Hikari se quedo escondida detrás de la roca sin dejar de escuchar esos paso que parecían marchar sobre unos charcos de agua, ya no dudo, no eran animales, eran personas y a varias. En silencio llamo a Taichi esperando que tuviera suficiente señal, y pudo escuchar la voz de su hermano y al mismo tiempo, las voces preocupadas de los demás al otro lado de su celular.

Hikari: ¡Hermano! ¡Que bueno escucharte!-Dijo emocionada, pero con voz baja, trataba de controlarla

Taichi: ¡Hikari! ¡¿Donde estas?!-Dijo preocupado al otro lado de la llamada

Hikari: En un bosque, no se en cuál exactamente. Solo abrí mis ojos y aparecí aquí de la nada-Dijo asustada y en susurro

Koushiro: Tratare de rastrear la llamada para saber donde estas ahora que respondió-Dijo corriendo a su computadora

Taichi: Hikari, no te muevas, vamos a ir a buscarte

Hikari: No puedo. Pero trataré de ir a un lugar mas alto donde no hayan arboles, quizás sepa donde este e intente llamarlos de nuevo para decirles

Sora: Hikari, ¿que ocurre? ¿Por que susurras?-Dijo confundida y preocupada

Hikari: Hay alguien aquí, escucho muchos pasos por los arboles. Si me quedo de seguro me ven, no me quiero arriesgar. Esperare a que se vayan y...

- ¿Escuchaste eso?

- Hay una señal

Hikari rápidamente tapo su boca con su mano y coloco su celular en su pecho esperando que no se escucharan las voces de los demás y la suya.

Lentamente volteo la cabeza detrás de la roca para ver mejor lo que ocurría, vio a dos hombros con uniformes.

No eran de ningún tipo de uniforme especifico, ambos usaba gorras y su ropa, era como de soldados, pero todo, incluso las botas y guantes de cuero, eran de color negro, uno muy oscuro que se confundía en la oscuridad.

Ambos tenían unas armas de fuego, unas simples, en cada lado de su cinturón, y tenían un extraño aparato en sus manos, ambos buscando alrededor con miradas de enojo y desesperación por querer encontrar algo.

Hikari vio con mas detalle la pantalla del extraño aparato de uno de los hombros y parecía como un dispositivo de rastreo como el de los digivices, de hecho, era idéntico, de inmediato, uno de los hombres llamo al otro como si percibía una señal cerca de donde estaba Hikari, supo que podría ser por el celular, Hikari tuvo que cortar la llamada y apago rápido su teléfono y vio que la señal del extraño dispositivo se apago, la estaba rastreando.

Los dos hombres se fueron por un grito de un tercer hombre. Saco un suspiro por estar tan aliviada de que no la encontraran, pero no podía llamar a nadie, se sintió mas asustada, y decidió alejarse de ahí mismo mientras gateaba entre los matorrales, miro detrás suya para que no la siguieran, pero al voltear de frente vio a una mujer apareciendo justo frente a ella, rodeado de otros hombres, todos con el mismo uniforme.

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Era fácil para Daichi ir y venir a hora del digimundo al mundo real sin problemas. Fue directo al Hospital central de Odaiba donde ataco la ultima vez que lo vieron, y comenzó a husmear los registros médicos en medio de la oscuridad junto con Dracmon.

Daichi: Parece que ya vieron el intercambio de los registros-Dijo hojeando unos papeles dentro de unos archivos

Dracmon: Los volvieron a acomodar

Daichi: Pues entonces volvamos a acomodarlos-Dijo sacando unos papeles y cambiándolos por otros-¿Revisaste que no viniera nadie por los corredores?

Dracmon: Si, acabo de ir a revisar, es muy noche, nadie revisa a estas horas

Daichi: Por el espectáculo que dimos, no creo que estén de acuerdo contigo. Listo-Dijo mientras guardaba los registros dentro de un archivero

Dracmon: ¿Ahora te dejaran en paz?

Daichi: No olvides que esos dos detectives también tienes estos registros

Dracmon: Y cuando los arreglemos ¿te dejaran en paz?

Daichi: Siempre y cuando no sepan del digimundo, lo estaré, de ahora en adelante, nos quedaremos haya. Sera mejor que vayas a ver a Papá y a Mamá antes de que el trance termine

Dracmon: ¿Quieres que los libere como acordamos?

