•|CAPÍTULO QUINCE


[S i n  E d i t a r]

En la vida siempre existirá un por qué al comportamiento de x persona y es que no siempre uno fue así, una persona que no cree en el amor de seguro que tiene sus razones y Harry tenía las suyas para ser como es. Desde pequeño había admirado el matrimonio de sus padres y veía como a su héroe a su padre sin embargo todo se desmoronó después de la muerte de sus tíos y enterarse de la verdad, de que el "perfecto" matrimonio era una farsa y que su madre era una mujer débil que no hacía nada a lo que su padre hacia.

A los dieciséis años se enamoró por primera vez de la chica que en ese tiempo él creyó que era la mujer perfecta con su cabello rojo fuego que parecía brillar ante la luz del día y su piel ligeramente bronceada cubierta de algunas cuantas pecas que él amaba besar a cada oportunidad, ella venía de una familia italiana y que habían decidido vivir en New York h mudandose a lado de la casa de sus padres y por supuesto que al principio se había mostrado un poco tosco con ella sin embargo aún así ella no había parado de hablar con Harry a pesar de que la mayor parte del tiempo él la ignorará, no fue hasta los diecisiete años que Harry aceptó sus sentimientos por Bianca Alessandrini y se puede decir que fue feliz con ella los primeros meses de relación hasta que inevitablemente todo cambio, él empezó a temer que ella lo dejara por otro o le estuviera siendo infiel, Harry no quería vivir en una relación tóxica como la de sus padres pero desafortunadamente en eso se convirtió su relación con Bianca.

Las inseguridades crecieron en Harry al igual que el resentimiento hacia su padre cada vez que lo veía sonreír hipócrita mente como si todo estuviera bien y más cuando lo veía a lado de su hijo bastardo, los odiaba a ambos y miraba a su madre con decepción por soportar eso, las cosas empeoraron en todo sentido.

Conoció a Ian—la actual pareja de su hermana menor—en una fiesta en la cual lo habían invitado junto a Bianca, ambos habían ido y concedieron con Ian que era hijo de uno de los socios del padre de Harry, ambos hablaron y bajo los efectos del alcohol compartieron sus penas así que Ian le propuso ir a una pelea clandestina al principio Harry se había negado al igual que Bianca.

—Por supuesto que no— había dicho ella mientras se vestía—, Harry eso puede ser muy peligroso— su voz sonaba angustiada.

Harry la había mirado desde la cama él aún seguía acostado y veía a su novia vestirse ya que esa tarde Bianca tenía que ir a una cena junto a sus padres.

— Es una buena oportunidad para intentar algo nuevo— contestó.

Bianca se había girado para mirarlo, su cabello lucía desordenado pero aún así seguía viéndose magnífica.

—Harry, no me gusta eso— había caminado hasta la cama pasa quedar al frente de Harry—, no quiero que te pase nada malo.

—No me pasará nada, lo prometo— había sonreído para después jalar la de la mano y tirarla encima de él y besarla, el beso que había comenzado lento terminó con ellos dos de nuevo enredados entre las sabanas, haciendo el amor.

Y si, Harry asistió a esa pelea y se dió cuenta que ahí podía sacar sus frustraciones hacia su padre y el hijo no reconocido originalmente por su padre, cada vez que pasaba sentía una enorme satisfacción y más relajado pero las cosas con Bianca se intensificaron, no le gustaba llevarla con el a aquellos lugares ya que los hombres se la quedaban viendo y eso a Harry no le gustaba así que se distanciaron por unos meses y Bianca había comenzado a tener problemas en casa, Harry se sentía más inseguro a cada momento que ella no contestaba las llamadas pero él no tenía idea que había días en los que Bianca simplemente estaba tan mal que terminaba completamente dopada con los somníferos que tomaba después de ver las peleas de sus padres.

