- ¡¡¡Yuuu!!! - Corría un pelirrojo, de cabello color rojizo, y con un parche de pirata de nombre Lavi Boockman , seguido también de una joven de cabello verde oscuro corto hasta su hombro de nombre Lenalee Lee, ambos chicos, quienes persiguen a un Kanda muy apresurado y apasionado como un enamorado quien va en busca de su amada sin importarle las leyes que le imponían, solo seguía a su corazón, pero ahora en este caso es por un hombre, quien resulto ser aquel joven de quien su amigo se ha enamorado y ser golpeado por el mismo.

- Rey Tiedoll, ¿No va a detener a Kanda? - Pregunta una cansada Lenalee, conteniendo su respiración con inspirar despacio.

- Con la edad que tengo, ya no tengo las fuerzas de estar detrás de el desde que Yuu era pequeño, ahora el es una persona adulta que sigue a su corazón - Dice el anciano rey con un aire de nostalgia, como un padre que ve a su hijo alzar sus alas para ir a su destino - uff - Suspira después.

- ¿Que ocurre Majestad? - Pregunta Lavi.

- ¿Como le podre contar a Mana que mi hijo tiene puesto los ojos en alguien mas, que su hijo?.

- No se preocupe señor, Kanda de seguro regresara después de una discusión y mas tarde se arreglaran las cosas - Consuela fraternalmente al rey Tiedoll Lenalee, para que el no se se sienta mal, como lo había estado hace poco.

- Si, Lenalee tiene razon Yuu, usted sabe como es el, de seguro en estos momentos ya ha cabalgado hasta aquí y dejando a su caballo en el establo, para que los sirvientes se lo cuiden - Aporta también Lavi.

- Ah! claro mientras voy a hablar con uno de nuestro soldados, si Kanda ha regresado - Dice una animada Lenalee, quien va en dirección hacia los soldados, quienes estaban vigilando en las afueras del castillos.

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No hace mucho, su maestro el mago rojo, Cross Marian, lo había dejado solo para que conozca mas de cerca su cuarto o como lo llamaría, su nuevo hogar, Allen Walker, un campesino común y corriente como todo un aldeano, con una vida tranquila, sencilla, y un poco alocada y es debido a su maestro, con las locuras que se le ocurre, lo expone en situaciones peligrosas, como las cobranzas de apuestas que le debe cualquier criatura mágica, hasta a un enano se lo cobraría con una pelea de armas.

"Jejeje, vaya que loco recuerdo", mantiene una risa débil, los momentos extraños y locos que estuvo con su maestro, aunque sean ambientes terribles y crueles a la vez, fueron los momento mas alegres y felices que tubo que inculcarse gracias a cierto mago rojo, ahora se encuentra en la habitación del castillo de aquel Rey Mana, que según el hombre de cabellos rojos, es su padre.

Mientras tanto, después de ver su habitación y de pensar un poco en sus recuerdos, Allen se recuesta un poco en la cama, estaba tan cansado, ya casi es de noche, así que el mientras duerme un poco, puede que mas tarde su maestro lo despierte para querer presentarlo a ese hombre, el rey Mana, pero cuando se iba a dormir, de repente escucha una misteriosa voz, diciéndole ven hacia a mi, para Allen aquella voz, era tan tenebrosa y terrorífica, que el mismo le causaba miedo, la voz seguía y seguía , hasta que se oye otra palabra, ve a la habitación de costura, como si fuera una orden, el muchacho de cabellos plateados, mira en dirección de la voz, y ve una extraña luz de colo morado, como si lo estuviera esperando en ese castillo. Cuando Allen mira hacia la luz, la voz le ordena sígueme y el joven como por arte me magia, el brillo de sus ojos se fueron, solo se tornaron borrosas, el se para y sigue a la luz fosforescente, la luz de color morado abre una puerta de la habitación y siguen hacia el camino hasta la habitación de costura.

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¿Hasta cuando se tardara?, el mago rojo deja a solas a su discípulo para que conociera su cuarto, no es para el por que demorarse, bueno a el nunca le a importado ese tipo de cosas como sus amigos , el rey Tiedoll, y el rey Mana , cuando iba a tocar o derribar de una patada la puerta, siente una presencia muy oscura, una que antes la había sentido hace mucho tiempo, una energía maligna que te provoca mucho miedo, después abre los ojos, esa presencia es de .....

O no ya esta aquí ese mago gordo, luego de aquel pensamiento le da una fuerte patada a la puerta, que la abre en dos, mira la habitación y no estaba Allen, de seguro fue convencido fácilmente por el Conde, resulta que se pregunta como los ha localizado, esas preguntas las deja a un lado y ve una puerta que nunca había visto en la habitación de su discípulo, de seguro el mago gordo lo invoco y secuestra al heredero de Mana.

Tenia un mal presentimiento y tenia que correr lo mas rápido posible, si Allen va a aquella habitación de costura, podría reencontrarse con la rueca y si lo pincha, el joven podría morir en un largo sueño, corría y corría por cada camino del cuarto secreto.

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Allen Walker, hijo del rey Mana, sorpresa mente, caminaba en un estado de trance, como si fuera una marioneta controlada por su portador, iba siguiendo a la extraña luz de color morado, invitándolo a una habitación abandonada, compuesta por muchas ruecas quemadas y rotas, pero la extraña criatura lo estaba guiando a una rueca, no estaba en la misma condición que las otras, aquel objeto tenia un aura desconocida, como si fuese controlado, de manera involuntaria, mueve su mano y va hacia la aguja de rueca, luego siente de nuevo esa tenebrosa voz tócala, ¡¡Tócala!!, después de escuchar la voz, Allen siente un punzante dolor y después su vista se torna borrosa y cae.

El Mago rojo, ya va a la habitación de costura, y encuentras el cuerpo sin vida, de Allen Walker, ya llego demasiado tarde, la profecía que tanto temía ya se cumplió, Allen, su discípulo, ya duerme en un sueño donde no podrá despertar.

- Jajajaja, ¿Acaso creías que me ibas a engañar fácilmente? - Aparece atrás del cuerpo del joven dormido, El Conde Milenario con una sonrisa torcida, que el propio Cross Marian le causaba las ganas de vomitar. - Ahora que al fin tuve que encontrarlo durante dieciséis años .................

Continuara ............................................................................