Cassio

La nada, el lugar donde me encuentro o eso creo, un lugar oscuro, lleno de soledad y desesperanza. Todo por una sola persona, aquella que con sus palabras me enterraron en un hueco del que no supe salir.

No puedo decir que siento, porque no se si puedo llamar a esto sentir, pero de algo si tengo certeza y es que recuerdo todo. ¿Qué es todo? Lo que fueron nuestros últimos días, las peleas, la despedida, las lágrimas, las suplicas no escuchadas, el ver su espalda alejándose luego de decir que no había marcha atrás.

Se preguntarán ¿Quién soy? Mi nombre es Cassio Lombardi tenia 27 años cuando morí o eso creo que paso, en un momento estaba acostado en mi cama y al siguiente ya estaba en este lugar.

Desde que llegue lo único que puedo ver son esos últimos recuerdos que sirven para avivar el odio, el rencor, no existe nada más, tanta negatividad consumiéndome. Me veo... Me veo a mi mismo... A mi mismo arrodillado suplicando... Suplicando sin recibir nada a cambio.

¿Dónde estoy? No lo sé. ¿Esto es estar muerto? Tampoco tengo respuesta para eso. Lo ultimo que supe o sentí fue un dolor de cabeza muy fuerte y luego todo paso a ser negro. No vi un sendero iluminado, una luz a final del camino, tampoco había alguien para indicarme o abrirme puertas de un paraíso inexistente y mucho menos una voz celestial.

Honestamente la muerte esta sobrevalorada, hablaban de sentir paz, pues les informo que la maldita paz nunca llego, solo el odio y el rencor consumiendo todo a su paso, impregnando todo de oscuridad, una oscuridad cruda y absoluta.

Grito cada tanto ya que no se que mas hacer, estoy cansado de estos malditos recuerdos que me atormentan una y otra vez, si esto es la muerte se los puedo decir con propiedad es una real mierda. Camino y camino intentando llegar a algún lugar, pero no me muevo o si la verdad es que ya no lo sé.

Me estoy desesperando...

- AAAAAAAAHHH...!!!!!!!!!! _No hay dolor en mis cuerdas vocales después de gritar a todo pulmón, tampoco desahogo y mucho menos alivio de algún tipo_.

Caigo de rodillas en lo que supongo que es el piso, una corriente fría me envuelve y abruma sobre manera por lo que paso las manos por mis brazos, pero tampoco eso quita la sensación de frio, no se va queda tatuado en mi piel casi hasta el punto que quema.

¿Habrá alguien que me recuerde? ¿Cómo estará mi familia? ¿Mi hermano se habrá graduado? ¿Mi madre se habrá divorciado del idiota de mi padre?... La verdad es que no me arrepiento del golpe que le di la ultima vez, me cegue cuando vi sus intenciones de golpear a mi madre, que lo único que hace es vivir por él y para el...

- Deja de ser tan patético... _Me quedo rígido, sin decir o hacer nada_ Te pensaste solo pequeño Cassio. _Su tono burlón me molesta sobremanera_.

- Quien... ¿Quién eres? _Me atrevo a preguntar_.

- No te lo imaginas... _Algo se apaga dentro de mi y me envuelve de manera absoluta con solo escuchar su voz_ Te pensaba más inteligente pequeño Cassio...

_Mi ceño se frunce de manera profunda_ ¿Por qué no habías hablado antes? _Suelta una risa bastante siniestra que me tiene con la piel erizada, miro hacia todos lados, pero no hay nadie mas o no logro ver a nadie más_.

- Te estaba probando... _Volvió a reír mas fuerte haciendo retumbar todo alrededor_ Deja de buscar... No me encontraras pequeño Cassio... Yo soy todos esos sentimientos que llevas acumulando desde hace tanto tiempo. Soy oscuridad, soy desesperanza, soy soledad, soy guerras... Imagino que ya se entendió el punto... Yo soy... ¿Ya sabes quién soy?

_Trago grueso, pero finalmente me atrevo a decir a decir_ Si... Si lo sé.

_Aplaudió fuerte_ Muy bien pequeño Cassio que inteligente... _El diminutivo ya me tiene cansado_ Segunda pregunta... ¿Sabes por qué estás aquí?

