Con Shikamaru

El Chunin perezoso estaba sobre la rama de un árbol mirando fijamente a la pelirroja de Oto que también estaba en otra rama, cuando logro interceptarla, estaba enterrada contra la corteza de un árbol, pensó que había corrido con suerte, pues solo tenía que inmovilizarla con su sombra para después dejarla fuera de combate, pero cuando aterrizo en la rama del árbol donde ella estaba, vio como en el cuerpo de la chica comenzaron a crecer líneas oscuras, para después salir casi como si nada de la corteza del árbol. Tayuya una vez libre del árbol, tomo impulso y de un salto puso distancia entre ella y su oponente, pues por lo que pudo ver durante la invasión, ese Chunin podía paralizarla solo con su sombra, por lo cual supuso que sus patéticos ataques solo serían de corto alcance, por suerte en ningún momento soltó su flauta, solo tenía que acabar con ese estúpido lo antes posible para ir tan rápido como pudiera a la base, ya que lo último que quería era arriesgarse a toparse con los hermanos Son.

Shikamaru sabía que esas marcas extrañas le daban un monstruoso aumento de poder a su usuario, pues aún tenía presente el impresionante Chakra de la Uchiha durante la segunda etapa de los exámenes Chunin, por lo cual tenía que ir con cuidado, aunque el hecho de tener que luchar con una chica era un fastidio y lo era aún más cuando tenía que tratar de no hacerle mucho daño, pues aún tenía muy presente las rápidas palabras de su amigo rubio antes de que todos tuvieran que separarse.

Flashback

- Shikamaru – hablo Naruto en voz baja para que ninguno de sus enemigos lo escuchara.

- ¿Qué pasa? – pregunto Shikamaru con una ceja levantada, pues el tono de su amigo parecía serio.

- Dentro de lo posible, procura no matar a esa chica – dijo con seriedad ganando una mirada confundida de su amigo – esa chica podría ser una Uzumaki, solo basta mirar su cabello para sospechar de ello.

Shikamaru abrió los ojos en sorpresa para luego dirigir su mirada a su futura oponente, era cierto que su tono de cabello era uno rojizo algo rosado, podía variar bastante de Kushina-sama, pero sabía que esa chica llamada Karin también era del clan Uzumaki y su cabello era de un tono más brillante que el de la matriarca Uzumaki o el de sus amigos pelirrojos, con eso en mente, existía la enorme posibilidad de que ella también fuera miembro de ese clan.

- Que fastidio, pero bien, hare mi mejor intento – respondió Shikamaru con un suspiro – aunque si no me queda de otra para salvar mi vida, lamento decírtelo pero... - intento agregar pero fue interrumpido.

- No te preocupes, jamás te pediría que pusieras tu vida en riesgo de esa manera – dijo Naruto con una media sonrisa.

Fin Flashback

- Eres un idiota, ¿En verdad crees que un patético muchachito como tú podrá vencerme? – pregunto Tayuya con arrogancia sacando a ese estúpido ratoncito de sus pensamientos – no cabe duda de que los Son en verdad son fuertes pero también unos descerebrados si creen que podrán acabar conmigo mandando a un debilucho como tú.

- Je subestimar a un oponente siempre será la razón número uno por la que alguien pierde en una importante pelea – comento Shikamaru con una sonrisa confiada – además, esos descerebrados son mis amigos y líderes en esta misión, si me dejaron encargarme de ti, es porque confían en que puedo hacerlo.

- Solo eres un estúpido hablador, esos idiotas solo dividieron sus fuerzas y los mandaron a pelear contra cada miembro del Sonido – comento Tayuya con seriedad – no quieres verlo, pero esos dos los sacrificaron a todos con tal de recuperar a esa mocosa Uchiha, está claro que no les importan, solo fueron traídos hasta acá para morir jaja – agrego con una sonrisa arrogante y burlona.

- ¿Ya acabaste? – pregunto Shikamaru de forma perezosa, haciendo que la pelirroja frunciera el ceño en molestia – es cierto que tomamos una decisión apresurada al dividirnos, pero ellos nunca nos sacrificarían, cada uno de nosotros vino porque quiso, para rescatar a una buena amiga, a una camarada en apuros, y estoy seguro de que esos dos aun enfocados en buscar a tus amigos que tienen a Satsuki, nos están vigilando constantemente, preocupados por nuestro bienestar, y no solo yo lo sé, mis demás amigos deben de saberlo y es por eso mismo que todos deben estar luchando sin importarles arriesgar su vida, y eso me incluye a mi – finalizo con una sonrisa confiada y alegre, mientras veía momentáneamente las nubes.

La pelirroja frunció el ceño con molestia ante esa respuesta, pues no podía imaginarse el cómo era posible que esos enanos estuvieran dispuestos a arriesgar sus vidas solo por una compañera, ninguno de su equipo haría lo mismo por ella, eso lo sabía muy bien y de su amo, tampoco podría esperar una acción remotamente parecida, pues en cuanto ya no le fueran útiles o cuando encontrara algo mejor, simplemente la haría a un lado como un trozo de mierda, su vida solo era de utilidad para Orochimaru si aún le encontraba un uso, eso la hizo enojar a un más, por lo cual llevo un dedo a la boca para después morderlo y trazar sellos con velocidad.

- ¡Jutsu de Invocación! – exclamo Tayuya golpeando su mano en la rama donde estaba parada.

Shikamaru vio una gran explosión de humo, que una vez disipada, se dejó ver a tres monstruos gigantes, uno de ellos, usa un traje completo color verde oscuro y su cabello cubre por completo su rostro, porta un garrote gigante revestido con pequeñas púas. El otro de los monstruos, usa camisa y pantalones oscuros, es calvo y tiene cicatrices en la cabeza, además de que tiene los ojos vendados, tiene amarrado a cada brazo armas parecidas a espinas, posee una larga barbilla puntiaguda color negra y dos mechones de cabello en los extremos de su cabeza. El último, tiene toda la parte superior de su cuerpo envuelto en vendas y usa pantalones marrones, su cabeza se encuentra en una posición mirando hacia arriba permanentemente.

- Adiós a la idea de que no tiene como luchar cuerpo a cuerpo – murmuro Shikamaru con una mueca de disgusto.

- Jeje disfruta de mi Melodía Mortífera – comento Tayuya con una sonrisa mientras se llevaba sus labios a su flauta.

La melodía que tocaba la pelirroja era uno suave con tonos rápidos y agudos, que por momentos la tonada pasaba a ser uno fuerte y siniestro, casi como si augurara la muerte. Las enormes invocaciones comenzaron a reaccionar a la tonada y sin previo aviso, saltaron al frente para destruir a su oponente. Shikamaru pudo reaccionar a tiempo para moverse a un lado esquivando el maso de uno de esos monstruos, el golpe con el mazo atravesó la rama donde estaba parado como si nada, no tuvo tiempo para impresionarse, pues de inmediato tuvo que saltar para esquivar una tacleada del monstruo que no tenía brazos, cuando volvió a aterrizar en otra rama, salto a otra para no ser empalado por el tercer monstruo, comenzó a tomar distancia de esas cosas para comenzar a trazar el plan más adecuado, pero nota como la tonada de esa flauta comienza volverse aún más fuerte y rápida que antes, y justo en ese momento los tres monstruos saltaron al mismo tiempo en su dirección.

- "Esas cosas están reaccionando con su flauta" – pensó Shikamaru mientras tomaba una bomba de humo y la lanzaba bajo sus pies para poder alejarse de esas cosas – "mejor dicho, los está controlando con su tonada".