Daichi: Si, dales el recuerdo que te dije hace tiempo. Ahora le toca a mi querido hermano sufrir como yo lo hice-Dijo mientras salia junto con Dracmon

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Ya había amanecido, era demasiado temprano, pero no podía esperar nada, volvieron a reunirse con Koushiro. El se había quedado despierto buscando la ubicación de Daisuke, Miyako y de Iori en el digimundo y pudo ubicaros en el pueblo del inicio.

También logro ubicar a Hikari cerca del bosque de las afueras de Tokio, lo que sorprendió a todos porque ahí mismo fue donde ubicaron el accidente de Daichi. Hikari estaba en el bosque a unos metros de ese pueblo abandonado donde el río que arrastro a Daichi pasaba por ahí.

Taichi era el único sin deseos de ir, se asusto bastante al oír la ubicación de su hermana. Pero necesitaba ir quería ir por Hikari. Tomaron la decisión de dividirse para hacerlo todo más rápido y estar reunidos luego.

Mimi y Sora decidieron en acompañar a Taichi a buscar a Hikari mientras que Koushiro, Joe, Ken, Takeru y Yamato decidieron ir por los demás al digimundo antes de que algo les pasara.

Antes de poder llamar a Agumon, Sora y a Palmon para el viaje de los chicos por Hikari, Taichi se fue del edificio donde se encontraba la oficina de Koushiro. No se fue, solo decidió alejarse de todo por unos instantes, pensando en lo que pudo haberle ocurrido a Hikari mientras los demás planeaban todo.

Se que todos me lo dicen, pero se que es mi culpa por no decir nada desde el principio, no debí devolverle el mensaje a Daichi. Se repetía eso mentalmente una y otra vez, ese pensamiento no salia de su cabeza.

Taichi: Les paso esto por Daichi... Por mi culpa-Dijo a si mismo mirando a la nada con sus brazos cruzados y tratando de morder sus labios

Agumon: ¡Taichi! -Gritó alegre mientras corría para saltar a sus brazos y abrazarlo

Taichi: Agumon... -Dijo despertando de sus pensamientos y volteando a verlo

Saltó hacia él y lo abrazo como si no lo hubiera visto en años.

Agumon: Que bueno que estes bien Taichi-Dijo feliz mientras le sonreía

Taichi: Agumon... -Dijo mientras empezaba a sonreírle de forma tranquilizante al verlo así-Que alegría verte

Agumon: También me alegra verte Taichi-Dijo con la enorme sonrisa

Taichi: De verdad. Que bueno Agumon-Dijo bastante tranquilo mientras lo abrazaba con mas ánimos

Palmon: ¡Taichi!-Dijo igual de alegre llegando entre los brazos de Mimi

Biyomon: ¡Estas bien!-Dijo también llegando entre los brazos de Sora

Taichi: Chicos... -Dijo alegre al verlos

Sora: Taichi, es seguro que Hikari-chan esta bien

Pero Taichi no dijo nada, de poco su sonrisa comenzó a disminuir y desvió su mirada sin dejar de abrazar a Agumon aferrándose a él. Agumon sintió esa sensación de intranquilidad en Taichi.

Agumon: Taichi...

Taichi: Se que es causa de Daichi, si yo no...

Mimi: Callate-Dijo alsando la voz con un tono de autoridad sorprendiendo a todos

Sora: Mimi-chan...

Mimi tomó aire y calmo su expresión de autoridad.

Mimi: No te sigas culpando más. No estabas obligado a decirnos nada de que tenias un hermano gemelo, que estaba mal ni del accidente. Nadie sabia que él llegaria a tu vida de nuevo y no podías suponer que te usaría de esa manera. Nada es tu culpa. Si hay que culpar a alguien es el destino, no tu

Taichi: Mimi...

En eso, a lo lejos se escucharon los sonidos de sirenas de policía, eran muchas y todos iban en dirección al edificio.

Cuando se detuvieron frente al edificio, un hombre y una mujer bajaron de uno de los vehículos, todos muy molestos y fueron justo en dirección de Taichi mientras lo tomaban del brazo con gran brusquedad.

Taichi: ¡¿Que demonios...?!-Dijo molesto y confundido tratando de soltarse y de que no lo movieran

Mimi: ¡Oigan!

Sora: ¡Esperen! ¡¿Quienes son?!

Sin decir palabra alguna, metieron a Taichi dentro de la patrulla, las chicas trataron de detenerlos, pero hicieron lo mismo con Mimi y Sora.