Enid Sinclair estaba muy contenta ese día, desde que el mayordomo le ayudaba a estudiar, los temas los tenía más claros. Era cierto que en algunos puntos le costaba más, pero ella misma se notaba que había mejorado en el tema de los estudios. Tn se aseguraba que los esquemas quedasen claros para luego repasarlos de cara al examen. La relación con este también era mucho mejor, si que lo consideraba en algunas ocasiones...demasiado profesional, pero su página había aumentado en visitas gracias a qué él estaba presente en su vida y por la entrevista claro. Pero también se debía a una cosa; su mejora para escribir. Eso aumentó el número de visitas.

―¡Por fin terminaron las clases!―dijo la loba tras salir de la última clase de la semana junto a Yoko―voy a tirarme toda la tarde escribiendo sobre chismes y viendo películas acompañadas de palomitas.

―Yo voy a ir con Divina a terminar unos trabajos atrasados, es lo malo de juntarnos, empezamos a hablar de rumores y...―decía la vampira antes de despedirse.

Al llegar a la habitación, Enid se quitó los zapatos tirándolos a un lado antes de caerse sobre la cama.

―Señorita Sinclair, debe vigilar sus modales―dijo este mientras los recogía y los colocaba en su lugar de manera correcta.

―Oh venga...no seas tan serio―dio unos golpecitos en la cama―venga, vamos a ver una película.

―Señorita...aunque hayan terminado las clases, debe hacer sus obligaciones―contestó el chico.

―Pero ya han terminado las clases, tengo los deberes hechos, he mejorado en clase y en ortografía―hizo pucheros―merezco un poco de descanso.

El chico revisó las libretas y ejercicios mientras ella miraba su reacción.

―Sí, ha mejorado notablemente, algo que no era excesivamente difícil―comentó―está bien, puede tomarse el día libre.

―¡Bien!―exclamó muy feliz pues había sido una semana muy dura.

Fue tal que resbaló y cayó al suelo golpeándose un poco la cabeza. Enseguida Tn fue a levantarla mientras le preguntaba si estaba bien.

―Me duele un poco―respondió ella sobándose la cabeza.

El chico la hizo apoyarse en su pecho mientras revisaba la zona. La chica se sentía algo sonrojada al tener al joven tan cerca. Tn miró unas cuantas veces, pero no tenía nada, ni siquiera le saldría un chichón. Por si acaso, le trajó un poco de hielo.

―Está muy frío―dijo ella quejándose.

―No esperará que esté caliente.

Después de ese suceso, ambos se pusieron a ver una película junto a las palomitas. Cosa y Miércoles salieron a Jerichó para ir a la biblioteca de allí. Enid había elegido una romántica y se notaba mucho porque estaba algo sensible, incluso lloraba de emoción por algunas escenas.

―Qué película tan tierna y bonita...ojalá vivir una historia de amor así―dijo mientras se limpiaba las lágrimas.

―No debe confundir ficción con realidad mi señora―comentó el joven.

―¿No puedes dejar de ser tan gruñón?

―Soy sincero...mi señora

―Jum.

Enid se enojó un poco por ese comentario y tras esto, le dijo que podía descansar, que ella se iba a tumbar a escuchar música. El joven se fue hasta su cama y se sentó en la cama, apoyando su espalda en la pared, vigilando a la joven de vez en cuando por si necesitaba algo. Ella le daba la espalda, aún seguía enfadada por ese comentario.

Llamaron a la puerta, Tn se levantó y abrió, era Ajax.

―¿Qué desea?

―Hablar con Enid.

La loba que se percató le miró con los brazos cruzados.

―¿Qué quieres?―se notaba molesta.

―¿Podemos hablar...a solas?―miró al chico.

Tn volteó a mirar a Enid quien asintió. Salió por la puerta, se quedaría afuera, esperando por si algo pasaba, esperaba que no. Permaneció en la pared, cruzado de brazos y esperando.

Dentro de la habitación, Ajax se acercó con calma.

―Me gustaría pedirte...una segunda oportunidad―dijo sorprendiendo a la chica―sé qué sido...he actuado mal pero te quiero Enid.

―Lo siento Ajax...pero no, ya tomé esa decisión.