Ambos estaban sumidos en sus problemas y a pesar de amarse aún no tenían la suficiente confianza para hablar libremente de sus problemas personales y lo que los afligía, tal vez si lo hubieran hecho las cosas no hubieran terminado como lo habían hecho.

—¿Puedo pasar?—Harry miró hacia la puerta de su oficina en donde se asomaba Louise.

—Adelante, ¿Cómo te fue con mi hermano?— preguntó reclinándose en si silla.

Louise camino hasta sentarse en la silla de enfrente e hizo una mueca que indicaba a Harry que las cosas no habían salido bien.

—Nathan es tan aburrido—se quejó—,ya no es como solía ser en nuestra adolescencia, literalmente me trató como una desconocida así que cada vez que veía que me acercaba a él, me rodeaba y se iba.—se cruzó de brazos.

Harry se despeinó y miró con seriedad a Louise:
—Al parecer Nathan va en serio con Clare.

—¿Clare?—preguntó Louise, dándose cuenta de donde le sonaba el nombre.—¿Nathan está saliendo con esa?.

Harry la miró mal, su ceño se frunció y chasqueó la lengua. Louise se estremeció en ese momento no le convenía ver a un Harry enojado.

—Perdón— murmuró entre dientes—, me tomó por sorpresa yo pensé que me habías enviado a Los Angeles simplemente para que viera a Nathan porque sabes que me interesa.

—Y por eso lo hice— soltó Harry, acomodándose el cabello—, pero al parecer mi tonto hermano no cayó ante tí y eso que ustedes también tuvieron algo que ver hace años.

Louise sonrió al recordar cuando Nathan y ella llegaban a tener algo aún sabiendo que ella sentía algo por Harry.

—Vaya, ¿A caso ustedes siguen compartiendo a las mismas mujeres?— rió al darse cuenta de lo que Harry había dicho. Harry volvió a fruncir el ceño y meneó su cabeza hacia un lado, tratando de olvidar cosas de sus pasado.

—Cállate, eso no te importa.

— Como sea—murmuró—, ¿Qué vas a hacer?.

Louise sabía que Harry no se daría por vencido, Harry no era de los que perdían tan fácilmente de hecho, Harry no era de los que les gustaba perder. Ella había estado interesada en Harry y había querido tener algo con él más que un acoston, después de que Clare había desaparecido ella se propuso seducirlo y lo consiguió cuatro meses después sin embargo Harry era tan frío fuera y tan caliente en la cama lamentablemente Louise se había desilusionado y había aceptado ser el reemplazo de Clare porque sabía que Harry sola la tenía por el hecho de que Clare no estaba, pero ahora que ella había aparecido Louise sería desechada y lo aceptaba.

Había estado tan feliz cuando Harry la había mandado a los angeles para que viera a Nathan, aquel chico que era tan dulce y que siempre la había tratado bien pero con el que siempre hacia de lado por Harry, Louise había creído que Nathan estaría encantado al verla sin embargo las cosas no salieron así y ahora entendía por qué: Clare Jones. De nuevo ella aparecía para quitarle lo que jamás le había pertenecido a Harry y a Nathan Styles.

—Nada—dijo Harry. Louise lo miró confundida.

—¿Cómo?.

—No voy a hacer nada más que apoyar a mi hermano menor— se encogió de hombros—, Nathan merece tener un poco de felicidad aunque sea por poco.

Entonces Louise entendió que Harry no se estaba dando por vencido, él simplemente estaba dando tiempo antes de atacar.

Clare se había enamorado completamente de Nathan al principio simplemente era cariño y atracción pero con pasó del tiempo ella realmente quedó prendada por él; Nathan era un chico dulce, amable un caballero total, nunca creyó volver a enamorarse después de su primera desilución amorosa pero ahí estaba parada frente a Nathan, frente a la persona que la había ayudado a superar sus temores al amor y le había enseñado que el amor no era sufrir sino disfrutar, vivir el momento y que por supuesto habría momentos malos pero juntos podían superarlos y seguir adelante.

