+28+

Fin de flashback


En mis manos yacía, ya no mi compañera, si no el recuerdo de quien alguna vez lo fue, Ume, mi niña, quien me ha acompañado demasiados años de mi vida, ya no está, se ha ido, y todo por salvarme de esos estúpidos niños y sacarme de la tortura que reviví en ese sueño. Ella es y fue demasiado para mí; un alma tan pura en un pequeñito insecto que no solo me mantuvo cuerdo y vivo, si no que cargó con la responsabilidad de guiar a sus hermanas.

— Ume ¿Como soportaste con tanto en tus hombros? Tú eres también la hermana mayor y cuidaste de hasta quien tenía que cuidar de ti— Decía viendo fijamente mi mano con el cuerpo estático de Ume y lágrimas que se escaparon aun tratando de contenerlas.

Levante la mirada y vi la finca mariposa cubierta por la noche. Tanjiro, Zenitsu e Inozuke descansaban en paz, o al menos eso quiero pensar, aunque sepa que es poco probable. Mas tener su imagen en mi mente, me trae culpa y vergüenza, lo cual me trae la sensación de querer huir, no soy digno, soy tan débil a comparación de ellos, soy débil a comparación de todos.

Mis niñas se quedaron adentro durmiendo, mientras que yo salí a buscar un lugar digno de resguardar los restos de Ume; sin embargo, y aunque me quiera engañar, realmente esa no fue mi única intención, en verdad sentía la necesidad de escapar, no tengo la poca vergüenza como para mirar de nuevo a Tanjiro a los ojos ¿Como le podría explicar lo que dije sobre su hermana? Además, tampoco tengo las agallas para discúlpame sobre lo inútil que he sido todo este tiempo, mucho menos sabiendo que eso es algo que no podré cambiar.

¿Y si decido morir? No, esa no es una opción, Rengoku no quería que muriera, no me suicidaré solo por esto, aunque huir sería igual de patético, no desobedecería a los deseos de quien fue tan amable y cariñoso conmigo, aun habiéndome visto tan patético.

Pero no quiero huir, tal vez solo necesito un descanso, volver a mi hogar, quisiera poder decir eso y tener un verdadero hogar al cual volver, pero en un mundo donde el hogar son las personas más que los lugares ¿Tengo un hogar al cual volver? La respuesta es no, aunque ame mucho a mis niñas, no puedo descuidarlas de esta manera, no puedo permitir que lo que pasó con Ume se vuelva a repetir, no son un hogar, son algo que cuidar ¿Pero es que acaso un hogar no es algo que se deba de cuidar? Probablemente, sin embargo, antes que eso es un lugar donde puedas descansar y sentirte seguro, yo las amo, pero justo por eso no puedo relajarme estando cerca de ellas, no otra vez.

¿Y Rengoku? ... Rengoku ¿Rengoku mi lugar seguro? ¿Mi hogar? Tal vez, me daba seguridad estar cerca suyo, aun siendo en una misión tan peligrosa, al igual que con Zenitsu, Inozuke y Tanjiro ... ¿Y si ellos fueron mi hogar? Ellos fueron mi hogar ... Pero yo los alejé, yo lo arruiné; por mi culpa "mamá" Rengoku está muerto, Tanjiro ha de odiarme y Zenitsu e Inozuke también. Yo soy el idiota que aleja a su familia, todo fue culpa mía, todo siempre ha sido culpa mía ... ¿Eh? Mis mejillas están mojadas ¿Estoy llorando?

Caminando un poco más me acerqué a un pequeño campo floral, muy similar al que tenía mi madre, donde me gusta recordar que Ume y yo nos conocimos, aunque sepa que no fue ahí exactamente. Aquel campo, lleno de las mismas flores hermosas que fascinarían los ojos de cualquiera que las viera, estaba particularmente iluminado por la mismísima luna, con un reflejo albino y hermoso; pareciendo ser el mejor lugar donde Ume podría descansar.

Me arrodille e hice un pequeño agujero en la tierra para poder colocar la pequeña caja de madera que resguarda el cuerpo de mi querida Ume, tratando de ser lo menos sentimental, porque no quisiera llorar más.

— Ume, siempre serás mi niña, aunque ya no estés conmigo, sin embargo ¿Yo que soy para ti si tú ya no estás? Tal vez la parte de mí que conocías tú, murió junto a ti y tú eras quien conocía a la parte de mí que quería seguir luchando, entonces ¿Esté es el final? 

— Todavía estas muy lejos de tu final— Habló una voz grave y familiar detrás mío, interrumpiendo mis pensamientos.

Sin pensarlo dos veces me levante y desenvainé mi espada, no me importa quien sea, no necesito más molestias en este momento, si incluso mi cerebro está jugando en mi contra, no necesito alguien más que-

Él ... ¿Por qué está aquí? 


Jola, el siguiente cap va a estar más chevere, lo prometo ;-;










-

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top