El joven se molestó un poco ante la negativa.

―¿Es por él verdad?―preguntó enfadado.

―¿De qué hablas?―extrañada, Enid no entendía.

―¿Crees que no hay rumores circulando de vuestra relación?, ¿acaso por las noches no...?―ella le arreó un bofetón.

Enid estaba cabreada y casi llorando.

―¡Si crees que soy esa clase de chica es que no me conoces nada!―le dio un par de golpes en el pecho―¡ahora largo, no quiero verte en mi vida!.

La joven se lo dijo varias veces y finalmente el chico se largó muy cabreado dando un fuerte portazo. Enid acabó de rodillas, llorando como una niña pequeña cuando vio entrar a Tn. Él se aproximó, se agachó para cargarla estilo princesa hasta llevarla a la cama donde la tumbó.

―Por favor―dijo ella―abrázame como lo hace un amigo.

―Somos amigos...mi señora―la rodeó con los brazos hasta que la joven se desahogó.

―Gracias―susurró ella triste.

Las cosas habían cambiado mucho para ella, su vida dio un gran cambio en todos los aspectos y estaba abrumada por todo. Al quitarse de su abrazo, le dio un pequeño beso en la mejilla.

―Lamento que hayas tenido que ver esto―dijo―y consolarme.

―Para eso estamos los amigos...señorita Sinclair―comentó el joven mirándola a los ojos.

―Tn...¿de verdad somos amigos?

―Claro, todos los mayordomos somos amigos de nuestros señores y señoras, pero eso no quita que hay límites que no se deben pasar. Yo escucharé, atenderé y haré todo lo que usted me pida.

―¿Y qué límites son esos?

―Por ejemplo enamorarse

―Eso no es justo...todo el mundo merece ser amado

―Sí, pero debemos separar amor y trabajo...señorita Sinclair.

Después de eso, Enid se dio una ducha para calmarse. Afuera, cuando iba a salir, resbaló golpeando el grifo, salió el agua mojando a Tn por completo. Por suerte, ambos estaban bien.

El chico se quedó en calzoncillos ante el rubor de ella quien no apartaba la mirada de todo su cuerpo, sobretodo cierta parte pues era la primera vez que estaba así con un chico.

―Señorita Sinclair...debo secarla―dijo este serio.

―Oh...claro.

El estar desnuda delante de él era muy vergonzoso, pero la parte más extraña era cuando tocaba ciertas zonas con la toalla provocando que tuviera qué apretar los dientes para no dejar escapar ningún sonido. Incluso se aferraba a sus hombros para no caerse porque perdía fuerzas.

Después de eso, se vistió y se tumbó en la cama. Tn se dio una ducha para no resfriarse.

―No pueden enamorarse...―pensaba ella recordando la conversación.

A la chica le dolía un poco eso, era muy sentimental y se preocupaba muchas veces más por los demás que por ella misma, lo daba todo. Y con Tn la cosa no era diferente. El joven salió vestido con todo menos la camisa, dejando su pecho al aire. Al verlo, Enid se sonrojo un poco recordando haber estado ahí.

―¿Necesita algo mi señora?―ella negó―entiendo, cualquier cosa por favor dígala.

Esa noche, cuando Cosa, Miércoles y Tn dormían, la joven no dejaba de pensar en la misma escena una y otra vez. Se sentía acolarada, sobretodo porque tenía los pensamientos del baño, podía sentir sus manos por todo su cuerpo y eso la hizo ponerse roja.

Se fue al baño a refrescarse, eso no le había pasado nunca. Cuando terminó, vio a Tn entrar.

―¿Se encuentra bien?―estaba muy preocupado.

Ella asintió y el joven suspiró de alivio. Aunque era su deber, a Enid le ganaba eso, que se preocupasen por ella. Luego, regresaron a dormir.

Los primeros sentimientos...comenzaron a salir a flote...

Continuará...

Espero que les haya gustado.

Un saludo :D

PD: Si tienen ideas no duden en decirlas.

Está historia será más corta que la de Miércoles. También lamento si va más lenta en cuanto a romance y eso, pero no quiero apresurar demasiado las cosas, quiero que se vea un poco el desarrollo de los personajes.