XI

REA

—¿Podrías callarte?

Kaya me pregunta y yo me callo. Nunca nos hemos llevado bien pero necesito saber más detalles sobre la Purasangre que buscamos. Nadie me quiere decir nada, solo sé que es la Purasangre más antigua y que se ha escapado de The blackness, nuestra misión es encontrarla y llevarla de vuelta pero si eso no es posible, tenemos permiso de eliminarla.

Eso me hace preguntarme que tan peligrosa es esa Purasangre como para que nuestro rey de la orden de eliminarla si no podemos capturarla. Otra cosa que me parece extraña es el hecho de que el rey haya enviado a Kaya y no a Kain. Kain es el mejor rastreador que he conocido. Si esa Purasangre es de tanta importancia, ¿por qué el rey no mandaría a su mejor rastreador? Aquí pasa algo y como siempre, mi curiosidad se revuelve dentro de mí.

Además, el rey no solo me envió a mi como rastreadora, envió a los líderes de las cuatro secciones elementales, Purasangres expertos en elementos específicos. Mis ojos caen sobre Ryde de la sección de fuego, con su uniforme de Nhyme y una figura de llama de fuego estampada en su brazo, luego veo a Nyxe con las mismas ropas pero su estampado es de agua, lo mismo es con Pryer y su marca de tierra y Jyle de aire.

En la jerarquía de The blackness, nuestro rey insurgente está a la cabeza, luego le siguen Kain, Vincent y Kaya como guardias reales, luego los Purasangres de confianza como yo y los lideres de las secciones elementales que están hoy con nosotros, le sigue el líder de los convertidos y el de los humanos. Cada especie tiene un líder que los representa, sin embargo, los Purasangres y los convertidos son numerosos así que tienen líderes por elemento. La única especie que no habita en The blackness es la de los lobos, ellos siempre han sido de libertad y naturaleza.

—Siempre tan distraída, Rea— la voz de Jyle me saca de mis pensamientos, diría que Jyle es la única conversadora de los líderes elementales. Ryde y Nyxe nunca hablan y Pryer siempre está de mal humor, Jyle me hace un gesto a Nyxe, —¿Aún no la superas?

Yo bufo.

—Ha pasado un siglo, Jyle, incluso el enamoramiento más profundo tiene fecha de vencimiento— le digo honestamente.

Nyxe y yo tuvimos un relación algo rocosa hace más de un siglo, antes de que me mandarán a seguir a nuestro rey como alimentadora. Nyxe era una Purasangre demasiado cerrada y fría, sin importar cuanto intenté, cuanto me entregué, ella nunca me devolvió ni siquiera un porcentaje de lo mucho que le di. Apesta cuando solo eres tu la que da, terminé exhausta, sin nada que dar cuando decidí terminar con eso.

Pero oye, no hay nada mejor para superar a una ex-novia que el tiempo, y un siglo es más que suficiente.

Nyxe es hermosa, usa el cabello corto, tiene tatuajes a los lados de su cuello y una estrella al lado de su ojo izquierdo. Con solo verla, uno puede saber que sufrirá, porque alguien con ese atractivo, con esa esencia a su alrededor es un peligro claro. Pero yo igual me acerqué y caí.

Mis ojos abandonan a Nyxe y caen sobre Ryde, él siempre ha llamado mi atención, Ryde representa exactamente su sección de fuego: volátil, inestable, caliente. Pero si Nyxe tiene esa aura de peligro a su alrededor, Ryde la tiene al doble, y no cometeré el mismo error dos veces. Además, tampoco puedo andar con todos los líderes elementales, mi madre me matará. Ella se la pasó histérica todo el tiempo que anduve con Nyxe porque decía que era peligrosa, me involucro con Ryde y me cuelga. A mi madre no le cae bien ninguno de ellos y sin importar cuantos siglos tenga de edad, mi madre siempre me aterrará.

Estamos caminando en medio de un valle con altas montañas sin vegetación a los lados. Mis informantes me dieron esta ubicación, al parecer, la Purasangre tiene su guarida dentro de alguna de estas montañas áridas. Pero hay demasiado silencio, solo la brisa nocturna se escucha, arena volando en el aire con el viento.

—¿Sientes algo?— Jyle le pregunta a Kaya.

—No— Kaya responde, sus ojos por todo el lugar, —es extraño, suelo sentir los seres vivos a mi alrededor pero desde que entramos a este valle no siento nada, ni siquiera siento los animales. Algo está bloqueando este lugar.

—Tiene que ser ella— murmura Pryer.

