra primera cita, pero al recapacitar era Jeremy.

─Basta!─Él me miro confundido y yo sólo negaba recordando lo que acababa de hacer.

─Qué acaso no te ha gustado?...─Se acercó pícaro hacia mi y yo le pegue una cachetada.

─Largo de mi habitación.─Él aún tocaba su mejilla la cual deje roja con el impacto de mi mano.─Dije que te fueras!!─Sin más que decir se fue aún sin creer lo que había heho. Al ver la hora note que eran las ocho de la noche. Rayos! Debía estar a las nueve en la fiesta!. Será mejor apurarme, lo mejor que podía hacer ahora era distraerme.

Continuará....