Después de que el pelinegro estuviera analizando los movimientos de las invocaciones por un tiempo, comenzó a entender, no lograba distinguir las variables en el tono musical de la pelirroja, pero si el movimiento de los dedos de la chica era difícil pero no imposible. Tayuya cansada de que ese pequeño estúpido solo saltara de un lugar a otro, paso a ponerse más seria, cambiando la tonada de su flauta por una más rápida y aguda, paso a la Revolución Demoniaca, haciendo que sus invocaciones atacaran con mayor rapidez mientras que de sus bocas salían lo que parecían sanguijuelas translucidas y con varias bocas llenas de varias hileras de dientes a lo largo de sus cuerpos. Shikamaru estaba impresionado y desconcertado sobre esas cosas, pero sin perder el tiempo, tomo unas shuriken y se las lanzo, pero sus armas atravesaron esa cosa como si nada, viendo que los daños físicos no le afectaban, espero a que se acercaran y coloco un papel bomba y una bomba de humo en la rama donde estaba parado, para luego saltar en el último momento, causado una gran explosión y aprovechando el humo para esconderse, pero una de esas sanguijuelas logro morderle uno de sus dedos en el último momento, pero no perdió un dedo, en cambio sintió como le arrancaran su Chakra, todo eso fue visto por los grandes ojos marrones de la pelirroja.

- "Cuando se dio cuenta de que no puede dañar a los fantasmas, decidió evitarlos" – pensó Tayuya sin dejar de tocar su flauta mientas una sonrisa satisfecha adornaba su rostro – "Bien, es más listo de lo que aparenta, pero veamos que tanto".

- "Mis shuriken y las explosiones no les causaron nada, además, cuando una de esas cosas me mordió sentí como perdía mi energía" – se dijo Shikamaru mentalmente escondido entre las ramas de los árboles – "Esas cosas son peligrosas, si logran atraparme devoraran todo mi Chakra, por lo cual debo evitarlas, eso solo me deja con ella como mi blanco principal... el problema, es que esos tres gigantes tampoco me dejaran el trabajo fácil, podría captúralos con mi Posesión de Sombras, pero ese es otro problema, esas cosas nunca me atacan al mismo tiempo, si solo uno escapa, es mi fin" – analizo con molestia la situación tan difícil en la que se encontraba mientras que se aseguraba que esas sanguijuelas no se acercaran a su posición – "Ella no me da alternativas ofensivas o defensivas.... Sin duda sería una gran ponente en un juego de Shoji" – concluyo con una sonrisa satisfecha mientras una gota de sudor le recorría la mejilla.

Con Kiba y Sai

El par de ninjas de Konoha más el ninja de Oto se encontraban en una zona rocosa justo al lado de un rio, apenas llegaron con su objetivo, se lanzaron en contra su oponente sin darle la oportunidad de reponerse. El Inuzuka se encontraba corriendo alrededor de su oponente en dirección de las manecillas del reloj a la vez que su compañero canino que se encontraba con el pelaje de color rojo corría en dirección opuesta, mientras que por el lado del pelinegro pálido, este se encontraba creando varias bestias de tinta. El peli-gris ya tenía su sello maldito activado, donde varias manchas oscuras se distribuyeron por todo su cuerpo, sabía que no podía confiarse ni un solo segundo, pues ya estaba lo suficientemente cansado y herido como para depender del sello, pero tenía que acabar con esos dos, rápido, pues no sabía cuánto tiempo podía mantenerlo activo sin resentir los efectos secundarios.

- ¡Colmillo Sobre Colmillo! – grito Kiba estando al frente de su oponente y Akamaru que se acaba de convertir en una copia suya, lo ataco por detrás.

Sakon viendo que sería atacado por dos grandes taladros que giraban a una enorme velocidad, no pensaba arriesgarse, por lo cual concentro Chakra en sus piernas para esquivarlos al dar un gran salto y salir de su trayectoria y atacarlos desde lejos, pero ese plan se ve obstaculizado cuando al intentar saltar se da cuenta que está siendo sujetado por algo, al mirar hacia abajo ve como es sujetado por serpientes hechas de tinta, luego sus muñecas también fueron sujetadas por más serpientes de tinta que salieron del suelo, Ukon intento liberar a su hermano al sacar sus manos por las rodillas de este, solo para que sus muñecas también fueran capturadas por un par de serpientes que salieron del suelo.

El ataque de Kiba dio en el blanco, logrando dar el en el abdomen de su oponente y Akamaru en su espalda, ocasionando que este grite de dolor al sentir como las áreas de impacto son rasgadas, el ataque al no poder atravesar a su oponente, gira por un lado, atacando sus costados, Kiba y Akamaru desasen su ataque, solo para ver como el peli-gris cae en una rodilla y sangrando por algunas heridas profundas. Sai aprovechando la oportunidad, lanza sus bestias contra su oponente, donde dos tigres logran sujetarlo de los brazos y arrástralo algunos metros, pero cuando ve como nuevamente de su oponente vuelven a salir extremidades para destruir a las bestias que lo tenían prisionero, para luego acabar con las demás frunce el ceño y se lanza al frente para atarlo.

El pelinegro al estar al frente de su oponente le lanza varios kunai, donde el peli-gris pudo esquivarlos con relativa facilidad, pero aun así siguió adelante pues eso solo era una distracción, lanzo un poderoso puñetazo de derecha que fue detenido por su oponente al sujetarlo por la muñeca con su mano izquierda, Sakon lanzo una ráfaga de puñetazos de su brazo derecho justo al rostro del pelinegro, pero Sai viendo el ataque lo esquiva al agacharse y aun siendo sujetado, lanza una pata de izquierda al abdomen de su oponente, pero su patada es frenada por un pie que salió del abdomen de este, pero no se detuvo y uso ese pie para tomar impulso y saltar sobre este, y una vez arriba le lanzo un puñetazo de izquierda a su rostro, pero una vez su ataque es frenado, pues Ukon saco su puño derecho de la frente de su hermano frenando el ataque, pero Sai ya previendo eso sonríe y aplicando un poco de presión sobre su pie derecho, sale una cuchilla de la punta de su sandalia y lanza un corte al pecho de su oponente que no pudo esquivar, Sakon se vio forzado a soltar al pelinegro el cual comenzó a saltar a hacia atrás en un intento de tomar distancia, pero no le daría la oportunidad, por lo cual se lanzó al frente para atacarlo con todo lo que tenía.

- Nunca podrás ganarme en Taijutsu mocoso – exclamo Sakon con una mueca psicópata en su rostro - ¡Ráfaga de Puños Múltiples! – grito lanzando un rápido puñetazo derecho del cual salieron dos puños más.

Sai logro bloquear todos los ataques con sus antebrazos pero aun así fue empujado un par de metros hacia atrás por la fuerza del ataque, pero Sakon no detuvo su ataque, pues se lanzó al frente lanzando una patada rápida de la cual salieron dos piernas más, el pelinegro justo antes de ser golpeado, se tira hacia atrás colocando sus brazos a los costados de su cabeza y sus manos en el suelo, flexiono las piernas toco lo que pudo contra su pecho y los lanzo al frente para golpear el abdomen de su ponente, el cual no pudo reaccionar a tiempo y recibió el golpe de lleno, el peli-gris sintió un enorme dolor, no solo por el golpe, sino también por las heridas que presentaba, pero no tuvo tiempo de reponerse cuando ve como que el chico de marcas en las mejillas y su canino vuelto su copia, se lanzaron en su dirección a cuatro patas a una enorme velocidad lanzando una enorme serie de zarpazo, que apenas y podía esquivar, pero aun así lentamente comenzaron a sacarlo de equilibrio, eso fue aprovechado por Kiba y Akamaru que de un salto rápido, se colocaron al frente de su oponente y en un movimiento ágil y rápido cada uno lo golpeo en el abdomen con su codo, lanzándolo con fuerza hacia su compañero que ya había terminado de trazar sellos de mano.

- ¡Estilo de Fuego Gran Bola de Fuego! – exclamo Sai lanzando su Jutsu contra su oponente que no pudo esquivar, luego ve como su compañero y el can de un salto se coloca a su lado.

- ¡Muy bien lo logramos! – grito Kiba con una gran sonrisa confiada.

- Aun no, es demasiado fácil – comento Sai con seriedad y fue apoyado por un ladrido de Akamaru.

- Tsk, en verdad es obstinado – muro Kiba con una mueca – ¿Lograste analizar su estilo de pelea? – pregunto con seriedad.

- Algo así, su Taijutsu es fuerte, pero carece de técnica, claramente confía mucho en esa habilidad de sacar extremidades de su cuerpo para atacar o defender – respondió Sai con tranquilidad – pero mientras siga haciendo eso, es casi imposible encontrar una abertura con mi velocidad actual.