—Eso quiere decir que estamos en el lugar correcto, ¿no?— digo con entusiasmo porque los seres que me rodean son fríos o amargados. Tal vez por eso nuestro rey me mandó con ellos, para darle un poco de luz a esto.

—Eso quiere decir que sabía que veníamos— Kaya responde con frialdad, ella estira sus manos a sus costados, líneas negras emergen de su palma y suben por su antebrazo, hombros hasta llegar a su cuello y subir a su cara, cuando cruzan sus ojos, estos se vuelve ligeramente rojos. Su mirada busca y revisa por todos lados, —algo está mal.

—Kaya—

—¡Ryde!— Kaya le llama, —¡Detrás de ti!

A Ryde apenas le da tiempo de girarse para levantar su brazo y recibir el golpe de una inmensa bola de poder azul resplandeciente. El impacto lo envía hacia atrás hasta que su espalda choca con una de las montañas áridas. De inmediato, todos nos ponemos a la defensiva en un circulo, cuidando la espalda del otro. Kaya está a mi izquierda y Jyle a la derecha, ¿qué fue eso? ¿Y de dónde vino?

—Kaya— susurro.

—No puedo ver la fuente, no sé de donde vino— Kaya admite y eso me sorprende, ella suele ser arrogante y segura de sus poderes, ¿Kaya le teme a esta Purasangre? Si una Protectora le teme es porque debe ser muy peligrosa. Bajo mis manos y de las tiras negras en mis muslos, despego de mis dos dagas.

—¡Everild Acton!— grita Kaya, así que ese es el nombre de la Purasangre más antigua, —nuestro Rey Insurgente requiere tu presencia en la corte, si cooperas con nosotros, no te haremos daño, de lo contrario, tenemos la orden de eliminarte.

Una risa burlona hace eco por todo el valle. Al mirar hacia el tope de una de las montañas, podemos ver la figura de Everild, sus ropas son de un rojo carmesí que hace juego con su cabello.

—Como has crecido, Kaya— su voz viaja con el viento hasta nosotros, —Lamer el piso por donde camina el rey ha dado sus frutos, ¿eh? Hmm, ¿o solo te envió a ti porque Kain es inútil? Siempre la segunda opción, Kaya, eso debe doler.

Kaya se tensa a mi lado y observo a Ryde despegarse de la montaña donde fue estampado hace unos segundos.

—Siempre tan habladora, Everild pero hasta tu debes admitir que no podrías derrotarnos así que ven con nosotros, coopera y el rey te mostrará piedad.

Everild sonríe y se deja caer en el aire de la montaña hasta que aterriza a unos pasos de nosotros.

—Ryde, Nyxe, Pryer, Jyle— ella les saluda, —tiempo sin verlos.

—¿Hasta cuando vas a hacer esto, Everild?— Jyle le pregunta, —solo ven con nosotros porque honestamente esto de perseguirte es cansino.

—No es mi culpa que no puedan atraparme.

—La última vez si te atrapamos pero por culpa de Kain—

—Nyxe— Kaya le corta, —no estamos aquí para hablar de eso.

Yo miro entre Kaya y Everild sin entender nada. Everild parece notarlo.

—Oh, una cara nueva— ella se me queda viendo, —supongo que es una rastreadora, que tierna.

Nyxe se pone ligeramente frente a mí y yo le doy una mirada de '¿en serio?' Me rompe el corazón en trillones de pedazos hace más de un siglo y ¿ahora quiere protegerme? Vaya que le gusta revolverme las emociones.

No caigas, Rea, ya la superaste, ya la superaste.

—Estoy de buen humor— Everild comienza, y pone sus manos detrás de su espalda, —¿qué les parecen si se dejan atrapar voluntariamente? Prometo no hacerles daño y darles una celda decente.

Kaya se ríe con burla.

—¿Quién te crees que eres, Everild? Podrás ser la Purasangre más antigua pero estás frente a una Protectora.

—Y tú no tienes ni idea de a quien te enfrentas, Kaya— esa sonrisa no deja sus labios, —ese es el gran problema de ustedes, del rey, de Kain y de ti, esa arrogancia, siempre subestiman al enemigo. El poder no es nada en comparación a una buena estrategia y algo que ustedes carecen por montones.

—¿Qué?

—Una familia.

Ella alzo sus brazos a sus lados y de todos los altos de las montañas emergen un montón de figuras, rodeando el valle por completo. Hay Purasangres y convertidos, incluso humanos, todos llevan puestas mascaras que ocultan sus rostros.

—Ellos no me siguen porque soy poderosa, o porque me temen como es el caso de tu rey, ellos me siguen porque he creado lazos con cada uno de ellos, porque creen en mi visión, no son mis seguidores, son mi familia y eso es algo que nunca debes subestimar, Kaya.

