Capitulo 8: Una Explicación A Lo Sucedido

Las posibilidades de lo que pudo pasarle anoche en esta habitación con las chicas se dispararon en su mente, buscando un posible resultado viable sin embargo sus pensamientos llevaban a lo mismo. De la forma más extraña posible y sin tener un recuerdo de lo sucedido hizo que pensar en una posibilidad de haber tenido sexo o un momento erotico con las tres chicas durmientes en la cama que parecían por momentos satisfechas. Algo que solo vio cuando paso todo ese fin de semana con Yumiko y Mizuki cuando descansaban o relajaban despues de algunas horas, esa misma expresión estaba en el rostro del trío de chicas en su cama qué parecían por el momento no querer despertar de su sueño.

"Esto realmente es extraño, jamás me imagine a mi mismo despertando con la dupla más popular de la Academia, que incluye a este mujer que no conozco de nada pero me resulta familiar" — Pensó Issei extrañado mientras recostaba con resignación su cabeza en la almohada.

Realmente no recordaba nada pero por alguna razón entendía que el acto de el teniendo sexo con ellas no sucedió, sino que había una razón mas por la que las tres se encontraban de esa manera en la cama con el durmiendo tranquilamente con rostros satisfechos. Pero mientras a él le parecía extraño que esto pasara en su mente la memoria eidetica que había deseado comenzó a activarse, dejando a la vista recuerdos incompletos de todos los sucesos que lo llevaron a esto.

"Había olvidado que ahora tengo este tipo de memoria" — Pensó Issei antes de cerrar los ojos lentamente.

Concentrando su mente en los recuerdos incompletos que tenía, causados por sus constantes perdidas de conciencia en su mente a causa de los retumbares, por lo que concentrando más su mente llego a sumergirse aún más en los recuerdos de la noche anterior.

Lo primero que podía ver dentro de los recuerdos incompletos, era el cielo, sus ojos parecían no poder enfocarse en las lejanías pero si en lo que estaba cerca y antes de perderse por completo dentro de la inconsciencia logró observar a las dos One-samas y la mujer durmiente en su pecho discutiendo con dos personas más, quienes para su sorpresa dejaron aparecer algunas alas sobre su espalda.

Mismas que los impulsaron alejandolos del suelo para luego alejarse volando de ese lugar, ver eso en sus recuerdos dejo totalmente sorprendido a Issei que con incredulidad trato de negar eso con una alucinación suya, pero lo que le siguió a eso fue un enorme Círculo de diferentes símbolos de color rojo qué cambió todos los alrededores en un instante. Ya no se encontraban al aire libre como antes, al contrario ahora parecían estar en algún lugar con aspecto rústico como si este se tratara de un viejo edificio, sin embargo dejo de concentrarse en sus alrededores cuando noto que su vista se movía de un lado a otro rumbo a unas escaleras qué a simple vista parecían llevarlo al segundo piso del lugar.

Pero antes de continuar su mirada de un segundo a otro se oscureció, volviendo a aclararse cuando estaba acostado en esa misma cama en la que estaba ahora y de manera extraña para el podía ver al duo de One-samas hablando de algo con esa mujer en su pecho. Que como ellas ya se encontraba sobre la cama diciendo algo importante al dúo de chicas, que de una misma manera parecían decir algo de la situación, no podía escuchar nada pero podía entender que el era el tema de la conversación que tenían.

"Maldición, no logro oír nada más que balbuceos" — Pensó Issei mientras antes de notar como algo rojizo comenzaba al segundo siguiente a rodearlo.

No sabía que era pero con solo ver como las tres se sorprendían al verlo supo que se trataba de algo malo, pero justo antes de que ellas hicieran algo su mirada una vez más volvió a oscurecerse dejándo un conjunto de recuerdos fragmentados. En los que podía ver por segundos como las tres, parecían estar absorbiendo aquello Carmesí que salia de el con sus manos al tocar su pecho, ambas One-samas aún se mantenían a sus costados y esa mujer ya se encontraba sentada sobre sus piernas absorbiendo más de esa cosa roja que la dupla de one-samas.

Volviendo a oscurecer su mirada por un par de segundos, el siguiente fragmento dejó al castaño sorprendido al ver que a pesar de haber solo sido unos segundos desde su perspectiva, ahora podía verle el bracier al trío de chicas. Rías y Akeno por alguna razón tenían abiertas en sus totalidad sus camisas, mostrandole a el los colores que tenia su ropa interior, y esa mujer tampoco era la excepción en eso, Rías tenía un bracier de color café con un diseño similar al de las flores o rosas, Akeno tenía un bracier rosa que tenia encajes en su diseño y la mujer en sus piernas tenía un bracier de un color negro bastante erotico para Issei qué en verdad aprecio poder ver tal paisaje aún cuando era un recuerdo.

Sin embargo mientras veía los pechos de las tres, noto como parecían estar de una forma bastante preocupadas aunque con sus rostros ya sonrojados y respiraciónes jadeantes sus preocupaciones parecían a su parecer importantes aunque no podía oír todavía lo que decían, pero justo en el instante que sintió como su mente iba de nuevo a perderse en la inconsciencia fue capaz de ver como el trío de mujeres sin esperarlo comenzaban a quitarse de una forma rápida sus prendas superiores en el que solo alcanzó a divisar el momento que comenzaban a quitarse el bracier.

Después de eso su memoria se volvió de nuevo a la oscuridad, que a diferencia o comparación de las otras tardo más que unos segundos en la oscuridad, hasta el punto en el que solo alzanzo a oír algún sonido bastante extraño que el ya había oído varias veces dejándolo totalmente sorprendido ante la posibilidad de que en verdad tuvo sexo con las tres en las horas que tardo inconsciente. Pero sus pensamientos cambiaron un poco en el momento que su mente regreso por un par de segundos a la luz de nuevo, solo para ver algo que no esperaba.

Cuando recupero parcialmente parte de su conciencia pudo ver que al menos en lo que parecía todas estaban desnudas a su alrededor, haciendo algo que sin una menor duda lo hizo tragar saliva ante lo estimulante que era, podría ver a Akeno a su costado sosteniendo su brazo entre sus pechos mientras sus dedos eran con cierto acto erotico lamidos por ella casi como si lo que tuviera en su boca fuera su miembro, Rías estaba casi sobre el y como Akeno lamia de un modo que era bastante erotico su pecho con una gran sensualidad qué realmente le dejaba en verdad hipnotizado al ver como pasaba su lengua sobre su pecho marcado para ir subiendo hasta su cuello donde era al instante lamido  mientras los pechos de la pelirroja se aplastaban contra el con demasiado entusiasmo.

Y cuando se alejaba parcialmente de su cuello y pecho podía notar que su brazo izquierdo estaba de un mismo modo en sus pechos, justo como lo tenía Akeno a quien podía ver parcialmente debido al cabello de la pelirroja que cubría de un modo bastante amplio su vista. Que solo fue capaz de ver parcialmente como esa mujer sobre sus piernas, estaba igual de sonrojada qué las dos One-samas pero a diferencia de ellas dos, ella se movía del mismo modo sugerente qué había visto en todo el fin de semana, ese mismo tipo de movimiento qué se asemejaba a que ella misma estaba autopenetrandose en ese momento con su miembro que ahora de verdad desconocía si era realmente así o solo estaba frotándose contra el en esa posición.

