-No llores por favor-Aarón me mira de una forma triste pero lo ignoro.

-Tú no sabes cómo me siento, así que no me pidas que no llore-una lagrima cae por mi mejilla pero no me preocupo por retirarla.

-Ya me siento lo suficiente mal como para que a demás me tortures viéndote llorar, sabes que me duele verte así.

-¡Pues lo siento por llorar!, como siempre yo hice las cosas mal, Aarón siempre está bien-hablo con sarcasmo mientras alzó mis manos al aire- ¡no hay que reclamarle nada a Aarón!

-No es momento de tus sarcasmos Fernanda-suelta un gruñido.

Siempre es momento para mis sarcasmos

-¿Pero si es momento para que me engañes?-lo miro dolida, trato de encontrar su mirada pero él la esquiva.

-No sabes si te engañe.

-Lo peor es que ni tú sabes-camino hacia la habitación tomando unas cuentas cosas y así metiéndolas en mi maleta de mano, escucho como se va acercando Aarón.

-¿Que haces?

-Necesito tiempo para pensar las cosas-ya que tengo todo listo estoy dispuesta a irme pero Aarón sujeta mi brazo.

-No me puedes hacer esto, no te puedes ir nada más así-su tono de voz al igual que su mirada es suplicante pero trata de ocultarlo, por unos minutos me pierdo en sus ojos, pero finalmente el recuerdo vuelve a mi.

-No estamos pasando un buen momento, al igual que tú, necesito tiempo para pensar-mi mirada abandona la suya por unos segundos pero vuelvo a juntarla-pero a diferencia de ti, yo si recordare lo que pensareé.

Sin mas que decir me suelto de su agarre y camino hacia la puerta, pero antes de salir escucho su voz.

-En las buenas y en las malas, ¿recuerdas?-su voz se escucha ronca, como si fuese a llorar.

-Eso dejó de valer en el momento que me dejaste sola cuando más necesitaba tu ayuda.

Sin mirar atrás salgo del apartamento.

(...)

Tocó dos veces la puerta frente a mi esperando a que alguien abra, al escuchar como abren la figura de Carolina de asoma.

-Sonará mal pero..¿Qué haces aquí?-ella me mira sorprendida y no lo trata de ocultar, no la culpo, no habría imaginado tener que venir a su casa en estas condiciones.

-Hoy pido posada-le doy una sonrisa forzada, mi amiga se hace a un lado y me deja pasar, cuando menos lo pienso tengo a Carolina abrazada a mi.

-¿Como te sientes amiga?

-Bien, supongo-alzó mis hombros sin importancia.

-Siempre te empeñas en decir que estás bien cuando no es verdad-iker sale de la cocina mientras come lo que parece un sándwich-tú lo sabes, nosotros lo sabemos, no engañas a nadie.

-No quiero incomodarlos con mis problemas-bajo mi cabeza.

-Tú eres nuestra amiga, mi casi hermana, tus problemas son los míos, si alguien te hace sufrir yo le haré daño.

-Es difícil eso cuando Aarón es como tú hermano, al igual que yo.

-Yo le haré daño, no es mi hermano-escucho como ríe Iker, el cual recibe un golpe de parte de Carolina.

-Aarón es el que está mal, sea mi hermano o no yo estaré del lado de la verdad -ella me mira con una sonrisa mientras me abraza de nuevo- O del lado que me convenga.

Al escuchar eso me separo y la empujo levemente.

-Te pagaré con comida si me apoyas.

-Hecho-grita Iker-¡Al fin! Comida de verdad y no sopas instantáneas, sándwiches y quesadillas.

-Tú comes eso porque quieres-mi amiga lo mira ofendida.

-¡Tú no me haces nada de comer, solo eso!

-Si no te gusta aprende a cocinar-ella se voltea ignorándolo, ellos me levantan el animo cuando se comportan como niños pequeños.

Hablando de niños

-¿Donde está Zenda?

-Está dormida, le di un baño luego un biberón y se durmió rapidísimo.-me mira orgullosa.

-Tan buena mamá tú.

-No le des ideas por favor, el pobre bebé se moriría de hambre cuando empiece a comer, igual que yo-iker habla haciendo un puchero lo cual me causa risa.

-Ya supéralo-bufa mi amiga-te regalare un curso de cocina a ver si así dejas de fastidiar.

-¡Fastidio porque muero de hambre!