—Que tonterías, hablas de que somos arrogantes y que subestimamos a nuestro enemigo pero eso parece ser lo que estás haciendo en este momento.

—Oh, no, yo no te estoy subestimando, Kaya, solo confío en mi familia— ella hace el gesto a su alrededor, —¿puedes decir lo mismo? ¿Confías en las personas a tu lado?— Kaya hace una mueca, —¿Los conoces? ¿Qué les gusta hacer en su tiempo libre? No sabes absolutamente nada sobre ellos, ¿no es así?

—No necesito saber nada de ellos.

—Por supuesto que no porque son inferiores, ¿cierto?

Silencio.

Nyxe y yo compartimos una mirada. La tensión en el aire se incrementa y yo aprieto mis dagas con fuerza. Pelear no es mi fortaleza pero no me rendiré con facilidad. Kaya se endereza, la seriedad en su expresión me indica que esto está a punto de volverse violento.

—Estoy cansada de perder mi tiempo contigo. Pryer— Kaya ordena.

Pryer asiente, se arrodilla y entierra sus manos en la tierra, el suelo bajo nosotros comienza a temblar bruscamente y yo doy dos pasos atrás tratando de mantener el equilibro. La tierra se abre en varias líneas que van directo a Everild pero se desvían y van hacia las montañas, quebrando el suelo, y observo con la boca abierta como cada montaña se desmorona cayendo en bloques de tierra que Everild apenas esquiva. Sus seguidores no tienen otro remedio que saltar de las montañas y ponerse detrás de ella. El ruido de tierra compacta estrellándose contra el suelo es estruendoso hasta que quedamos en un terreno plano, ya no hay montañas donde esconderse. Supongo que eso era lo que Kaya quería.

Ya no hay tiempo para charlar, esto es una batalla desde el segundo que Kaya le ordenó a Pryer destruir las montañas. Así que los lideres elementales corren hacia Everild y su grupo con la excepción de Nyxe quien se queda a mi lado.

—Ni siquiera lo pienses— le digo entre dientes, —Ve.

Ella no se mueve, y Kaya la ojea con altivez.

—¿Tienes miedo?— el tono de Kaya es despectivo. Si ella supiera que Nyxe solo está siendo una idiota que le gusta confundirme al querer protegerme pero supongo que Everild tiene razón, Kaya no sabe nada de nosotros.

—Nyxe— la miro a los ojos, —Ve.

Ella aprieta su mandíbula antes de unirse a los elementales. Y en pocos segundos el plano valle es un campo de batalla. Ryde ataca con tranquilidad, un aro de fuego a su alrededor lo protege de todo, sus manos cargan dos espadas hechas de fuego. Ya ha dejado a varios heridos a su paso, nada de muertos, nuestro rey nos dio ordenes muy especificas, a la única que podemos eliminar es a Everild.

Pryer usa rocas minúsculas como un escudo, y al acercarse a algún enemigo, levanta bloques de tierra del suelo para golpearlos y dejarlos inconscientes de un solo golpe. Por su parte, Jyle usa el aire para elevar a quien se enfrenta y confundirlo hasta que los libera y los deja caer al suelo, ella se acerca y susurra palabras antiguas para robarles el aliento literalmente y apretar sus pulmones. Jyle es una de las pocas expertas de aire que puede hacer eso. Nyxe camina con la confianza que la caracteriza y crea grandes bolas de la agua que luego envía a quien la ataca, una vez que el agua toca el enemigo lo envuelve, atrapándolo dentro, ahogandolo y debilitándolo hasta que pierde el conocimiento.

Esto ya es otro nivel en el uso de elementos, ellos son los líderes de sus secciones después de todo.

—Voy por Everild— Kaya me dice al desvanecerse de mi lado, dejándome sola.

Muy bien, puedes hacer esto, Rea. Tenemos la ventaja.

Tres humanos corren hacia mí con una rapidez increíble. Seguramente son humanos que han consumido sangre de convertidos o Purasangres para adquirir habilidades temporales. Igual no son difíciles de manejar, aunque no sea una Purasangre experta en peleas físicas estoy dos especies por encima de ellos. El primero intenta golpearme y yo agarro su brazo y lo jalo hacia mí para golpear la parte de atrás de su cuello y dejarlo inconsciente. El segundo aprovecha la distracción del primero para golpearme el rostro y escupo sangre antes de devolver el golpe con tanta fuerza que cae al suelo y no se levanta de nuevo. El tercero se detiene frente a mí y me sonríe diabólicamente, ¿qué le pasa?

