-33 Sacrificios-
Pov Hiro
Su mirada no me dejaba de ver, podía sentir una extraña sensación de odio o molestia. Nunca lo había visto de esa forma, parecía que aquél Miguel alegre y cariñoso lo habían matado, desapareciendolo de la faz de la tierra. Agaché la mirada para evitar esa incómoda expresión en él. Cómo pude me levanté y me sacudí un poco el polvo de mis ropas, pero de inmediato noté que en una de sus manos estaba vendada haciendo despertar mi interés.
-¿Te has lastimado?
-¿Qué demonios haces aquí?- evitó mi pregunta, sentí en mi pecho un gran peso. Recordé lo que me había dicho ayer, sus palabras me hacían debilitarme cada vez que lo escuchaba en mi cabeza. Me mantuve en silencio, intentando buscar las palabras para confrontarme a él y decirle lo que está sucediendo, pero mi cabeza no estaba ayudándome en este momento. Lentamente lo miré, pero sus ojos estaban inexpresiva, podía ver el disgusto por mi presencia. ¿Qué es lo que debería hacer?
-Joven Miguel- habló una mujer no muy mayor. Al parecer era una de las sirvientas de la tribu de plata, sus ropas eran impecables y limpios. No podías ni encontrar una pequeña arruga sobre ella.- La ceremonia está lista, las tribus lo esperan.
Miguel solo se quedó en silencio, me observo por unos segundos y dió media vuelta, dejándome solo ver su espalda alejarse cada vez más. La mujer solo se limito a hacer una leve reverencia y siguió su camino en dirección a donde se había ido Miguel. Mi corazón estaba a punto de estallar, deseaba ir hacia a él y poder traer de vuelta a aquel sonriente chico que estaba decidido en ir en contra de todo. Pero cuando estaba a punto de avanzar una mano se posó de golpe en mi hombro haciéndome voltear de inmediato.
-¿Hiro? Te estaba buscando como loco.- era Wasabi- ¿Pasó algo?
-Ví a Miguel...
-¿Pudiste decirle algo?
-No siquiera...ni una palabra...pero...he llegado...tarde.- Wasabi me miró con más preocupación, su rostro me daba una señal de darme un consejo, sin embargo, el sonido de los tambores iniciaron con su presencia.
-Hiro, aún no es tarde. Tadashi acaba de mandar un texto diciendo que han encontrado a Héctor. Así que aún tenemos tiempo perfecto para interferir. He detectado a tus demás amigos no muy lejos de aquí. Supongo que ellos te escucharán si les adviertes.
-Tienes razón...- respiré profundamente. No debía comportarme como un cobarde ahora, si amaba demasiado a Miguel, tenía que sacrificarme.- Vamos de inmediato antes que sospechen de nosotros.
Wasabi asintío y corrimos en dirección a buscar a los demás, pero, lo que no teníamos en cuenta era que un par de ojos ya había puesto su interés en nosotros. Mientras más nos alejamos, el sonido de los tambores no dejaban de parar. El olor a leña encendida se podía percibir perfectamente, el cielo estaba apagándose para convertirse en una noche extraña y misteriosa. Sabía que quedaba poco tiempo para que la luna llena se colocará en el punto exacto para iniciar la ceremonia.
"El lazo se ha hecho antes"
Esas palabras resonaban en mi mente, la imagen de la mano cubierta de vendas de Miguel me hizo detenerme en mitad de nuestro camino, con lentitud miré la mía y mis conclusiones llegaron de golpe. Él ya sabía que estaba enlazado conmigo, pero aquella fría mirada no era de disgusto, era de miedo y tristeza. Sonreí algo decaído, cómo pude haber Sido tan idiota por creer que en verdad me quería lejos de su vida. Empuñe mi mano con fuerza y continúe corriendo, mi corazón ahora se aceleraba con más intensidad, esa adrenalina misteriosa estaba corriendo por todo mi ser. Y ahora estaba decidido de salvar sus vidas.
Ya podía detectar el olor a Tadashi muy cerca, seguimos un pequeño tramo más cuándo los vimos haciendo una señal. Pero cuando ya estaba a poco de detenerme, un inmenso dolor en mi pecho hizo que cayera al suelo. Mis gritos eran fuertes y agonizantes, el dolor no dejaba de arder dentro de mí,podía escuchar mis latidos acelerados a punto de explotar. De nuevo ese calor en mi cuerpo apareció, era similar a la vez que luchamos contra Renesmee, pareciera sentir sus mirada sonriente sobre mí.
-¡Hiro!- gritó Tadashi quién no dudo en ir hacia dónde estaba agonizando. Wasabi me levanto para ponerme boca arriba, mi hermano colocó su mano sobre mí y la alejo de golpe.- está...ardiendo de fiebre...¡Baymax protocolo de sanación!
-Entendido, Tadashi.- Baymax se acercó a mí para tratarme pero, un brazo hizo detenerlo.
-¿Héctor? ¿Pero que....?
- Tu hermano no está enfermo.
- ¿Qué no escuchaste? ¡Está ardiendo de fiebre! - exclamó Gogo, pero Héctor no respondió nada. Me miró con seriedad y este se agachó en frente mío, todos estaban extrañados a lo que estaba sucediendo. De nuevo me quejé de dolor por el pecho, Tadashi no podía solo estar esperando pero Héctor seguía deteniendolo.
-Te han mordido antes, ¿Verdad?- esas palabras me hicieron quedarme quieto por un momento, aunque no podía dejar de intentar buscar aire fresco, ya no podía respirar correctamente. Respondí como pude asintiendo mi cabeza.
