Marinette March 2022

"El Maletín de Marinette"

26. Bien Jugado

"Sé que el amor es una cosa tan divertida, un encanto misterioso, tengo que llegar a conocerte más"

Marinette tuvo una semana, bastante peculiar, Adrien había vuelto a sentarse con ella, a mirarla y podía notar en él, un brillo tan especial, que su corazón se aceleraba con solo observarlo.

Se encontró varias veces observándolo de más, así, como antiguamente solía hacerlo, pero no podía. No, ya no, ahora que había soltado todo lo que sentía por su compañero de batalla, no podía volver al mismo ruedo de antes.

¡Marinette, por todos los cielos, enfócate!

Se regañaba una y otra vez, hasta ese jueves en la noche en donde tuvo que ver que llevaba para su cita con el superhéroe. Su antifaz estaba listo, la temática eran colores fríos este año, así que llevaba una máscara azul con detalles en morado.

Estaba tan nerviosa de poder compartir con él, en forma civil, poder saber como son sus facciones reales, su voz, su cabello...

Sonrió imaginándose todo lo que podía pasar, mientras, finalmente, Tikki le señaló un par de prendas que habían separado con los kwamis, ordenándoselas como si estuvieran puesta sobre un maniquí.

—¿Qué tal éste? —preguntó el Kwami de la creación, a lo que Marinette afirmó.

—Me encanta, gracias, chicos.

...

A comparación de su contraparte, Marinette no se caracteriza por tener una muy buena puntualidad, aún así, puso lo mejor de si misma para estar puntualmente en el puente de las Artes a las 10 de la mañana.

Se había colocado una blusa morada atada al cuello de mangas anchas y acampanadas junto con un jean azul oscuro, combinando muy bien con su antifaz.

Cuando se detuvo en la entrada del puente, aspiró profundamente antes de subir. Había varias personas, pero pudo notar como una mata de cabellos rubios iba y venía, como si estuviera nervioso.

Ladeo su sonrisa tomándose el tiempo de admirarlo.

Tenía un antifaz verde, del mismo color que sus pantalones, llevaba una camisa azul marino que le quedaba perfecta, como si fuera hecha a medida y su cabello rubio lucía tan desordenado como cuando estaba transformado.

Aspirando profundamente, se acercó y lo saludó, él inmediatamente se sobresaltó, antes de acomodarse el antifaz y darle una leve reverencia, para saludarla.

—Buenos días, M' lady —la saludó.

—Buenos días, M' lord —lo saludó de igual manera, haciéndole una leve reverencia.

Ambos se miraron sin poder aguantar la risa que brotó en su garganta.

—¿Preparada para este día? —preguntó Chat Noir, ofreciéndole el brazo. Ella negó con honestidad.

—No, pero vamos —dijo, extendiendo su mano derecha hacia al frente mientras se tomaba de él con la mano izquierda.

...

Marinette estaba encantada. Conocer al chico tras la máscara, aunque tuviera una puesta, estaba siendo una de las mejores experiencias de su vida. Su corazón estaba al límite, la mayoría del tiempo. Era tan divertido, elocuente y siempre sabía que decir en cada momento.

Pero algo se sentía fuera de lugar, pero no lograba saber a que se debía eso.

—¿Marinette? —le preguntó, indicándole uno pequeño restaurante a un costado de la calle— ¿Quieres comer algo? —la chica afirmó y se apartaron de la lluvia de colores, dejando atrás el ruido de las personas que desfilaban.

Entraron al restaurante, y tras pedir algo para comer, Chat Noir pidió permiso para ir al baño. Marinette se quitó el antifaz y suspiró, ¿Qué era lo que la inquietaba?

Mientras más pasaba el tiempo con Chat Noir, más sentía que lo conocía. Éste volvió del baño con unos estrafalarios lentes de sol y una gorra que cubría sus cabellos.

—Sigo estando de incognito —dijo, elevando sus manos antes de que ella le dijera algo. Y fue ahí cuando lo observó, el brillante anillo plateado que tenía en su mano derecha, lugar donde debería estar su miraculous.

—Así que es plateado —comentó con curiosidad, más para ella que para él, pero éste alcanzó a oírla.

—¿Plateado?

—Tu anillo —dijo, sin pensar mucho lo que decía—. Conmigo es color oro rosa.

—Claramente, ese color va muy bien contigo —respondió, observando la carta para pedir algo que pudieran almorzar.

Y aunque la charla surgió rápidamente mientras comían, hablando de sus cosas triviales, Marinette no podía quitar su vista del anillo de su mano derecha, ¿Por qué le resultaba tan familiar? ¿Por qué sentía que estaba muy acostumbrada a verlo?

Sacudió la cabeza para salir de sus pensamientos.

Terminaron de comer, y a la hora de pedir la cuenta, él se ofreció a pagar, pero fue hasta la caja a realizar el pago, quizás para que ella no viera el nombre en la tarjeta y pudiera identificarlo.

Por un lado, le gustaba que fuera tan cuidadoso de esos detalles, pero a la vez la llenaban de una insana curiosidad.

—¿Nos vamos? —le dijo, regresando extendiéndole la mano, Marinette miró la mano y luego al chico, antes de tomarla.

Compartieron el resto de la tarde, recorriendo distintas partes del carnaval, siempre tomados de la mano.

Cuando ya no les quedó que más recorrer, y tras tomar un helado, lejos de André, éste la acompañó hasta la panadería.

—Pase un día encantador —dijo Marinette con una sonrisa.

—Yo he pasado uno de los mejores días de mi vida —le contó, tomándole la mano para darle un beso en los nudillos—. Gracias por esto, M' lady.

Ésta se miró la mano que había sido besada y le extendió el puño hacia él. Chat lo comprendió, inmediatamente, chocando su puño con el de ella.

—¡Bien jugado! —se dijeron.

Luego, cada uno se despidió con un gesto de su mano. Marinette entró a la panadería, sorprendiendo a sus padres por la brusquedad de su movimiento.

—¿Estás bien, hija? —preguntó Sabine.

—¡Perfecta! —respondió, elevando sus brazos—. ¡Voy a ir a bañarme y a arreglar las cosas para mi trabajo, me llaman para la cena!

Marinette le dio un beso a cada uno y subió las escaleras con mucha prisa. Tenía muchas cosas que procesar.

.

.

.

.

Tic Tac, Tic Tac...

¿Cuánto tiempo le quedará a Chat Noir?

.

¡Muchas Gracias por leer!

.

Aquatic~

26 de Marzo 2022