XVI. La abuela colapso, tenemos que ir al ducado del sol.
Will contuvo con mucho esfuerzo las ganas de llorar para cuando terminó de leer la carta de sus manos, de hecho estas últimas temblaban con nerviosismo y a duras penas podía mantener la carta en su sitio. Llegó un momento en que fue inevitable que Nicola notara el temblor de su cuerpo y con cierta angustia le dejó una mano sobre el hombro.
— ¿Will, qué pasa?
—N-Nico yo... yo tengo que volver a Delos.
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—¿Regresar a Delos?, ¡¿Así de la nada?!—Preguntó Percy bastante sorprendido mientras terminaba de pasar un pedazo de galleta a medio masticar.
—¡Percy, no hables con la boca llena!— Le regañó Hazel, más que nada con la intención de que se callara y dejara hablar a Nico con Will.
Nico por su parte estaba sosteniendo con cautela la mano de Will en muestra de apoyo al verlo tan abatido y pálido por la situación. Podía sentir cómo el cuerpo del rubio temblaba al tratar de contener sus lágrimas, como el brillo de los bonitos ojos azules que tanto adoraba ahora era casi inexistente y el cómo el pecho de Solace se movía de forma irregular.
—Salgan de aquí...
—¿Eh... Majestad...?
—Jules, no me hagas repetirlo...
Con esas palabras, el mayordomo hizo rápidamente un ademán para que todos dejaran la habitación. Por su parte Hazel ayudó llevándose a Percy al jalar de su capa mientras el príncipe de Atlantis hacía lo posible por llevarse la mayor cantidad de galletas posibles.
Una vez que la sala estuvo a total disposición de ambos chicos, Nico se puso sobre sus propias rodillas para mirar la cara de Will quien se mantenía con la cabeza totalmente baja. Parecía que Solace estaba enfrentando una especie de ataque de pánico o shock que le impedía dejar de temblar, respirar con normalidad o ver a su prometido a los ojos.
Por lo que Nico simplemente espero a que Will estuviera un poco más tranquilo como para mirarlo a los ojos, y luego comenzó a guiarlo para que el rubio comenzará a regular su respiración.
Así estuvieron un par de minutos hasta que Solace finalmente pudo respirar con normalidad y se rompió a llorar ahí mismo en los brazos de Nico quien se mantuvo en silencio, brindando solo el apoyo de sus brazos alrededor de los hombres de Will mientras le acariciaba la espalda. Hazel solía tener ese tipo de ataques cuando recordaba la horrible muerte de su madre en pesadillas, así que ya tenía una idea de cómo manejar a la gente ante una situación parecida. Cosa que resultó ser muy útil en ese momento.
—N-Nico...
—Tomate tu tiempo Will.
—N-No... Yo... Yo enserio tengo que volver ahora... O no voy a llegar a tiempo...—Nico se separó un poco del otro chico para mirarlo con una mueca preocupada mientras esperaba que Solace le explicará a qué se debía esa urgencia por volver.—E-es mi abuela...
Will apenas alcanzó a darle la carta a di Angelo antes de que se largara a llorar de nueva cuenta en el hombro de su chico. Con todo el cuidado del mundo, Nico desdobló aquella carta para leer con cuidado.
Hola hermano. ¤/ £¥ / ~§
Lamento las pocas palabras amorosas que puedas ver en esta carta, sé que tenemos mucho de que platicar tras estos meses de incomunicación pero ahora mismo, todo eso pasa a ser un segundo plano.
Desde que te fuiste al país del Hades las cosas en Delos no han estado bien. Michael y Lee llegaron antes que nosotros y desde entonces no han parado de pelear con nuestro padre, poniendo a una gran parte del ejército en contra del propio rey. Están en contra de que se te hubiera obligado a aceptar un compromiso con el país extranjero siendo bien conocidas tus circunstancias como heredero de Helios y la cuestión de la independencia de nuestro territorio. Artemisa ha tomado medidas drásticas planeando una posible rebelión contra el rey Nicola con tal de que te regresen sin objetar, tiene la intención de llamar al pueblo a las armas si su petición no se cumple antes de la llegada de la primera nevada y eso no es todo, de la pena, nuestra querida abuela ha colapsado. Su corazón viejo y delicado no pudo con la noticia de que te habían obligado a semejante atrocidad, que te hayan separado de la protección de sus brazos, que no le sea posible verte de nuevo. El médico familiar no le augura más de una semana de vida a partir del día en que esta carta ha sido enviada, es urgente que regreses a casa. Mi abuela solo llora y lamenta por verte una vez más antes de morir. Regresa Will, te necesitamos.