- Por muerto obviamente ya que por santo no creo que sea... _Pongo los ojos en blanco_.

- No te conviene hacerte el graciosito conmigo... _Su tono se vuelve amenazante, haciendo que el frio a mi alrededor se intensificara_ Lo dejare pasar porque eres alguien sumamente prometedor... _Comienzo a sentirme examinado de arriba abajo si eso es posible ya que no veo a nadie examinándome_ ¿Por qué tanto odio pequeño Cassio?

- La respuesta a esa pregunta tiene nombre y apellido... _Una llama quemadora se apodera de mí, como cada vez que pienso en ella, pero no de manera buena, aunque si lo pienso tampoco de manera mala para mi claro está, me hace sentir poderoso y no el patético hombre que se arrodillo ante una mujer por no perderla_.

- Muy bien... _Dijo aplaudiendo_ Entonces esta propuesta es ideal para ti... _Una sonrisa siniestra crece y se apodera de mi expresión_ Y si te dijera que te puedes vengar.

- Te preguntaría cuando comienzo.

- Excelente respuesta... No esperaba menos de ti _Aplaude de nuevo celebrando mi odio_ Me gustas chico, pero antes... Sabes que nada es gratis ¿Cierto?

- ¿Qué es lo que quieres a cambio?

- Si logras vengarte y espero que así sea... tu alma y la de ella jamás saldrán de aquí.

- Perdí el alma mucho antes de llegar aquí.

- Hay condiciones.

_Estaba tan ansioso que nada de lo que pudiera decirme importaba, solo necesitaba comenzar ya, con mi divina y cruda venganza_ ¿Cuáles? _Dije cansado de tantos rodeos_.

- Mientras el odio y el rencor crezcan tu serás mas fuerte... _Mi sonrisa volvió, nada mejor que sentir la fuerza y el poder recorrer mi sistema_.

- Pero... _La risa burlona volvió dejando una sensacion amarga e inquietante_ Siempre hay un pero.

- Que inteligente pequeño Cassio... Claro que hay un pero... Pero si sintieras algo por más mínimo que sea el sentimiento positivo un dolor insoportable sentirás, tan insoportable que atravesara tu ser entero y te dejara hecho miseria.

- Eso no pasara... _Digo orgulloso y sin una pizca de duda_ Aclarado este punto, que más.

- No comas ansias pequeño Cassio... Hay que repetirlo mil veces de ser necesario... Ya que si vuelves a sentir desaparecerás... Todo sentimiento positivo te lleva a la extinción _Dijo recalcando el punto_.

- QUE NO VA A PASAR...!!!!

- Cálmate hay que dejar todo claro... _Esto esta colmando mi poca paciencia_.

- Que más...

- Puedes andar de tu cuenta, pero solo de noche... La claridad, la luz nos debilita.

- Ok tener cuidado con el sol, la luz y todo lo referente al tema... Solo de noche... Que más.

- Si y un punto muy importante... Puedes lastimar, enloquecer y crear caos total, pero no acabar con su vida esa decisión es solo de ella.

- No pensaba matarla, seria demasiado bueno para lo que ella realmente se merece.

- Recuerda a medida que tu odio crezca las posibilidades serán mas grandes y tu fuerza se verá repotenciada.

- Si... Si... Si ya entendí... _Dije rodando los ojos con pereza_ Cuando empiezo...

- Antes de empezar... Porque no recordamos un poco porque estas en esta situación...

- ¿Qué? ¿Por qué? Nooooo.

Grito ante lo que tengo que ver nuevamente y escuchando su risa a lo lejos.

*Recuerdo*

- Ya no puedo seguir con esto... _Dijo como si nada, como si sus palabras no destruyeran todo a su paso_.

- ¿Por qué?... ¿Qué hice mal? _Sus ojos están en todos lados menos en mi_ Podemos arreglarlo... _Intente tomar sus manos, pero me rechazo como si mi tacto la quemara_.

- Ya no hay nada que arreglar... Entiéndelo... Se acabo...

- Vas a tirar todos estos años a la basura... ¿Qué hice mal?... ¿Qué hice tan mal?... _Su ceño se frunció y mordió su labio, ella solo hacia eso cuando estaba nerviosa_.