- Comprendo, tenemos suerte de que este cansado o estaríamos en serios proble...- Kiba no pudo continuar al sentir un escalofrió que le recorrió la columna, confundiendo mucho a su compañero – ¡¿Pero qué demonios?! – exclamo muy asustado clavando su mirada en el fuego donde se encontraba su oponente – Sai prepárate esto se acaba de poner feo, ese sujeto acaba de volverse más fuerte – informo mientras se ponía en guardia con una gota de sudor recorriéndole la mejilla.

Sai asintió y se preparó de nuevo, pues sabia de la habilidad de su compañero para detectar los niveles de Chakra de un oponente con solo su olfato, por lo cual si se puso así de nervioso cuando parecían tener toda la ventaja al ser tres contra uno, era porque el aumento de poder de su oponente era algo para ponerse sumamente serio. El par de ninjas de Konoha al igual que el pequeño can, abrieron los ojos con sorpresa cuando el fuego desapareció y dejo ver lo que había dentro, Ukon ahora tenía la cabeza al lado de la de Sakon, el cabello de ambos creció y su flequillo les llegaba hasta el pecho además, se volvía blanquecino, sus colmillos crecían y le salía un enorme cuerno al lado contrario de su frente a cada uno; también su piel cambiaba, volviéndose rojiza.

- Sakon ya no podemos seguir perdiendo el tiempo, necesitamos acabar esto cuanto antes – ordenó Ukon molesto viendo a su hermano de reojo.

- Tienes razón hermano, es hora de ponerle fin a esta horrible batalla – comento Sakon con una sonrisa sádica.

- ¡No te confíes Sai! ¡Ahora son más diez veces más fuertes que antes! – informo Kiba con nerviosismo al ver como su oponente comenzó a correr en su dirección – una vez más Akamaru, ¡Mimetismo Animal! – dijo transformando una vez más a su compañero canino en una copia suya.

- ¡No te separes! ¡No podrá con nosotros si nos mantenemos unidos! – exclamo Sai mientras comenzaba a crear varias bestias de tinta.

Sakon y Ukon corrían contra sus oponentes, destruyendo de un solo golpe las bestias de tinta que se lanzaban en su contra y cuando estuvieron frente a sus oponentes, primero se lanzaron contra el pelinegro lanzando un puñetazo derecho, el cual Sai logro esquivar y lanzo un gancho izquierdo a las costillas de sus oponentes, pero este fue detenido cuando una pierna sale del pecho de esos sujetos y desvía su puño, Kiba y Akamaru salto para cortar con sus garras las cabezas de esos sujetos, pero cada zarpazo es detenido por manos que salieron de las nucas de esos sujetos y sujetaron sus muñecas, las manos los jalaron con fuerza hacia ellos, donde Sakon y Ukon golpeaba los rostros de los dos chicos con marcas en las mejillas en el rostro con sus nucas, mandando a esos dos varios metros lejos, para de inmediato sacar dos pies de su pecho que iban contra el pelinegro, Sai logro esquivar el ataca a tiempo dando un gran salto, para luego tomar con una mano unos kunai y con la otra trazar sellos de mano, lanzo los kunai seguido de escupir varias bolas de fuego, los hermanos del Sonido, dieron varios saltos hacia atrás para esquivar el ataque, y cuando vieron que ese pelinegro dejo de lanzar bolas de fuego, de un poderoso impulso, saltaron para estar frente a este y conectarle un puñetazo derecho con dos puños más en el rostro, luego otro puñetazo izquierdo con dos puños más en su abdomen mandándolo con fuerza hacia abajo, Sai escupe sangre mientras sofocaba un grito de dolor que solo se intensifico cuando su cuerpo se enterró en el suelo.

Los hermanos del Sonido comenzaron a descender justo encima del pelinegro ya preparando un poderoso pisotón que le atravesaría el pecho, pero justo a escasos metros de lograrlo, el Inuzuka salta tomando el cuerpo de su compañero sacándolo del área de impacto, el par de ninjas de Konoha ven como su oponente destruyo el suelo donde uno de ellos estaba hace unos segundos, una vez que el polvo se disipo, pudieron ver como amabas cabezas les sonreían de forma sádica.

- Gracias Kiba – dijo Sai poniéndose de pie y limpiándose la sangre de la comisura de sus labios.

- Aun es muy pronto para agradecer – comento Kiba con nerviosismo al ver que ahora no podían ni hacerle ni un rasguño a ese fenómeno – dime, ¿Puedes hacer ese Jutsu de Fuego y Tinta? – pregunto con seriedad ya trazando un plan.

- ¿El Rugido de Dragones Celestiales? – respondió Sai a forma de pregunta y cuando su compañero asintió continuo – puedo pero no creo que funcione contra ese sujeto, aun requiero de muchos sellos de mano y no tengo ningún pergamino con esas bestias, por lo cual hacerlas consumirá mucho de mi Chakra.

- Muy bien, no te preocupes, Akamaru y yo tenemos un Jutsu que será perfecto para acabar con esos dos, necesitamos de un respaldo para hacerlo pues consume casi todo nuestro Chakra, pero contigo cerca y sumado a tu Jutsu, los acabaremos de un solo golpe– informo con confianza viendo como ese sujeto comenzó a caminar hacia ellos – ¡Prepara tu Jutsu, te daremos el tiempo necesario! – grito corriendo de frente a su enemigo.

- ¡Esto se acabó estúpidos! – grito Ukon con enojo.

- ¡No dejaremos que hagan nada! – agrego Sakon con burla mientras comenzaba a correr contra su enemigo.

- ¡Ahora Akamaru! – grito Kiba dando un gran salto hacia arriba.

Los hermanos del Sonido se detuvieron al ver a ese sujeto saltar y aún más cuando grito pues les pareció un movimiento muy tonto, Akamaru que se había mantenido oculto esperando la señal de su amo, salió de entre unas rocas detrás de su enemigo y salto sobre este, para luego comenzar a girar y orinar, logrando así, marcar a sus enemigos, los cuales se comenzaron a quejar e intentar limpiarse la orina, una vez que el can aterrizo, volvió a saltar con fuerza en dirección a su amo, aterrizando justo sobre su cabeza, mientras este terminaba de trazar sellos de mano.

- Estilo Inuzuka, ¡Transformación Hombre Bestia! – grito Kiba para luego ser cubierto por una enorme cortina de humo - ¡Lobo Bicéfalo! – agrego con un gran rugido.

Sakon y Ukon saltaron hacia atrás para esquivar una enorme garra que estuvo a punto de aplastarlos, una vez que el humo se despejo, un gran lobo de dos cabezas se dejó ver, tenía el pelaje completamente blanco, sus garras eran de color negro, sus ojos eran rojos y sus colmillos eran enormes, la imponente bestia gruñía con furia hacia sus oponentes, de su boca una enorme cantidad de baba caí sobre el suelo.

- Jeje tanto alboroto para que apareciera un pequeño peluche – comento Sakon con burla.

- En verdad estas desesperado si ahora eres tú el que se volvió un animal – dijo Ukon en el mismo tono burlón que su hermano.

La enorme bestia bicéfala dio un poderoso salto para luego comenzar a girar a una enorme velocidad, para luego comenzar a seguir a sus enemigos, los cuales no tuvieron muchos problemas para esquivarlo, pero al estar relativamente cerca de esa bestia, se dieron cuenta de que el viento que lo rodeaba era tan rápido que con solo estar cerca recibiría un daño considerable, pues ya tenía algunos cortes en sus brazos y piernas. Kiba siguió persiguiendo a su enemigo sin dejar que se acercara mucho a su compañero, tuvo varias oportunidades para atacar, pero necesitaba del Jutsu de su compañero, ya que un solo erros podía costarle muy caro a los tres.

- ¡Esta listo! – grito Sai sosteniendo un enorme rollo a su lado derecho.

