Cualquier persona con el corazón roto, es capaz de lastimar a quien alguna vez juró proteger...

Un nuevo día le daba la bienvenida a Cipher, recibiéndolo con la cálida luz del sol...

-¡Joder! Parece que hiberné todo un año...- Decía Bill estirándose y sentándose en su cama- ¿Que pasó anoche?- y en forma de destello, recordó el trato con Leonardo.

Soltó un suspiro, miró en dirección al suelo y con los pies descalzos se hincó frente al papel arrugado para recogerlo. Lo desdobló y al chasquear los dedos apareció un teléfono celular en su mano libre.

Fácilmente pasaron más de diez minutos con un Bill Cipher viendo la tarjeta y el teléfono, reflexionando sobre si llamar o no... Con un suspiro y el corazón a punto de estallarle con tantas emociones bombardeándolo tomó su decisión.

-Mierda, espero no meter la pata con esto- Se vistió con su traje amarillo y negro, sin olvidar su sombrero que rompía las leyes de la gravedad y bajó tratando no despertar a nadie... Propósito inútil ya que todos estaban despiertos.

Caminando sobre la punta de sus pies, Bill atravesaba con mucho sigilo los pasillos con dirección al comedor.

-No debo hacer ningún ruido... Espera, que imbécil soy, ¡Puedo flotar!-.

Comenzó a flotar para no hacer ruido y cuando llegó al comedor se detuvo en seco al percatarse de la presencia de JokerBoy, sentado en la mesa; estaba petrificado, esos ojos escarlata se cristalizaron con sólo ver al rubio.

JokerBoy se levantó inmediatamente y corrió hacía Bill, mientras sus lágrimas fluían por sus mejillas.

Joker- Bill, l-lo lamento tanto... Puedo explicarlo-.

Pero Bill no escuchaba, su mirada expresaba seriedad, y hasta cierto punto, frialdad... Ningún sentimiento se asomaba por esos ojos color ámbar.

Cuando JokerBoy estaba apunto de llegar a Bill una cadena azul atrapó a su muñeca derecha y le impidió avanzar más.

Joker- ¿Bill?- preguntó confundido- ¿Qué haces?- Bill lo observó con la mirada desbordando odio y dijo con una voz algo grave:

Bill- Dile a Carla que saldré de visita, no me vuelvas a dirigir la palabra a menos de que yo te lo permita... ¿Entendiste?- Sujetó su mentón y lo obligó a observarlo, JokerBoy desvío su mirada cristalina pero las cadenas lo apretaron más- ¡Contéstame cuando te hablo! ¡Mirame!-.

Joker- S-si...- Las lágrimas no le dejaban hablar con claridad.

Bill- ¡Si, señor!- Gritó y apretó con fuerza extraordinaria el mentón del chico.

Joker- Si, señor- Decía entre sollozos.

Bill lo soltó y desapareció la cadena de la mano de JokerBoy y éste último se dejó caer en el suelo tapándose la cara con las manos intentando, de manera inútil, esconder sus lágrimas.

Bill- Y yo me sentí mucho peor con tú maldita traición... - Chasqueó sus dedos y desapareció.

.
.
.

Apareció frente a una casa, demacrada por el tiempo, pero con un aura compleja, llena tanto de alegría como de angustia o decepción. Caminó hacia la puerta y tocó el timbre. Un estrepitoso tintinear se hizo presente... Era eso, o los pensamientos de Bill se volvían en su contra como un cargo de conciencia.

Pasaron los minutos y no se escuchaba señal de vida dentro de aquella casa. Bill tocó el timbre varias veces más y su paciencia se agotaba.

-Tal vez sea una señal del Destino, nah, a quien engaño, ese iditota ha de estar más ocupado en otras cosas-.

Bill se dio media vuelta y empezó a desender por las escaleras del patio. Hasta que una mano sujeto su saco haciendo voltear tan rápido que cuando pudo reaccionar, Leonardo ya le había dado la vuelta y robado un beso que Bill correspondió.

Leo- Vaya, vaya, vaya, Pero que impaciente eres Billy~ - Canturreó el menor sujetando la corbata del rubio y acercando sus rostros al punto de tocar sus narices.

Bill- ¡¿Y a que se debe ese beso?!- Preguntó con un sonrojo creciendo en su rostro, apartandose de Leonardo.

Leo- Se me dio la gana, me gusta el sabor de los demonios... Tanto retóricos como literales... Pero que modales los míos, vamos entra, no hay nadie en casa más que yo-.

Bill entró desconfiado de lo que sería capaz de hacer Leonardo.
-Debo cuidarme de este cabron, no caeré en sus juegos- .
Siguió al menor por toda la casa hasta que llegaron a lo que supuso era la habitación de chico.
-Bastante simple, un escritorio, una laptop, un armario... Y una cama... Rayos como tengo ganas de... No, Bill reprime tus impulsos de lujuria-.

Leo- Vaya que no esperaba visitas hoy Billy, tendrás que esperar a que termmine mi tarea primero- Dijo sacándole de sus pensamientos, mientras se sentaba frente al escritorio y encendia la laptop.

-Joder Bill resiste... No es momento para que empieces con tus deseos carnales... No es correcto-.

Leo- Vaya que eres más callado de lo que pensé, ¿Querrás que te saqué las palabras yo mismo? ¿En que piensas Billy~?- Decía sin apartar la vista de su monitor.

-No es correcto, el tiene novio, tiene a... JokerBoy... Y por lo que entiendo, este sujeto no ama demasiado que digamos a JB...-.

Bill- Aaaah!! ¡A la mierda todo eso!- Dijo levantándose de la cama del menor y llamando su atención.

Leo- Billy, ¿Que sucede?- Leonardo dejó la laptop y miró en dirección al demonio que ahora lo cargaba hacía su cama con una mirada llena de lujuria.

Bill- Sucede que te voy a violar... PineTree- Su sonrisa le daría miedo a cualquiera, a cualquiera menos a Leonardo.

Leonardo sonrió, rodeó con sus brazos y piernas el cuello y cintura de Bill y lo besó, acto que el rubio correspondió y se separaron sólo por falta de aire.

Arqueando una ceja y con una mirada seductora le dijo a Bill:

No es violación si lo disfruto
______________________________________

Hasta aquí voy a dejar el capítulo, el Lemmon vendrá en el que sigue...

Son las 2 de la mañana y yo no he dormido nada 🎶🎵

Ok no... Creo que debo ir a dormir... Hasta pronto mis sensuales Doritos

P.D: ¿Soy la única que cree que Bill es un ninfomano?

JokerCipher