Sin embargo ahora entendía que el momento difícil había llegado y esperaba que pudieran superarlo.

—Tengo algo que decirte— le dijo en voz baja, evitando que Edward escuchará y agradecía que su pequeño se encontrará en el piso superior.

—Clare—Nathan acaricio la mejilla de Clare con delicadeza—,¿Pasó algo malo?

—Depende desde nuestra perspectiva— sonrió amargamente.

Nathan se sorprendió, nunca había visto esa sonrisa en el delicado rostro de Clare y mucho menos esa mirada: tan desesperada.

—¿Por qué lo dices?— se acercó más a ella.

—Porque no sé cómo te lo tomarás— alzó la mano para ponerla sobre el hombro Nathan, alejándolo.

Bien definitivamente ahora Nathan estaba oficialmente preocupado y por qué no decirlo: asustado.

—Por favor, espérame en tu carro— pidió—voy a hablar con Edward.

Nathan no supo que responder así que Clare lo tomó como un sí y entro a la casa de nuevo, cerrando la puerta y así evitar que Nathan entrará.

Nathan caminó de regreso a su auto y entro, se quedó mirando al frente solo viendo la carretera y sintiendo su corazón palpitar aceleradamente entonces recordó que antes de llegar a la casa de Clare le había parecido haber visto la figura de Abigail alejándose al sentido contrario de donde él venía,¿Se había equivocado?,¿ Y si lo que tenía Clare era por Abigail?.

Escuchó el seguro de la puerta del copiloto desactivarse indicándole que Clare estaba ahí, escuchó la puerta cerrarse y luego el silencio invadió el lugar nunca antes el silencio se le había hecho tan incómodo y asfixiante.

—¿A dónde quieres ir?— preguntó a punto de encender el auto pero Clare le detuvo la mano y la sostuvo sin soltarlo.

— A ningún lado, Eddy está en su habitación haciendo la tarea solo quería un lugar en donde pudiera hablar contigo a solas— Nathan giró su cabeza para verla. Clare al contrario ella seguía mirando al frente.— Prométeme que no me interrumpirás hasta que termine de hablar- está vez lo miró con la mirada suplicante y llorosa. Quiso abrazarla sin embargo se contuvo.

—Lo prometo.

— Tenía veintidós años cuando conocí al padre de Edward, en esa época me comporte de manera insensata así que cometí errores— Nathan veía a Clare pero ella veía hacia el frente—, me entregué a la persona equivocada sin ninguna medida algo que no estaba permitido sin embargo me aleje en cuanto pude— sonrió amargamente—,pero no me fuí con las manos vacías, había quedado embarazada al principio tuve miedo sin embargo no podía deshacerme de una creatura que no tenía la culpa de nada— su voz tembló— me regrese a Benson y tuve a Eddy, como verás no le dije nada al papá de Edward...

— Clare...— tragó saliva y Clare le apretó la mano— ¿El papá de Edward regresó?— Clare asintió energéticamente, sollozando.

— Sabe de él...quiere conocerlo y mi bebé...oh mi pequeño— Nathan apretó los labios— también quiere conocerlo...

— Lo entiendo.

— No...

— Lo hago, de verdad que lo hago, no me voy a enojar por eso ambos tienen derecho a conocerse— murmuró aunque su mirada demostraba el dolor que estaba sintiendo.

— Nathan...aún no te he dicho el nombre.

— No es necesario— negó porque realmente no le interesaba, porque sentía que no debía saberlo.

— Lo es— ahora Clare lo miró, con lágrimas corriendo por sus palidas mejillas.

— No, Clare...

—¡Lo es!— gritó—, es necesario que te lo diga...— volvió a sollozar.

Nathan cerró los ojos momentáneamente para después volver a mirar a Clare, ella realmente se veía tan mal así que la jalo de la mano y la atrajo hacia él, abrazándola. Clare se lloró en el pecho de Nathan aferrándose a él porque posiblemente ese sería el último día en el que estarían así, le dolía de solo imaginar alejarse de Nathan, alejarse de lo que él significaba para ella, de la seguridad, del amor: sintió la mano de  Nathan acariciar sus cabellos, consolando la.