El Inuzuka sonrió mentalmente, mientras que seguía atacando a sus enemigos, pero esta vez los dirigió al frente de su compañero y justo donde había dejado caer una enorme cantidad de baba, los hermanos del Sonido ya se habían cansado de huir, pero no podían atacar directamente a esa enorme bestia, por lo cual se dirigirían contra el pelinegro justo apenas tocaran de nuevo el suelo, pero apenas lo hicieron se resbalaron al pisar la baba, Kiba dejo de girar y se colocó detrás de su compañero y le ladro con fuerza, el pelinegro de inmediato entendió el mensaje y coloco el pergamino frente a él y trazo los sellos de mano tan rápido como pudo y concentro gran parte de su Chakra en el ataque.

- ¡Arte Ninja Pergamino de Cabezas Celestiales! – exclamo Sai mientras seis enormes cabezas de dragones salían en fila frente a él – ¡Estilo de Fuego Jutsu Rugido de Dragones Celestiales! – grito con fuerza y los dragones abrieron sus bocas lanzando una poderosa ola de fuego contra sus enemigos.

- Muy bien – dijo Kiba con una gran sonrisa mental, mientras se lanzaba al frente y comenzaba a girar una vez más - ¡Doble Colmillo del Sabueso Infernal! – exclamo mientras todo el fuego comenzaba a rodearlo gracias a las olas de viento que liberaba su Jutsu.

El enorme taladro envuelto fuego se dirigió con fuerza contra los hermanos del Sonido, arrasando con el suelo bajo ellos como si de simple plasto se tratara mientas que estos no pudieron esquivar el ataque, dándoles de lleno en el centro de su abdomen y arrastrándolos con fuerza hacia atrás, mientras que la fuerza del taladro comenzaba a atravesarlos donde el fuego también ayudaba a ello, pero también iba quemándolos, y cuando el cuerpo compartido de esos dos no pudo soportarlo más, se terminó partiendo por la mitad lanzado parte motilidad a un lado, una vez logrado eso, la gran bestia dejo de girar y aterrizo en el suelo viendo lo logrado, donde dio una enorme sonrisa mostrando todos sus colmillos. El pelinegro se dejó caer sobre una rodilla mientras respiraba pesadamente, estaba cansado, el desgaste que hizo fue enorme, pero no lo fue tanto como cuando lo uso contra la heredera Uzumaki

Sai levanto la mirada y vio a su compañero aun transformado donde por las facciones de su rostro canino, dedujo que estaba sonriendo, por lo cual también sonrió y le dedico un pulgar arriba a sus compañeros, Kiba y Akamaru que vieron eso, esbozaron una sonrisa aún más grande, mientas que la cabeza estaba listo para soltar un aullido de victoria, pero eso se detuvo a la vez que las sonrisas se esfumaron y fueron remplazadas por miradas horrorizadas, cuando vieron que de la parte de donde fueron separados esos fenómenos, comenzó a salir lo que parecían órganos y extremidades, que comenzaron tomar la forma de piernas pero adquirieron una forma extraña, pues parecía una armadura, haciendo que se parezcan todavía más a una armadura Oni, pero el shock solo aumento cuando esos dos se pusieron de pie ahora como dos cuerpos independientes uno del otro.

Tanto Sakon como Ukon tenían miradas perdidas en la furia y odio total, si bien lograron salir prácticamente ilesos del ataque de ese taladro gigante, no lo hicieron de las llamas, la mitad derecha e izquierda de sus respectivos cuerpos estaban llenos de quemaduras bastante letales, pero nada que no pudieran ignorar mientras se encargaban de desmembrar a esos estúpidos ninjas por causarles tantos daños.

- Es hora de matarlos – dijo Ukon dando un paso hacia la enorme bestia mientras apretaba los puños con ira que no se molestaría en contener – ¡Dense por muertos!

- Eso te deja conmigo – comento Sakon dándose la vuelta y viendo al pelinegro – me encargare de arrancarte el corazón y devorarlo mientras aun vives.

- "Se separaron, ¿Qué demonios son esos sujetos? ¿En verdad son unos monstruos?" – se cuestionó Kiba no entendiendo como es que aún seguían vivos, luego escucho un quejido de Akamaru – "Lo sé amigo, Sai uso mucho de su Chakra y apenas puede mantenerse de pie y nosotros no estamos mejor, tenemos proteger a nuestro camarada ya que esta fue nuestra idea en primer lugar" – le dijo a su compañero ignorando como sus patas temblaban de cansancio – "Prepárate Akamaru, será todo o nada"

- "Maldición, debí suponer que podían dividirse, fui un estúpido por no anticiparlo" – se reprochó Sai con enojo mientras golpeaba el suelo con furia, pues ya sabía de las asquerosas técnicas del Sannin traidor por lo cual debió suponer que uno de sus discípulos debía tener algo igual de asqueroso – "Ya no tengo fuerzas para luchar por mucho tiempo y esos sujetos parecen poder luchar por más tiempo, esto es una estupidez, debimos ganar con ese ataque, no cabe duda de que Sasuke tenían razón, estos sujetos solo esperan el momento adecuado para una jugada ruin"

- ¡Ahora hermano! – grito Ukon viendo como la enorme bestia se lanzó en su contra.

- ¡Entiendo! – exclamo Sakon girando hacia atrás para tomar las manos de su hermano que también giro hacia atrás.

Ukon comenzó a girar a su hermano para luego soltarlo con una enorme fuerza y velocidad contra el pelinegro, mientras el mismo se mordía ambos pulgares y trazaba sellos de mano para luego colocar su mano en el suelo e invocar la barrera Rashomon que su amo le dio, era una gigantesca puerta de metal casi indestructible que tiene una forma demoníaca y unas cadenas con pesos a cada lado. Kiba y Akamaru debido a que no pueden ver nada al moverse a tal velocidad y solo se guían por el olfato, no pudieron esquivar la enorme barrera, estrellándose de lleno en ella y logrando causarle una enorme abolladura, ambos se dejaron caer por el enorme dolor y cansancio que sentían, donde en una explosión de humo ambos cayeron al suelo ya con sus apariencias normales.

Sakon se dirigía a una enorme velocidad contra el pelinegro, listo para matarlo y de la forma en la cual lo había prometido. Sai comenzó a trazar sellos de mano a una gran velocidad para luego lanzar una enorme bola fuego contra su enemigo, el cual estaba seguro no podía esquivar pero grande fue su sorpresa que al ver que cuando su bola de fuego estaba a un metro lejos de él, salió ese monstruo que uso la parte izquierda de su cuerpo que parecía armadura para cubrirse del fuego, Sakon aterrizo a cuatro patas y con la cabaza baja frente al pelinegro para luego impulsarse al frente mientras levantaba la cabeza y atravesaba el hombro derecho del pelinegro mientras lo levantaba con la cabeza del suelo.

- ¡Ahhhhhha! – grito Sai de dolor, pero aun así levanto su brazo izquierdo e intento golpear la cabeza de su enemigo.

Sakon en un movimiento rápido golpeo el abdomen del pelinegro con ambos brazos, haciendo que por la fuerza del ataque, fuera liberado de su cuerno y lanzado con fuerza contra unas rocas. Sai escupió una gran sangre, mientras comenzaba se deslizaba sobre la roca contra la que se estrelló, hasta que se sentó en el suelo, intento mover su brazo derecho solo para descubrir que no podía debido al inmenso dolor que sentía, miro al frente y vio como ese monstruo comenzó a caminar con calma en su dirección.

- Maldición... jeje esto se está poniendo feo – murmuro Sai débilmente mientras sonreía con cansancio.

- Oh y se pondrá mucho peor – comento Sakon que logro escuchar al pelinegro.

Sakon al estar a un par de metros de su presa, escucha como el suelo bajo sus pies se comienza a romper y cuando baja la mirada, ve como varias serpientes salen del suelo y los sujetan por sus extremidades, pero con especial fuerza donde tenía sus quemaduras, soltó un grito ahogado de dolor mientras caía sobre una rodilla y forcejeaba contra esas cosas para liberarse, mientras dos serpientes más se dirigían a su cuello.

- "Solo espero que duren el tiempo suficiente como para pensar en un plan" – se dijo Sai, analizando todo a su alrededor con la oportunidad de poder encontrar una solución.

