(Jueves 11 de enero)

5:30am

El cielo oscuro se va lentamente aclarando por los lejanos rayos del sol, la luz que entra a la habitación aún es tenue, y una coneja está despierta, acostada cubierta hasta cintura con una blanca cobija observando detenidamente el techo, su expresión de melancolía le invade en su soledad, luego con una mueca de inconformidad se quita la cobija, seguido se sienta en la cama, mientras susurra el nombre que tanto busca sentir a su lado.

—Nick... ¿donde estarás?—murmura la triste coneja.

De pronto la puerta se abre, entra un conejo gris de rayas negras vistiendo un uniforme de enfermero mientras lleva consigo un ramo de flores variadas, Judy extrañada le pregunta.

—¿Quien eres tu y que haces aquí?—El conejo no contesta, camina hacia una mesa cercana a la cama, pone las flores sobre un florero al girarse para ver a Judy lo hace con una pistola en mano apuntándole pero su vista es obstruida por una almohada lanzada por la coneja, entonces este la esquiva para volver a apuntarle, pero Judy ya no estaba en la cama, ahora estaba agachada debajo del conejo, esta salta, propinándole un golpe en el mentón aturdiendo al conejo haciéndolo retroceder con el mentón levantado disparando dos veces al aire sin soltar el arma, Judy lo toma por el brazo tratando de desarmarlo pero el conejo reacciona antes propinándole un golpe en la cabeza con la empuñadura de la pistola, haciendo que la coneja caiga débil al suelo. Aun consciente pero sin fuerzas Judy observa al conejo mientras este le comienza a apuntar a la cabeza.

—Mi nombre es Jack Savage... y esto lo tomo mas personal que una orden...—comienza a apretar el gatillo, las ventanas se rompen, un grito hace retumbar la habitación, un zarpazo hace añicos el arma y la mano de Savage, el conejo solo logra reaccionar retrocediendo instintivamente, la sangre comienza a caer al suelo, Jack cubre su pata destrozada con un pedazo de tela de la sábana, de pronto su rostro lleno de terror mira a un zorro enfurecido en medio de la habitación con sus enormes ojos amarillos que lo contemplan para ser degollado como una débil presa.

Una débil presa contra un fiero depredador, Jack presenciaba su muerte, el sentimiento de impotencia le invade, de su boca salen tres palabras.

—¡¡¿Que Eres Tú?!!— le grita el aterrorizado conejo mientras Nick lo tenia arrinconado. Se escuchan pasos y voces por el pasillo, una granada cae por la ventana, inmediatamente Nick se gira tomando a Judy del suelo cubriéndola con su cuerpo, la granada estalla, un denso humo blanco llena el lugar, la puerta se abre bruscamente, era Bogo con varios oficiales. 

Bogo observa como un conejo mal herido huye saliendo de la ventana auxiliado por una hiena, el búfalo corre hacia la ventana pero ambos animales desaparecieron entre los edificios, al girarse nota que entre el humo hay una silueta agachada, luego de que todo se aclara mira a un zorro de espaldas y agachado protegiendo a Judy, la cual tiene una herida en la cabeza, Bogo hace señas a los demás oficiales los cuales apuntan al zorro, este se levanta y se gira dejándose mostrar, uno de sus ojos es totalmente amarillo mientras el otro es verde.

—Wilde, ¿eres tu?—pregunta Bogo. El fornido Zorro le contesta.

—Creo que todavía soy yo jefe—dice Nick mientras sonríe levemente. 

Judy comienza a reaccionar tratando de levantarse mientras busca como aferrarse a Nick, el zorro la toma entre sus brazos llevándola hacia la cama, entonces Bogo llama a los médicos, estos inmediatamente entran para atender a la coneja, los oficiales siguen apuntando, ven con temor al zorro pero Bogo sin miedo alguno comienza a hablarle mientras da la señal de bajar las armas.

—¿Wilde! ¿Sabes que fue lo que pasó aquí?—pregunta el búfalo.

