La manada de Enid Sinclair ahora es muy rica, tiene mucho más terrenos además de haberle tocado la lotería. Preocupada por ella, su madre encarga un servicio para ella. Es la pequeña de la familia y en cierto punto la más inmadura de todos. Es por ello que quieren que se centre en los estudios porque desean que tenga un brillante futuro.

La loba se enteró poco después de su llegada a Nevermore y teniendo aún días de fiesta hasta el comienzo de las clases. Se preguntaba que clase de persona sería el mayordomo. Mientras tanto, ella estaba feliz besándose con Ajax en su cuarto. Ambos compartían risas y besos, Miércoles no tardaría en llegar a la academia, por lo tanto aprovechaban los momentos íntimos para estar juntos.

—Así que ahora eres toda una celebridad eh—comentó este mientras acariciaba su espalda.

—Puede—reía ella feliz—pero sería mejor verte a ti como mayordomo—lo besó de nuevo y se tumbaron.

Ajax no desaprovechaba para meter la mano en el trasero de ella provocando un leve suspiro en la joven que se mordía el labio. 

Entonces sonó el teléfono de la joven.

—¿Si?—preguntaba ella algo nerviosa—¿qué?, ¿ya?...entiendo.

La joven al colgar dijo que su mayordomo estaba abajo. Se arregló la ropa mientras el joven miraba a su chica e incluso le tocaba el culo manoseando este hasta que recibió un cariñoso manotazo.

—Ya tendremos tiempo luego—dijo con voz dulce.

Llegaron los dos al patio y allí vieron a un joven alto, bien plantado, algo musculoso, pelo bien peinado y de color negro al igual que sus ojos. Llevaba una maleta a su lado.

—¿Eres Tn?—preguntaba ella acercándose.

—Si, soy Tn y estaré a su servicio señorita Sinclair. Seré además su tutor para que pueda mejorar sus notas—respondió—le ayudaré en todo lo que necesite y satisfaré todas sus necesidades.

La joven se puso algo roja al ser tratada como una dama.

—¿Un chico?, se suponía que sería una chica—comentó Ajax algo molesto viendo a este.

—De ser así sería una doncella, y no soy un chico, soy un hombre. Y por favor, cuando se dirija a mí controle ese tono ya que no creo haber hecho nada para molestarlo—dijo muy relajado y con la mirada serena, era todo un profesional.

—¿Y qué tareas más tienes?

—Conviviré con usted y su compañera de habitación. Mis tareas son; lavar, cocinar si así lo requiere usted, vestirla, coser, planchar, ayudarla con los estudios y un largo listado de tareas.

Ella tragaba saliva.

—¿Vestirme?—preguntó roja.

—Si, seré la persona encargada de vestirla. La ropa que usará estará planchada, limpia de cualquier mancha y sus zapatos estarán impolutos—contestó.

—¡Un momento!—intervino el joven—¿vas a vestirla?, ¿quieres decir qué tendrás que verla en ropa interior?—preguntó entre enfadado y sorprendido.

Tn lo miró durante unos segundos.

—¿Acaso hay otra forma de vestirla?, debo asegurarme que va bien vestida, eso me recuerda, la peinaré también cada día de una forma distinta para que se vea bonita. Como digo, son las órdenes de su madre.

Ajax se puso en medio de los dos.

—¡No pienso permitir que toques a mi chica con tus manos!—estaba muy cabreado—¿crees que puedes venir aquí y verla sin ropa?—estaba alterado.

—Por favor, rebaje el tono, estoy entrenado y si me obliga, usaré la fuerza física para poder cumplir con mi deber—dijo este.

—¿Crees qué me das miedo?, no vas a tocarla

—Deje que haga mi trabajo, señorita Sincliar, le pido que le haga entrar en razón

—¡No eres más que un chico de servidumbre!—al decir eso, Tn se arremangó de una forma lenta y segura de sí mismo.

—Último aviso, estoy autorizado y por contrato puedo emplear la fuerza...