Kiba como pudo se levantó del suelo y miro la enorme defensa que desapareció en una explosión de humo y del humo salió ese monstro que se lanzó a golpearlo, intento dar un salto hacia atrás pero aun así recibió el golpe de frente, dio unos pasos hacia atrás y regreso la mirada al frente solo para ver que ya no había nadie.

- ¿Buscas a alguien? – pregunto Ukon asomando su cabeza por encima del lado derecho de su cuello del Inuzuka, el cual giro para mirarlo con horror al ver que estaba dentro de él.

Kiba intento golpear a la cabeza que se asomaba por detrás de su cuello y que estaba saliendo de su cuerpo, pero su puño es detenido por una mano que sale de su propio pecho y lo sujeta por la muñeca impidiéndole liberarse, ve como ese sujeto comienza a moverse de su lado derecho a su lado izquierdo de su cuello.

- ¿Cómo diablos es esto posible? – pregunto Kiba aun en shock por lo que veía.

- Es muy fácil, tengo una habilidad en extremo útil para los asesinatos sigilosos, puedo descomponer y reconstruir mis células para entrar en otro individuo – respondió Ukon con arrogancia y una sonrisa psicópata – ahora mis células están dentro de tu cuerpo y lentamente comenzamos a fusionarnos o mejor dicho comienzo a asimilarte, dentro de poco erradicare todas las células de tu cuerpo.

Akamaru viendo en peligro a su amo, no lo dudo ni un segundo y se lanzó al ataque para intentar liberarlo aún contra las ordenes de este que le decía que no se acercara, Ukon sonrió y cuando vio al pequeño pulgoso frente a su rostro, saco una pierna de su anfitrión y lo golpeo con fuerza mandándolo lejos. Kiba tenía bien abiertos los ojos al ver a su compañero tumbado en el suelo sin moverse después de recibir ese golpe, nunca lo había desobedecido pero esta vez lo hizo para intentar salvarlo, frunció el ceño en furia mientras recordaba las palabras de ese monstruo dentro de su cuerpo.

- "Si estamos fusionados, eso quiere solo una cosa" – pensó Kiba mientras llevaba su mano libre a su bolso y tomaba un kunai, para luego mirar de reojo a su compañero pelinegro – "tranquilo Sai, si esto funciona, aunque me cueste la vida, te salvare por ponerte en este aprieto" – pensó con determinación sujetando con fuerza su arma.

Sin darle tiempo a su enemigo de saber que estaba tramando, el Inuzuka se entierra el kunai en su costado, el dolor fue horrible, sentía como su boca se comenzaba a llenar de sangre pero aun así, sus labios se torcieron en una sonrisa, pues vio como ese sujeto también escupía sangre, Ukon sentía un profundo dolor que solo se intensifico cuando ese mocoso enterró aún más su kunai en su costado.

- ¿Pe... pero qué demonios crees que estás haciendo? – pregunto Ukon escupiendo algo de sangre.

- Je tú lo dijiste ahora nos fusionamos... en otras palabras si yo muero, tú mueres – respondió Kiba con una sonrisa arrogante a su enemigo.

- ¿Suicidio? ¿Estás loco? – cuestiono Ukon no pudiendo creer el plan del mocoso – "Imposible, nunca nadie había recurrido a algo tan desesperado como esto antes, si no salgo de su cuerpo... en verdad moriré" – pensó con nerviosismo, pero un grito de ese mocoso lo hizo salir de sus pensamientos.

- ¡Uno más y acabamos! – rugió Kiba sacando el kunai de su cuerpo para volverlo a enterrar con fuerza.

El Inuzuka detienen su ataque suicida al sentir como algo se expulsa de su cuerpo y al mirar hacia atrás ve a su enemigo tumbado en el suelo respirando con dificultan, vuelve a tomar el kunai con todas las fuerzas que le quedaban y se gira para luego lanzarse sobre ese sujeto con la intención de atravesarle el corazón.

Con Neji y Shino

Cuando la nube de polvo se despejo, se dejó ver a un domador de insectos de espaldas contra la corteza de un árbol mientras intentaba ponerse de pie, al Hyuga frente a su compañero respirando con dificultad con una profunda herida en su brazo izquierdo, la cual bañaba en sangre su brazo, en medio de ambos un gran cráter de al menos 5 metros con una flecha dorada en el centro, justo antes de que la flecha lograra impactar en el Hyuga, logro sentir que algo se acercaba por su punto ciego, no sabía lo que era, pero definitiva era malo y era aún peor cuando vio como su compañero se lanzó para lanzarlo fuera del camino, pero si lo lograba el recibiría el ataque, por lo cual Neji concentrando el poco Chakra que le quedaba después de formar esa cúpula de Chakra a su alrededor, para con una expulsión de Chakra de sus manos logro empujarlo lejos, pero eso a costa de recibir de lleno el ataque, no sabía que se acercaba pero no quería que alguien muriera por protegerlo, aunque se sorprendió que el ataque que no pudo ver solo lograra hacerle un corte en su brazo, pero fue hasta que noto algunos insectos saliendo de sus ropas que entendió todo.

Shino ya completamente erguido miro con alivio como su compañero seguía de pie sin ninguna herida fatal y todo gracias a los insectos que le coloco antes de empezar a pelear, los cuales salieron en el momento oportuno y formaron una pequeña pirámide que sirvió para desviar la flecha, eso hizo que soltara un suspiro pues no sabía si sus insectos lo lograrían por lo cual se lanzó al frente para lanzarlo lejos de la trayectoria. Kidomaru miro con mucha molestia como terminaron las cosas, se suponía que al menos uno debía morir, pero aun así, obtuvo su respuesta, ese Hyuga no esquivo su ataque y su compañero tuvo que saltar para ayudarlo, eso solo indicaba una cosa, el Hyuga tiene un punto ciego, a la altura de su de su primera vertebra torácica, y el domador de insectos ahora era completamente vulnerable, pues ya no tenía más insectos, era la única explicación posible, pues uno ahora era herido al lanzarle ataques de un punto en específico y el otro ahora tomaba riesgos que antes no necesitaba tomar.

- "Esto es malo, si no fueran por los insectos de Shino, probablemente ya estaría muerto" – pensó Neji mientras respiraba pesadamente por el gasto de Chakra – "no fallo y no fue un tiro de suerte, el apunto al punto ciego de mi Byakugan, el descubrió el secreto de mi clan" – dedujo sintiéndose realmente alarmado.

- Neji, ¿Sabes dónde está? – pregunto Shino acercándose a su compañero, aun no estaba dispuesto a bajar la guardia con ese sujeto aun rondando por los alrededores.

- No, ya no tengo tanto Chakra, y debido a eso el rango de alcance de mis ojos ahora es de solo 60 metros a lo mucho – respondió Neji en voz baja para que solo su compañero lo escuchara.

- Entiendo, yo tampoco cuento con muchos insectos, necesitamos tomar distancia y escondernos entre los árboles – informo Shino de forma seria, recibiendo un asentimiento de su compañero – "esto está mal, apenas y podemos seguir de pie, nos confiamos y entre más nos defendemos más información le damos a ese sujeto para vencernos" – pensó con una gota de sudor recorriéndole la mejilla.

- ¡Corre! – grito Neji al ver como una enorme cantidad de kunais eran lanzados a sus espaldas.

El domador de insectos tomo por la cintura a su compañero y paso su brazo derecho por detrás de su cuello para no dejarlo atrás. Los ninjas de Konoha corrieron con todo lo que tenían mientras una llovizna de kunais les pisaban los talones, comenzaron a correr en zigzag entre los árboles con el fin de encontrar cobertura. El polimelio sonrió ante el burdo plan de sus presas, pues ya lo tenía todo planeado y sus patéticos intentos de esconderse no funcionarían, abrió la boca y saco otra flecha solo que en el culatín tenía un hilo de telaraña.

- "No importa que tanto se muevan o intenten huir, con este hilo de Chakra, podre dirigir la flecha a través de su punto ciego, y con ese obstáculo superado, no podrá salvar a su amigo esta vez, el cual ya no tiene suficientes insectos como para parar o desviar mi ataque" – se dijo Kidomaru con diversión mientras tensaba su arco al máximo.

