Diciembre 1917

-Diablo, Newt- protesta Minho en susurros- ¿por qué vienes siempre tan tarde?

-Cállate, chino. Vengo cuando me apetece que para algo mi novio duerme aquí- contesta Newt metiéndose en la cama con Thomas- además, duérmete. Vamos a hacer cosas de mayores.

-No seríais capaces con nosotros en la habitación- comenta Minho tapándose para darles la espalda. No subirán a mayores, pero no le extrañaría nada que se la pasaran tocándose por encima entre besos.

-Pruébame, chino- ríe Newt- además bien podrías irte tú con Scott a otra habitación.

-¿Para que folléis a gusto?- ríe Minho.

-Para que folléis vosotros a gusto- sonríe Newt sentándose en la cama de Minho, a sus pies.

Minho se reincorpora de repente y lo mira fijamente.

-¿Qué dices, Newt?- tartamudea.

-Sé que te gusta, Minho. ¿Hace cuánto?

-No digas tonterías, Newt- se sonroja y menos mal que Newt no lo ve con claridad.

-No intentes mentirme, Minho. Os conozco muy, muy bien. A vosotros tres.

-Está bien- confiesa Minho- me gusta Scott. Pero ni se te ocurre decírselo ni a Thomas.

Newt sonríe contento.

-Tommy, ya lo sabe. ¿Piensas que es tonto? Lo hemos hablado. Los dos os gustáis, pero no entiendo como Scotty sigue con Isaac.

-No seas necio, Newt. Yo no le gusto a Scott...

-¿Cuánto te lleva gustando?

-No sé... desde después de la marcha de Erica más o menos.

-¿Tanto ya?- se emociona Newt.

-Más o menos. ¿Tú sabes en el momento exacto que te gustó Thomas?

-Claro, desde el primer momento en que lo vi. Otra cosa es que quisiera darme cuenta- se sonroja Newt.

-Bueno, pues yo no. No quería darme cuenta tampoco supongo- Minho se encoge de hombros.

-Tenéis una tensión horrible- le dice Newt acariciando su pierna para darle apoyo.

-¡Vosotros también! Y cada día va a peor. Aún recuerdo vuestros gemidos el día del cumpleaños de Thomas. Ya puedes chuparla bien para que Thomas gimiese así- finge un escalofrío y Newt se sonroja mientras se lanza a pegar a Minho.

Porque en el décimo séptimo cumpleaños de su novio no tuvo mejor idea que, a parte de prepararle una fiesta sorpresa, hacerle una mamada. Lo que llegó a los oídos de Minho cuando los buscaba y se fue traumado sin interrumpir.

-No es por la mía con Tommy, garlopo. Estáis siempre tocándoos, es hora de pasar a más.

-¡Está con Isaac, Newt!- susurra alarmado al ver a su amigo tan decidido.

-¿Y? Estoy seguro de que le gustas tú más que Isaac. Por lo menos ahora mismo. Intenta dejarle caer que tendrías algo con él y esperemos que Scott lo pille y se haga cargo de ello.

Minho se calla pensando en ello.

-¿Te gusta mucho?- pregunta Newt sonriendo.

-No, bueno. No tanto, solo un poco- Minho se rasca la cabeza y sonríe levemente.

-Voy a despertar a Thomas- susurra Newt sonriendo travieso.

-Intentaré dormir- ríe Minho- buenas noches.

-Buenas noches, chinito- Newt se levanta de la cama y después de darle un beso a Minho en la frente se desliza entre las sábanas de Thomas.

Lo mira y sonríe. Tiene los ojos cerrados, relajado y con la respiración acompasada. Los labios entreabiertos respirando levemente por la boca. Newt mira fijamente cada lunar de su cara. Los brazo de Thomas están abrazando prácticamente la almohada.

Newt deja un beso en sus labios despertándolo. Abre los ojos lentamente y al ver a Newt en su cama lo abraza rápidamente acercándolo a él.