Ver todo esto dejo anodadado a Issei que hasta ese punto se percato al fin sobre el humo, o mejor dicho sobre el aura roja a su alrededor que ahora llenaba toda esa habitación en su totalidad. Y esta aura al parecer se movía de un modo bastante o realmente extraño al salir para volver de un modo normal entrar a su cuerpo, qué a diferencia de antes parecía sentirse en verdad normal e incluso mejor pero no ignoro que de toda esa aura que estaba rodenadolo, estaba siendo absorbido y asimilado dentro del cuerpo de las tres chicas que parecían no ser capaces de pensar correctamente pero aún tenían cierto grado de lucides en sus mentes.

"Entonces el que actúen así debe de ser a causa de esa aura qué sale de mi... Sino recuerdo mal, logre oír por un momento que mi Sacred Gear esta por despertar y de no recibir ayuda iba a morir" — Pensó Issei mientras el recuerdo volvía de una nueva cuenta a ponerse oscuro. — "Sigo sin saber que es una Sacred Gear, pero al menos puedo decir que ellas me salvaron aunque no esperaron terminar dentro de este resultado que no me desagrada pero podría ser lo contrario en ellas".

Con ese pensamiento Issei volvió a abrir los ojos nuevamente, notando así que la luz de la habitación ya era más fuerte al filtrarse entre las cortinas de la ventana, sin embargo su atención se fue hacia su pecho rápidamente y eso fue debido a la mirada curiosa de la mujer aun sobre su pecho qué parecía ya haber despertado.

— ¿Como te sientes? — Pregunto Suzune mientras Issei parpadeaba unas veces.

— Bien, supongo... — Respondió Issei al ver mirada tranquila de la mujer.

— Me alegro, vaya que nos causaste un par de problemas ¿Sabes? Pero todo se soluciono al final así que esta bien, sin dudas eres afortunado — Dijo Suzune mientras se levantaba.

Quedando sentada sobre Issei quien no pudo evitar sorprenderse, debido a que al haberse levantado dejo una vez más su cuerpo desnudo expuesto al castaño que fue capaz de apreciar totalmente todo el físico de la mujer que ante eso simplemente sonrió ligeramente para acercarse nuevamente al castaño. Que sin poder esperarlo sintió los labios de esa mujer sobre su frente, uno que no duró mucho antes de alejarse de él de nuevo para luego salir de la cama.

Todo bajo la atenta vista de Issei que sin la menor duda admitió honestamente el hecho de que el cuerpo de esa mujer, no perdía ante los cuerpos de Yumiko como el de Mizuki qué podían considerarse de una gran calidad sin la menor duda. Por el simple hecho de que  al ver como ella se alejaba tuvo la perfecta vista de como era su trasero qué fácilmente podía ser capaz de competir con sus "Esposas" en varios aspectos así como en otros que le fascinaron bastante al verla de pie en la habitación mientras se ponía una bata.

— Me llamo Suzune por cierto, Suzune Dehart — Dijo con una suave sonrisa la mujer mientras lo veía y terminaba de ponerse la bata.

Dejando sorprendido a Issei al ver que a pasar de vestir algo simple no le restaba nada a esa belleza natural que poseía la mujer, por lo que levantándose así como sentándose en la cama respondió con un mismo gesto sonriente.

— Es un placer, yo me llamo Hyoudou Issei — Respondió mientras usaba una parte de la manta para poder cubrirse con algo de vergüenza.

— Ufufu~ no necesitas hacer eso, ya lo e visto durante la noche y muy de cerca la verdad — Dijo Suzune sorprendiendo al castaño que la observo. — Debo admitir que no esperaba ver algo tan varonil en un chico de tu edad~.

— ¿D-De verdad...? — Respondió Issei al sentirse algo avergonzado. — Bueno, tu te cubriste así que asumi que era mejor si lo hacía también.

— Entonces... ¿Quieres que siga estando desnuda frente a ti? — Pregunto Suzune mientras comenzaba a deshacer el nudo de su bata. — No me molesta ¿Sabes? Ya me viste desnuda antes, y puedes volver a verme de esa forma si así lo deseas.

— ¿Eh? — Respondio únicamente Issei al ver como Suzune deshacía el nudo de su bata, para luego quitárselo lentamente.

Mostrandole su cuerpo desnundo una vez más a Issei, quien antes de poderle decir algo al respecto observo con gran sorpresa como Suzune volvía a meterse en la cama justo debajo de las sábanas, donde se movió hasta llegar de nuevo a su posición original esa mañana en las piernas de Issei. Quien para este punto estaba completamente sorprendido, no conocía a Suzune y esta era la primera vez que hablaban pero aún con eso ella estaba actuando igual que lo hacían sus
"Esposas" Mizuki y Yumiko en esos tipos de aspecto de querer complacerlo en lo que deseara.

— Eh~ Suzune... — Trato hablar Issei en busca de una respuesta a la situación.

Pero antes de poder hablar bien, Suzune lo beso dejándolo totalmente en shock al sentir como los labios de la mujer iban a cada segundo moviéndose de una forma bastante deseosa sobre sus labios. En un beso qué solo había experimentado en el fin de semana junto con sus "Esposas", lo cual no podía procesar correctamente al ser tan repentino de lo contrario algo en su entrepierna habría despertado por la posición en la que estaban ahora, donde el espacio entre sus sexos era realmente escasa al punto que casi se tocaban.

— ¿Sabes? Yo realmente había perdido las esperanzas de encontrarte... — Dijo Suzune al separar sus labios de Issei el cual seguía tratando de comprender lo que sucedía. — Pero al final estas aquí, yo realmente pude encontrarte...

— ¿Nos conociamos? — Pregunto Issei confundido mientras Suzune sonreía.

— No, pero ambos... No, todas nosotras estábamos destinadas a conocerte, aun cuando creímos qué no aparecerías en nuestras vidas lo hiciste — Dijo Suzune feliz mientras acariciaba el rostro de su "amado" quien aun no entendía nada de lo que sucedía.

Y es que sin saberlo Issei le había robado el papel de ser el "Amante" o "Esposo" de las Pleyades a alguien más, dentro de las muchas posibilidades de sus deseos el de haber deseado "Perder su virginidad con dos mujeres hermosas" fue en verdad un deseo con muchas consecuencias, y esto al haberse efectuado con dos mujeres a quienes no debió tocar y el resultado en esto fue algo más catástrofico del que se pudo haber imaginado. Y es el que título de Pleyades les pertenecía las siete hijas del Titán Atlas y de la oceánide Pléyone, que le había heredado su belleza a todas sus siete hijas y fue a cusa de esta que el cazador Orión se enamoró de todas las Pléyades a quienes persiguió sin cesar.

Por esta razón Diosa Artemisa, quien era la protectora de las Pléyades, para poder protegerlas las convirtió en estrellas con el fin de mantener lejos a Orión de todas ellas. Sin embargo aun con eso este no se rindió y las persiguió sin descanso en los años siguientes Atlas objeto a Zeus y este en respuesta, envió a un Toro a proteger a las Pleyades aunque al final llegó a ser derrotado por Orion con un escudo y un garrote, ante la derrota del Toro qué era el Guardian de las Pleyades se envió del mismo modo a un Escorpión Venenoso.

Mismo que logró completar la tarea que le fue encomendada, proteger a las siete Pleyades de Orion, por eso cuando en el cielo del este aparece la constelación de Scorpius (el escorpión), Orión huye por el oeste y nunca se encuentran. Gracias al escorpión las siete hijas de Atlas por fin huyeron del amor de Orion para así hacerse inmunes a su seducción que al parecer no funcionó de ningún modo y esto era por que las Pléyades reflejaban una actitud de cautela y total rechazo a las tentaciones mundanas, así como la predisposición a seguir un camino de pureza y conocimiento divino.

