P.O.V de Pedro

Seguía sin comprender nada de lo que acaba de ocurrir, pero reaccione y corrí para seguirlo. Si no antes, cerra la puerta con seguro del apartamento.

Lo volví a encontrar en la planta baja, donde pude acorralarlo para evitar que se fuera.

Nico, qué tienes? Dímelo por favor-suplique

No lo se! Esto también es nuevo para mi, en verdad, no se que me pasa!-grito, empezando a llorar

Lo abrace y él correspondió, ambos estábamos confundidos. Como acaba de decir, esto era algo nuevo tanto para él como para mi, aunque no sabía exactamente a lo que íbamos a enfrentar, una cosa era segura: no lo dejaría solo.

Sentí como olía mi cuello, el mismo lado donde hace rato me había mordido. Sabía que aún tenía sed y no podría evitarlo, cerré los ojos soltando un suspiro y con mi mano baje un poco más mi camisa estirando mi cuello.

Puedes beber mi sangre, tienes todo mi permiso-dije, aprovechando en que nadie se encontraba en ese momento

Sentí su aliento chocar contra mi piel, me estremecí. Volví a sentir sus colmillos ser clavados en mi cuello, arrebatándome un quejido de dolor.

Debo admitir que no dolía tanto como paso allá arriba, creo que esa es la gran diferencia cuando es en contra y a favor de tu voluntad. Jadee apenas sentí que me faltaban las fuerzas, mi agarre aflojo y mis piernas ya casi no podían sostenerme.

Él me cargo poniendo mis piernas alrededor de su cintura, sacándome otro quejido. En esa posición me sentí un poco mejor, lo volví a abrazar pero esta vez con fuerza.

N-Nico...ah-gemí

En qué momento comenzó hacer calor aquí? No lo sabía, solo se que de la nada empecé a sentir placer. Estaba confundido, pero me gustaba y no quería que parara.

Intentaba gemir bajo para que nadie nos pudiera oír aunque sabía que era imposible ya que era bien tarde. Solté un quejido cuando se separo, jadee.

Sentí su lengua caliente lamer mi cuello, justo donde me había mordido, me estremecí ante el contacto.

Lo siento...-susurró, yo negue

No tienes porque disculparte, todo esta bien. Es más, me encanto que hicieras eso-admití

No te molesta que sea vampiro?-preguntó

Claro que no, me gusta que seas así y quiero ayudarte a recordar tu verdadero pasado-dije

Gracias-dijo

Yo asentí, nos miramos a los ojos por un momento. Note que su vista bajo hacía mis labios, sabía lo que iba a pasar y que luego nos íbamos a arrepentir.

Me beso, yo correspondí. Era mi primer beso y con la mejor persona que pude haber elegido, mi mejor amigo. Lo disfrutamos hasta perder el aliento, nuestras miradas volvieron a encontrarse.

Sabíamos que esto era prohibido, algo imposible. Eramos amigos, nada más que eso, solo amigos. Él me bajo, mire hacía el suelo ya que no tenía las fuerzas para verle a los ojos otra vez.

Esto...Esto no ocurrió ok, nada paso en este lugar-dijo, aunque se notaba el dolor en cada palabra

Yo solo me limite a asentir, tenía ganas de llorar. Ese beso, sentí algo especial en el, algo que creí que ambos compartíamos pero veo que no.

Subimos al departamento, ninguno de los dos dijo alguna palabra en el camino. Apenas entramos, yo eche llave a la puerta y el fue al cuarto.

Suspire tembloroso, las ganas de llorar finalmente me dominaron.  Me deslice en la puerta sentándome, me hice bolita y oculte mi rostro entre mis piernas.

Por qué la vida es tan cruel?

Espero les guste, al fin esta historia tiene un final. Besos <3