Devanessa.
Bueno, pues si esta historia era verdad, ahora entendía por qué Will entró en un casi estado de pánico. La carta le decía básicamente que había matado a su abuela (su principal figura materna y a la cual le debía todo que sabía) a disgustos con su próximo matrimonio y que una posible guerra entre su nación de nacimiento y su nuevo hogar se aproximaba.
—Will... No te preocupes, no dejare que la guerra nos alcance.
—...
—Haré todo lo posible por resolver esto sin las armas. Te prometo que nuestro matrimonio no tendrá consecuencias bélicas. Nadie nos va a separar y...
—Quiero ir a Delos Nico.
Nico dejó de hablar en ese momento y se giró a ver a su prometido con cierta sorpresa. ¿Enserio Solace planeaba rendirse sin siquiera pelear?
—Will...
—No me mal entiendas Nico. No pienso romper mi compromiso contigo pero... Quiero ir a Delos, a despedirme de mi abuela. Puede que nunca la vuelva a ver si no regreso ahora... Ella es... es mi María, Nico. Yo necesito volver.
Nico tragó grueso antes esas palabras. Y tratando de empatizar totalmente con su prometido, apretó su abrazo aún más, como si buscara fusionarse con Will para que nadie más pudiera separarlos. Y eso quería pero entendía por completo la situación de Solace, esa desesperación por llegar a tiempo antes de que fuera demasiado tarde, pero tampoco quería dejar ir a su luz tan a la ligera, tenía el presentimiento de que si lo dejaba ir solo, él sería quien no volvería a ver a Will.
Y después de lo de la flecha y la escapada de Will hacia el templo de Octaviano, no podía confiar su seguridad a nadie... Si tan solo no fuera el rey del mundo, si tan solo él no tuviera que encargarse de la nación más grande y poderosa de todas... Si tan solo pudiera soltar esa pesada corona por unos días e ir con Will a su hogar...
Un momento... Claro que podía, él era el puto rey del mundo. Él podría hacer lo que le venga en gana... Él haría lo que fuera por Will.
—Te prometo que solo iré y me despediré e inmediatamente voy a regresar... estaré aquí en dos semanas solo...
—No te preocupes Will. Iremos lo más pronto posible a Delos.
Will apenas salió de su estupefacción cuando Nico estaba llamando con total urgencia a Jules Albert y Frank quienes no tardaron mucho en llegar al lugar.
—Frank, tienes conocimiento básico sobre la protección de figuras de autoridad. ¿Cuánta escolta debe ser necesaria para un viaje de a lo mucho un mes?
—De mínimo se deben requerir cuatro soldados por cada persona importante, majestad.— Totalmente serio respondió a Nico antes de que este asintiera y le diera la orden directa de formar cuatro grupos de escoltas junto con el capitán de la fuerza del castillo. Frank salió rápidamente de la alcoba, acatando como un soldado las órdenes de su monarca.
—Jules, necesito que con premura hagas todos los preparativos para un viaje de cuatro semanas. También que localices la ruta más rápida para dar con la isla de Delos en su actual posición.
—De inmediato su Alteza. Los preparativos estarán listos en cuarenta y ocho horas a más tardar.
Nico chasqueo la lengua con disgusto.
─Necesito que estemos listos para zarpar mañana.— Todos miraron atónitos a Nico mientras este ayudaba a su prometido a levantarse del suelo.
—¿M-mañana?
—Si Jules, para mañana. Es necesario que lleguemos a Delos antes de que finalice la semana.
— B-bueno, pero si me permite decirlo majestad: a juzgar por las fechas del año, Delos debería estar ahora mismo a siete días de viaje en barco con dirección al sureste de nuestras tierras. La isla cambia su ubicación cada tanto, así que si mis cálculos no me fallan, si se parte en tres días, estarías en Delos antes del equinoccio de verano. Aún si salimos mañana no auguro que lleguemos para antes del inicio del nuevo mes.