Esto con claridad molestó a Orion que se mantenía firme en su deseo de poseer en su totalidad a las Pleyades, por esa razón afirmó que el no cesaría su búsqueda del conseguirlas hasta que lo logrará. Ante la obsesión de Orion por las Pleyades, Zeus le propuso una solución y es que en cada docientos años las Pleyades elegirían por decisión propia a siete mujeres para que se volvieran sus avatares, algo que Orion también haría con un hombre entre toda la humanidad.

Este tendría ligado su destino a las siete representantes de las Pleyades, mismas que diferente de las verdaderas iban de manera incondicional a enamorarse del avatar de Orion a quien seguirían hasta el final de sus vidas. Esto para calmar al Cazador Orion que después de pensarlo terminó aceptando la solución de Zeus a quien no le costó mucho convencer a las siete Pleyades que accedieron a esto con la condición de que Orion dejara por un tiempo el perseguirlas cuando ellas por momentos salieran de la bóveda celeste para visitar a la Diosa Artemisa que era sus protectora y a sus padres.

Orion acepto comenzando así el ciclo en el que aparecerian los Siete Avatares de las Siete Pleyades, que debido a su título se terminarían enamorarando sin poder evitarlo del único avatar de Orion. Claro que, al ser los Avatares de seres Divinos obtuvieron algunas habilidades que por obvias razones estaban destinadas para servir y ayudar al Avatar de Orion, en el pasado las Avatares se encontraron con el Avatar de Orion cumpliendo con todo lo que este quisiera, calmando así por el momento la persecución del Cazador Orion.

Esto se había repitido varias veces hasta la actualidad donde Issei sin saberlo, dio ruptura a este ciclo debido a su deseo en el último fin de semana, en la habitación de su amigo donde el castaño deseo algo que traeria sus primeras consecuencias.

"Deseo perder mi virginidad con una o dos mujeres hermosas, y una vez termimos de tener sexo ambas se terminaran enamorando perdidamente de mi que no se opondrán a nada de lo que les pida sin importar que sea"

Ese había sido su deseo, influenciado en parte por lo sucesos con sus amigos, ese deseo le traería varias consecuencias no por tratar de perder su virginidad qué a decir verdad se había restaurado con su físico perfecto al ser un nuevo cuerpo, o que fuera con dos hermosas mujeres. La parte que le traería las consecuencias en el futuro era lo último, que una vez ellos tres terminaran de tener sexo ellas iban a terminar enamorandose perdidamente y absolutamente de él al punto en que no se pondrían a nada de lo que les pidiera, sin importar que fuera.

Esa última era la parte que causaría qué Suzune Dehart se sintiera así con Issei, y es que el deseo se había efectuado sobre dos miembros de las Pleyades esa noche, Matsuda Yumiko y Motohama Mizuki se habían enamorado perdidamente de un chico común. Algo que no pasaría en las circunstancias normales debido a que a las Siete Avatares de Pleyades solo se les permitía enamorarse perdidamente del avatar de Orion, pero gracias a que Issei especifico eso en el Libro De Los Deseos este en consecuencia actuó para poderle cumplir el deseo a Issei.

Al no haber especificado con que tipo de mujer iba a perder su virginidad, debido a las variables de lo Sobrenatural y de lo Divino, El Libro De Los Deseos tomo por hecho que no importaba de que Especie fuera, si se trataba de un Demonio, o un Angel, Angel Caido, Youkai, Valkyria una Diosa incluso, nada de eso importaba en absoluto, por tanto que tuviera el Titulo de Pleyades tampoco importaba mucho. Lo único que importaba para cumplir el deseo era que Issei tuviera sexo con dos hermosas mujeres para poder perder su virginidad y que estas se enamoraran de él perdidamente después de hacerlo por un fin de semana entero en caso de Issei.

Teniendo todo eso en cuenta y que en el momento que pidió el Deseo, Mizuki así como Yumiko se encontraban cerca hizo que automáticamente ellas dos fueran a pesar de ser dos de las siete Pleyades las elegidas para ayudar a Issei a perder su virginidad. De no haber deseado qué se enamoraran perdidamente de el, todos los sucesos de ese fin de semana serian cosa de una sola vez, y jamás se iban en su vida a volver repetir debido al Título Pleyades como sus destinos ligados al avatar de Orion, ya que una vez este se presentará en sus vidas abandonarian todo para estar con el aun si ya habían formado una familia antes o alcanzado un puesto importante.

Pero al haber deseado eso, causó que El Libro De Los Deseos actuara para poder cumplir lo que deseaba el usuario y con el impedimento, de que las Pleyades no podían enamorarse perdidamente de la existencia de un hombre que no fuera el avatar de Orion. El Libro De Los Deseos tomo los siete destinos ligados al Avatar de Orion y los ligo totalmente al destino de Issei a forma de cumplir su deseo, no tomo dos destinos sino todos ellos para poder mantener una fuerte conexión y balance entre ellos.

Rompiendo así el Ciclo de las Avatares de las Pleyades con el Avatar de Orion qué a pesar de existir actualmente, ya no tenia ningúno de los siete destinos ligados a el gracias a Issei que pase a haber vuelto a ser "Virgen" en teoría el deseo todavía se mantenía en pie al haberse cumplido en el pasado y como su deseo de tener una gran resistencia sexual qué supere a los seres del universo que se reactiva cada qué alguien lo supere, su deseo de ser capaz de perder su virginidad con dos hermosas mujeres se reactivo una vez más gracias al físico perfecto.

Este era la primera consecuencia de las muchas que Issei había obtenido por el deseo más simple que pudo pedir, y en este mismo momento comenzaba a ser capaz de entender que usar el Libro de un modo bastante vago como lo uso en todo el transcurso de estos días era un total error, ya que al no ser específico o claro con lo que quería varias cosas se incluían en el deseo.

“Realmente tengo que meditar mejor mis deseos de ahora en adelante o algo como esto podría volver a ocurrir otra vez" — Pensó Issei mientras estaba en otro lugar sentado.

Más especifico en la sala del Club de la pelirroja, Rías Gremory que estaba del mismo modo sentada en los sillones en donde Akeno Himejima también estaba sirviendo el Té para todos ahí. Después de su beso con Suzune y sus palabras a las cuales Issei termino tomando como algo causado por el Libro, Rías y Akeno despertaron de su sueño dando inicio a una explicación que los llevó a esta sala después de que terminaran de vestirse, aunque el lo hizo en otra habitación por obvias razones.

— Bien, supongo que quieres tener una explicación de lo sucedido... — Dijo Rías aun con un notable sonrojo debido a sus recuerdos de la noche anterior.

— B-Bueno yo realmente quisiera saber que fue lo que pasó antes de quedarme inconsciente, recuerdo algunas cosas y no son muy claras por decirlo así... — Dijo Issei tratando de parecer un poco más tranquilo aunque también sentía cierta timidez por lo sucedido.

— Ara~ entonces recuerdas el momento cuando nosotras... — Comento Akeno en un tono y sonrisa bastante coquetos.

— ¡Akeno! — Dijo Rías avergonzada al punto de casi parecerse a su cabello.

— Ara~ Ara~ no deberías avergonzarte Rías, lo que sucedió en la habitación en la noche es algo muy natural entre todo joven de nuestra edad~ — Aclaro Akeno mientras abrazaba a Issei, colocando el brazo izquierdo del chico entre sus dos pechos. — ¿No es así Issei-kun~?

— Opino lo mismo que Himejima-san, a decir verdad lo que paso en la noche en esa habitación es bastante común entre los jóvenes de su edad — Apoyo Suzune al entrar por la puerta vistiendo algo en verdad diferente a lo que tenia antes.