Entonces siento la arena que envuelve mis tobillos, subiendo por mis piernas. Mierda, mierda, trato de zafarme pero la arena se aprieta sobre mi piel, echo un vistazo por encima de mi hombro para ver a un Purasangre. Así que los humanos eran la distracción, que estúpida eres, Rea.

Me giro ligeramente para intentar usar algún elemento contra el Purasangre pero él se mueve rápidamente y aparece frente a mí y golpea mi estomago. Me inclino hacia delante y él agarra un puño de mi cabello y me obliga a mirarlo. Su mascara solo me deja ver lo oscuro de sus ojos.

—No queremos hacerte daño— me susurra, y yo le gruño, —Shh, eres una rastreadora, ¿cierto? Pelear no es lo que haces así que solo quédate quieta y esto terminara pronto.

—Suéltame— le digo entre dientes.

Él alza su mano libre y sus redes de arenas sube por mi cintura hasta atrapar mis manos y mis brazos, paralizándome por completo.

—Solo quédate quieta— me repite antes de ojear con desprecio la insignia de Nhyme en mi uniforme, —¿Crees en él? ¿En tu rey?

—Siempre.

Él sacude su cabeza.

—Y yo que pensaba que eras inteligente.

—Líberame y te mostraré que tan inteligente soy, arrogante de mierda.

Él se ríe.

—¿Desafiante, eh?

—Tu uso de tierra es patético, ¿A caso no viste a Pryer? Él si es un Purasangre que vale la pena observar cuando usa elementos, no como tú, con estos trucos de tan poco nivel.

—Hablas demasiado para alguien que está bajo mi control.

—Usando humanos para distraerme porque no me podías pelear de frente, cobarde.

—Sé lo que estás haciendo— me dice, y acerca su rostro enmascarado al mío, —provocándome para que te libere y así podamos luchar de forma justa.

Me río en su cara.

—No, solo te estoy distrayendo.

Antes de que él pueda reaccionar, el agua que he estado liberando de mi mano mientras charlábamos ya ha aflojado las ataduras arenosas así que libero mi pierna izquierda y lo pateo en medio de las piernas. Él se tambalea hacia atrás hasta que cae de rodillas. El dolor debilita el resto de su arena sobre mí y me libero por completo para darle un puñetazo con todas las ganas que le fractura la mandíbula.

Le agarro del cabello de la misma forma que él lo hizo.

—Y yo que pensaba que eras inteligente.

Uso sus palabras en contra de él antes de torcerle el cuello y dejarlo inconsciente por un rato. Dejo salir una larga respiración antes de observar la batalla frente a mí, bueno, el final de la batalla porque ya todos los seguidores de Everild están inconscientes en el suelo y Kaya la tiene con las manos atadas al frente con amarres de poder.

Nos juntamos de nuevo y Everild nos sonríe.

—Hola de nuevo.

—Sonabas tan segura de ti misma que me esperaba un poco más de resistencia— Kaya bramo al empujarla, Everild cae de rodillas frente a nosotros, —¿Quién subestimo a quien?

—Lo que sea— Nyxe dice, —hora de volver.

Pero Kaya sigue hablando.

—Ahí está tu familia, Everild, inconsciente. No dijiste que esa era tu gran fortaleza.

—Kaya, es suficiente— intervengo porque quiero irme a casa.

—Déjenla alardear, le encanta hacer eso— Everild nos dice y me sorprende la tranquilidad con la que nos habla, acabamos de atraparla, dejar a su familia inconsciente y ella está tan calmada. Algo no cuadra.

Escaneo los alrededores y no veo nada raro.

Estamos a punto de partir cuando pasa, una larga lanza formada de energía azul cae del cielo y atraviesa a Nyxe. Grito de inmediato, mi corazón se aprieta.

—¡No, no, Nyxe!— yo tomo su rostro y ella escupe sangre, —¡Nyxe!— la lanza atravesó su pecho y se clavo en la tierra así que la mantiene de pie pero Nyxe cierra los ojos y yo entro en pánico, —¡No! ¡No!

—Estará bien— Everild me asegura. Kaya la agarra del cuello y la levanta.

—¿Qué está pasando? ¡Será mejor que empieces a hablar!

Pero Everild se ríe en su cara.

Pryer, Jyle y Ryde todos tienen sus ojos en el cielo, tratando de ver de donde vino la lanza mientras yo acaricio el rostro de Nyxe, tiene que estar bien, Everild no me mentiría, no tiene razón para hacerlo. En medio del silencio, podemos escuchar el casi imperceptible sonido de algo viajando en el aire a mucha velocidad hacia nosotros: más lanzas.

