Capítulo 5
No sabía si debía permanecer en la habitación o si a Hoseok le molestaría que saliera pero cuando comprobó que la puerta no tenia llaves se sintió aliviado de que no lo haya encerrado, salió cautelosamente sacando primero la cabeza y se encontró con un gran pasillo donde suponía él había otras tres habitaciones, de un extremo podía ver las escaleras y hacia el fondo el pasillo giraba pero prefirió no indagar allí y se dirigió hacia abajo.
Por lo general le costaba un poco más bajar o subir escaleras pero podía hacerlo si se sostenía de algo firmemente, apretando el barandal de madera comenzó a descender lentamente un escalón a la vez, primero bajaba su pierna sana y cuando estaba seguro bajaba la otro, ya que su pierna derecha no tenía la fuerza suficiente para sostener todo su peso debía hacerlo de este modo.
No había bajado ni cuatro escalones cuando la voz de Hoseok lo hizo saltar del susto, -espera... el rubio se llevo la mano al pecho, no lo había visto llegar,... lo siento no quise asustarte.- le dijo mientras subía rápidamente y se paraba frente a él, -está bien, yo solo... ahh!- no termino la frase cuando el mayor ya lo había tomado de la cintura elevando sus pies del suelo sorprendiéndolo completamente.
Con la impresión de caer se sujeto a su camiseta negra arrugándola en sus puños, Hoseok bajaba con él sin siquiera sostenerse de la baranda con su mano libre, -hueles bien.- le susurro al oído como si fuera algo que no se supone diría en voz alta.
El momento no duro más que unos segundos cuando Hoseok lo dejo cuidadosamente en el suelo de la planta baja, el mayor ya no lo tocaba pero él seguía aferrado a su camiseta, carraspeo avergonzado cuando volvió en sí y lo soltó disimuladamente, -g-gracias... ah y use...-toco su cabello húmedo refiriéndose al resiente cumplido -está bien.- lo corto él.
El rubio rápidamente se distrajo mirando el lugar, una lujosa sala abierta con todo y chimenea como las que veía en las revistas de diseño que vendían en el aparador del supermercado y que nunca se había molestado en comprar, -whoa... ¿esta es tu casa? Es muy bonita.- caminando lentamente fue recorriéndola encantado con todo.
-algo así.- el rubio se metió en la cocina con Hoseok siguiéndolo de cerca, se voltio para mirarlo por sobre su hombro, -¿siempre me dirás eso?... cuando no quieras decir toda la historia.- -es muy probable.- ambos se sonrieron en complicidad, -está bien.- le dijo sin más y abrió la nevera.
-¿Qué haces?- -bueno tú ya cocinaste algo para mí así que ahora yo hare algo para ti.- Hoseok asintió más que conforme y se sentó en la gran isla central para verlo de cerca, observo silenciosamente en cada instante al rubio mientras preparaba unos macarrones con queso y unos huevos revueltos para ambos, cenaron uno frente al otro mirándose de tanto en tanto.
Para Taehyung que se consideraba alguien charlatán era algo incomodo mantenerse en silencio por tanto tiempo y su mente estaba llena de inquietudes y dudas con respecto a Hoseok, su vida y donde se encontraba parado en este momento pero no se sentía con la confianza suficiente para exigir una explicación, -¿puedo hacerte una pregunta?- era como caminar en terreno desconocido no estaba seguro de nada.
-puedes preguntarme lo quieras cuando tú lo quieras, no necesitas mi permiso.- aliviado por aquello decidió empezar por algo trivial y lo primero que noto cuando conoció al mayor, -tienes un acento raro, ¿no eres de aquí cierto?- -naci en Corea pero me fui a vivir a Japón cuando era un niño...
