Atención: Éste tomo del fanfic puede contener palabras explicitas o partes con contenido no apto para personas con "asco" exagerado u odio por la sexualidad, se les pide discreción y aceptación.

Aclaro que éste capítulo lo escribo sin intenciones de apoyar, o de alguna manera adular el maltrato a la mujer. Hecho para fines de entretenimiento

Me di a la tarea de investigar un poco para traerles un buen contenido.
Espero que les guste...

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Contactos contactos.

Debo tener mucho cuidado en ésta región, pues aquí no tengo a nadie que me cubra las espaldas.

Debo moverme con cautela, Serena ya me vio, y torpemente revelé lo que le hacía a Miette...

-Traeme agua- Le ordené, ella aún sigue bajo los efectos de aquello...

-Claro hermano- Sí, sigue así.

Volteo y reviso en la maleta.

Lo bueno es que nadie lo notó ni en el aeropuerto ni en el autobús...

-Con muchísimo cuidado... Ya tendré tiempo de armar un plan- Digo para mí mismo mientras muevo un poco de lo mío en una mini-bolsa de plástico. Dejo de respirar, puede volar y eso sería fatal para mí

-¡Calem!, ¿Quieres agua natural o de sabor?- Pregunta mi hermana desde abajo, por un momento me agito y casi la riego, la sellé

-¡De, de sabor está bien!- Contesté, al menos lo moví sin complicaciones

-¡Ahora subo...!-

•=00=•

-Quiero que te quedes sentada aquí, ¿está bien?-

-Claro, esperaré si así lo quieres- Me dice atendiendo lo que le digo, esto es increíble...

Según mi reloj, sólo queda alrededor de media hora, necesito que ella aguarde ahí

Mientras tanto, volteo por la ventana y me río

-Serás mía Serena- Digo entre dientes, ya pienso en todo lo que me permitiré hacer cuando el momento al fin llegue.

Mas sin embargo, queda el asunto de ese tal Ash.

Es obvio lo que ambos sienten, me pregunto en qué nivel está su relación

¿Amistad?

¿Noviazgo?

Sea cual sea, quizá la logre romper, nunca antes había llegado a pensar eso...

Será divertido verlos pelearse, pues es obvio que Serena no lo recordará en lo absoluto.

Buena idea sería un vídeo.

Se lo enseño al tal Ash, le hago creer algo a mi favor y adiós relación entre ambos

-Calem, me empiezo a hartar- Me dice Miette sonoramente, entonces me pongo de pie y me siento a su lado

-No pasa nada, haremos algo si quieres hermanita- Le digo sonriendo

Me acerqué a su boca...

-¿Pero qué haces?, somos hermanos- Me dice tímida y pastosamente

-Solo disfrutalo...- Y entonces le besé

Llevé mi mano hasta su entrepierna, ella pareció evitarlo, pero seguí

-Sígueme el juego...- Ordené, y ella empezó a corresponder el beso sin preguntar, luego oí cómo lanzó un gemido entre éste, el cual empezaba a subir de tono

Le alcé la blusa, le dije que alzara los brazos, y lo hizo...

•=00=•

Ella estaba dormida en la cama, me encargué de volverle a poner su falda y blusa para que no sospechara, aunque ella sabía a la perfección lo que le hacía sin su consentimiento

¡Pero la pobre ni cuenta se daba de cuándo yo la hacía "mi esclava"!

Al fin y al cabo, con la mínima dosis siempre lo olvidan.

Nunca me ha fallado nada, pasan dos horas y están como si nada hubiese pasado...

Lo sé, soy alguien sádico...

Pero lo sé manejar a la perfección.

Río y salgo de mi cuarto, me dirijo al baño...