—¡Cúbranse!— Kaya nos ordena y libera a Everild para levantar sus manos y formar un escudo transparente sobre nosotros. Sin embargo, las lanzas atraviesan el escudo con facilidad. Pryer y Ryde son los primeros en ser atravesados por algunas.

—¡No!— Jyle grita y antes de que pueda alcanzarlos, una lanza la atraviesa a ella. Estoy temblando al lado de Nyxe quien aunque está insconciente respira débilmente. Kaya toma a Everild y la pega a su cuerpo.

—Si una lanza viene por mi, nos atravesara a las dos— le amenaza.

Tengo que calmarme y pensar. Observo la lanza que atraviesa a Nyxe, su energía y su azul resplandeciente son hermosos, al principio, pensé que eran elementales hechos de agua pero no lo son, entonces, ¿qué son? Estiro mi mano para tocarlo y la energía azul se pega a mi dedo y siento como absorbe mi energía hasta que despego el dedo. Son extractores de energía, posiblemente usados para mantener a alguien en este estado de inconsciencia que está Nyxe.

¿Qué carajos está pasando? Y, ¿Por qué ninguna lanza ha venido por mí?

Levanto la mirada al cielo y no veo nada solo oscuridad.

—¡Habla, maldita sea!— Kaya aprieta el cuello de Everild con furia, —¡O te juro que te arrancaré al cabeza ahora mismo!

Y ese momento, en medio de la desesperación, de la confusión, el aire se vuelve pesado, difícil de respirar y es como si la gravedad se alterara también, mi cuerpo se siente pesado como si una fuerza invisible le obligara a doblegarse, lucho pero termino arrodillada en el suelo, agarrando mi pecho. Una presión nace en mi cabeza y duele tanto que jadeo en agonía y sangre brota de mi nariz.

Kaya no ha tenido otro remedio que liberar a Everild y caer de rodillas a unos pasos de mí. Y esto me preocupa, Kaya es una Protectora, si esto le esta afectando a ella, estamos jodidos, ella es la más fuerte de nosotros. Nada esto tiene sentido. Mis ojos caen sobre la lanza de Nyxe de nuevo y observo en completa sorpresa como alrededor de la punta que está clavada en la tierra pequeñas flores han comenzado a florecer.

No puede ser. No puede ser.

Vuelvo a mirar a Kaya en el suelo y todo cobra sentido, los Protectores son casi invencibles, la única criatura por encima de ellos es...

Un Purificador.

Pero eso es imposible, los únicos Purificadores despiertos son Kace, Shadow y Morgan. Tiene que ser Morgan, no hay nadie más. Capto movimiento con el rabillo del ojo y veo una figura masculina encapuchada descender lentamente en la distancia, cuando sus pies tocan la tierra, una ola de poder se expande a su alrededor, y aunque estoy arrodillada casi me tumba hacia atrás.

Kaya está sin palabras y yo no entiendo nada, ¿quién es él? No puede ser un Purificador, pero todo apunta a que lo es.

—¡Sorpresa!— Everild le dice a Kaya antes de caminar hacia él, yo intento ver su rostro pero está oculto en la capucha negra que lleva puesta. Él levanta su mano y las ataduras en las muñecas de Everild se desvanecen.

—Kaya...— me giro hacia ella pero Kaya está luchando por permanecer consciente, lo que sea que él le esté haciendo la está dominando, —¡Kaya!

Ella me murmura algo y cae inconsciente sobre el suelo. Mierda, mierda, estoy sola en esto, frente a un posible Purificador. Él camina hacia mí y yo me estremezco sin saber que hacer.

—No te preocupes, él no te hará daño— Everild me tranquiliza, —solo quiere saludarte, ha pasado un tiempo, Rea.

—¿Ah?— digo confundida.

Él levanta su mano y yo me cubro de forma defensiva pero él solo echa su capucha hacia atrás, revelando su rostro. Su nombre deja mis labios en un susurro incrédulo. 

—Aidan...

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Nota de la autora: ¡Chan! ¡Chaaan! ¡Chaaan! Apareció el señor Aidan y es un... ¿qué? Pero, ¿qué? ¿cómo dices que dijiste? Este capítulo fue más largo de lo normal porque quería narrar todo bien para entraran en la batalla y ¡bam! Apareciera Aidan. Además, de que me encanta la acción. El como, el porque de todo se explicará más adelante, así que tranquilos, chiquitouuus, ¿Extrañaron a Aidan? 

Aquí déjenme preguntas que pueda responder sin dar spoiler. 

Memes de la semana:

muakatela, 

Ariana G.