Por su lado Hoseok también tenía miles de preguntas y dudas sobre el menor así que aprovecharía esta oportunidad para indagar sobre su pasado,... y tu creciste en un orfanato ¿cierto?- -oye que tanto sabes sobre mi.- rebuzno risueño sin dejar de comer lo último en su plato, -solo eso.-
Le hecho una falsa mirada de desconfianza pero aún así le conto sobre su historia, él siempre era abierto respecto ese tema -en realidad según las hermanas llegue al orfanato como a los 3 o 4 años, me enviaron del hospital a allí cuando no pudieron encontrar a ningún familiar que me cuidara- -¿del hospital?-
-sí, estuve en el hospital por varios meses después de un accidente automovilístico- -¿así es como te lastimaste la pierna?- -aja- respondió simplemente el menor, -y qué paso con tus padres ¿estaban en el auto también?- -mm no, iba solo en un taxi.- esto intrigaba al mayor cada vez más, -tu solo ¿pero no eras un niño acaso?- Taehyung simplemente se alzo de hombros, -es todo lo que se, lamentablemente el taxista murió de camino al hospital así que tampoco pude saber a donde se supone que me llevaba o con quien.-
-lamento todo eso- por primera vez en su vida Hoseok quería regresar al pasado solo para evitarle cualquier dolor al menor, -está bien, una vez escuche que un testigo dijo haber visto una mujer rubia subirme al taxi pero jamás pudo comprobarse... mordió su labio inferior pensativamente,... cuando era niño me gustaba pensar que era mi madre pero si así fuera supongo que me abría buscado.-
-tal vez algo le sucedió y no pudo hacerlo.- solo quería consolarlo de la forma que fuera, -tal vez- -¿y recuerdas algo del accidente o antes de eso?- Taehyung comenzó a juntar los platos para lavarlos mientras él lo seguía atento con la mirada,
-no, no recuerdo nada, ni del accidente o mis padres o donde vivía antes, solo sé que desperté en el hospital y cuando me preguntaron mi nombre Taehyung salió, no se mi apellido o si ese es mi verdadero nombre si quiera y jamás podre estar completamente seguro de ello pero ya no me preocupo, creo que lo importante no es quienes fuimos en el pasado sino quienes seamos en el futuro-
Taehyung sonrió hermosamente cautivando por completo el corazón de Hoseok, él no podía creer que no tuviera resentimientos o rencor por todo lo que le había sucedió siendo tan pequeño, la vida había sido tan injusta con él y sin embargo el menor todavía era capaz de sonreír de esa forma.
-sabes, cuando dijiste que todos te llamaban v y no Taehyung pensé que era algo estúpido, Taehyung es un nombre hermoso... igual que tu.- totalmente ruborizado y avergonzado el menor solo desvió la mirada sintiendo sus mejillas hervir.
-¿y entonces cuanto tiempo estuviste en el orfanato?- continuo preguntando Hoseok de forma natural como si nada así que pensó que no debería tomar sus cumplidos de forma tan personal y carraspeo para pasar la pena, -hasta que cumplí los 18, nadie quería adoptar a un niño invalido sin nombre así que allí me quede hasta que fui mayor... el mayor tomo un repasador para ir secando los platos limpios.
...estuve bien allí, las hermanas eran buenas conmigo pero pensé que era tiempo de valerme por mi mismo y encontrar mi propio camino, supongo que es algo que todos debemos hacerlo en algún momento.- era fascinante escucharlo hablar tan abiertamente de su pasado sin dolor alguno al contrario de Hoseok que seguía atado a el tanto que no era capaz de encontrar la paz.
Hoseok tomo la cafetera para prepararla, -¿te gusta el café?- -en realidad prefiero el té..., le informo e inmediatamente él coloco agua a hervir, -¿cuántos años tienes?- pregunto Taehyung repentinamente volviendo la atención a él -tengo 29 ¿y tú?- el rubio no esperaba que fuera tan grande, -tengo 23 o 22 años no estoy muy seguro...
...pero oye entonces eres mi hyung, debí hablarte formalmente desde el principio.- -¿Qué? Acaso creíste que era de otra forma.- movió su mano por encima del rubio haciendo énfasis en la diferencia de estatura y ambos rieron -¡oye!... volvió a sonrojarse, sentía que no podía controlarse frente al mayor.