Causando cierta sorpresa en Issei qué no esperaba verla en ese traje sino con esas ropas de Miko qué vestía antes, pero aún así eso no significaba que le quedara mal sino lo contrario, le quedaba bien.

— Ahora podemos comenzar — Dijo con calma Suzune mientras se sentaba justo al lado derecho de Issei quien solo rasco nervioso su mejilla.

— Bien, lo primero en aclarar es que en la noche no tuvimos sexo — Aclaro Rías avergonzada ante lo que Issei asintió ya que presentía eso.

— Ara~ Ara~ aunque casi... — Comento Akeno antes de parar.

— Akeno por favor... — Advirtió Rías un poco avergonzada sacando una sonrisa burlona de la pelinegra. — Bien, ahora para continuar quisiera preguntarte... ¿Crees en lo sobrenatural Hyoudou?.

La pregunta podía parecer algo tonta con los sucesos anteriores pero en si este tipo de pregunta, era para saber si el ya había aceptado lo sucedido anteriormente y en pos a eso podía creer lo que estaban por decirle a continuación.

— Si, realmente lo hago — Respondió el castaño mientras preguntaba algo que a decir verdad había estado rodando por su mente. — Yo... ¿Sigo siendo humano?.

Su pregunta hizo que las tres mujeres se intercambiaran miradas entre sí, dando a entender que podía ser difícil decir lo siguiente a alguien que hasta hace poco había tenido una vida "normal".

— Antes de responder eso, me gustaría decirte que tanto Akeno como yo, en si no somos humanas — Hablo Rías antes de mostrar un par de alas similares a la del murciélago. — Nosotras dos somos Demonios al igual que Koneko Toujou y Kiba Yuuto.

— Ya me lo esperaba de cierta forma, lo de ser Demonios no me lo esperaba, sin embargo lo de no ser humanos ya me lo esperaba — Dijo Issei mientras Rías solo asentía al guardar sus alas al igual que Akeno qué las sacó para validar lo dicho.

— Ya veo, ahora con eso claro debes de saber, que los Demonios están al borde de la extinción por la Guerra entre Las Tres Grandes Facciones Bíblicas — Dijo Rías sorprendiendo a Issei al saber que los Demonios estaban al borde de estar extintos. — Naturalmente no fuimos la única parte afectada, las dos Facciones enemigas también tuvieron bajas entre sus filas pero lo nuestro fue algo grave, debido a que los Demonios tardan una década o incluso un siglo en concebir a un hijo, con una fertilidad de ese tipo y con sus números reducidos era obvio al peligro inminente que se enfrentaban la raza de los Demonios.

— Ciertamente, si la especie tiene en si una baja fertilidad es natural que haya un inminente peligro en desaparecer a falta de nuevos miembros para reparar los daños de la guerra... — Dijo Issei un poco más serio, aunque para si mismo estaba sorprendido por entender todo rápidamente.

— Correcto, con la baja fertilidad y con los Maous perdidos por la Guerra, a los Demonios no les quedó más opción que buscar otra solución — Dijo Rías al usar Magia para hacer aparecer, un Tablero de Ajedrez sobre la mesa de centro. — Y esa fue la creación y la emplementacion de esto, "Las Evil Pices", que tienen una función de formar una Nobleza usando una reencarnarcion como base.

— ¿Reencarnacion? — Pregunto Issei al comprender algo que lo dejo totalmente sorprendido. — Entonces... ¿Puedes usar las Evil Pices para reencarnar a otros en Demonios?.

— Así es, dependiendo de la pieza que se use la persona o ser reencarnado toma la característica de la pieza usada en el... — Explico Rías mientras se sorprendia ante la inteligencia de Issei que según escucho antes no era mucha. — Ahora yo ya use a varias Evil Pices que me entregaron, uno lo use en Akeno, otro en Yuuto y una más en Koneko.

— Comprendo, si me fijo en el tablero es obvio que hacen falta algunas piezas, un Caballero, una Torre, el Alfil y la Reina a quien asumo usaste en Himejima-senpai, Kiba-san, Toujo-chan y alguien más que no está presente aquí — Dijo Issei con lo que Rías estuvo de acuerdo.

— Correcto, una vez usas una Evil Pices esta pasa a formar parte de la persona o ser reencarnado — Añadió Rías entes de detenerse un segundo antes de decir. — Algo que sucedió contigo también.

Ante esas palabras Issei se confundió un instante, antes de entender a lo que Rías se refería con eso al pinto que solo pudo señalarse así mismo sorprendido.

— ¿Soy un Demonio? — Pregunto Issei sorprendido mientras Akeno lo miraba tranquilamente, y Suzune se mantenía en silencio.

— Bueno... Si soy sincera no lo se — Dijo Rías honestamente extrañando a Issei al oír eso. — Como dije una vez se usa una de las piezas para reencarnar a alguien, esta pasa a ser parte de él o ella, y como puedes ver además de las piezas que me mencionaste no me falta ninguna otra.

Ante sus palabras Issei se fijo que en el tablero, además de las piezas faltantes las demás estaban presentes, por tanto no tardo en mostrar confusión debido a las palabras de la pelirroja.

— Entonces... ¿No soy un Demonio? — Pregunto de nuevo Issei mientras Rías volvía a recargarse en el sillón.

— La verdad intente reencarnarte pero por alguna razón no funcionó aun si los ocho peones entraron en ti — Dijo Rías mientras Issei fijaba su atención en los ocho peones sobre el tablero. — Pero... Cuando pasaron al menos diez segundos los ocho Peones se salieron de tu cuerpo.

— ¿Eh? Entonces... — Dijo Issei aun con sorpresa.

— Si, durante diez segundos fuiste parte de mi Nobleza y un Demonio — Explicó Rías mientras Issei se giraba a Akeno, la cual seguía aferrada a su brazo.

— Es verdad, durante diez segundos te convertiste en un Demonio, pero luego dejaste de serlo cuando tu Sacred Gear despertó completamente — Dijo Akeno mientras Issei recordaba algo de todos los fragmentos de sus recuerdos.

— El aura roja... — Dijo Issei mientras el trío de chicas se sorprendía.

— Ara~ Ara~ parece que ya lo recuerdas Issei-kun~ — Dijo Akeno sonrojando por mucho a Rías y sacando una sonrisa casi imperceptible en Suzune.

— Bueno, no todo pero recuerdo un par de cosas de anoche, entre ellas había un tipo de aura roja que me rodeaba... Creo que estaba en toda la habitación sino lo recuerdo mal — Explicó Issei mientras todas se sonrojaban ligeramente.

— Danna-sama, esa aura carmesí de la que hablas fue causada por el poder de las Evil Pices al ser expulsadas, cuando eso sucedió tu aura comenzó de forma extraña a filtrarse al exterior y para no permitir que se extendiera fuera de esa habitación tuvimos que contenerla por precaución en nuestros cuerpos — Dijo Suzune sonrojando a Rías y sacando un rostro coqueto y deseoso en Akeno.

Que como la pelirroja en el otro sillón no tardaron en notar las palabras de Suzune hace un segundo, poniendo al unísono el rostro confundido.

— ¿Danna-sama? — Preguntaron ambas al mismo tiempo.

— Yo tampoco entiendo, así que por el momento solo concentrémonos en una cosa a la vez — Aclaro Issei antes de la siguiente pregunta de las chicas. — En ese caso, si mi aura se filtro después de expulsar las Evil Pices significa que sus acciones de anoche fueron para poder contener la mayor aura posible.

