Engaños
Hotel Royal Woods, habitación 211; una mujer de tez morena se encontraba mirando la TV, riendo a carcajadas por el programa que estaba viendo, algo sobre que la valiente imprudencia tiene su ciencia.
Eso hasta que se vio interrumpida por el sonido proveniente de la puerta, se levantó de su asiento para permitir que pasara la persona que vino a verla, su sorpresa fue grande al ver quienes eran. este sin duda será un largo día, tedioso y lleno de sentimientos.
—¡Lori, Leni y Lily! ¿Qué están haciendo aquí?— preguntó la latina
—Necesitábamos hablar contigo— Habló tajantemente Lori
—Ronnie Anne ¿podemos pasar?— Pidió amablemente Leni
Dándose cuenta de que hablar con ellas a mitad del pasillo, no era precisamente una buena idea.
—¡Oh! Lo siento adelante pasen, ¿les gustaría algo de tomar? tengo sodas en el frigobar— Ofreció la latina sonriendo tratando de no tensar la situación, que de por sí ya era incómoda
—Ronalda Anne Santiago Casa Grande, no venimos a tomar unas sodas como si fuéramos "amigas o cuñadas"— Esto lo decía Lily, haciendo comillas con los dedos y con un tono sarcástico y molesto en su voz
La sonrisa de Ronnie Anne se desvaneció rápidamente, sabía que la situación entre ellas no era la más favorable, todo esto debido a la forma en que terminó la relación con Lincoln y Laín.
—Yo… lo siento solo trataba de ser amable— Decía temerosa y bajando la cabeza —¿Lincoln sabe que están aquí?— Preguntaba con cierta curiosidad
—No Ronnie, él no lo sabe y es mejor que se quede así ¿entendido?— Respondió la mayor de las hermanas Loud
—Sí Lori, lo entiendo— Contestó la morena
—Bien ya que quedó claro eso, queremos saber sobre tú y nuestro hermano ¿que fue lo que pasó con ustedes?— Dijo Lily mirando a la latina seriamente
—¡¿Qué?!... ¿porque quieren saber eso?— Respondía sorprendida, no esperaba eso de ellas —Y-yo no sé qué decir—
—Empieza por el principio Ronnie Anne, nosotras solo queremos ayudar— Le hablaba Leni con gentileza
—¿Enserio me quieren ayudar con Lincoln y Laín?— Decía mirándolas confundida
—No nos malinterpretes Ronalda, si queremos ayudar, pero no a ti, sino a Lincoln y a nuestro sobrino— Dijo severamente Lily, ganándose una mirada de sorpresa por parte de Lori y Leni
—Mira Ronnie Anne, dudo mucho que podamos borrar años de dolor y sufrimiento, pero podemos empezar con algo, como dijo Lily, queremos ayudar a que Lain principalmente, tenga a su madre de nuevo en su vida— Lori le extendió la mano en ese momento a Ronnie, quien con unas pequeñas lágrimas tomó su mano
—Bien les contaré todo, no pido que me perdonen pero si que me entiendan, no soy una mala persona solo tuve mala suerte— Tomó asiento en el pequeño sillón de la habitación, guiando a las hermanas Loud a sentarse en las sillas que había disponible
—Antes de empezar Ronnie Anne ¿aún sigue en pie tu oferta de las sodas? Es que quiero una— Al decir esto se ganó una risilla de parte de la latina mientras que Lori y Lily sólo sonrieron
—Claro que si Leni, te traeré una soda— Se levantó y fue al frigobar por la soda entregándosela a la rubia
Ya en su asiento Ronnie Anne comenzó a hablar —Bien empecemos, como sabrán mi relación con Lincoln comenzó cuando teníamos 11 años, yo no lo sabía en ese entonces pero él sería mi primer y único amor— Su mirada al hablar sobre ello, denotaba melancolía y añoranzas de un tiempo que parecía lejano —Él era un chico muy dulce y tierno, siempre me trato bien, claro después de que nos confesamos y dejara de molestarlo— Soltó una pequeña risa al recordar el día que le metió una hamburguesa en los pantalones
Mientras la latina seguía hablando, las hermanas Loud escuchaban atentamente, y también sonreían al recordar los consejos que le dieron para conocer mejor a Ronnie Anne, sobre todo Lori.
En tanto esta conversación tenía lugar, otra más tenía comienzo entre dos personas, en algún lugar lejos de ahí Lincoln y Sid Chang, hablaban sobre ciertas fotos que el albino sostenía en sus manos, un par de lágrimas se asomaban por las comisuras de sus ojos.