-¿Mordido?- preguntó tímidamente Honey Lemon.
-¡Woow se convertirá en un hombre lobo! ¡Auch!- dijo Fred mientras era golpeado por Kubo quién estaba en un costado.
-No exactamente. No es como en las películas que por una mordida será completamente un hombre lobo. Esté se convierte en un especie de veneno para los humanos...al menos que este se controlé por sangre de otro lobo. - sacó una pequeña daga y cortó un poco de su mano dejando correr su sangre, la colocó frente a mis labios y dejo que la bebiera. Eso mismo había hecho Leo la última vez, pero, ¿Porqué había regresado?
La sangre amarga bajaba por mi garganta, podía sentir el dolor y el calor bajar lentamente. Mi respiración volvió a regularse y mis latidos a calmarse.
- Cuándo eres mordido por un lobo, esto sucede. Nuestra sangre es un tranquilizante temporal, si lo dejó es posible que muera por el dolor. En el tiempo que está calmado puede tener síntomas similares a uno de nosotros, sin embargo, es un peligro que un humano este sufriendo.
-¿Tiene alguna cura?- Héctor miró a mi hermano por unos segundos y después dejó soltar un leve suspiro.
-La hay, pero...está vez de vuelta tiene que ser mordido...
- ¿Ahora si como en las películas?
-Algo así, Fred. Pero esta mordida solo se puede hacer en el último momento...en el último...solo si Hiro esté a punto de morir.
Mis ojos se abrieron de golpe, aún no podía creer que esa sería la cura para no sufrir estos cambios por el veneno. ¿Morir?, En verdad debería ser una broma para que eso pasara. Me levanté ya un poco mejor, todos me veían con un rostro de terror, excepto Tadashi. Parecía que estaba sufriendo por dentro.
-Pero...por el momento. Beber nuestra sangre es la única opción para mantenerlo así...además yo..no...- Héctor se detuvo para hablar cuándo miró al cielo con algo de sorpresa. Allí estaba, la brillante Luna haciendo su presencia; era más grande de lo normal. El tiempo estaba corriendo, no había mucho por esperar, cuándo al fin pude ponerme de pie un ruido en los arbustos hizo ponernos en alerta. Sin embargo, aquél aroma pude reconocerlo, les hice una leve señal a mis amigos para que se calmaran. Entre las sombras una silueta caminaba hacia nosotros, esos ojos afelinados hicieron que la tranquilidad bajara. Kyle sin dudar se acercó a Marco abrazándole con fuerza, él también respondió de esa forma.
- Parece que han visto a un difunto.
- Pues, no estás tan lejos de ello - respondió Kyle sonriéndole de alguna forma.
-Pude oler tu aroma chino, sabía que no ibas a dejarlo así nada más. Además de que la sangre de Héctor se podía oler fuera de dónde estaba encerrado.
- ¿Porqué viniste hasta acá? ¿No te siguieron?
-No, están muy ocupados embobados con los que serán los principales protagonistas de la ceremonia. Pero tampoco son tan tontos de no darse cuenta de su aparición. Han rodeado la aldea y será más difícil entrar tranquilamente.
- ¿Dónde está Leo? ¿Se encuentra bien?- comentó Kubo con algo de preocupación.
- Él está bien, pero, lo hicieron estar cerca de su manada ahora. No puede hacer mucho por ayudarlos. No deberían estar preguntando demasiado ¿saben?. Ya queda muy poco tiempo para irse todo a la chingada. Hiro, tú eres el único que puede detener la ceremonia y desenmascarar a estos idiotas.
-¿Con qué? No tengo pruebas para decirles en frente de un inmenso número de tribus, que es seguro lucharán en contra de nosotros.
-Bueno, yo puedo asegúrate algo.- ahora habló Héctor de nuevo.- los plata están ocultando un humano entre ellos, si no me puedo equivocar es la mujer con que casarán a Miguel.
- ¡¿Qué?!
-Dios, esto es más interesante que los dramas que veo en las series.- dijo Fred con una sonrisa.- entonces, si ellos ocultan un humano, debe haber un punto débil...¡La sangre! ¡Hiro, tienen que oler su sangre!
- Es verdad. En la ceremonia hay un punto dónde deben unir sangre por tribu. Estoy más que seguro que lo omitiran a toda costa.
- ¿Cuál es entonces ahora el plan, hermano?- me quedé en silencio, era demasiada información para procesarlo, miré de nuevo a la Luna buscando alguna respuesta. Alcé mi mano para ver de nuevo mi marca, ya era más claro, él me pertenece y yo a él.
-Debemos atacar ahora mismo.
-------------------------------------
Continuará.....
Heeeeeeeeeeyyyy volvinos de las tinieblaaaaaaaaas!!!!! Jajaja
Uffff en serio nos perdimos por mucho tiempo, quería continuar pero ahhhhhh Vegitto dijo que mejor guardara lo que seguía en el siguiente cap ❤️❤️ ufff se viene de las buenas.
En primera el título no va con lo de hoy xD jajajaja. Pero nos ayudó para inspirarnos en el siguiente. 😪😪
De mi parte lamento ir dando vueltas de que si escribía y no, en verdad sucedieron muchas cosas en estos tiempos perdida. Pero, bueno de nuevo vino a mi la motivación de nuevo ❤️❤️❤️😭💓
Espero que les haya gustado nuestro regreso. ❤️❤️
¿Alguna teoría de lo que vendrá?
Nos vemos en la siguiente!! Los amamos ❤️❤️💕🤭🤭
Beka-san~
=Vegitto=
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top