—Vino el conejo Jack Savage, la mano derecha de Siberia a querer matar a Judy, los motivos no están del todo claros pero pude detenerlo a tiempo, lamentablemente fue casualidad ya que venía a ver a Judy y me encontré con que él estaba aquí.—contesta el zorro.

—Bien hecho Wilde, uno de nuestros oficiales a cargo de la vigilancia de Hopps y de los otros oficiales, vio al conejo sospechoso y avisó a la comisaría, de inmediato supuse que no iba a ser nada bueno, ahora estamos más alertas que nunca.—comenta el búfalo.

—Jefe Bogo, también encontré información fundamental sobre el plan de Siberia contra esta ciudad, pero antes de entregársela tengo que investigar un poco más y aclarar dudas. De momento Judy estará en constante peligro...— le interrumpe Bogo.

—Bien Wilde, te daré 12 horas para que aclares dudas y luego entregues la información, pero luego te llevarás y cuidarás a la oficial Hopps durante dos días a Bunnyburrow hasta que pase el peligro, ya que nosotros estaremos reguardando la ciudad para evitar cualquier suceso ocasionado por Siberia.—En eso Judy habla.

—¡Nick!—llama la coneja al zorro, este camina hacia ella.

—¿Estas bien Judy?— la coneja asiente.

—No me dejes sola torpe zorro— reclama la molesta coneja.

—Jajaja, no mi torpe coneja, estaré contigo muy pronto, solo dame hasta la noche— le dice Nick, y la coneja le mira el rostro, uno de sus ojos era diferente, era amarillo, esto preocupó mas a Judy.

—¡No!, iré contigo, además tu ojo, te estas volviendo salvaje, debes buscar a Paltrova, ella sabrá qué hacer—comenta.

— Está bien Judy, pero debo hacer caso a bogo o se pondrá mas molesto que de costumbre.— comenta Nick casi riendo.

 No estoy bromeando Wilde, es una orden.— Al escuchar la orden del búfalo Nick solo asiente, y sale por la ventana cargando a Judy.

—¡Al menos salgan de este edificio como cualquier otro mamífero decente!— le grita el búfalo malhumorado.

(Jueves 11 de Enero)

10:00am - Laboratorio al Noreste de Zootopia.

Nick camina junto a Judy hacia el laboratorio donde hablaron por ultima vez con la Doctora Sara Paltrova y su Padre Jonh Wilde, varios lobos a la entrada del edificio al verlos llegar le advierten que se detengan, a lo que el zorro hace caso omiso, le intentan detener pero el zorro los golpea a todos dejándolos inconscientes, la coneja solo observa impresionada.

—¡Quiero respuestas Paltrova!— Grita Nick desde afuera del edificio.

—Señor Wilde, Señorita Judy, que agradable visita, lo irónico es que ya los esperábamos.—comenta Paltrova desde el altavoz de la entrada, seguido la puerta principal se abre y ambos entran.

Ya estando adentro Nick y Judy caminan hasta llegar al laboratorio principal donde encuentran a Paltrova y su padre sentados con la vista dirigida a Nick. Este con gran seriedad les reclama.

—Ya conozco el plan de Siberia, sus intenciones y lo que ustedes hicieron—exclama el zorro.

—Entonces ya lo sabes—contesta John.

—¡¿Porque lo hicieron?! ¡¿porque le dieron el arma a Siberia?!— les grita Nick. Paltrova se levanta, suspira, mira a John luego su mirada se dirige hacia Nick.

—No teníamos elección... nosotros también queríamos venganza por la masacre cometida hace treinta años por la gente de Ciudad Ártica. Nuestras intenciones de usar la tecnología para bien eran buenas, pero no podíamos dejar que un gobierno tan cruel como los dirigentes de Ciudad Ártica anduvieran sueltos, entonces un día hace diez años, Siberia llegó dándose a conocer que era la hija desaparecida de los Kozlov, su sed de venganza era necesaria para nuestros planes, por lo que ella se ofreció a llevar a cabo nuestra venganza,  así que creé el primer suero genético para ella, haciéndola más fuerte y veloz, pero no contábamos que era demasiado inestable, fue mi error, eso hizo que su mente perdiera todo tipo de cordura, la venganza es lo único que vive en ella.—explica Paltrova mientras su mirada está agachada.