Se encontraban en una pequeña cafetería, los dos sentados aún sin decir nada, Sid, veía como el corazón del peliblanco se estrujaba cada vez que veía aquellas fotos, hasta que decidió romper el silencio.
—Lincoln, sé que esto es duro para ti, sobre todo por lo que pasó entre ustedes, quizá el motivo por el que ella se fue se debió a que te engañaba con otro— Como si de veneno se tratase, las palabras de Sid hacían mella en la mente de Lincoln
—Sid tú eres su mejor amiga, fuiste su manager ¿acaso sabes el porqué ella me dejó a mí y a Laín?— el albino pedía una respuesta que se podía ver en su mirada, escucharía cualquier cosa que ella supiera
—Lincoln, no hagas preguntas si no quieres saber las respuestas— la asiática ya tenía una historia preparada, solo bastaba un empujón más para que el se tragara sus engaños
—Sid, estoy dispuesto a escuchar lo que sea— Mirándola seriamente, ya había caído en su trampa —Solo dime todo lo que tú sabes—
—Bien Lincoln, si eso es lo que quieres te diré todo, pero tienes que creerme lo que te diré, te dejará un mal sabor de boca— Internamente Sid agradecia que el albino fuera un poco manipulable —Ronnie Anne, ella ya había dejado de sentir amor por ti Lincoln, lo descubrí hace mucho tiempo la persona que ves ahí, se llama Chad, el trabajaba en la misma promotora de los Xgames donde Ronnie y yo trabajabamos, ahí se conocieron—
Lincoln volvió a observar las fotos, entonces tuvo una pequeña epifanía, recordó que en alguna ocasión que se vio en la necesidad de ir por Ronnie Anne a su trabajo, lo había visto junto a ella riéndose y charlando animadamente, él jamás pensó que algo sucedía entre ellos, solo lo veía como un muy buen conocido de Ronnie Anne, aunque ella nunca lo presentó por esa razón no sabía su nombre y mucho menos lo recordaba.
—¿y tú lo sabías, y nunca me dijiste nada? ¡¿todo este tiempo lo supiste?!— Alzó un poco la voz, sus ojos mostraban molestia
—Lincoln yo no lo sabía— Sid respondió asustada, no se esperaba esa reacción del peliblanco quien la interrumpió y siguió hablando
—¡No me salgas con mentiras Sid, ¿lo sabías?— Dijo otra vez Lincoln más calmado pero con firmeza en su voz
—Sí lo sabía, pero fue porque me enteré tiempo después, cuando ella se fue y te dejo sólo con tu hijo— Trataba de sonar lo más creíble posible, aún estaba nerviosa por su reacción de hace un momento —Lo supe cuando los vi besándose detrás de su camerino, así que tomé estas fotos en ese momento— Terminó por decir ya más relajada, el ambiente ya no estaba tan tenso
—¿Y-y tú sabes si aún se siguen viendo?— Lincoln sabía que esta era de esas preguntas, de las que no quería oír respuestas
—Lincoln… si, ellos se siguen viendo… en verdad lo siento, puedo ver que todavía sientes algo por ella— Esta era la oportunidad de oro de Sid, al tener al albino en el momento más vulnerable de sus emociones —Si tu me lo permites Lincoln, puedo curar tu corazón roto— Decía Sid mientras se acercaba al peliblanco abrazándolo
Lincoln solo se dejó llevar por el momento, dejó que los brazos de la asiática lo rodearan, contenía sus lágrimas no quería llorar, pero al estar en los brazos de Sid empezó a sollozar levemente, ella al escucharlo se separó un poco de él para mirarlo a los ojos y lentamente se acercó a sus labios y lo beso.
No imaginaba tal acción de la asiática, Lincoln sólo se quedó estático y se sorprendió de lo que estaba pasando, al final reaccióno y separó a Sid de sus labios.
—¿Porque hiciste eso Sid?— Le preguntó jadeando por la falta de oxígeno
—¿No es obvio Lincoln?, solo quiero ayudarte, y quien sabe ¿tal vez mi ayuda te gusté?— Respondió con dulzura y sensualidad en su voz
—Y-yo no sé qué hacer, agradezco tu ayuda Sid, pero son demasiadas cosas por procesar— El albino puso sus manos en su cabeza, tenía mucho en qué pensar —Quizá te llame luego, es hora de irme Laín debe estar esperándome, nos vemos Sid— Se levantó de su asiento y se marchó rumbo a su hogar
Sid se quedó en la cafetería, si bien no había podido seducirlo, su objetivo principal ya estaba hecho, una sonrisa maliciosa se posó en sus labios.
