Capitulo 4

- Perdonad a mi hermana Irene es que tiene un mal día - digo.

- ¿Jugamos un partido de fútbol? - pregunta un chico pelirrojo.

- A mí me parece buena idea - dice una chica que está al lado de Alexa.

- A que esperamos. Vamos a hacer los equipos - dice Alex.

A continuación empezamos a hacer los equipos. Hacemos un partido de chicos contra chicas para no complicarnos mucho haciendo los equipos y empezar a jugar cuanto antes. Yo me pidió ser portera es lo que mejor se me da. Consigo parar diez goles pero me meten tres. Estamos empatados hasta que de repente en el último minuto de partido Aitana mete un gol y ganamos nosotras las chicas. El marcador final es chicos 3 y chicas 4

- Que suerte Aitana - grita Laila.

Laila va tres cursos por encima mía. Su pelo es de color castaño y sus ojos de color verde oscuro. Lleva puesta una camiseta de color blanco con flores y unos pantalones cortos de color verde botella.

- A sido un partido muy emocionante - dice Álvaro.

Álvaro es un chico un año menor que yo. Su pelo es de color negro y sus ojos marrones. Lleva puesto unos pantalones de color rojo y una camiseta blanca con un balon en el centro.

De repente empieza a sonar una música por la megafonía.

- Es el timbre para ir a comer - dice Aitana.

- ¿Quieres comer con nosotros? - me pregunta Alexa.

- Vale - contesto.

A continuación nos vamos hacia el comedor. El comedor es gigante. Tiene un montón de mesas. Hay que ir a coger la comida al mostrador. En la mesa de al lado está Laura con su nueva amiga Alejandra. También hay mucha más gente.

- Hola - me saluda Laura.

- Hola Laura. Veo que has hecho muchos amigos - digo.

- Hola. ¿Tu quien eres? - pregunta Alex - Yo soy Álex.

- Yo soy Laura la hermana pequeña de Adriana - dice Laura - Adriana sabes dónde se ha metido Irene.

- No. Irene a huido como siempre. Se ha ido a la habitación y me preocupa lo que pueda haber pasado - digo.

- Vamos a comer. Me muero de hambre - dice Aitana.

- Vale. Te veo después Laura - digo y me voy a la fila para coger la comida.

De primero cogo macarrones y de segundo bacalao. De beber me cogí un zumo de naranja y agua. De postre cojo unas natillas y una mandarina mi fruta preferida.

A continuación me voy a sentar. Justo cuando me siento aparece Irene en en comedor. Parece que se haya peleado con un gato. Voy corriendo hasta donde esta ella.

-¿Estas bien? ¿Qué te ha pasado? - la pregunto.

- No te preocupes estoy bien. No me ha pasado nada - dice ella.

- Como que no te ha pasado nada. Parece que te has peleado con un gato - digo riéndome.

- Ya es verdad no tengo muy buen aspecto. Después te lo cuento cuando no haya nadie - dice Irene y se va a por su comida.

La comida trascurre tranquila sin incidentes. Irene se sienta con nosotros pero no habla es como si se hubiese quedado muda.

- ¿Adriana, Irene cuales son vuestros poderes? - pregunta Laila.

Irene se levanta para irse pero yo la agarró del brazo para que no se levante.

- Nuestro poder es el tiempo - contesto.

- ¿Entonces sois Iris? - pregunta Ernesto.

- Si - contesta Irene.

Pobre Irene está súper nerviosa. No le gusta que pregunten sobre sus poderes. Eso la pone muy nerviosa. Y cuando se pone nerviosa solo habla con monosílabos.

- Que os parece si luego vamos al patio de entrenamiento y utilizamos nuestros poderes - dice Alexa.

- No - grita Irene y se va del comedor.

- ¿Qué le pasa a Irene? - me pregunta Laila.

- No controla sus poderes y le da miedo mandaros a alguno a otro tiempo - digo.

En realidad eso no es lo que le da miedo. Lo que le da miedo es que sin querer muestre sus poderes de la muerte. Y haga daño a alguien.

- Yo me voy a buscar a Irene - digo.

- Voy contigo - dice Alex.

- Vale - digo levantándome de la silla.

A continuación Alex y yo salimos del comedor y nos vamos en busca de Irene. Decidimos primero buscarla en la biblioteca. En la biblioteca no está así que vamos a mí habitación.

Abrimos la puerta y nos quedamos sorprendidos. La habitación está lleno de magia de la muerte. Entramos dentro y cerramos la puerta. Esta todo muy oscuro.

- Es imposible ver algo aquí - dice Alex.

- Espera - digo.

A continuación empiezo a conjurar un conjuro. De mi mano empieza a brotar una pequeña llama de color blanco. En unos segundos la llama ilumina todo la habitación. Irene está tumbada en su cama mirando el techo.

- Irene - digo.

- Si que pasa - contesta ella.

- Está todo la habitación llena de magia de la muerte. Si quieres no llamar la atención lo estás haciendo fatal. Venga Irene soluciona este caos - digo.

A continuación Irene se levanta y hace desaparecer todo la magia.

Yo también apagó mi llama.

Nos ponemos juntas sentadas en la cama de Irene.

- ¿Chicas cual es cual? - pregunta Alex - Sois más parecidas de lo que parece. Físicamente sois idénticas. Lo que pasa es que vuestros caracteres son muy diferentes y por eso os diferencias. Seguro que dentro de unos meses seré capaz de reconocerla.

- Claro que somos iguales somos gemelas identicas- dice Irene.

- Te pille tú eres Irene - dice Alex.

- A nuestros padres también les cuesta diferenciarnos - digo mientras se me hace un nudo en la garganta.

Me cuesta mucho llamarlos así. Pero prefiero no contar nada. No me gusta nada que la gente sienta pena de mi. Me hace sentir débil e insegura.

- ¿Irene que es lo que te ha pasado antes? - le pregunto a Irene.

- Estoy inestable y eso hace que mi poder se descontrole y que tenga ganas de destruir todo lo que encuentre a mi paso. Además estoy agobiada porque hay mucha gente y todos preguntan por lo mismo mi poder - dice Irene.

- Irene entiendo que te sientas agobiada. Yo también cuando llegue me sentía agobiado. Mis poderes también se descontrolaban todo el rato y me pasaba el día en mi habitación. Sólo tienes que salir de tu caparazón - dijo Alex.






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