— Así es, naturalmente hubieron unos efectos secundarios al haberlo hecho y por pasar demasiado tiempo dentro de tu aura nos vimos bastante afectadas a decir verdad — Explico Suzune ante el rostro ligeramente extrañado de Issei, qué comprendió un segundo después.

— Te refieres a... — Señaló Issei ante el recuerdo de las tres lamiendo partes de su cuerpo o frotándose contra el.

— Si — Respondió Suzune con calma al igual que feliz. — Puedo asegurarte que esta fue por mucho la primera vez en la que experimentamos la Verdadera aura y poder de un verdadero Alfa ¿O tal vez la de un verdadero y legítimo Rey?.

Sus palabras hicieron que Issei tuviera una sonrisa nerviosa, pero tanto Rías y Akeno pensaron lo mismo que Suzune, cuando estaban en esa habitación con Issei ambas fueron testigos de algo que las dejó sorprendidas. Aún si no llego a consumarse el sexo, los juegos previos así como besos y diferentes roces llenos de erotismo como placer estuvieron en las últimas horas presentes.

Dejando un claro mensaje a ambas que habían experimentado algo increíble, a pesar del resultado entendieron bien lo sucedido. Hyoudou Issei con solo tener unas horas había hecho que ellas sin la menor de las dudas se sintieran como si fueran las parejas del castaño, y de una forma inconsciente ellas lo aceptaron al estar inmersas en eso que diferente del castaño podían recordar todo lo que las tres hicieron y todo lo que sintieron.

Sin embargo los sentimientos causados por la situación, que habían hecho que diferentes dudas sugieran en las chicas con el pasar de las horas aunque fue al menos en Rías, donde las dudas fueron más evidentes al no poder comprender bien los sentimientos que tuvo durante esas horas en donde se sintió llena con un extraño placer lleno de satisfacción qué sobrepasó lo que experimento por mucho en su vida.

Un sentimiento que la abrumo pero a su vez no le disgusto en lo absoluto, todo lo contrario se sintió cómoda al hacerlo de diferentes maneras, y aun si Issei estuvo inconsciente todo el tiempo sabía que de haberlo estado completamente ella ya ni siquiera sería virgen al igual que Akeno, que diferente de ella había quedado más maravillada qué confundida dado que a decir verdad los sentimientos que sintió le habían hecho olvidar el dolor qué iba oculto en su corazón.

— C-Creo que eso es un poco exagerado si lo dices así... — Dijo Issei nervioso sin embargo sintió como Suzune lo tomaba del brazo del mismo modo que Akeno.

— No es una exageración, ya que fue en parte a esa aura que supe que eras tu al que estaba esperando — Dijo Suzune en verdad feliz haciendo que Issei solo por dudas se mantuviera en silencio.

Habían muchas cosas que no entendía a decir verdad, sin embargo si entendía al menos que toda esta situación sugio por su deseo de un Físico Perfecto. El cual ya estaba totalmente completado, ahora no existía imperfecciones en su cuerpo qué a decir verdad considerarse como uno al que el mundo o el universo jamás iba en su larga vida a ver en existencia.

— C-Comprendo... Aún así eso significa que sigo siendo un Humano ¿No? — Le cuestiono Issei a Rías quien parecía un tanto dudosa de responder.

— Bueno, esa es la parte complicada en si también — Menciono Rías mientras a Issei le extrañaban esas palabras. — No se por que sucedió eso, o que fue lo que detono el cambio pero técnicamente ya no eres un Humano, eres un Dragón en un 100% al punto que te podrías llegar en parte a considerar como un Sangre Pura de la especie.

— ¿Ehh? ¿Un Dragón? Dices que yo deje de ser Humano para convertirme en un Dragón, ¿Correcto? — Cuestiono Issei de verdad incrédulo por eso.

— Ya lo había dicho, no se que detonó el cambio de especie pero ahora ya no eres un Humano, ahora eres un Dragón — Se limito a decir Rías mientras Issei solo no parecía comprender por que decía eso a pesar de saber lo sobrenatural. — En un principio creímos que eso era a causa de tu Sacred Gear pero el Boosted Gear esta clasificado como Longuinus, una que no trasforma la especie de su usuario en un Dragon mucho antes de si quiera haber despertado.

— Es por eso que creemos que hubo otro detonante para eso — Agrego Suzune del mismo modo. — ¿Sucedió algo que antes de que te comenzarás a sentir mal?.

— Siendo sincero no tengo idea... — Dijo Issei sinceramente. — "Sin embargo creo que el verdadero responsable de esto, fue el Libro de Los Deseos o no tendría nada de sentido que esto pasara".

Pensó aun confundido por la situación a la que realmente no entendía nada, esto por lo repentino del asunto en el que sin saber nada le habían soltado demasiada información sin la oportunidad de poder procesarla correctamente.

— Muy bien, entonces resumiendo todo lo sucedió hasta ahora es que mi Sacred Gear despertó, lo que causó que casi me muriera sino fuera por sus ayuda — Dijo Issei mientras Rías asentía.

— De no haberlo hecho probablemente habrías tardado más en despertarla, sin embargo el riesgo de no soportar todo y morir era alto — Aclaro Rías mientras a Issei se le daba por asentir.

— Bien, en ese caso el que usaras una de las Evil Pices, en este caso los Peones fue para ayudarme a despertar sin riesgos la Sacred Gear — Continuo Issei recibiendo otro asentimiento de Rías. — Pero en ese momento cuando lo hiciste el tiempo del despertar de mi Sacred Gear se acortó, y conscecuentemente mi cuerpo expulsó a los Ocho Peones de mi interior, lo que de manera automática causó que saliera un Aura Roja de mi cuerpo qué ustedes tres se vieron obligadas a detener causando una situación bastante... Extraña en uno que otro sentido.

— Así es — Afirmó Rías sonrojada.

— Aunque siendo sincera me gustó todo lo sucedido~ — Admitió Akeno a su lado con una sonrisa.

— Digo lo mismo — Secundo Suzune con el mismo sentimiento amoroso que tenia desde hace más de una hora.

— Ejem~ Entonces en conclusión, perdí toda mi humanidad, desperté mi Sacred Gear, fui un Demonio por diez segundos, mi aura se descontrolo causando toda la situación para controlarla y ahora tengo que asimilar todo más otras cosas que al momento creo aun no me han dicho por todo lo sucedido... — Explico Issei ante la pelirroja que asintió a sus palabras. — A decir verdad creo que me volví loco pero aún recuerdo varias cosas de las que sin duda no puedo negar que me sucedieron por tanto solo me queda aceptar todos y cada uno de los sucesos.

Comento el castaño mientras se dejaba al instante caer sobre el sofá bajo la mirada de las tres, que entendían bien que todos los sucesos ocurridos en la noche habían sido sorprendentes para alguien que era totalmente un principiante en todo esto, así que asimilar todo no sería fácil hasta pasados unos días. Pero contrario a toda su lógica de pensamientos, Issei ya había aceptado lo sucedido como algo real por el simple hecho de que ya había visto el poder del Libro De Los Deseos y el podía aunalar lo sucedido con un solo deseo al instante, sin embargo esto estaba errado totalmente por una sencilla razón por la existencia de dos reglas.

1.- Cualquier deseo escrito dentro de las páginas de este libro se hará realidad, y mientras no entre en conflicto con una de las reglas el deseo se cumplirá.

5.- Si un deseo entra en conflicto con otro, el deseo anteriormente escrito, sera anulado pasado los cuarenta y ocho segundos.

