Capítulo XIII.

"Almas en resonancia" esa era una de las frases que más le llamaban la atención de su canción favorita y hasta ahora es que sentía que podía usarlas con la propiedad debida.

Al hablar de resonancia científicamente hablando puede entenderse de dos formas: la primera es que se trata de amplificar y prolongar un sonido por repercusiones reiteradas veces.

La segunda era la que le parecía mas adecuada para la ocasión: vibrar un "x" que recibe impulsos de la misma frecuencia o múltiplos de ella.

Y "alma" es una entidad inmaterial que poseen los seres vivos.

Por lo que al juntarlo podría resumirlo en que la resonancia de almas se refiere a: un par de almas que resuenan entre si, apoyándose y multiplicando su valor.

Eso para el ya sonaba demasiado cursi pero al final era lo que le sucedía en esos momentos.

Cuando era joven la verdad su vida le valía un comino, como todo adolescente había tenido su etapa rebelde y la suya consistió en ir en contra de todo lo que sus padres le enseñaron y se volvió metalero de corazón.

Gracias al cielo había conseguido buenos amigos y por ello su vida no se fue por el drenaje, incluso la banda le ayudo a reencontrarse a si mismo y pudo tomar el rumbo de su vida.

Y ahora sus amigos volvían a meterle en un conflicto interno. Claro que ansiaba volver a tocar con ellos pero... Los niños no eran lo suyo.

Y menos aquella niña castaña tan inquieta que se le había apegado inmediatamente.

En esos momentos es que comprendió el término de "Resonancia de almas" y es que simplemente había caído.

No creía en las maldiciones es decir eso no era científico pero quizás debería empezar a respetar a la "Maldición Shouto" puesto que ya también se había contagiado.

Pero Ochako era demasiado compatible con el, tal vez pelearan cada 5 minutos por cosas sin importancia o se molestaban entre ellos pero debía admitir que parecían una pareja de casados mas que enemigos.

Ochako Uraraka era su "resonancia de almas" mejor conocida como "alma gemela" y era lo bastante maduro para aceptar que había sido un "clic" instantáneo.

Por ello ahora Vienes a un día y horas de comenzar el concierto sin contra parte se sentaba con la castaña.

Todo resultó de la manera mas normal posible, incluso su... ¿confesión? Pues claramente le había dicho a la niña que era su alma gemela y esta con una sonrisa le respondió que se había dado cuenta bastante tarde pues para la niña fue obvio desde que lo vio.

Por el momento solo serían ¿amigos? Pero en un futuro, cuando la legalidad se lo permitiese, iría a por ella y pediría su mano formalmente, bueno es que estaba chapado a la antigua y por eso no se molestaba en tratar de llamar su atención desde ese momento como Kirishima.

— Oye Iida, saldré al súper con Kirishima, nos llevamos a Bakugo mientras habla con los demás para que organicen las canciones que tocaremos mañana — Todoroki le tendió una libreta y pluma y tras cargar al rubio y casi arrastrar al pelirrojo los tres se fueron.

Sabía que se tardarían por lo que no se molesto en hacerlo inmediatamente prefirió charlas con la cachetona quien le pregunto de su vida.

Bueno muy interesante no era : era hijo de una familia acomodada y sus padres tenían un negocio de software pero su hermano mayor lo heredaría por lo que no se preocupaba.

La niña incluso pareció un poco decepcionada de lo "ordinaria" que era su vida hasta que menciono lo ultimo: acababa de regresar de Roma, y estudiaba mucho para entrar  a la mejor universidad de robótica del país y con suerte podría conseguir una beca para estar unos años en México, país en el que estaba interesado por sus recientes avances en robótica.

Cuando lo mencionó
los ojos de la castaña de inundaron de lágrimas pero no dijo nada, tardo casi 20 minutos en convencerla de contarle que ocurría.

Resulta que ella en realidad no era una "Uraraka" en forma si no que cuando era joven su madre se embarazo y su padre la abandonó, antes de que naciera su madre conoció a su padre actual, el señor Uraraka y este la amo desde el inició como  su hija.

— ¿Tu también vas a abandonar me como mi padre? ¿No te quedaras conmigo? —

Bien eso si le rompió el corazón.

— Mira Uraraka-san— Dijo mientras se ponía a su altura y le tomaba las mejillas — Si yo me voy es que para cuando vuelva pueda darte la vida que te mereces primero volver por ti— dijo solemne y la niña sonrió aceptando.

Luego de eso empezó a apuntar las canciones que pidió su amigo y no se sorprendió al ver que todos pedían una en específico.

¿Porque no hacer lo mismo?

Canción 5: Resonance - T.M Revolution.