—¿Quiénes... quiénes son?—

La voz del jombre salió ronca y quebrada, suponía que se debía a qué era su verdadera voz y no la de Kurogiri, 

¡Shinsō lo había logrado! ¡Realmente lo hizo! Ya sabía que él podría hacerlo, pero jamás creyó que le llevaría tan poco tiempo, incluso llegó a pensar que le llevaría varios días, no es que desconfiará del de cabello índigo o lo menospreciará, simplemente sabía que él era aún muy joven y no controlaba del todo su peculiaridad, por lo que obviamente se le haría difícil quitar el control mental que alguien más puso sobre una persona, aunque considerando que en el futuro el alumno de Eraserhead iba a tomar el control de Gigantomachia (un spoiler que había visto en su vida anterior antes de morir) este sería un buen método para fortalecerlo. 

Se acercó al hombre y puso su mano derecha sobre la mejilla del contrario. —estás tan hermoso como el día en el que te fuiste—

—¿Quién-es son? ¿D-dónde estoy?— Pregunto, está vez que voz salió más firme, pero en sus palabras había un ligero tartamudeo.

—Está en un lugar seguro así que no se preocupe Shirakumo-san, soy Kaori y ese de ahí es Hitoshi-kun, ¡Su Quirk es lavado de cerebro! ¡Él uso su Quirk para liberarlo de aquellos grilletes que lo mantuvieron como prisionero!— Dijo con entusiasmo la reencarnada, que pronto se dio cuenta de algo, ya habían pasado mucho tiempo desde que dejó la Yūei y al menos tres desde que se comunicó con Aizawa, ¡Tenía que avisarles!. —¡Santa cachucha! ¡Debo avisarles que todo está bien! ¡Hitoshi-kun préstame tu teléfono por unos minutos!—

Shinsō observó a la pequeña por un par de segundos y luego le entrego su teléfono. —Me lo devuelves al acabar—

—Ya se, no soy una ladrona— Caminó a la cocina con el teléfono en mano y marco el número de Aizawa, tenía suerte de habérselo memorizado junto a los de Fūyumi, Natsū, Shōto y Nezu. El teléfono empezó a sonar y luego de unos minutos Eraserhead le respondió.—¡Venga a buscarme Aizawa-san! ¡Ya concluí mi misión!—

Al otro lado de la línea se escuchó un gruñido de cansancio. -"¿Dónde estás mocosa?"-

—Pero antes de que venga, tengo que avisarle que traiga con usted al gritón, a la señora que huele a colonia barata y al alebrije, ellos serán importantes y le darán estabilidad—

-"Entiendo que quieras que lleve a Nezu, ¿Pero por qué a Hizashi y Nemuri?"-

—¡Solo venga con ellos! ¡Será importante! ¡Mucho muy importante! ¡VENGA CON ELLOS!—

«bien, iré con ellos. ¿Ahora me dirás dónde es que te encuentras?»

—Calle Zahara #347, creo que sabe dónde es que queda, después de todo esté es su territorio— Y era cierto, el distrito donde se localiza la casa de Shinsō era el territorio por dónde suele patrullar Aizawa.

-"Iremos de inmediato"-

La llamada finalizó.

Iba a volver con los demás, pero le entró el hambre así que tomo una silla y se subió en ella, abrió una alacena y encontró una bolsa de pan, tomo uno, después se regreso con Shinsō y el recién recuperado Shirakumo, quien aún permanecía esposado, se quedaría así hasta que Eraserhead y los demás llegarán, no quería que el hombre intentará escapar así que lo mejor era dejarle las esposas, al menos por ahora.

Le devolvió el teléfono a Shinsō y luego se sentó en el sillón junto a Shirakumo. —Hitoshi-kun, lo mejor será que vayas preparándote mentalmente, tu héroe favorito viene en camino hacia acá—

Tras decir eso empezó a comer el pan que se había robado de la cocina, dejando a Shinsō al borde de la histeria, pues el control mental había sido verdadero lo que significaba que la niña podía estar diciendo la verdad sobre la inminente llegada de Eraserhead y eso lo ponía por de más ansioso, ¿En verdad el que liberará a aquel hombre del lavado de cerebro que tenía le daría la oportunidad de estar en el curso de héroes? ¿O iban a encerrarlo por usar su quirk de manera ilegal?.