—¡Ajax vale ya, podemos hablar de ello y...!—pero esté no atendía a razones.

Ajax no paraba de insultar al joven que permanecía tranquilo, mirando y escuchando cada palabra que salía de la boca de este.

—¡No eres más que un fracasado que trabaja limpiando mierda!.

Tn suspiró.

—Por favor...mire aquí—le mostró la mano izquierda levantada.

El chico la miró sin entender nada cuando le vino la hostia padre por la derecha que lo tumbó. El joven sintió como perdía casi todos los sentidos. Sentía un pitido en el oído.

—¡Ajax!—exclamó sorprendida—no tenías que golpearlo...tan fuerte.

El chico volvió en sí en la enfermería tras un par de horas tumbado. Enid le puso al corriente y él apenas recordaba algo.

—No vuelvas a hacer eso, le has insultado...

—Él quiere tocarte

—Es un profesional, si intenta algo lo denuncio

—Enid...

—Confía en mí...solamente tengo ojos para ti.

Ajax se quedaría esa tarde noche en revisión. Miércoles había llegado y colocado todas sus cosas mientras Tn tenía todo ya en su rincón. Al ponerse al día de lo sucedido, la pelinegra felicitó al joven por el trabajo realizado de pegarle a Ajax.

—No me gusta como huele, bebe y fuma demasiado, es asqueroso tenerlo cerca—comentó ella.

—Yo no huelo nada—dijo Enid.

—Porque pasas mucho tiempo con él y no te das cuenta.

Esa noche a Enid le costó un poco dormir pero finalmente pudo conciliar el sueño.

La mañana llegó, su roomie estaba ya abajo desayunando porque había madrugado. Tn se acercó cuando la vio despierta para ayudarla a levantarse como sino pudiera hacerlo ella misma. Se lavó la cara y salió.

—Muy bien, ¿puedo empezar?—preguntó el chico.

Ella roja como un tomate asintió.

—Entiendo, por cierto, su blusa rosa está descosida de un lado, ¿me hago cargo de ella?—Enid asintió feliz—de acuerdo, me encargaré de ello.

—Gracias

—Es un placer ayudarla señorita Sinclair

—Me puedes decir Enid

—Eso va en contra del código señorita Sincliar.

La chica olió la colonia del joven, era un olor fresco. Entonces el chico empezó a desabrochar los botones de su camisón mientras le pedía estar quieta. Ella tragaba saliva, tenía la cara del joven a pocos metros mientras realizaba su trabajo. Luego le quitó el camisón y la camisa de interior para después proceder lo mismo con los pantalones.

—¿La ropa interior también es necesaria?—preguntó avergonzada.

—Por supuesto, debe ir cada día con una ropa interior diferente y limpia. Yo limpiaré y planchare todo, no debe preocuparse por ello señorita Sinclair.

Ella le daba mucho corte y dijo que lo haría ella misma.

—Puedo hacerlo de espaldas si lo prefiere—ella nerviosa accedió.

Tn se colocó detrás y desabrochó el sujetador para luego bajarle la parte inferior. Enid estaba nerviosa, roja, estaba desnuda delante de un chico que no era su pareja. Sentía algo de frío por estar de esa manera...quería terminar pronto con ello. Tn le colocó la ropa limpia y el uniforme de manera profesional mientras ella se cubría con las manos. Enid pensó que fue una eternidad. Incluso sintió la respiración del joven provocando en ella un hormigueo. Ahora faltaban los zapatos.

—Siéntese por favor—ella lo hizo en el borde de la cama.

El joven le colocó los calcetines y después los zapatos.

—Listo, hemos terminado—dijo levantándose del suelo.

—¿Será así cada día?—este asintió.

—Vamos, hay que desayunar, debe estar fuerte para poder llevar una vida sana señorita Sinclair.

Tomó la mochila de la joven y le siguió hasta la cafetería.

Y así empezó su nueva vida...

Continuará...

Espero que les haya gustado.

Un saludo :D

Espero sus comentarios jejeje