— Es Harry...tu hermano es el papá de Edward...— la mano de Nathan se paralizó sobre la nuca de Clare.

Clare no quiso alejarse ni mucho menos mirarlo a la cara, no quería ve la cara de decepción y desconcierto que en ese momento Nathan debería tener. Nathan rió, estremeciendo a Clare.

— Que buena broma— siguió riendo, sin embargo abrazo más fuerte a Clare.—,Que buena broma— murmuraba repetitivamente.

Oh, cuanto Clare hubiera querido decirle que efectivamente era broma y unirse a la estridente risa de Nathan pero no era así.

—No...No lo es y lo sabes...— susurró aún sin mirarlo.

Nathan negaba y ambos se aferraban el uno al otro, Clare se animó a levantar la mirada para encontrarse con los ojos llorosos de Nathan.

— ¿Qué vamos a hacer?— preguntó Clare.

El silencio reino en el interior del carro, ambos abrazados y mirándose era todo lo que Nathan necesitaba para siempre.

— Vamos a estar juntos.

Mientras tanto Harry paseaba por su oficina, en su mano derecha se encontraba la foto que había sido tomado hace tres años de Clare con Edward y en la mano izquierda sostenía una copa llena de whisky, Louise se había ido desde hace unas horas y ya no tenía nada que hacer pero no quieria llegar a su casa en donde solo estaba la soledad, tal vez de nuevo iría al departamento que había comprado para Clare, al menos ahí...no se sentiría como lo hacia ahora.

Su celular sonó pero no contesto, bebió un poco de la bebida y camino hasta situarse en uno de los sofás que había ahí, la oficina seguía igual como hace cinco años al igual que los recuerdos y un recuerdo en especial: cerró los ojos mientras se recargaba en el respaldo del sofá y se dejaba llevar por los recuerdos.

La primera vez que la había visto había sido un momento no muy bueno para él, ese día se había recién instalado en la oficina de su padre para poder tomar el cargo que Harry siempre había aborrecido pero que lamentablemente había tenido que tomar ya que su hermano había tomado otra carrera, revelándose contra su padre, y Daniel, no Harry no podía dejarle el cargo a él.

Si bien había sido educado para tomar la presidencia cuando su padre se jubilara aún así él había mantenido la esperanza de poder vivir como el quería pero está de más decir que las cosas no salieron como esperaba, así que después de que su padre le enseñará todo lo que él ya sabía y le presentará a los empleados Harry había decidido pedir algo rápido de comer ya que tenía mucho trabajo como para salir a comer a algún restaurante, había esperado con paciencia su comida y cuando estuvo a punto de simplemente cancelar el pedido e irse aunque sea a la cafetería de la empresa escuchó la puerta del elevador personal abriéndose y ahí la vió por primera vez.

Era la segunda mujer más hermosa que había visto y que le había atraído instantáneamente nada más cruzar la mirada y aunque en ese momento ella no lucía "especialmente" arreglada aún así Clare le pareció perfecta, tantas ideas le vinieron a la mente que no fueron nada buenas o al menos no para un santo pero para un demonio como él eran los pensamientos adecuados.

Su ceño se frunció al verla salir de su elevador:
—¿Quién eres?— había preguntado.

Ella había tardado un poco en contestar y cuando lo hizo, su voz tembló.

—yo...yo— aclaró su garganta.— Vengo de Sweet coffe.

¿Sweet coffee?

Ah

Ahora recordaba, era aquella cafetería que le había recomendado una de sus empleadas para que pudiera algo de comer. Se cruzó de brazos y la inspeccionó con la mirada uno de sus dedos fue a su barbilla mientras recorría con su mirada la delgada figura de la chica frente a él, como había visto anteriormente no vestía de manera formal al contrario, su ropa ni siquiera era la adecuada para estar frente a él y su rostro no llevaba ninguna gota de maquillaje pero aún así ella seguía viéndose bien.