La existencia de estas dos reglas dentro del Libro de los Deseos hacia imposible que Issei anulara lo sucedido, ya que lo sucedido en si se debían a sus deseos al haberse cumplidos. Por tanto si llegaba en algún momento a Desear que todo a su alrededor regresara a la normalidad ya fuera con el tema de las Pleyades con sus destinos ligados al suyo o recuperar su humanidad ninguno iba a funcionar gracias a que entraban en conflicto con sus anteriores deseos.

La única forma en la que podría arreglar algo de lo sucedido, era usando la cuarta regla del Libro De Los Deseos para editar el deseo añadiendo o removiendo algo al tener el ligero lapso de tiempo.  

4.- Alterar o reescribir un deseo que se haya escrito con anterioridad solo será posible hasta que pasen ciento noventa y dos horas, una vez transcurrido todo ese tiempo, solo dispondrá de cuarenta segundos para editar el deseo, una vez transcurrido ese tiempo editar el deseo sera imposible.

Sin embargo esto no era algo que Issei en si tuviera en cuenta por el momento, con lo sucedido tenia el pensamiento de estar en esa situación por al menos unos días a forma de experimentar algo nuevo sin la preocupación de que esto iba a ser en lo que restaba del tiempo permanente.

— ¿Entonces que sigue ahora que paso todo esto? — Pregunto Issei mientras se limitaba a ver al trío de chicas. — Dudo que no hayan consecuencias.

— Realmente eres diferente a todos los rumores que dicen de ti — Alago Rías a Issei mientras tomaba su taza de Té del pequeño plato en su mano. — Tienes el pensamiento correcto, todo esto trajo a decir verdad varias consecuencias.

— Ya me lo esperaba, ¿Son malas? — Dijo casi resignado Issei mientras veía a Rias beber de su Te.

— Algunas lo son, otras... Son un tanto complicadas — Explico Rías mientras dejaba la taza y en plato en la mesa. — Lo primero que debes de saber es que tus poderes aun son un poco inestables, no en un aspecto volátil o algo asi.

— ¿Pero...? — Pregunto Issei mientras notaba un ligero nerviosismo en Rías.

— Pero al estar de algún modo inestable tu aura sigue filtrandose de tu cuerpo en estos momentos, sino es por que ellas te están abrazando ahora el aura roja ya se  podría notar ligeramente — Dijo Rías de forma seria. — Tienes que aprender con rapidez a controlar tu aura, o harás que alguien haga lo mismo que sucedió en la habitación, solo que mas descontrolado.

— Algo malo considerando que estoy en una Academia en donde hay más chicas que chicos — Admitió Issei recibiendo a modo de respuesta un asentir.

— Por eso nosotras te ayudaremos para mantener tranquila tu aura hasta que lo puedas hacer por ti mismo — Dijo Akeno con una sonrisa coqueta con la que dio a entender a Issei lo que debían hacer para controlar su aura.

— C-Comprendo... ¿Hay algo más? Con lo que dijiste antes asumo que hay más que solo eso — Señaló Issei recibiendo ahora un ligero movimiento a su lado.

— Ademas de tu aura, debes aprender a controlar tus nuevos poderes, ahora que tu Sacred Gear desperto debes aprender a usar sus habilidades — Dijo Suzune en cierto tono serio. — Hay muchos que no se sentirán contentos cuando se enteren qué el Sekiryuutei a despertado.

— ¿Sekiryuutei? — Pregunto Issei antes de recordar las palabras de Rías. — ¿Te refieres a lo que Gremory-Senpai llamo Longuinus antes no? El Boosted Gear.

— Así es, el Boosted Gear le otorga a su usuario el Titulo del Sekiryuutei debido al Dragon sellado dentro — Explico con calma Suzune mientras acariciaba de la misma manera la mano izquierda de su ya "amado". — Uno de los dos Dragones Celestiales, también llamado el Dragon Rojo de la Dominación... Ddraig.

Nombro Suzune el nombre del Dragón a Issei, quien ante la noticia de que dentro de su brazo estaba sellado un Dragón se sorprendió enormemente. Mientras a lo lejos, pero relativamente cerca del Viejo Edificio Escolar donde Issei estaba, en el Nuevo Edificio Escolar la campana sonó marcando el inicio de las clases como de costumbre, aunque en el grupo de Issei la mayoría veían hacia su pupitre vacío con cierta curiosidad.

— ¿Volverá a llegar tarde? — Pregunto Aika al dúo de chicos que eran amigos del castaño.

— No me preguntes, ayer le mande un mensaje antes de dormir pero el no me respondió — Comentó Motohama antes de ajustarse los lentes.

— A estado actuando raro, más con lo de ayer — Añadió Matsuda mientras veía al frente con un rostro tranquilo. — ¿Habrá hecho trampa de verdad?.

— Si de verdad hizo trampa ayer, con lo estricta que es Chabashira-Sensei no me cabe duda de que lo hayan suspendido o castigado por eso — Dijo Motohama ante lo que la mayoría que logró oír eso tuvo que asentir.

— ¡Hum~! Espero que lo suspendieran o castigarán, así nos libraremos de uno de los tres pervertidos — Dijo Murayama al frente de Aika mientras la mayoría de las chicas asentia.

— Opino lo mismo, si uno de ustedes no está, nosotras podremos cambiarnos de ropa tranquilamente — Dijo Katase con ese mismo tono. — Aunque es extraño... Hyoudou-kun no parece el tipo de chico que haría trampa en un examen.

— Para mi si lo parece, incluso podría aprovecharse de nosotras si le damos una oportunidad — Dijo Murayama al ver con desagrado a los pervertidos.

— Bueno, siendo honesta Hyoudou-Kun puede ser un pervertido y todo pero no creo que lo haga, es más el jamas haría algo como aprovecharse de una chica a pesar de que le dieras la oportunidad o no de hacerlo — Comento Katase con lo que la mayoría se giro a verla.

— ¿Por que lo defiendes? — Pregunto un tanto extrañada Murayama a su amiga.

— ¿Eh? No lo defiendo, es solo que no es justo acusar a Hyoudou-Kun de algo que jamás haría — Respondió Katase con un cierto nerviosismo.

— Más que defenderlo... ¿Desde cuando le agrega el "Kun" a su apellido? — Dijo Aika con una ligera sonrisa curiosa.

— Es verdad, nunca le agrego el "Kun" al apellido de Issei cuando le hablaba para insultarlo — Apoyo Motohama a Aika un tanto extrañado por eso.

— Ahora parece como si lo respetará en parte — Añadió Matsuda ante lo que los presentes observaron a Katase más que extrañados.

— ¡E-Esperen! ¡No digan...! — Comento Katase tratando de justificarse.

— Pues es natural que lo respete ahora, después de pasar algunas horas a solas con Hyoudou-Kun y que este no hiciera nada para aprovecharse de ella y de mi aun cuando estábamos vulnerables nos dejó claro que Hyoudou-Kun puede ser un pervertido y todo pero no es alguien que se aproveche de las chicas cuando no se pueden defender — Explicó Lynn sorprendiendo a todos los presentes al oírlo. — Algo muy diferente de ese par, que de haberse quedado con nosotras a refugiarse de la lluvia en la Academia es seguro que se hubieran aprovechado de nosotras, incluso Hyoudou-kun nos dijo lo mismo ese día, "Motohama y Matsuda se habrían aprovechado de ustedes".

Todos observaron la llegada de Lynn con sorpresa, aunque los dos mencionados se quedaron extrañados como ofendidos en parte por lo dicho al último y lo que dijo al principio al llegar.

— Eso último fue bajo — Dijo Matsuda molesto. — Nosotros no haríamos eso.