•=00=•

-Quiero saber qué me hiciste ésta vez- Me dice mi hermana sentada a mi lado

-Sabes qué pasa en ese tiempo. Descuida que sigues siendo virgen- Dije divertido

-Sucio... Degenerado... ¡Sádico!- Me dice

-Gracias por el título- Reí

-Pero pronto disfrutaré de algo mejor, ¿sabes?-

-Quiero que dejes de hacerlo con quien quieras, ¡nadie tiene que ser una esclava sexual tuya!- Me dice mientras voltea, se sonrojó

-Te excita- Dije afirmando

-¿¡Qué?!-

-¿Verdad?- Le pregunto

-¿Verdad qué?- Dice sudando

-Te excita la idea de que yo te hago algo más que mi simple hermana... Esclava- Dije sonriendo, ella se me alejó

-No te dejo sólo porque eres parte de mi familia, y a pesar de todo te quiero, porque tengo la esperanza de que algún día cambies-

-Sí, lo que digas, pero recuerda algo, ni siquiera te das cuenta de cuando pierdes tu voluntad y te conviertes en mi fiel esclavita- Le dije riendo.

No niego que mi relación con ella es casi buena, solo porque se incomoda luego de recibir una de "nuestras sesiones"

Aun así la quiero, más allá del simple hecho de quererla sexualmente.

Qué extraño; ya no me suena raro, a pesar de tener solo dieciséis

¿Será por costumbre?

•=00=•

-Me dijiste que tienes a alguien en la mira... ¿Acaso es...?- Cuestiona Miette mirándome dudosa

-La hija de la señora Grace- Dije seguro

-Es un muy buen partido, y créeme que con ella sí me gustaría perder la virginidad- Reí de mi comentario

-Pensé que ya la habías perdido- Me responde siguiéndome al mismo tono de plática

-Claro que no... No he querido desperdiciar lo que me hará hombre- Dije sonando maduro

-Eso es una simple regla machista, te he dicho que lo que hace al hombre son sus acciones- Me dijo parándose, pero un momento de silencio la invadió

-¿Y ahora qué?-

-Nada... Solo recordé algo que pasó en el autobús cuando veníamos-

-¿Hablas de cuando el tal Ash nos interrumpió?- Pregunté, pero no es que le guarde algún mal, al menos aún, es solo que como que se me está metiendo algo de mucho

-Más bien cuando me salvó de mi propio hermano- Entonces dio la media vuelta. Reí de ella ahora a sus espaldas

-Salvarte... Más bien lo vi ir al baño- Dije parándome

-No evitarás que pase lo que tenga que pasar. Incluso haré mía a esa niña de pueblo- Le comenté divertido, después de todo, muy pocas posibilidades había de que sucediera algo para evitarlo

-En ese caso yo me haré la cotilla- Responde con decisión

-A ha, como digas esclavita- 

•=00=•

Aprendí que tienen que pasar como mínimo unas veinticuatro horas cada dosis de la droga que uso

Su sobre exceso puede matar, y eso me delataría de sobremanera

-Ahora qué piensas- Me vuelve a hablar Miette

-En nada- Le respondí en seco

-Obviamente no querrás decirme cómo piensas drogarla, ¿verdad?-

-Por supuesto que no- negué

-Pero quizá te tenga que hacer algo...- Le dije amenazante y sonriendo

-No entiendo por qué haces esto...- Calló y guardó silencio un tiempo, la volteé a ver y hablé directo

-¿Estás llorando?-

-No...-

-Por qué- Cuestioné autoritario, ella volteó a verme

-De alguna manera siento que cargo parte de la culpa de lo que le haces a las chicas- Me dice pastosamente, pero detonando un sentimiento de ligero odio...

-Ninguna se da cuenta Miette, ya te dije que esa droga solo anula la voluntad, borra la memoria y no les hace daño- Le dije para pasarle un brazo por el cuello, y ella me correspondió

-Quiero que... Cambies, antes de que algo malo pase- Me ruega

-Aún no encuentro eso que me hará dejarlo... Pero es bueno que tu esperanza siga viva-

-Además, no me gusta sentirme mal porque ellas no recuerden nada-

-Entonces estás celosa...- Reí

-Me siento sumamente mal- Y paré con lo que ella dijo

-¿A qué te refieres?- Pensé lo peor

-A que... Empiezo a sentirme bien con que me lo hagas...- Me dijo atenuando su voz, sonreí de manera indescriptible

-Entonces haré esto...- Rápidamente me acerqué a ella y la besé.

Sorprendentemente no trató de detenerlo, pero no lo correspondió...

~Continuará~