-Newtie, no te puedes escapar todas las noches para venir a verme- dice Thomas sonriendo.

-Solo hoy y ya me espero más días- sonríe Newt pegándose a su pecho.

-Cómo me llevas diciendo toda la semana, eh- ríe Thomas apresándolo más.

Newt suelta una risita.

-Solo son un par de besos- comenta.

-Podemos estar toda la noche sin vernos, Newt- Thomas acaricia el pelo de Newt relajándolo y provocando leves ronroneos en el rubio- antes estábamos toda la semana. Y durante mucho tiempo ni nos veíamos.

-¿Y cómo aguantaba? No tengo ni idea- susurra Newt dejando que siga con el masaje.

Después de unos minutos en silencio, Newt mira a Thomas, coge su rostro con sus manos y lo besa con cuidado. Acaricia con sus pulgares las mejillas del castaño sintiendo ese calor familiar cuando está con él.

-Un par de besos más y te vas, Newtie- suspira Thomas notando los labios de Newt en su cuello.

Newt asiente en silencio y sus manos viajan a la camiseta de Thomas sacándosela por la cabeza.

Thomas gime en bajito cuando Newt muerde su oreja y vuelve a sus labios. Entonces Thomas empieza a besarlo con hambre dejándolo debajo de su cuerpo contra la cama. Newt sonríe contento y acaricia toda la espalda de Thomas.

Thomas se mueve encima de Newt besándolo con ganas y Newt sigue cada beso acariciando la piel de Thomas con fuerza. Reprime un jadeo cuando nota el miembro erecto de Thomas rozando el suyo y eso lo pone tanto como para gemir después de reprimir el jadeo.

Thomas pone su mano en la boca de Newt y sonríe restregándose contra el rubio. Después de un rato, siguiendo embistiendo levemente, se acuesta en la cama y pone a Newt encima de su miembro notando así el suyo presionado en su pelvis.

Se vuelven a besar con fuerzas mordiendo y lamiendo ambos labios mientras Thomas guía a Newt con sus manos en la cintura para que siga con leves movimientos encima de su pene.

Newt está por gemir en alto cuando para.

-Para, para, Tommy- sonríe algo sudado. Se sienta encima del miembro de Thomas y se pasa la mano con la frente.

Thomas suspira colocando la almohada encima de su cabeza silencio su resoplo. Se abanica con las manos cuando la almohada vuelve a su sitio.

-¿Demasiado rápido?- pregunta dándose algo de aire y suspirando.

Newt ríe levemente y se coloca el pelo un poco hacia atrás.

-Demasiado perfecto pero no ahora. No con Minho y Scott durmiendo al lado.

-Bien- responde Thomas asintiendo. Deja de abanicarse con las manos y suspira de nuevo- bien. Bien.

-Eso ya lo has dicho- sonríe Newt- ¿quieres que te ayude a bajarla?- pregunta acariciando su estómago.

-No, no. Tranquilo, se me pasará durmiendo- sonríe Thomas. Mira de reojo para Newt ve que no está tan excitado como él- te... ¿te estaba... gustando?

Newt lo mira fijamente interrogante.

-Claro que sí- contesta al ver que lo ha preguntado en serio- me ha encantado.

-Es que...- Thomas muerde su labio y quita a Newt de su colo sentándolo a su lado- es que no... bueno... no estás tan excitado como yo.

-Estoy mucho más que excitado- se acerca a su oído y susurrándole con una sonrisa tierna- pero estoy intentando controlarme. No podemos hacerlo ahora.

-Oh- Thomas sonríe mordiendo el labio- vale. Sí, bien- sonríe y suspira de nuevo.

-Te dejo dormir- deja un beso lento en sus labios y Thomas se tapa hasta la cintura- espero que se te baje pronto todo- comenta divertido- buenas noches.

-Buenas noches- sonríe Thomas colocándose de lado.