La flecha fue soltada y se dirigió con una enorme velocidad contra sus objetivos, destruyendo con facilidad la fricción del aire y creado una estela de polvo tras su paso, generando un sonido sumamente agudo, moviéndose en acorde a al punto ciego del Hyuga. Shino y Neji logran escuchar el fuerte sonido generado por otra flecha, sabían que se avecinaba por sus espaldas, por lo cual sin pensarlo e ignorando el hecho de que podría morir, comenzó a reunir todo el Chakra que le quedaba para volver a generar una cúpula de Chakra a su alrededor para saber la trayectoria del ataque.

- "Piensa hacerlo de nuevo" – pensó alarmado Shino pues uno de sus insectos le informo de lo que haría su compañero, pero también otro le informo de algo muy importante – "un hilo" – repitió lo dicho por sus insectos.

Justo antes de que el Hyuga lograra expulsar su Chakra, este recibe un fuerte golpe del domador de insectos en su abdomen, para que luego lo sujetara con fuerza y después lo lanzara varios metros lejos, Shino se dio la vuelta encarando la flecha y como pudo se las arregló para que solo le atravesara el costado derecho de su abdomen y no un órgano vital, pero aun así, la fuerza de la flecha lo arrastro varios metros lejos, donde lo clavo a un árbol, haciendo que sienta un dolor inmenso a la vez que escupía sangre. Neji que apenas se estaba levantando del suelo, vio con los ojos bien abiertos a su compañero y como se sacrificó para salvarlo, estaba en shock tal que no podía ni formular una palabra, pero no queriendo ver a un camarada morir, ignoro el dolor y cansancio en su cuerpo, se puso completamente de pie y salir corriendo en dirección a su amigo para auxiliarlo, pero se detiene en seco cuando lo ve sujetar el hilo y mostrar una débil pero segura sonrisa victoriosa.

Shino uso a todos los insectos que aún le quedaban y los introdujo en ese hilo, pues sabía que ese sujeto usaba dicho hilo para cambiar la trayectoria de la flecha, no motivo por el cual lo hacía, pero sabía que tenía que estar conectado al cuerpo de su enemigo, por lo cual solo tenía que dejarse golpear para obtener una sola oportunidad.

- "Le di" – exclamo victorioso Kidomaru formando una sonrisa sádica – "Ahora por el otro que esta petrificado del..." – no pudo continuar de alegar pues sintió como el Chakra le faltaba en todo su cuerpo.

El polimelio se cubrió la boca para intentar sofocar una tos, pero cuando ve su mano la ve llena de sangre e insectos, fue cuando sus piernas le temblaron y se calló de la rama en la que estaba parado y fue cuando se dio cuenta de que había caído en una trampa, el mocoso de gafas oscuras recibió el ataque a propósito para mandar a sus insectos a través de su hilo de Chakra e introducirlos en su cuerpo para que devoraran su Chakra, pero no todo estaba perdido, sentía a esos insectos dentro de él, pero aún no consumían todo su Chakra por lo cual dedujo que no eran muchos, rompió el hilo que salía de su boca, y en cuanto tocara tierra acabaría con esos dos de una vez y ya se encargaría de liberarse de esas cosas dentro de su cuerpo.

- ¡Neji se encuentra a cien metros en dirección recta! – grito Shino ignorando el dolor e intentando que su boca no se llenara de sangre – ¡¡¡ACABA CON ESE DESGRACIADO!!!

El Hyuga al escuchar esas fuertes palabras, no lo dudo ni un segundo, se dio media vuelta, activo su Byakugan y corrió con todo lo que tenía en la dirección que le dio su compañero.

- "¡Tu sacrifico no será en vano Shino, acabare con ese sujeto de una vez!" – rugió Neji con determinación comenzando a correr más y más rápido – "Naruto tú lo dijiste, el destino no está tallado en piedra y aunque mi enemigo sea más fuerte, no me rendiré, superare mis propios límites, pues no puedo defraudar la confianza de mi compañero".

- "Ellos confiaron en mí, no solo como camarada sino como amigo, una derrota no es una opción" – pensó Shino rompiendo la flecha que lo tenía prisionero y comenzando a seguir a su compañero a paso lento pero seguro que lentamente comenzó a tomar impulso – "No pienso quedarme viendo y no hacer nada... si aun... puedo caminar... aun puedo pelear..."

En cuanto Kidomaru aterrizo se dispuso a correr contra sus presas, pero no pudo hacer nada cuando vio al Hyuga ya frente a él, Neji sin perder tiempo, comenzó a atacar todos y cada uno de los puntos de Chakra de su enemigo utilizando los ocho trigramas, sesenta y cuatro palmas, y cuando dio su último golpe, lanzo al polimelio lejos, haciéndolo estrellar contra un árbol, mientras el caía sobre sus rodillas completamente exhausto.

- Esto... se acabó... – dijo Neji entre jadeos y mirando el suelo, pero queda en shock cuando escucha un sonido al frente y cuando levanta la mirada ve a su enemigo poniéndose de pie mientras una armadura dorara caía de su piel – "maldición, aún tiene las fuerzas para poder hacer eso" – pensó realmente alarmado.

- Se los... reconozco... me han hecho mucho daño... pero aun puedo matarlos – dijo Kidomaru viendo al mocoso de gafas oscuras que se acercó a su compañero Hyuga – "mi armadura no pudo protegerme de todos los ataques, ya no siento dos brazos izquierdos y me cuesta respirar, pero no pienso morir sin antes acabar lo que empecé" – se dijo con odio dirigido a sus presas.

Kidomaru abrió tanto como pudo su boca y reuniendo todo el Chakra que aun tenia, pues su siguiente ataque sería el ultimo, pero a la distancia de esos mocosos y con lo lastimado que estaban, era imposible que pudieran esquivar el ataque, mucho menos sobrevivir. Tanto Shino como Neji se alarmaron ante las acciones de su enemigo, estaban demasiado cansados como para seguir luchando y aún más para defenderse, pero aun así, Neji se puso de pie y tomo por la cintura a Shino mientras pasaba uno de sus brazos por detrás de su cuello, tenían que retirarse y encontrar una cobertura, pero antes de que pudieran darse media vuelta, ven como de la boca de ese sujeto se comenzaron a cumular varios kunai.

Con Shikamaru

Tayuya ya se estaba aburriendo de que esa pequeña rata de cabello de piña no saliera para que sus invocaciones lo partieran en tres, no había manera en que pudiera ganar, tenía la pelea de su lado y aunque estuviera cansada, el resultado sería el mismo, pues jamás perdería contra ese estúpido, pero si había algo por lo cual darle crédito, era que podía esconderse bastante bien, como la pequeña rata inútil que era.

Shikamaru que estaba escondido entre las ramas de los árboles, estaba de cuclillas en su clásica posición de pensamiento cuando algo lo superaba, no contaba con mucho armamento ninja y ya había usado casi todas sus bombas de humo y papeles bomba para solo escapar de esas sanguijuelas, abrió los ojos de golpe y sonrió, diez, diez movimientos fueron los que logro obtener que le darían la victoria en tan dura pelea, tomo todas sus armas y comenzó a preparar su plan.

Tomando un kunai el pelinegro le ato un papel bomba y lo lanzo cerca de la pelirroja, siendo ese su primer movimiento, donde la pelirroja al ver el papel bomba, salto lejos del rango de la explosión, donde no pudo evitar sonreír divertida ante tal patético intento por parte de estúpido ratoncito, cambiando la tonada, dirigió a una de sus invocaciones justo de donde salió el arma, pero aun así, comenzó a buscar con la mirada todo a su alrededor, pues no se daría el gusto de bajar la guardia, Shikamaru que ya se había movido de posición, quedando justo arriba de la pelirroja y colocando una bomba de luz, siendo ese su segundo movimiento, aun escondido se colocó frente a la pelirroja y lanzándole un kunai de frente, obligándola a usar a una de sus invocaciones a cubrirse y mandar a otra justo donde fue lanzado el kunai, donde obviamente ya no estaba, ese fue el cuarto movimiento, luego lanzo varios shuriken a varias ramas con cuerdas de alambre que sostenían kunais y que al ser cortados, fueron lanzados en dirección a la pelirroja, fueron el quinto, sexto, séptimo y octavo movimiento, y como lo supuso la misma invocación que la cubrió del primer kunai también la cubrió de los otros cuatro, solo que no noto que uno de los kunai tenía alambre, salto de su escondite aterrizando frente a la pelirroja, donde antes de ello, lanzo su kunai en dirección a la bomba de luz, siendo ese el noveno movimiento.