— Vengo a dejar un pedido— explicó con las mejillas rojas, de nuevo tuvo un pequeño y morboso pensamiento con ella que hicieron a su entrepierna comenzar a despertar, miró sus labios al darse cuenta que los mordía.

Diablos.

Sus labios se veían muy apetitosos para besar, lamer y morder, se imaginó una manera de mantener esa boca ocupada que de le hacía muy apetecible.

— Ya veo— la vió asentir nerviosamente— ¿Para quién?— quiso jugar un poco con ella.

Ella desvió la mirada y la dirigió al bolsillo de aquella vieja gabardina, miró como sacaba lo que era el ticket para después volver a mirarlo.

— Harry Styles— De nuevo mordió su labio.

¿Por qué carajos hacia eso?

¿Es qué acaso quería provocarlo?

Harry sonrió como solo él sabía hacerlo, tal vez la chica había venido con esas intenciones al saber de quién se trataba aunque se le hacía extraño que pareciera no reconocerlo.

Muy buena actriz, pensó sonriendo divertido. Sin embargo su sonrisa titubeó al ver la mirada confundida y al mismo tiempo enojada de la chica.

— ¿Es en serio?— preguntó con voz arrogante, esperando a que le dijera que era una  broma y después tratara de seducirlo, tal vez bajo esa gabardina y uniforme de  trabajo se encontraba un sedictivo conjunto de lencería.—¿No me conoces?— ella frunció el ceño. Ella debía estar bromeando, ¿Cierto?. Su sonrisa desapareció al percatarse por fin que realmente la chica frente a él no lo reconocía.

— No me conoces— había susurrado—soy Harry Styles— se presentó, esperando que ella con eso al menos lo reconociera.

— Ah, ya sé quien es— sonrió. Harry había vuelto a sonreír con confianza.— es el que pidió el pedido— y ahí su sonrisa decayó, más su postura siguió impecable.

La miró con indignación, cómo era posible que esa muchacha no supiera ni siquiera lo que representaba su nombre: se cruzó de brazos y respondió con algo de dureza.

—No, soy el dueño de esta empresa.

Harry había podido asegurar que en ese momento se interesó en ella pero se encaprichó mucho más en cuanto la tuvo en su cama y se había puesto furioso ante la negación de Clare para verlo o aceptar su propuesta así que había tenido que presionar un poco las cosas. Movió sus contactos y logró que le cancelaran la beca a Clare, agradecía haber conocido al director de la universidad ya que era amigo de su padre así que no le había resultado tan difícil además de que le debía un favor y en cuanto Clare había caído ante él, Harry se sintió dichoso pero mientras más días estaba con ella en la cama más quería, ya no la quería para unos meses él la quería conservar para él y solo par él no quería que otro hombre la tocará y de solo pensarlo lo enfurecía.

¿Qué si hizo mal al embarazarla sin su consentimiento?

No le importaba, porque gracias a eso es que tenía un ancla para retenerla.

Qué importaba que Nathan estuviera saliendo con Clare, ella le pertenecía y Edward también.

Hola ✋🏻

Espero que les esté yendo bien en este inicio de semana.💖

Este domingo tenía planeado subir capitulo pero  entré a la aplicación y está se me trabó,el capítulo se me borró a la mitad y me desanime, de hecho me había dado un bajón horrible con EPDD me sentía insatisfecha y no me daban ganas de continuar pero hoy me agarró de un momento la motivación para escribir en EPDD mientras se escuchaba música en mi trabajo.

Críticas al capítulo aquí 👉🏼

Críticas a la escritora aquí 👉🏼

Recomendaciones aquí 👉🏼

¿Alguien más vió la noticia de que Harry va a sacar un nuevo disco?

Besos 😘

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