Esa misma tarde

-Newt- lo llama la señorita Daisy. Newt corre hacia ella y le sonríe- cariño, vete al sótano a por más espumillón. Falta rodear un par de bandejas y ya estaría todo.

Newt asiente y una vez le dan las llaves busca al señor Vernon para bajar con él al sótano.

-¡Tom!- llama ahora a Thomas y este va hacia ella- ¿puedes poner más muérdago por las puertas?

Thomas asiente mirando las ramas del arbusto y corre hacia la casa.

-Bueno, Newt- comienza el señor Vernon- ¿cómo estás con Thomas?

Newt se sonroja. No ha hablado con la señorita Daisy en serio de lo que tiene y siente por Thomas cómo para hablarlo con el señor Vernon que siempre le ha dado algo de miedo.

-Muy bien, señor. Somos muy felices- rebusca por el sótano abriendo cajas y encuentra una con varios espumillones dentro.

-Sí, sí. Eso lo sé- comenta el señor Vernon- se os ve en los ojos y en los gestos cuando estáis juntos.

Newt sonríe mirándolo levemente. Salen del sótano y de camino junto la señorita Daisy.

-Os queréis mucho, ¿no?

Newt enrojece y asiente mirando la caja.

-Más que a nadie en este mundo.

Al señor Vernon le sorprende la respuesta.

-¿Igual Thomas?

Newt asiente.

-Muy convencido tienes que estar para afirmar algo tan grande.

-Lo estoy, señor. Para mí no hay nadie más importante que Tommy y a él le pasa lo mismo conmigo.

-Y... eh... ¿habéis pasado a mayores?

Newt lo mira horrorizado y sonrojado.

-No, señor- responde simplemente.

-Sabéis que Daisy y yo os apoyamos, ¿no?

-Sí, señor Vernon- contesta Newt. Apura el paso y van junta a la señorita Daisy.

-Tome, señorita Daisy. La caja con los espumillones.

La señorita Daisy da las gracias con una sonrisa al rubio y nada más lo hace, Newt escapa corriendo.

-He hablado con Newt- dice el señor Vernon mirando a la señorita Daisy.

La señorita Daisy lo mira y se cruza de brazos.

-Ya decía yo que Newt venía extraño. Vernon...

-Lo sé, lo sé. Sé lo que me dijiste pero algún día tendríamos que hablar con ellos.

-No con Newt, Vernon. Newt tiene que decir las cosas él. ¿Y no podías haber hablado con Thomas? Newt desde lo de Erica no ha estado para interrogatorios sobre nada y lo sabes- lo acusa con un dedo y se pone a colocar los restantes adornos por las mesas.

-No han pasado a mayores- dice el señor Vernon- pero me ha dicho que se quieren. Que son las personas más importantes de sus vidas.

La señorita Daisy la mira horrorizada.

-¿¡Le has preguntado eso a Newt!?- lleva su mano al pecho-madre de Dios y de todos los santos. ¡VERNON! ¿¡Cómo diablos se te ocurre!?

-Deja a la virgen tranquila, Daisy. Fue una pregunta sin importancia y respondió sin vacilar. Aunque sonrojado.

-Serás pazguato- le recrimina golpeándolo en el hombro- pobre Newt que tiene que aguantar ahora hombres tan cortos de miras como tú.

El señor Vernon agarra a la señorita Daisy por la cintura y la acerca a él con una sonrisa.

-Están enamorados, Daisy. No creo que lo sepan todavía pero lo están. Para mí sigue siendo extraño, pero han encontrado lo que tantos buscan. Amor.

La señorita Daisy sonríe.

-Eso no justifica tus actos, Vernon.

El señor Vernon sonríe y deposita un beso en la frente de la señorita Daisy.

-En el amor y en la guerra todo vale- responde el señor Vernon separándose.

Horas después los niños están ya cenados y cada regalo para cada uno bajo el enorme árbol del salón.