— ¿Qué Issei no se aprovecharia de una chica? Por favor, Issei es el que tiene un indice más alto en aprovecharse de... — Dijo Motohama antes de detenerse.

— Claro que no — Interrumpió Lynn a él pervertido de Lentes. — Solo lo dicen de esa manera por que les molesta que...

— Por supuesto que nos molesta, Issei nos acusa de algo que no haríamos, es natural que nos molestemos — Aclaro Motohama al instante. — Seguramente llego a aprovecharse de ustedes dos sin que lo notarán.

— No lo hizo, en ningún momento tomo ventaja de la situación... — Defendió con un tono serio Katase al castaño. — Y que lo diga yo tiene más peso aún, incluso en el caso hipotético en el que me obligarán a acostarme con alguno de los tres yo sin dudar eligiria a Hyoudou-Kun y creo que hablo por la mayoría de chicas en que lo elegirían a él por encima de ustedes dos.

Todas las chicas se mostraron un rostro de desagrado ante la idea de ellas en un momento íntimo con Hyoudou Issei, sin embargo cuando lo pensaron mejor por un momento se percataron de que en si entre los tres pervertidos. Hyoudou era por mucho, el único que sería "Amable" con ellas o tendría en consideración sus sentimientos al respecto debido a todas las veces que lo vieron respetarlos aún cuando lo terminaban golpeando.

— Tiene un punto en eso — Admitió Aika mientras las chicas la miraban. — Aun si nos obligaran a tener sexo con Hyoudou, este no haría ningún movimiento contra nosotras, de hecho buscaría algún modo de salir de esa situación sin lastimarnos, caso contrario a ustedes dos... Creo que llamar a Hyoudou un Noble Pervertido sería lo correcto.

— Hmp~ ustedes dicen eso por que no conocen a Issei como nosotros — Dijo Matsuda mientras Aika reía al oírlo.

— Exacto, Issei es por mucho peor que nosotros dos — Apoyo Motohama ante las palabras de su amigo.

— Creo que sería al revés, ustedes son los que no conocen a Hyoudou — Dijo Aika mientras la puerta del aula se iba abriendo. — Después de todo ambos lo han abandonado incontables veces con el Club de Kendo para poder salvarse.

Con esas palabras todos admitieron que entre los Tres Pervertidos, solo Issei fue el más golpeado por el Club de Kendo. Y eso podia ser confirmado por miembros presentes del Club, que recordando uno que otro día podían confirmar que Issei había sido el más golpeado por ellas.

— No es nuestra culpa que el no sea tan rápido como nosotros... — Dijo Matsuda mientras las chicas lo veían con un gran desagrado. — Además Issei es mentiroso por naturaleza.

— Así es, y les recuerdo que ese "Noble Pervertido", hizo trampa en el examen de ayer — Les recordó Motohana antes que fuera interrumpido por otra voz.

— En eso te equivocas Motohama — Dijo la voz tranquila pero seria de Chabashira Sae qué ya había entrado en al aula. — El puntaje de Hyoudou fue correcto.

Y había oído parte de la conversación del grupo de jóvenes que se giraron hacia su persona al ver que había defendido de la misma manera a Issei qué otras chicas.

— Después de hablar con Hyoudou por algunas horas, llegue a la conclusión de que el no hizo trampa en el examen, los resultados que obtuvo fueron en efecto por su propio conocimiento — Explicó Sae dejando sorprendidos a todos sus alumnos. — Por tanto fue Hyoudou el que obtuvo el máximo promedio en la clase de 2do año con un 100%.

— Eso no es posible... — Dijo Motohama sorprendido mientras Matsuda quedaba congelado en su lugar.

— Esto debe ser un sueño — Misito aun sin creerlo Matsuda.

Algo que la mayoría compartía debido a que al ser los compañeros de Issei, ellos sabían de cierta manera que el castaño no era el más listo de todos pero ahora eso había cambiado totalmente, y aun cuando no podían creerlo esto lo había confirmado una de las tres Senseis más estrictas de la Academia Kouh.

— Quien lo diría, el "Noble Pervertido" fue el más inteligente y el más honesto que ustedes dos... — Comentó Aika con burla mientras la mayoría miraba a los dos chicos. — Lo cual confirma que no conocen a Hyoudou, ya que dijeron de manera segura que era un "mentiroso por naturaleza" ¿No?.

— Bueno... — Dijo Matsuda mientras la mayoría de sus compañeros lo miraban.

Causando que bajara la cabeza al igual que Motohama qué evito la mirada del grupo entero, mismos que ahora tenían al nuevo Issei en una nueva perspectiva qué beneficiaba a Lynn y Sae. Ya que en pos a esto, la reputación del castaño iba gradualmente a mejorar hasta llegar al punto en que nadie recordaría lo que el solía hacer antes, algo de lo que Issei no era consciente en lo absoluto al estar en el viejo edificio escolar todavía.

Después de que le explicaran qué en su brazo izquierdo vivía ahora un Dragón Celestial qué podía acabar con Dioses y otros seres Mitológicos, Rías con Akeno se tuvieron que ir debido al inicio de su horario de clases. Algo a lo que se iba a unir, sino fuera por que le recordaron que su aura aun era muy inestable, por lo que para evitar accidentes se decidió mantenerlo en el viejo edificio donde la Cuarta de las Pleyades se encargaría de enseñarle lo básico de como a controlar su nueva aura Dragon.

— E-Espera... Suzune-san~ — Dijo Issei tratando de mantenerse más tranquilo que nunca.

Esto por que actualmente Suzune había decidido aprovechar el tiempo a solas a lado de Issei, a quien después de que se quedaran solos monto rápidamente sin mostrar vergüenza alguna mientras se aseguraba de restregar todo su cuerpo sobre el nervioso castaño que luchaba totalmente para no ceder ante toda su Lujuria, qué amenazaba con salir de el en cualquier momento.

— ¿Si~? ¿Pasa algo~~? — Pregunto en un suave tono lujurioso Suzune mientras su lengua pasaba sobre el cuello del chico.

— B-Bueno... Ahora que estamos solos quería preguntarte algo... — Dijo Issei mientras trataba de controlarse.

— Ufufu~ mis medidas son 108 de busto, 64 en cintura y 96 en caderas~ — Musito sensualmente Suzune antes de morderle suavemente el lóbulo de la oreja a Issei.

— N-No me refería a eso... — Respondió Issei mientras escuchaba una ligera risa de Suzune.

— Lo se~~ — Dijo Suzune mientras daba un suave pero sugerente movimiento de caderas. — Pero si quieres que responda a tus preguntas deberás concentirme un poco Danna-sama~.

Sus palabras y movimientos solo hacían que el auto control de Issei quedara casi del mismo modo que paso durante el fin de semana con Yumiko y Mizuki.

— Me parece bien... — Dijo Issei qué no olvidaba aun sus experiencias pasadas.

Por lo que dejandose llevar ligeramente coloco ambas manos sobre el trasero de Suzune qué gimió al sentir la fuerza del castaño al amasar su trasero. Algo que a pesar de sentirse bien, el sentimiento de placer aumentó cuando Issei subió de la forma más Erótica posible su falda, que al instante dejó expuesta sus bragas aún cubiertas por sus medias.

— Abre tu camisa... — Ordenó Issei con voz ronca qué tenso a Suzune, que hizo rápidamente lo que pidió.

Comenzando con su saco que no tardó en quitarse como arrojar en algún lado de la sala para luego comenzar quitarse varios de los primeros botones, que expusieron su bracier de color negro con encajes. El cual no tardo mucho en su lugar gracias a Suzune, que desabrocho el broche qué tenia el bracier en la parte delantera, un acto qué dejó expuestos totalmente a sus pechos como sus pezones rosas qué Issei no tardó en atrapar en su boca.