Will se puso bastante pálido al escuchar a Jules hablar con tanta franqueza. Nico notó esto y le dio un apretón a su mano que mantenía sujeta en señal de apoyo. Pero tampoco pasó desapercibido ese pequeño temblor en la mano de Nicola, al parecer la noticia de que inevitablemente llegarán tarde, era preocupante para él.
—¿Entiendes que no tenemos esos días Jules?
—Tal vez yo pueda ayudar con eso.—Desde la puerta se escuchó mientras Percy se asomaba por la entrada, seguido de una Hazel que se miraba sonrojada al verse descubierta al estar escuchando detrás de las puertas con su primo.
—Perseus... ¿Se puede saber qué hacías...?
—¿Espiando? Eso no es lo importante acá Nico. Lo que ahora mismo es más urgente, es que tu adorado futuro marido llegue antes del fin de la semana a su país de nacimiento, pues yo tengo la solución a ese problema.
—... No me la creo.— Aseguró Nico mientras se cruzaba de brazos.
—Mira primo, no quiero ofender a tu maravilloso imperio pero debes admitir que cuando se trata de su flota naval, están varios pasos detrás de mi linda Atlantis.— Nico frunció el entrecejo ante la sonrisa presumida de Percy, quien sabía perfectamente que su primo carecía de argumentos para debatir esa lógica.— Ese viaje de siete días, yo puedo hacerlo en tres días si usamos mi barco.
Al escuchar aquello, los ojos de Will comenzaron a brillar con esperanza.
—¿D-De verdad...?
—Claro que si Solecito, mí adorado Princesa Andrómeda es conocido por ser el barco más veloz de todo el mar atlántico. Te juro por mi madre que estaremos en Delos antes de que...
Percy no pudo continuar su frase porque en ese justo momento se vio interrumpido por el fuerte abrazo que Solace le estaba propinando con total emoción y rastro de lágrimas en los ojos.
—¡G-Gracias... Enserio muchas Gracias Perseus!
Algo sonrojado por la repentina muestra de afecto, Percy le dio una media sonrisa al rubio frente a él.
—No me agradezcas... Con esto estamos a mano por todos los problemas que te cause solecito.
Will soltó una risa irónica mientras se separaba de Percy para salir emocionado a preparar su equipaje. Todos los presentes vieron a Solace alejarse rápidamente, antes de que Nico tomará por la capa a su primo y lo obligará a verlo a la cara.
—No me convences...
—Por todos los dioses Nico. Te juro solemnemente que mis intenciones si son buenas.— Nico achino los ojos en búsqueda de que Percy confesara de una vez por que se había ofrecido tan rápidamente a llevar a su prometido con su familia, esperaba que su primo confesara que lo estaba haciendo exclusivamente para ahora sí liberarse de Will para volver a intentar su burrada de casarse con él pero lo que contestó Percy lo dejó casi boquiabierto, y más por la total sinceridad que expresaban sus ojos.— En serio estoy haciendo esto para redimirme con Will. He sido un verdadero grano en el culo con él, y aun con eso accedió a tratar mis heridas y se ha portado atento conmigo desde ese día. Incluso se tomó la molestia de explicarme que algas con buenas para limpiar la sangre en caso de que a Tritón le dé por ponerme veneno en el café algún día... él me ha demostrado que no es una mala persona y realmente quiero ayudarlo.
Nico soltó lentamente la capa de Percy mientras lo miraba con asombro y... tal vez algo de gratitud. Lo que su primo estaba haciendo por Will era un gesto muy grande. Algo que ni siquiera Nico podría terminar de agradecerle en nombre de su futuro esposo.
—Percy....
—Bueno, esto solo aplica para Will. Tu si tienes que pagar por pasaje. — Burlón respondió Percy mientras la sonrisa tierna de Nico desaparecía.
—Lo sabía... Algo tenías escondido.— Percy le guiño un ojo con picardía, del tipo de cuando un niño conseguía salirse con la suya.— ¿Qué es lo que quieres?
...