—Pero Siberia no contaba contigo, tampoco nosotros, apareciste luego de muchos años de olvido, fuiste parte del plan de Siberia, y ambos causaron daños irreparables en la matanza de mamíferos inocentes hace diez años.—comenta John.

—Para ese tiempo nosotros ya habíamos creado la Bomba H, capaz de borrar la ciudad de Zootopia del mapa, pero vimos las acciones de Siberia, y el odio injustificado a Zootopia. Entonces ella llegó a llevarse la bomba, no la pudimos detener pero le preguntamos el porqué quería destruir Zootopia... lo único que contesto fue.

*—¿Y porque no? ¡Esta ciudad es igual de podrida como las demás, todos pagaran!—* 

—Entonces tú llegaste a nosotros, eras el candidato perfecto, un zorro policía, un mamífero con honor, orgullo, pasión, de buena voluntad y sobre todo, que busca su redención.—comenta Paltrova.

—¡¿Cómo pudieron crear algo tan horrible?!, ¡morirán demasiados animales inocentes por el error que ustedes cometieron, Siberia incluso solo fue parte de su asqueroso plan,  son ustedes los que deberían detenerla, no yo!— reclama Nick molesto.

—Lo sabemos perfectamente pero eres tú quien puede detenerla, solamente tu Nick, no hay nadie más— comenta John.

—¡¡¡Yo no seré usado para redimir sus culpas usen a otro mamífero, un León o un tigre, cualquiera que sea más fuerte !!!—reclama Nick.

—El problema es que todos son inestables, solo tú has podido soportar el suero y aún más has podido resistir el veneno de Siberia.—comenta Paltrova.

—Sin embargo, hemos vigilado tu constante comportamiento durante los enfrentamientos que has tenido y aunque eres superior a Siberia en todos los aspectos, hay un inconveniente por el derivado del aullador inyectado por Siberia, donde cada vez que te transformas te vuelves más inestable, solo queda esperar que pasará al final.—Dice John.

—Entonces... ¿Eso es todo?..., ¿mi destino ya está decidido?—reclama Nick.

—En realidad la decisión es tuya Nick, solo tu sabrás si quieres salvarlos a todos, o no.—comenta John.

—La vida que he tenido jamás fue justa... soledad, odio, ira, dolor, muerte, ha sido lo único que me ha ofrecido este mundo pero aun así lo único que me mantiene cuerdo es Judy..., ella lo es todo para mí...—Nick se percata. Mientras los científicos sonríen débilmente.

—¿Ya lo entiendes verdad? Ahora sabes porque Siberia quiere matar a Judy.—explica Paltrova.

—Si es por mi, no te preocupes Nick, me sé defender sola.—comenta Judy con determinación mientras observa a Nick.

—Entonces ¿que harás?— Dice John, pero Nick no dice nada. Se gira y habla.

—No lo haré por esta ciudad, ni por ustedes, lo haré por Judy, ella es la luz de esta ciudad.— caminan hasta la salida dejando a los doctores atrás. Estos solo agachan la cabeza.

—Doctor Wilde, es probable que su hijo...— le interrumpe John, —lo sé Paltrova, por eso nosotros no nos quedaremos de brazos cruzados.— Comenta el viejo zorro.

Mientras el zorro y la coneja salen del edificio Judy observa el rostro  de Nick lleno de dolor y determinación, a lo que ella le dice.

—Nick ¿ahora que harás?— le pregunta.

—Nos iremos a BunyBurrow donde descansarás de tus heridas, luego veremos.—comenta el zorro.

—¿Nick?—dice Judy

—¿Que pasa Zanahorias?—pregunta Nick.

—No importa que pase yo estaré a tu lado—comenta la tierna coneja mientras el zorro sonríe.

—Gracias— contesta.

Fin del Capítulo

Hola, los actuales capítulos son fundamentales en la historia así que favor léanlo y opinen, les agradezco su apoyo a todos. Gracias.

Saludes!!!!