— ¡Danna-sama~! — Gimió Suzune con sensualidad mientras sostenía la cabeza del castaño contra sus pechos. 

Los cuales eran succionados con cierta fuerza causandole más placer a Suzune, que sentía placenteramente como Issei mordía su pezon derecho y apretaba el otro con sus dedos, una acción que ella había hecho varias veces cuando llego como toda mujer a autocomplacerse y podía asegurar que el placer que sintió antes no se podía comparar con el que sentía ahora con el castaño.

— Suzune... — Gruño ligeramente Issei al soltar brevemente el pezon rodado de la mujer y decir. — Hay algunas cosas que quiero saber antes de seguir...

— ¡P-Puedes preguntar lo que quieras Danna-Sama! — Gimió Suzune ante el ligero rose de sus pezones con el labio del castaño.

— Bien... ¿A que te referías con que yo era quien todas ustedes habían estado esperando? — Pregunto Issei al juntar con sus manos los pechos de Suzune y atrapar sus pezones en su boca. — ¿A quienes te refieres? Y ¿Qué eres?.

— ¡Ah~! ¡Yo soy una Las Siete Pleyades! ¡Somos las Avatares de Siete Diosas qué están ocultas en el interior de la Bóveda Celeste~! — Respondió Suzune mientras comenzaba a mover sus caderas de una forma Erótica. — ¡En cada 200 años, las Siete Diosas eligen a Siete Mujeres en el mundo a quienes les dan bendiciones y diferentes habilidades para protegernos hasta que nos encontremos con el único hombre a quien las siete amaremos con todo nuestro corazón, cuerpo y alma en toda la eternidad~!.

— Entonces... ¿Estan destinadas a amar a un solo hombre? — Pregunto Issei con su lengua moviendose en círculos, sobre los pezones de Suzune.

— ¡N-Nosotras podemos enamorarnos de otros hombres... Tener una pareja o en la mayoría de los casos formar una familia! ¡Ah~! ¡Pero cuando nos encontremos con el hombre ligado a nuestros destinos! ¡Lo que haya sucedido antes de conocerlo no volverá a importarnos jamás~! — Gemia suavemente Suzune mientras trataba de alguna manera explicar lo que sabía a su amado. —¡Abandonaremos todo para así estar junton a nuestro único y verdadero primer amor~!

Ante esa revelación el castaño quedo en verdad sorprendido mientras metía una de sus manos por debajo de las mallas y las bragas de Suzune, tocando de forma directa la zona más sensible de todo su cuerpo al introducirle tres de sus dedos con suavidad y habilidad sacándole a la pelinegra más gemidos qué antes.

— ¿Dices que yo soy ese hombre? ¿Las Siete Pleyades están ligados a mi por el destino? — Pregunto Issei mientras los labios de Suzune comenzaba a besar su cuello después que soltara sus pezones por un momento.

— ¡¡Si~!! ¡Ah~! ¡Nosotras siete estamos ligadas a ti sin importar que pase antes con nosotras! — Aclaro Suzune al pasar su lengua rozando los labios de Issei.

— Entiendo... Pero, ¿Como supiste que era yo el hombre al que todas ustedes esperaban? — Pregunto Issei antes de enredar su lengua con la Pleyade.

Quien sin poder aguantarlo más llego al más grande orgasmo de su vida, uno en verdad satisfactorio que le hacía desear más pero al sentir como Issei sacaba sus dedos de su interior supo que esto iba a quedarse así a menos que respondiera todas sus preguntas. 

— Cuando te vi por primera vez tuve un extraño sentimiento en mi corazón, cada vez que te veía podía sentir la sensación volver con más fuerza que antes y justo cuando tu aura comenzó a filtrarse en la habitación lo entendí — Admitió Suzune al separarse ligeramente de Issei. — Tu ya habías reclamado a dos de las Siete Pleyades como tuyas y ellas te han reconocido y te han entregado lo más importante y preciado que tienen las Pleyades.

— ¿Lo más importante y preciado para una Pleyade? — Pregunto Issei como si temiera la respuesta.

— Su Alma Estrella — Respondió Suzune mientras extendía sus manos hacia Issei con calma. — Esto es lo que representa la existencia de una Pleyades tener esto en tu poder, te permite gobernar sobre ella de manera absoluta hasta el final de su vida... Destruir esto, es destruirla a ella por completo al punto que su alma será enviada a la nada sin la oportunidad de entrar al cielo o el infierno.

Ver el "Alma Estrella" de Suzune dejó en el castaño la mayor de las sorpresas qué había tenido a lo largo de su vida, ahora tenía en frente suyo la existencia misma de la mujer. Ver esto le hizo entender al castaño que robarle esto a una Pleyades era lo mismo que esclavizarla, tendria a su Voluntad al Avatar de un Dios o en el caso de las Pleyades el Avatar de una de las Siete Diosas, resguardadas dentro de la Bóveda Celeste.

Sin embargo ahora en la mente de Issei estaba pensando algo totalmente ajeno, ya que recordaba bien las palabras que había dicho Suzune.

"Tu ya habías reclamado a dos de las Siete Pleyades como tuyas y ellas te han reconocido y te han entregado lo más importante y preciado que tienen las Pleyades"

Si ponía en contexto esas palabras podía saber, quienes eran las dos Pleyades qué Suzune mencionaba, ya que hasta ahora habían sido totalmente las únicas que el reclamado físicamente, emocionalmente y mentalmente.

— ¿Quieres decir que Mizuki y Yumiko forman parte de las Pleyades...? ¿Y que ellas me entregaron sus "Alma Estrella" cuando las reclame? — Pregunto Issei sorprendido ante lo que Suzune sonrió ligeramente.

— Si, cuando te toque para controlar tu aura en la noche, pude sentir las "Alma Estrella" de ambas en tu interior — Dijo Suzune mientras veía al sorprendido y incrédulo castaño. — Fue así como mis dudas sobre si eras tu el hombre que la mayoría esperábamos se despejaron al saber que ellas dos te aceptaron hasta este punto... Así como yo lo haré ahora.

Sus últimas palabras extrañaron a Issei, qué antes de poder preguntar a que era lo que se refería con eso, Suzune sin un mínimo sentimiento de temor o duda al respecto empujó voluntariamente sobre el pecho de Issei su "Alma Estrella". Algo que tomo por sorpresa a Issei al ver que el "Alma Estrella" de Suzune Dehart iba entrando en su cuerpo y desaparecía al instante dentro suyo sin darle una sola oportunidad de reaccionar o decir algo.

— A partir del día hoy mi existencia te pertenece, puedes usarme de la forma que quieras no me negare a nada, haré todo lo que desees — Dijo Suzune ante un Issei aún sorprendido. — Tus metas son mis metas, tu deseo es mi deseo, tu enemigo es mi enemigo, tu aliado es mi aliado, tus amigos son mis amigos, si tu vives yo viviré y si mueres yo moriré.

Sus palabras no eran ninguna broma a la vista de Issei, comprendiendo fácilmente qué Suzune pensaba y creía todo eso aún si apenas lo conoció ayer. Este resultado fue en sin lugar a dudas inesperado, por más que lo pensaba no podía creerlo sin importar que el había cometido un error involuntario sin saberlo al involucrarse demasiado en algo que jamás se esperó posible afecar con algo bastante simple.

"¿En que rayos me metí?" — Pensó con preocupación Issei, sin saber que pronto iba a cometer los errores que afectarian su vida por completo.

Continuará...

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