Para cuando la mañana empezaba a salir, Will ya se encontraba en el puerto Caronte esperando por zarpar con dirección a su hogar. Y cuando finalmente estuvo arriba del princesa Andrómeda una enorme cantidad de sentimientos le envolvían el estómago, desde la emoción por reencontrarse con toda su familia, hasta la angustia de que tal vez esta sería la última vez que vería a su adorada abuela.
Oh, su querida abuela...
Automáticamente, grandes cantidades de recuerdos atiborraron la memoria de Solace mientras la suave brisa de la mañana le acariciaba el rostro. Recordó cómo su abuela le enseñaba sobre los dioses y lo llevaba a meditar a las cascadas. La primera vez que tras recuperarse de su fea caída por las escaleras, lo llevó al templo para agradecer a los dioses por su pronto despertar.
Cuando le apodó como shiv ka priy* al hacerlo su aprendiz oficial.
La veces que lo regañaba a él y a Devanessa por no estudiar correctamente los pasos de las danzas sagradas... O cuando les enseño a cantar.
"¡William Dalal Laghari Solace, no trates de imitar el canto de tu hermana!"
"Will... Tu voz es hermosa, no tienes por qué buscar cambiarla. Si piensas que con eso vas a alcanzar esa nota, entonces jamás podrás dominar tus poderes."
"La voz de cada hijo de delos es única y preciosa Will, nunca pienses que por que no puedes alcanzar la misma nota que otras voces, significa que es horrible. Tú brillas con tu propio poder mi niño."
"¡Oh...Ven acá mi baagh shaavak*! No te estoy regañando cariño, pero debes aprender a abrazar el poder que tienes, es parte de ti y eso ya lo hace maravilloso *"
O las veces que lo consoló cuando algunos chicos del templo se burlaban de Solace al verlo siempre solo sin la compañía de su madre...
"No hay nada de malo contigo mi baagh, si esos niños se creen mejores por tener una madre, tu diles que eres el aprendiz de la gran reina Leto cariño. Es mil veces mejor que tener una madre, te lo dice tu abuela con total seguridad."
Una lágrima traicionera se escapó por los ojos azules de Solace al recordar a su abuela. Una sensación cálida le inundaba el corazón mientras la risa burlona y dulce de su abuela resonaba en su memoria... Y pensar ahora se dirigía a Delos para despedirse de ella.
—¿Will... estás bien?— La voz de Percy descolocó un poco a Will en ese momento pues no esperaba toparse con él tan pronto.
—Estoy bien, solo... Creo que no era totalmente consciente de cuánto extrañaba mi hogar hasta que me veo forzado a volver. Estoy... Emocionado por volver a ver a mi familia.
—Ufff, desearía ser tú... Yo lo único que extraño de mi hogar es a mi madre y mi hermana. Si fuera por mí, me las hubiera traído a pasar unas vacaciones acá... ¡Oye! ¿Es verdad que si Delos aceptara abrir sus fronteras, sería un paraíso turístico?
—Ah... N-no sabría decírtelo... Somos una isla de clima cálido con constantes cielos despejados y todo el tiempo estamos rodeados de la humedad del mar. No sé qué cuenta como paradisiaco pero...
—¡Cool! Siempre quise ver las tierras de Delos, Tritón siempre me presumía que su madre iba constantemente por su amistad con una de las concubinas del antiguo Rey (estoy casi seguro de que mentía solo para molestarme) y me contaba sobre la ciudad hecha de oro. ¡Ah, estoy emocionado!
—¿Es por eso que le dijiste a Nico que tu precio por traerlo a bordo junto con su escolta, era que vinieras con nosotros?
—¡OBVIO! No puedo perder la oportunidad de restregarle en la cara al presumido de mi hermano mayor que yo al menos si pise las tierras doradas. A demás sería como estar en alta mar todo el tiempo en un tabla de surff de lujo, ¡No todos los días puedes ir a una de las islas mágicas (ambulantes) más bellas y prohibidas del mundo!
Will rió con nerviosismo hasta que un sonido estruendoso impidió que continuara con ella, se trataba de la voz preocupada y angustiada de Jules Albert.