Mientras los niños estaban metidos en sus propios asuntos, Shirakumo estaba intentando romper las esposas Anti-Quirk que tenía, quería irse de allí y buscar a sus amigos, ¿Cuánto tiempo habría pasado desde la última vez que se vieron? Dudaba que solo unos días o unas semanas, ¿Quizás meses o hasta años?.

El pensar en eso lo hizo sentirse decaído, ¿Sus amigos lo seguirían recordando a pesar del tiempo transcurrido? ¿Cuáles serían las reacciones que tendrían si lo vieran nuevamente?... ¿Si Shōta lo viera de nuevo?, La última vez que hablaron le había prometido que si realizaban adecuadamente la misión en la que de habían visto involucrados, debido a sus pasantías, lo iba a invitar a salir, ¿Él recordaría eso? ¿O lo habría olvidado? ¿Se habrá olvidado de él?.

No les llevo mucho tiempo el llegar a la casa donde estaba Kaori, tan solo esperaban que la niña estuviese realmente allí y no fuera solo una trampa, porque aún cuando conocía a la niña desde hacia poco tiempo, ya había tenido malas experiencias debido a ella, por lo que no podían fiarse.

El auto (que era propiedad de Nemuri) se detuvo justo frente a la casa donde se suponía estaba la niña. Cuando bajaron del vehículo la puerta de la vivienda se abrió y una pequeña mancha oscura corrió hacia ellos.

—¡Papá!— Grito la infante de cabello negro. 

El corazón de Endeavor empezó a latir rápidamente en su caja torácica, está era la primera vez que oía a Kaori decir aquella palabra, ella siempre se comportaba como una irrespetuosa, contradiciendo cada cosa que decía o hacia, ¿Acaso la niña estaba aceptando al fin que era su padre?. 

El mayor observó a la niña correr en dirección a ellos con los brazos extendidos y con una enorme sonrisa adornando su rostro, el héroe de fuego levando sus brazos para recibir a la niña, quien no dejaba de decir la palabra "Papá".

Pero no fue él quien recibió aquel abrazo, sino que su hija menor paso de él y abrazo a Eraserhead, ¿Por qué al héroe clandestino? ¿Por qué la niña le decía "papá" a él?.

—Niña— Dijo Aizawa, quien le acaricio la cabeza, ignorando la mirada asesina que le estaba dando el héroe Número 2. —¿Por qué hiciste todo esto? ¿Por qué huir?—

—¡Estaba tratando de encontrar al amigo de papá! ¡Lo encontré! ¡Y el hermano mayor Hitoshi lo curo! ¡El hermano mayor uso su Quirk y quitó el control mental de él! ¡Y ahora volvió a ser el de antes!—

—¿De qué hablas?— Preguntó confundido, no entendía ni un sola palabra de lo que decía la niña, ¿A qué amigo suyo había encontrado?.

—¡Vamos! ¡Camina! ¡Tienes que verlo! ¡Luego te pondrás super feliz y le pedirás a la Quimera que ponga al hermano mayor en el curso de héroes! ¡Vamos! ¡Vamos!—

La niña empezó a jalar al héroe, que se dejó llevar por la niña hacia el interior de la casa, siendo seguidos por Nezu, Hizashi, Nemuri y Endeavor, que no dejaba de maldecir en voz baja.

Sus piernas temblaron cuando dio el primer paso dentro de la vivienda, sus ojos empezaron a arder y gruesas lágrimas hicieron su descenso por sus mejillas, ¿Era real? ¿O de trataba de una alusión, un espejismo o tal vez una aparición que quería recordarle lo que hacía mucho perdió?.

—¡Shōta!—

Aquel hombre llamándolo fue lo último que el héroe vio y escucho antes de que la oscuridad lo envolviera, convirtiendolo en su prisionero.

Así Se Ve Ahora Shirakumo Oboro, Espero El Diseño Que Elegí Sea De Su Agrado.