—Te lo dije Santiago, te dije que te arruinaría jajajaja— Dijo para sí misma riendo en voz baja
Regresando al hotel de Royal Woods, Ronnie Anne y las hermanas Loud, ya habían terminado su conversación.
—Y eso es todo lo que sucedió, yo nunca quise dejarlo solo con Laín, ¡pero esa maldita mujer sabe cómo explotar tus debilidades para usarlas en tu contra, se mete en tu cabeza y te manipula a su antojo! — Terminó por decir la latina con molestia y amargura
—Debió ser duro para ti descubrir que tu "mejor amiga"— Dijo Lily haciendo comillas con los dedos —Destruyó y separó a tu familia recién formada—
—Lo fue Lily… ella era como una hermana para mí, aún no sé porqué lo hizo— Ronnie Anne soltó un par de lágrimas con su voz ligeramente quebrada
Lori se levantó de su lugar, se acercó a la morena y la abrazó, hecho que sorprendió a Ronnie, a Leni y a Lily, lo único que pudo hacer la chica Santiago, fue corresponder el abrazo y soltar las lágrimas que llevaba reprimiendo desde que inició la conversación.
—Tranquila Ronnie Anne, yo… creo que te juzgue antes de tiempo, no eres quien pensé que eras— Amabilidad, comprensión y gentileza, esa era la sensación que transmitía Lori con sus palabras
—¿Una perra abandona hijos, una mal agradecida con el hombre que me dio todo?— Ronnie se separó del abrazo y miró a Lori para seguir hablando —Tal vez lo fui Lori, no te equivocaste, pero estoy dispuesta a hacer todo lo posible por regresar a la vida de ellos dos— Dijo con firmeza sin apartar la mirada de la rubia
—No creo que sea lo correcto, todavía siento un poco de rencor hacia ti Ronnie— Lily aún seguía molesta, pero su tono de voz era más suave y relajado —Te ayudaré, pero sólo lo hago por Lincoln y Laín, defraudame y pagarás caro ¿entendido?— La rubia menor extendió su mano hacia Ronnie Anne, quien aceptó sus términos
—Entendido Lily, prometo jamás defraudarlos de nuevo, ni a ti, ni a tu familia y en especial a Lincoln y Laín— El ambiente era agradable en ese momento, las tensiones y diferencias entre ellas ya no eran tan notables como al principio
—Bueno yo siempre te he tenido fe Ronnie Anne, pero no vuelvas a lastimar a nuestro Linky o no confeccionare tu vestido de bodas— Decía Leni con una risilla típica de ella
—No Leni no volverá a pasar, y sobre el vestido me encantaría poder llevar uno hecho por ti, claro si Lincoln me permite regresar a su vida—
Después de todo esto las hermanas Loud se despidieron de la latina, Lily y Leni se adelantaron al coche, mientras Lori aún seguía despidiéndose de Ronnie, pero de pronto se detuvo y regresó con ella para preguntar algo.
—Ronnie Anne, disculpa la molestia pero hay algo que quiero preguntarte— La rubia estaba un poco nerviosa
—Descuida Lori puedes preguntarme lo que sea— Ronnie Anne no quería arruinar el poco, pero gran avance entre ella —Adelante pregunta—
—Ronnie… Roberto… ¿cómo está él?— Eso tomó por sorpresa a la morena, quien se sintió un poco incomoda y mal por la respuesta que daría
—Lori… Bobby… él se casó hace un par de años… con Becky— Era un tema delicado para ellas dos
—Entiendo gracias por responder Ronnie Anne, cuidate nos veremos después— La mirada de dolor en los ojos de Lori lo decían todo, lo extrañaba —Aún te quedan un par más de hermanas con quienes hablar— Esto último lo dijo con una sonrisa que escondía su tristeza
—Claro que si Lori, nos vemos después cuidense mucho— Entro de nuevo a su habitación y dijo para sí misma —Bobby eres un idiota—
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Bueno esto es todo por ahora chicos, lamento la demora pero he estado haciendo un par de cosas, asuntos personales, y porque también me vicie a jugar Skullgirls mobil.
Espero que este capítulo les guste, si es así no olviden apoyar la historia un voto un comentario me animan a continuar.
Se despide de ustedes su amigable escritor
DobleE.E
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