—M-majestad. Cuando usted dijo que "viajarían", pensé que se refería a una escolta y el joven Solace. NO QUE USTED TAMBIÉN IRÍA EN ESTE VIAJE DE CUATRO SEMANAS.
—Estarás bien Jules, confió en que puedo dejarte el reino sin preocupaciones.
—¡MAJESTAD! ¡¿QUÉ LE DIRÉ A LOS EMISARIOS Y A LA CORTE SOBRE SU AUSENCIA?!
—Que me fui a conocer a mis suegros Jules, si no te funciona, estoy seguro de que se te ocurrirá alguna buena excusa. — Terminó de decir Nico mientras acababa de subir su equipaje al barco, con un angustiado Jules Albert, gritando e implorando por que regresará a tomar sus responsabilidades como monarca.— Además, Frank está de manera indefinida como mi primer ministro, no estarás completamente solo.
—¡NO SE VAYA MAJESTAD!
Percy no disimuló su risa ante la graciosa escena y dejó escapar toda su risa en un estruendoso sonido que hizo a las orejas de Nico enrojecer por la vergüenza que le daban los berrinches de Jules. Y Nico le habría soltado una patada Jules de no ser porque la alegre figura de Hazel cargando una pesada maleta para subirla al barco, le distrajo completamente.
—Hazel... ¿A dónde?
—¿Eh? ¿A dónde que...?
—¿A dónde crees que vas con esa maleta?
—Ammm... ¿A Delos con ustedes?
—¿Sí? Pues yo creo que no. Estas no son unas vacaciones, vamos a una negociación de emergencia para detener una posible guerra y a un próximo funeral. No voy a dejar que vayas.— Nico tenía toda la intención de tomar la maleta de su hermana para obligarla a dejar su medio camino de subida al princesa Andrómeda cuando la potente voz de Hazel se lo impidió.
—¡NO!
Absolutamente todos se quedaron callados. No era cosa de todos los días el ver como alguien se negaba a la voluntad del rey del mundo.
—¿Disculpa...?
—He dicho que no. — Reafirmó Hazel mientras tomaba fuerza de quien sabe dónde y lanzaba su enorme y pesada maleta a cubierta, la cual cayó en un horrible sonido de impacto mientras se podía escuchar a Percy chillar mientras decía "NO LE PEGUES A MI NAVE".—No pienso dejarte ir solo a Delos... La última vez que te deje ir solo a una negociación de guerra, se terminó desatando la segunda guerra mundial de Olimpus. Estás loco si crees que te voy a dejar ir a avergonzarnos con nuestra familia política.
—Hazel...
—Nada de "Hazel". No te dejaré ir solo y punto... A demás, tú mismo lo dijiste, vamos por una triste razón, una muy dolorosa y quiero estar ahí para Will, no lo dejaré llorando solo esta vez.— Esto último lo agrego Hazel mientras se giraba por el hombro y veía a su amigo rubio en la cubierta para dedicarle una sonrisa.
Will devolvió el gesto con una enorme sonrisa agradecida mientras se ponía las manos en el corazón, completamente enternecido por las palabras de la morena. Esta escena fue lo que realmente hizo a Nico el desistir de persuadir a Hazel para que regresara a tierra.
Soltando un pesado suspiro, Nico siguió a su hermana por detrás mientras escuchaba ahora también a Jules quejándose por que iba a ser el único que se quedaría en el país.
—Bueno, si ya no falta nadie por abordar...
La rampa del barco se dejó caer y la pequeña tripulación de Percy acató las órdenes de su capitán, quien desenvainó su espada al timón y en un limpio movimiento hacia el frente, hizo que el barco comenzara a avanzar a toda velocidad, haciendo que tanto Will como Nico, Hazel y el resto de la tripulación perdieron el equilibro sobre la cubierta ante la divertida risa de Perseo que parecía niño en feria al estar sobre su barco.
—¡Fijen curso al suroeste!— Gritó percy al sostenerse del timón para evitar caer en el arranque del barco, muy inteligente de su parte ya que tanta fue la fuerza de aquel impulso que Nico casi cae completamente en la acera de no ser porque Solace afirmó su cadera con un brazo y evitó que se cayera.
—Nico, ¿estás bien?