Taehyung tomo unas tasas que encontró en una de las alacena para el té, la tención y el ambiente ya no se sentía extraño frente al mayor como cuando despertó pero aún no olvidaba que estaba aquí en cualidad de secuestrado, -¿Cuánto tiempo debo quedarme aquí?, ¿ya no podre volver a mi casa o a mi trabajo?- eso era algo que lo inquietaba, se preguntaba si alguien se preocuparía porque él desapareciera tan repentinamente.
Suspirando Hoseok pensó en ello, incluso aunque el rubio no corriera ningún peligro no contemplaba la idea de dejarlo ir, -no por ahora, incluso si todo se tranquiza puedes quedarte aquí, no tienes que volver a ese trabajo ni a ningún otro yo te daré todo lo que necesites.- fue bastante contundente y el tono de su voz más duro de lo que pretendió, no quería infringirle miedo a Taehyung pero no quería que le quedaran dudas al respecto.
Tomo una bandeja para llevar las infusiones calientes hasta la sala y se sentaron frente a la chimenea, sin conocer realmente al menor sabía que su respuesta lo había asustado y ahora se mantenía en silencio, pensativo y cabizbajo, no le gustaba esto, él mayor solo quería verlo sonreír, -no eres mi prisionero Taehyung, puedes moverte por la casa libremente y salir, hay un gran jardín lleno de plantas y flores se que te gustan... solo te pido que no salgas de la propiedad y no dejes que nadie te vea...
Lo veía revolver su té casi compungido,... por favor, solo quiero mantenerte a salvo.- Taehyung respirando profundo y exhalando conecto finalmente su mirada con él, -¿Por qué haces esto Hoseok? ¿Por qué te preocupas por mi?- tragando saliva el mayor no sabía cómo responder, no sin hacer que el menor saliera corriendo y jamás quisiera volver a hablarle.
Esperaba no arrepentirse de esto, -soy un asesino Taehyung, me pagan por matar y lo he hecho desde que soy un niño, es todo lo que sé hacer... casi se derrama su té encima al escuchar aquello, el aire a su alrededor se sentía repentinamente mas frio y tétrico,... he perdido la cuenta de a cuantas personas he matado a lo largo de mi vida, niños, hombres, mujeres, en ocasiones tenía que hacerlos sufrir, torturarlos, matarlos lentamente o cosas peores dependiendo de lo que me pagaran por hacerles, simplemente hacia mi trabajo sin cargos de conciencia y sin importarme nada sobre ellos...
Taehyung no podía creer lo que escuchaba, el relato parecía no concordar con el hombre que tenía enfrente de él y que tan amablemente lo había tratado, sus manos temblaban aferrándose a la taza para no dejarla caer,... jamás me había involucrado con ninguno de ellos o indagado lo suficiente como para aprenderme sus nombres siquiera al igual que cuando me encargaron deshacerme de ti, para mí solo era un trabajo mas... hasta que te conocí y entonces no pude entender como alguien querría hacerte daño y pensé que si debía matarte al menos tenía que saber el porqué.-
-entonces cuando descubras porque alguien decidió que debía morir ¿vas a matarme?, ¿lo haría eso mas justificable?- Hoseok ni siquiera quería pensar en ello y ver la expresión de terror y angustia en el rostro de Taehyung lo hacía enfurecer, se sentía enojado, defraudado y frustrado consigo mismo por lo que el menor fuera a pensar de él, no podría manejar que le tuviera miedo o sintiera rechazo al tenerlo cerca.
-YA TE LO DIJE, NO DEJARE QUE NADA TE SUCEDA ¿PORQUE NO PUEDES ENTENDERLO?... necesitaba darle la seguridad de que estaría a salvo con él y no sabía cómo hacerlo, la amabilidad y delicadeza no eran lo suyo,... TE QUEDARAS AQUÍ, ME OCUPARE DE TI Y ESO SERA TODO... no quería obligarlo a permanecer a su lado, quería que él deseara hacerlo,... ¿acaso no es eso suficiente?-
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top