- "Primero se esconde como una rata para luego lanzar kunais como un idiota y luego aparecer frente a mí, ¿Pues qué demonios está planeando?" – cuestiono Tayuya mientras veía al mocoso y les ordenaba a sus invocaciones atacarlo, aunque arquea una ceja cuando este no hace ningún movimiento para esquivarlos, pero luego nota como una pequeña esfera cae frente a ella – "¿Una granada de luz?" – se preguntó para luego alarmarse por completo al descubrir lo que pasaba.

- Jutsu Posesión de sombra – dijo Shikamaru con calma cuando la bomba de luz exploto y logro expandir su sombra a un más, logrando capturar a las tres invocaciones al mismo tiempo.

- ¿Pero cómo? ¡¿Cómo demonios lograste predecir los movimientos de mis títeres?! – pregunto una muy enojada Tayuya al ver a ese infeliz sonreírle como si ya hubiera ganado - ¡Una maldita rata como tú nunca hubiera podido diferenciar las leves diferencias en mis notas musicales.

- Pues justamente así, yo no le puse atención a tu música, le puse atención a tus dedos – respondió Shikamaru sin perder su sonrisa, mientras se ponía en una pose como si estuviera tocando una flauta y las invocaciones lo imitaron, cosa que hizo enojar aún más a la pelirroja – tu usas los dedos índice y anular derechos, luego con el dedo cordial y el meñique izquierdos, eso hace actuar al hombre de las garras, y cuando usas el pulgar e índice derechos, y el índice y meñique izquierdos, el del garrote ataca, ¿Continuo? – explico como si fuera lo más normal del mundo – mientras tu perdías el tiempo esquivando mis ataques y en buscarme, yo me enfoque en analizar y memorizar los patrones de tus dedos, logrando deducir como actuarían.

- Eso es imposible – dijo Tayuya aun incrédula por lo que acaba de escuchar, acto seguido toco su flauta para que sus títeres atacaran de nuevo, pero estos no se movieron – ¡Eres una maldita rata embustera!

- Esa no es forma de hablar para una dama – comento Shikamaru con burla.

- ¡¿Quién mierda te crees para decirme como hablar?! ¡Yo hablare como me dé la gana pedazo de mierda! – rugió Tayuya con los ojos en blanco y una vena gigante en su frente, pues nunca le gusto que le dijeran como hablar.

- Bueno como sea, ahora como en el Shoji, tus tres piezas son mías y con ellas te acabare – comento Shikamaru con una sonrisa que se volvió una mueca cuando la pelirroja le sonrió con diversión y no dejaba de mirarlo con esos grandes ojos – ¿No deberías estar un poco más preocupada? Podrías intentar lanzarme un kunai por lo menos – comento tomando el alambre que estaba atado al kunai estaba enterrado en el brazo de una de las invocaciones con su mano derecha.

- Je mi flauta es mi única arma, y no ha habido ni una triste alma que haya sobrevivido a su melodía y definitivamente tu no serás el primero, estúpido – comento Tayuya agrandando su sonrisa.

Shikamaru ignoro las palabras tan delicadas de su oponente y salto al frente, donde las invocaciones frente a él imitaron su acto, Tayuya solo sonrió con diversión y con una simple pose de manos, hizo desaparecer a sus invocaciones en explosiones de humo, pero de lo que no se dio cuenta, fue que el pelinegro sonrió cunado ese movimiento y justo antes de que las invocaciones desaparecieran, las libero de su Posesión de Sombras, para que no imitaran su gesto, pues tiro con fuerza del alambre, jalándose al frente y cuando la invocación exploto tomo el kunai y gracias al humo, pudo aparecer frente a su oponente sin que esta pudiera reaccionar a tiempo, ese fue su décimo movimiento. Aterrizando en la misma rama que su oponente, Shikamaru en un movimiento rápido la golpea en el rostro con el pomo de su kunai haciéndola dar varios pasos hacia atrás, y sin perder tiempo trazo sellos de mano, para atraparla en su Jutsu de Sombra Estrangulante. Tayuya se dio cuenta de que no solo no podía moverse, sino que su cuerpo entero estaba siendo estrangulado por esas sombras, donde lo que parecían manos se dirigían a su cuello.

- Bueno parece que funciono, en cualquier buena estrategia el primer movimiento siempre es un engaño, donde debes prestar más atención es en el segundo movimiento – comento Shikamaru con una sonrisa – sabía que dispersarías a tus invocaciones, pero gracias a su tamaño, pude esconderme en sus explosiones de humo y atraparte, te lo dije, usé tus propias piezas para acabarte.

- ¡Bastardo creído! – rugió Tayuya con enojo e intentando moverse pero le fue inútil – "Nunca pensé que tendría que recurrir a la segunda etapa contra un mocoso estúpido como el" – pensó mientras su sello comenzaba a crecer y diseminarse – "Me da rabia, pero debo admitirlo, para ser una escoria, es bastante impresionante" – se dijo mientras sonreía.

Shikamaru miro confundido como su oponente comenzó a cambiar, su piel se volvió de un color marrón y sus grandes ojos marrones se volvieron amarillos, su cabello creció aún más, adquiriendo una tonalidad más rosada, también le crecieron un conjunto de cuernos que rompieron el sombrero que usaba.

- "Esto definitivamente no puede ser bueno, tengo que noquearla ahora" – pensó alarmado Shikamaru, dando varios pasos al frente y lanzando otro golpe con el pomo de su kunai al rostro de la pelirroja.

- Esta vez no te resultara tan fácil – dijo Tayuya deteniendo el golpe del pelinegro al sujetar con sus manos las suyas impidiéndole avanzar y que también que soltara el arma, mientas lo empujaba lentamente hacia atrás, para apuñalarlo con su propia arma aun en sus manos – puedes pensar que eres muy listo, pero no eres más que una sucia alimaña que esta por morir.

- "Imposible, se está revelando contra mi Jutsu, no cabe duda que su transformación es más que solo hacerla fea, le da un aumento irreal de Chakra" – dedujo Shikamaru mientras usaba su mano libre para acertar otro golpe, pero fue frenado cuando la pelirroja soltó una de sus manos y detuvo su ataque al sujetarlo por la muñeca, hizo una mueca de dolor cuando lo sujeto con fuerza – "Maldición, más vale que seas una Uzumaki o en verdad me enojare por tomar tantas precauciones para no lastimarte" – se dijo con enojo, mientras mandaba una mano de sombra estrangulante al cuello de la pelirroja para que la dejara inconsciente.

Tayuya apretó los dientes con enojo mientras forzaba al sello a darle más Chakra, haciendo que sus cuernos crecieran aún más, su cuerpo no podría soportar tanto Chakra del sello, pero si no lo intentaba moriría, sintió como la mano que le apretaba el cuello comenzaba a retroceder a la vez que empujaba la muñeca de esa maldita alimaña para atravesarlo con su propia arma mientras que con la otra mano intentaba romperle la muñeca. Shikamaru estaba forzando cada gramo de su Chakra restante a su Jutsu, pues quería dejarla inconsciente lo más rápido posible, pues todo su plan se basaba en eso, ya que sabía que podía lidiar con el aumento de ese Chakra gracias a esas marcas extrañas, pero nunca se imaginó una transformación que le otorgara más poder, ahora su única opción era usar todo el Chakra que le quedaba y dejarla inconsciente, pero en vista de la enorme resistencia que ponía, eso sería imposible, por lo cual, tendría que romperle el cuello si quería salir vivo de tan problemática situación.

