-Iker no seas llorón, ya supéralo- Carolina mira fastidiada a iker, ¿causa?, se dio cuenta que Carolina no preparó nada de lo que estaba en la mesa.

-Primero te indignas porque dije que no habías preparado nada tú, te pedí disculpas y me hiciste sentir muy mal por pensar eso, pero yo tenía razón, ¡no hiciste nada!-el levanta las manos al aire- ¡si yo conozco lo que tengo! Tú no sabes nada de eso, ya si hubieras hecho un huevo crudo te hubiera creído.

Pero miren, si son la pareja dramática.

-Tendrás que compensarme luego, ahora vamonos que se hace tarde-iker toma sus llaves y luego me mira-¿lista?

-No me iré con ustedes.

-¿En que piensas irte Fernanda?- Carolina me mira esperando mi respuesta al igual que iker.

-Es broma, saben que no tengo en qué ir-les sonrío mientras camino hacia la puerta.

(**)

-Hola Arthur, aquí vengo a hacerte compañía, pero que crees, no vengo sola-me acerco a él poniendo la pequeña mano de Zenda en su mano- vino a visitarte tú pequeña Zenda, aún no dice ninguna palabra pero balbucea un poco, yo la estoy cuidando muy bien te lo seguro, pero te está esperando para regresar a casa contigo, no la hagas esperar tanto.

Junto con Zenda aprieto la mano de Arthur, la bebe entre mis manos se empieza a mover incómoda a los pocos segundos empieza a llorar.

-Fernanda, conoces las reglas-me mira una de las enfermeras y yo asiento.

-Claro, ya me voy-volteo hacia Arthur- pronto regresará a visitarte tú bebe hermosa.

Sujeto por los brazos a Zenda tratando de tranquilizarla, salgo del servicio mientras camino hacia la puerta, pero para mi sorpresa me encuentro con Connor, el al mirarme se sorprende, mientras me inspecciona con la mirada.

-Casi olvido que trabajas aquí Luciernaga, hola Zenda-la bebe que estaba llorando hace un momento ahora le está pidiendo los brazos, Connor alza la ceja divertido mientras la toma de los brazos.

-¿Que haces aquí? ¿Estás enfermo?-lo miro curiosa pero él niega.

-La empresa donde trabajó se acaba asociar con el hospital, le proveerá materiales.

-Esa empresa es de los Anderson ¿verdad?-hago una mueca, el me mira un poco dudoso pero asiente.

-¿Siguen mal?

Alzó los hombros.

-No hemos hablado, le pedí espacio y al parecer eso es lo que está haciendo-tuerzo la boca.

-¿Porque esa cara si tú misma le pediste tiempo?-me mira confundido.

-Pues no es literal de que me deje de hablar, solo es un "no me molestes"-hago comillas con mis dedos-pero en realidad queremos que nos rueguen media hora después.

-Ohh-me mira sorprendido-lo tomare en cuenta cuando llegue a pelear con Jess.

-Claro Jess-chasqueó mi lengua recordándola-¿como vas con ella?

-Bastante bien, cada vez somos mas unidos, ¿crees que sea buena idea que vivamos juntos?

Me mira ansioso esperando mi respuesta.

-Creo que le preguntas a la persona menos indicada-suelto una pequeña risa- Aarón y yo no tenemos mucho viviendo juntos, ahora miramos, no digo que les vaya a pasar eso pero te recomiendo esperar un poco más.

-Creo que tienes razón, no voy a apresurar las cosas, solo que me ha tirado algunas indirectas sobre vivir juntos-rasca su cabeza nervioso causando una risa en mi- por cierto casi lo olvido hoy es cumpleaños de Jessica, me dijo que te invitara al bar donde se festejará.

¿Ella invitándome?

¿La misma que me hizo mala cara en la boda?

¿Debería preocuparme?

¿Debería ir?

¿Acaso ese mal olor es del pañal de Zenda?

-Fernanda, tierra llamando a Fernanda-al espichar la voz de Connor vuelvo a ponerle atención- te decía que ya confirmó ir Carolina y Carlos.

-Eso suena bien, supongo-le doy una leve sonrisa-me tengo que ir, debo dejar a Zenda en su guardería y regresar.

-Si quieres yo la llevo-se ofrece pero yo niego.

-No te preocupes, de seguro tienes cosas que hacer.

-No tengo problema, a demás es buena compañía, tengo algunos chistes nuevos que contarle-yo niego divertida.

(***)

-¿Segura iker no tiene problema con quedarse con Zenda?-le pregunto por quinta vez a Carolina.

Iker se quedó en casa para poder cuidar a Zenda, ya que él insistía en que me tenía que distraer y la fiesta era el momento indicado, me sentí mal en dejarlo solo pero insistió tanto que acepte al último.

Carlos llegó a la casa con un cambio para mi, un top negro junto con un pantalón negro con una rosa bordada en el muslo, dijo que en cuanto lo vio lo imagino en mí y no se resistió en comprármelo, pero que no le dijera a Carolina porque se pone celosa.

-Tranquila, el quiso hacer algo lindo por ti, eres su amiga, te vio triste y si puede hacer algo por hacerte feliz lo hará-Carolina se acerca a mi para darme un abrazo- a demás creo que le cayó mal el desayuno, está en modo de córrele que te alcanza.

-Pobre iker-suelto una risa sonora, la cual para al sentir unos brazos en mi cintura.

-Te ves ardiente chiquita-la voz de André llega a mis oídos, lo saludo de beso al igual que a Carlos.

-Me preguntó porque nos invitaría la novia de Connor-tuerce la boca mi amiga.

-Nos miro muy mal en la boda-André apoya a Carolina.

-A mi me da igual, fiesta es fiesta, igual no vengo a sentarme con ella, vengo con mis bebés-Carlos nos abraza a los tres-ahora vamos a entrar.

Todos lo empezamos a seguir dentro del bar, si, para mi sorpresa fue el bar de hace unos años en donde me perdí y conocí a Connor y encontré a Aarón.

Al entrar muchas luces empiezan a asomarse, la música fuerte llegando a mis oídos, el olor a alcohol y cigarro llega a mi nariz, me siento extraña, tenia tanto sin venir a un lugar así. Una vez adentro del bar mi mirada viaja a la barra donde a la primera persona que veo es a Connor junto a Jessica.

-Ahí están, debemos saludarla- alza la voz Carlos mientras se acerca a ellos-recuerden es Jessica no Jess.

-¡Connor bebe!-Carlos y André lo saludan, nosotras sólo agitamos la mano.

-Felicidades Jessica-le digo a la chica vestida con un ajustado vestido azul Aqua, ella a respuesta me sonríe, pero es una sonrisa con malicia.

-Me alegra tanto que vinieran-nos sonríe de la misma manera, se acerca a Connor abrazándolo.

-Adelante diviértanse, es barra libre pueden tomar lo que quieran.

-Música para mis oídos- sonríe André mientras se da vuelta.

Al girar a la barra veo a una persona que no me imagine encontrar aquí, siento como mi manos se forman en puños.

Tiene que ser una maldita broma, que hace ella aquí.