—S-si... Yo estoy bien...— Agregó Nico con un tierno sonrojo al sentir las manos de Solace en una zona bastante erógena mientras se perdía en el bello azul de los ojos de Solace. La situación no mejoró para Nico, sobre todo porque a Will se le ocurrió sonreírle con cariño en ese momento, fue como si a di Angelo se le escapará el aliento.
El momento podría haber durado más tiempo de no ser por qué la misma voz de Percy los interrumpió con un divertido comentario.
—¿Sabes Nico? Cuando Hazel me dijo que habías caído por Will, nunca pensé que lo decía de manera tan literal.
—Perseo... ¡VEN ACÁ!
Automáticamente y por esa provocación que causó que el sonrojo de Nico se extendiera hasta su cuello, di Angelo se separó de Will para comenzar a perseguir a su primo por todo el barco entero. Percy gritaba diciendo que las piernas cortas de Nico nunca le permitirían alcanzarlo, mientras que Nico solo le auguraba a su primo una muerte dolorosa para el momento en que lo alcanzara.
Will sonrió con diversión al ver aquella escena hasta que la cálida mano de Hazel llamó su atención. Se giró para ver a su amiga y ella le expresó en una mirada lo feliz que se encontraba de ver esta escena.
—Hace mucho tiempo que no veo a Nico tan animado.
—Bueno, si el estar animado incita a sus instintos asesinos contra el heredero de otro reino, creo que prefiero a mi amargado marido.
Hazel sonrió con ternura.
—La última vez que lo vi jugar así, fue antes de la muerte de su madre. Por primera vez desde que se volvió rey, veo a mi hermano divertirse como lo haría cualquier adolescente. Tan despreocupado...
Will sonrió con cariño y asintió a las palabras de Hazel. Esperaba que algún día, ese tipo de expresiones y momentos fueran más comunes de ahora en adelante en su vida compartida. Nada le haría más feliz que ver a su prometido ser capaz de bajar a guardia y vivir con calma.
Se perdió un poco en la escena hasta que la dulce voz de Hazel le hizo girar a mirarla.
—Will... quiero que sepas, que estamos aquí para brindarte todo el apoyo que necesites. Sé que vamos a ver a tu familia pero de ahora en adelante piensa en nosotros como una extensión de ella, estaremos contigo en todo momento. Y no te preocupes... vamos a llegar a tiempo.
Las lágrimas de felicidad que le brotaron a Will en ese momento, fueron las más hermosas y emocionantes de todas las que había liberado hasta ese momento. Las hermosas palabras de su cuñada le estaban llegando totalmente al corazón y Will no podía evitar sentirse más bendecido por los dioses. Atrapó a Hazel en un afectuoso abrazo y susurro miles de gracias mientras el barco avanzaba por las profundas aguas, en camino a la tierra que le vio nacer.
Glosario:
· Shiv ka priy: Del Hindi, significa el favorito de Shiva. Por si no lo sabían, Shiva es el dios de la destrucción y la restauración del universo en la cultura hindi y en el país de Will :3 Pongan sus teorías locas del porqué la abuela de Will le dio ese título. BUAHAHAHAHAHA
· Baagh shaavak: Del hindi y significa Cachorro de tigre o pequeño tigre. Es el apodo cariñoso que le dio Leto a Will por ser su bebe consentido. Y Baagh como podrán intuir, es solo tigre.
HOLA FRIJOLES.
EMPEZAMOS LA CELEBRACIÓN DE ANIVERSARIOOOO¡
Este capitulo es más corto de lo normal pero es más que nada por que es un poco de relleno para pasar a lo mero bueno. A partir del próximo capitulo al siguiente, retomamos los capítulos de 5mil palabras chicos.....
Espero que lo estén disfrutando y que le den mucho amor a este fic. Recuerden que es maratón y estoy subiendo todo el arco de Delos, hoy 18 de junio.
Quedensé hasta el final del arco para decidir la segunda parte de este especial de aniversario :3
Los quiero mucho y dejo de interrumpir su lectura.
PD. Es probable que de aquí a que finalice el arco, no vean mas notas mías a no ser que tenga que aclarar cosas como glosarios o datos extras para que mejore la comprensión de lectura.
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