-¡Todos a la cama! Papá Noel se llevará los regalos como no os vea dormidos- dice la señorita Daisy mandando a todos a dormir.

Los más pequeños corren a sus cuartos, pero los mayores se quedan en la mesa charlando.

-Ven, Newtie- se levanta Thomas llevando a Newt de la mano.

-¿Qué quieres, Tommy?- dice con una risita tonta al ver como lo coge de la mano con todos mirándolos.

-Tú hazme caso y sígueme- le sonríe.

Caminan hasta dentro donde el árbol.

-Quiero que tú y yo nos demos los regalos ahora- dice Thomas entrando en la habitación.

-¿Cómo sabes que te tengo un regalo? La señorita Daisy y el señor Vernon se encarga de los de todos.

-Minho me confesó que lo estaba escondiendo él por si algún día íbamos a vuestro cuarto. Sabe que no deja que toquen sus cosas.

-Maldito chivato- refunfuña Newt- está bien. Tienes dos regalos.

Thomas solo ríe y se sientan detrás del árbol donde Minho le dijo que colocara su regalo y donde él mismo colocó el de Newt. Thomas esconde una cajita pequeña detrás de él mientras que Newt agarra la caja de Thomas y la coloca entre ambos.

-Yo primero- dice Thomas cogiendo la caja. Al abrirla ve un osito de peluche.

-Es algo... soso, pero siempre te abrazas a la almohada cuando no estoy y así puedes abrazarte al peluche.

Newt enrojece y Thomas deja la caja a un lado para darle un casto beso en los labios.

-Me encanta. Tienes razón. Siempre quiero abrazarte y cuando no estás me abrazo a la almohada. Desde que a Scott le gusta Minho no quiere dormir conmigo- resopla Thomas divertido.

-Me toca- sonríe Newt sentándose mejor a su lado.

Thomas sonríe y le alcanza la caja. Newt alza una ceja divertido.

-¿Es un collar con tu nombre?- ríe cogiéndola de sus manos.

-No- sonríe Thomas- aunque te acercas.

-Sé que es muy grande para un anillo de compromiso, pero... sabes que no nos podemos casar ¿no?- ríe Newt abriendo la caja y al ver su interior se queda sin habla.

-A lo mejor me he pasado- comenta Thomas rascándose la nuca pero es otra manera de recordarla.

En la caja se encuentra una pulsera pequeña de oro con el nombre de Erica grabado en ella.

-Pero, mira- continúa Thomas nervioso viendo que no habla- es a tu medida y si creciendo tienes más muñeca me han dejado varias argollitas para que en un joyero cualquiera te añadan y...- Thomas lo mira fijamente sin verlo reaccionar- ahora tienes que parar mi discurso dándome un beso.

Newt suelta una risa y mira para él.

-Me encanta. Es precioso y significa mucho para mí que sea de Erica y que me la hayas regalado tú- se acerca a él y después de abrazarlo con todas sus fuerzas junta sus labios con todo el amor que tiene.

Thomas suspira y encierra el cuerpo de Newt con sus manos profundizando el beso.

-Feliz navidad, Tommy- sonríe al separarse cerca de sus labios.

-Feliz navidad, Newtie- sonríe Thomas mirando para sus ojos chocolate. Newt le acaricia la mejilla mirándolo con absoluta adoración.

-¿Me colocas tú la pulsera?- pregunta levantando su mano que sigue aferrada a ella.

Thomas asiente sonriendo sin decir nada con un potente brillo en los ojos.

La coloca en su muñeca derecha quedándole tan a medida como Thomas dijo.

-Es muy bonita- la mira Newt sonriendo tristemente.

Thomas agarra su barbilla para que lo mire.

-Es para que recuerdes, junto el collar de la concha, que Erica siempre te va querer- deja un casto beso en sus labios y se levanta ofreciéndole la mano- todavía falta una última cosa.

Newt toma la mano de Thomas y tira de él.