Con Kiba y Sai

El Inuzuka estaba cayendo justo sobre su enemigo con su kunai bien sujeto y apuntando a su corazón, necesitaba matarlo cuanto antes y aprovechar que su compañero capturo al otro fenómeno para igualmente matarlo, pues ya no sabía por cuanto más podía seguir. Ukon aun en el suelo abre los ojos al sentir el peligro y ve a su presa justo sobre él, donde en un movimiento rápido lanza una poderosa patada de derecha que logra conectar justo donde ese tipo se apuñalo, haciendo que escupa sangre y algunas gotas caigan sobre su rostro, pero aun así, con su otra pierna lanza otra patada a su rostro mandándolo lejos, Kiba cayo bruscamente en el suelo haciéndolo soltar el kunai, se intentó levantar para solo caer sentado y al mirar hacia arriba ve como su enemigo ya está de pie frente a él con su kunai en su mano derecha.

- Diste una buena pelea mocoso, eso te lo reconozco, pero aún no tienes lo que se necesita – comento Ukon con una sonrisa burlona.

- "No, no puedo morir aquí, mi compañero aun me necesita, debo hacer algo" – pensó frenéticamente Kiba por no poder ayudar a su amigo.

- ¡Este es tu fin! – grito Ukon dirigiendo el arma en su mano justo al rostro de su presa.

. . .

Sakon tomo las serpientes que lo estaban estrangulando el cuello y con un fuerte tirón las destruyo, luego mordió a las que le sujetaban los brazos y por último sujeto a las que lo tenían prisionero de las piernas, repitiendo el proceso de destruirlas de un fuerte tirón.

- ¿Alguna otra bestia que quieras traer a la fiesta? – pregunto Sakon con burla.

- Solo a tu madre – se burló Sai recordando uno de sus libros sobre cómo evitar ofender a los demás, aunque en esta ocasión aplico lo aprendido a la inversa.

Sakon rugió ante esa respuesta y lanzo su mano derecha contra el pecho del pelinegro para hacer justo lo que había prometido.

. . .

- ¡Ahora mueran! – grito Kidomaru con su boca llena de kunais.

El polimelio comenzó a lanzar una enorme cantidad de kunais que terminarían por drenar todo su Chakra, pero lo valía, necesitaba acabar con esos dos de una buena vez. Neji y Shino solo miraron con los ojos bien abiertos esa enorme cantidad de armas lanzadas en su dirección, no podían esquivarlas, no podían repelerlas, la rotación no funcionaría con esas cosas tan cerca y con el Chakra del Hyuga por los suelos, el par de ninjas de Konoha llevaron sus brazos sobre sus rostros a modo de escudo en un vano intento de esperar sobrevivir al ataque.

. . .

Shikamaru estaba sudando a mares por el enorme esfuerzo que estaba haciendo, por cada centímetro que lograba acercar su sombra al cuello de la pelirroja, esta forzaba la sombra a retroceder el doble, ya no podía durar mucho tiempo, sentía como la mano que tenía sujeto el kunai cada vez estaba más cerca de su cuerpo y dentro de poco lo iba a atravesar. Tayuya sonrió cuando sintió que la sombra comenzaba a retroceder no solo de su cuello sino también del resto de su cuerpo, ya estaba cansada y no sabía cuánto tiempo más su cuerpo soportaría el Chakra del sello, pero era claro quien terminaría cediendo primero.

- "Me estoy partiendo la cabeza, ¡¿Por qué diablos no se me ocurre ningún plan?!" – se cuestionó Shikamaru ya sintiendo que terminaría por perder el control sobre su sombra en cualquier momento – "Si tan solo alguien... ¡No! ¡No puedo depender de los demás! ¡Si elegí pelear contra ella es porque sabía que podría! ¡Cálmate y piensa en algo! ¡Pero ya!" – rugió en su mente, forzando a su cerebro en encontrar una solución.

- Jeje esto se acabó, pequeño pedazo de basura – murmuro Tayuya con una sonrisa arrogante al sentir como todo su cuerpo se liberaba, jalo la muñeca derecha del pelinegro hasta que tocara su abdomen para luego empujarlo de nuevo con fuerza hacia este - ¡Eres mío!

Shikamaru abrió los ojos en horror al ver como su propia arma aun en su propia mano se dirigía a su abdomen para apuñalarlo, pero cuando estaba por ser atravesado una poderosa onda de viento manda lejos a Tayuya, salvándolo en el proceso, el pelinegro solo pudo mirar en shock en dirección en donde su oponente fue mandada a volar.

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Ukon abrió los ojos en confusión cuando clavo el kunai en lo que parecía ser una marioneta que sirvió como escudo para proteger al Inuzuka, que igualmente miraba perplejo la marioneta pues sabia a quién pertenecía.

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Sakon estaba a centímetros de lograr atravesarle el pecho al pelinegro, pero eso nunca pudo concretar su ataque pues una poderosa onda de viento lo empuja lejos de este, mandándolo en dirección a su hermano, el cual no pudo reaccionar a tiempo y ambos fueron empujados contra las rocas con una gran fuerza.

Sai parpadeo confundido ante eso y con dificultad dirigió su mirada hacia arriba donde solo pudo ver una silueta parada sobre donde estaba recostado y solo pudo sonreír ante la figura que vino para ayudarlo.

. . .

Kidomaru había logrado lanzar todos su kunai y esos mocosos no pudieron ni mover un musculo para salvarse el pellejo, tuvo que ganar, debió ganar, pero sabía que eso no pudo ser posible al ver una enorme muralla hecha de cadenas doradas que protegieron a sus presas.

Neji y Shino bajaron los brazos y abrieron los ojos al escuchar el choque de armas y cuando miraron al frente quedaron impresionados ante lo que tenían frente a sus ojos, una enorme muralla a modo de protección que los salvo de ese letal ataque.

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- ¡¿Quién diablos eres tú?! – pregunto Tayuya aferrándose a un árbol con las manos para no ser manda a volar mientras veía a una rubia aterrizar al lado del pelinegro

- Soy una aliada de Konoha – respondió Temari con una sonrisa confiada en su rostro, una mano en su cadera y la otra sujetando su abanico completamente abierto.

. . .

- Un ninja de Suna – respondió Kankuro a la pregunta de esos fenómenos, con una mano controlando su marioneta y con la otra sujetando la que llevaba envuelta en la espalda.

- Mira nada más, en verdad sí que es un gusto tenerte de nuestro lado – comento Kiba viendo al marionetista de Suna.

. . .

- Creo que llegue justo a tiempo – comentó Menma con una sonrisa zorruna aterrizando al lado del pelinegro mientras buscaba un kit médico para tratar la herida en su hombro.

El pelirrojo frunció el ceño en preocupación cuando vio que la herida que presentaba el pelinegro era profunda y no solo eso, ya había perdido mucha sangre, miro rápidamente para ver el estado del Inuzuka, que igualmente parecía herido, y solo fulmino con la mirada a esos fenómenos que comenzaban a ponerse de pie.

- Hubiera estado mejor hace un par de minutos – murmuro Sai con una de sus clásicas sonrisas, haciendo que el pelirrojo girara para mirarlo.

- Bueno lo siento – dijo Menma con una sonrisa de disculpa.

. . .

- ¡¿Quién diablos esta allí?! ¡Muéstrate! – rugió Kidomaru buscando frenéticamente a quien logró detener su ataque.

La respuesta del polimelio vino cuando un kunai de tres puntas se clavó en el suelo justo al frente de los ninjas de Konoha, donde este pudo ver como un segundo después una chica pelirroja con su cabello atado en una cola de caballo alto apareció sobre ese extraño kunai, la chica lo miraba con seriedad y con los brazos caídos a los lados mientras sujetaba un kunai en cada mano en un agarre inverso. Neji y Shino sonrieron al ver la espalda de una de sus camaradas de la Hoja y soltaron un fuerte suspiro que ni siquiera sabían que estaban conteniendo. Natsumi miro por encima de su hombro y vio el terrible estado en que se encontraban su compañero de generación y el amigo de su hermano rubio, pero casi de inmediato frunció el ceño en molestia y regreso la mirada al fenómeno frente a ella.

- Esto... jamás te lo perdonare – murmuro Natsumi con odio mientras sujetaba con fuerza sus kunai, mientras cuatro cadenas salían de su espalda y se blandían como si fueran colas.