- No es lo que hiciste o lo que yo hice... Es lo que dejamos de hacer el uno por el otro... Merezco más... No lo entiendes.

- Yo... Yo te lo puedo dar... Dame la oportunidad.

- No... _Dijo regalándome una mirada llena de reproches_ Ya es demasiado tarde.

- Hera son 7 años tirados a la basura...

- YA LO SE... _Grito al fin explotando_ Cassio ya basta... Por favor vete.

- No...!!!! _Dije negando repetidas veces cayendo de rodillas al suelo... Sus ojos se abrieron como platos, ni yo mismo podía crees lo que estaba haciendo_ Te lo suplico Hera no me dejes.

- Levántate... _En su tono había desesperación_ Cassio levántate del suelo.

- Dime que quieres y lo hare...

- Quiero... _Volvió a morder su labio_ Quiero que te vayas... _Me dedico una mirada suplicante llena de lagrimas no derramadas, su orgullo jamás lo permitiría_.

- Hera por favor... _Me corto en seco_.

- Hera nada... Estoy harta de pedirte... Estoy cansada de ser lo segundo en tu vida... Me canse de dar y no recibir...

_Me quede sin palabras_ Hera no me iré de aquí.

- Si no te vas tu... Me iré yo...

Me pare rápido y por impulso tome su cara entre mis manos plantando un beso en sus labios, en un principio no correspondió, pero al cabo de un segundo contesto, aunque lo que recibí a cambio me descoloco se sentía la tristeza de sus lágrimas, podía sentir la despedida en este beso. Al separarnos aparto mis manos con delicadeza.

- Adiós Cassio... _Dijo en un susurro_.

_Mi desespero aumentaba a medida que ella volteaba para alejarse_ NO ME IRE... TE ESTARE ESPERANDO AQUÍ...

Caí al piso de nuevo con la cara entre mis manos dejando que las lágrimas rueden por mi rostro, siempre fui el tipo de hombre que se negaba a llorar por nadie, pero mírenme ahora llorando, suplicando y humillándome por una relación perdida.

- HERAAAAA... TE AMOOOOOO...!!!!

Espere... Espere... Y espere ella nunca volvió, en su lugar apareció su madre con cara de pena, lo que me hacía sentir aún más patético.

- Cassio querido levántate del piso... _Tomo mi mano y ayudo a levantarme, sintiéndome totalmente derrotado_ No sé qué paso entre ustedes, pero dale tiempo a que se calme y ordene sus sentimientos.

- Sra. Fannya usted cree que... _Me corte a mí mismo_.

- No hay nada que el tiempo no pueda reparar...

Acaricio mi mejilla con cariño y decidí creer en sus palabras, no me quedaba nada mas a lo que aferrarme... Pero que equivocados estábamos, pasaron los días, las semanas, los meses y luego llegue aquí.

*Fin del recuerdo*

- Si bueno gracias por recordarme el infierno que viví en ese momento... _Dije con sarcasmo_.

_Su risa retumbo de nuevo dejando el eco por doquier, al menos uno de los dos le parecía divertida mi miserable situación_ Calma pequeño Cassio _Y vamos de nuevo con el diminutivo_ Solo quería dejar en claro el porqué de tu venganza.

- El porqué de mi venganza jamás lo voy a olvidar... Y mucho menos cambiaria mi objetivo.

- Si tú lo dices... Por cierto, no le puedes quitar la opción de elegir.

_Fruncí el ceño sin entender a que se refería_ Que quieres decir con eso...

- Ella debe tomar la decisión por si sola de quitarse la vida... _Debe haber notado mi cara de confusión_ Ya sabes por esas tonterías del libre albedrio, todo sería tan fácil sin ese acuerdo... _Dice más para el mismo que para mí_.

Quede igual de confuso, pero por primera vez desde que llegue aquí una emoción nueva se apoderaba de mí, una emoción maligna, vigorizante, pero emoción al fin.

- ¿Cuándo comienzo?

- Ya.

Prepárate Hera porque tus días de calma están contados. Me voy a cobrar todos y cada uno de tus desplantes. La paz nunca llegara a ti y rogaras morir. Tu y tu existencia serán reducidas a nada.

Te hare arrepentir de todas y cada una de las lágrimas que derrame por ti... Arrepentirte no servirá de nada...