-Puedes ir a comer a la calle si no te gusta, ahh pero no sea para lavar tus calzoncillos porque "ay mi amor te quedaron tan limpios que hasta las manchas le quitaste" ahí si no dices nada verdad-Carolina se cruza de brazos con fastidio mientras iker se pone rojo, me imagino que d ella vergüenza.

-¡Dijiste que no dirías nada! Fernanda no la escuches, miente.

-Calmados-suelto una risa-ustedes ya parecen casados.

-Ni loca, primero que me compre una lavadora, que no es nada fácil lavarle sus calzones a mano-al terminar de hablar recibe un almohadazo de parte de iker, y de pasada una mía de mi parte también.

(***)

Al siguiente día me levanto con mucha flojera, siento mi cuerpo mas pesado de lo normal, mis ojos no se quieren abrir pero hago un esfuerzo por lograrlo. Al voltear a mi lado me encontró a Zenda jugando con uno de sus peluches, me acerco a ella, dirijo mi mano a su pequeña cabeza mientras doy unas suaves caricias.

Ayer por la noche antes de dormir me llegó un mensaje del hospital, en el decía que Arthur movió su mano, no es mucho pero eso es un avance, significa que está luchando por seguir.

Hoy tengo que volver al trabajo pero se me ocurrió una idea para motivar a Arthur, siempre eh creído que aunque los pacientes estén inconscientes pueden escuchar todo y sentir, así que llevaré a Zenda aunque sea unos minutos para que su papá la sienta con ella.

Ya que estoy lista junto a Zenda bajo las escaleras donde me encuentro con Carolina en la cocina, mi boca se abre al ver en la mesa hot cakes, chocomilk, frutas, salsas, algunos bollos entre otras cosas para acompañar.

-Esto se ve fantástico-digo sorprendida.

-Lo se, me levante muy temprano para tenerlo listo-mis ojos se entre cierran y la miro sin creer.

-A mi no me vas a engañar, tú no hiciste nada de esto.

-El que te engaño fue Aarón no yo-al escuchar eso mis ojos se abren como platos-¡Lo siento! solo salió de mi boca, soy tan estupida.

Ella toma su cara con preocupación

-Nombre.. con esas amigas para que quiero enemigas, a veces me pregunto quien es más perra tú o Carlos-río junto a ella, si me dolió un poco lo que dijo pero se que no fue su intención, ella no tiene filtro, es algo que agradezco y odio al mismo tiempo.

-Perdóname, toma uno de mis bollitos, anda-acerca uno a mi y lo tomo llevándomelo a la boca, al hacer eso Zenda me mira con la boca abierta-Se que no los preparaste, pero bien intento para engañar a iker, bien jugado, muy buen jugado.

-No iba a dejar que me ofendiera de esa manera, solo espero no se de cuenta como..

Deja de hablar cuando escuchamos los pasos de iker bajar las escaleras.

-¿Que es ese olor? Nunca había olido algo así en esta casa-al llegar a la cocina literalmente se le cae la mandíbula al ver todo lo qué hay en la mesa-¿tú lo hiciste?

Me mira y yo niego, voltea hacia Carolina pero luego niega riendo.

-Si no lo hiciste tú, lo más creíble que es que fuera la bebe, ni de coña Carolina hace esto-suelta una fuerte carcajada y sin pensarlo me uno a él.

-Yo lo hice idiota, ya no te volveré a preparar nada, tanto que me esforcé y así me pagas, burlándote, humillándome, pisoteando mis sentimientos, me levante tan temprano ilusionada a prepararte un rico desayuno y así me pagas.

¿No han visto a la señora dramas?

-No quise hacerte sentir mal amor, mira ya comeré te creo, gracias por hacer esto, se ve delicioso- iker mira a Carolina con culpa-me iré a lavar las manos y comeré todo esto.

Al darse la vuelta, Carolina se quita algunas lagrimas falsas que estaban en sus mejillas, mientras me mira con una sonrisa malvada.

-Te saliste con la tuya maldita.

Ella me mira con una sonrisa de oreja a oreja pero se borra al escuchar a iker

-¡Carolina, ¿que significan estas bolsas de desayunos hard coffe?!

Bueno, después de todo no se salió con la suya

Me anime a poner una Foto mía en mi perfil para que me conozcan un poco mas🙆🏽‍♀️.

¿Que le apareció? les deje un poco de lo que es la vida de carolina e iker, una locura.

Les mando un besooo!
Donde ustedes quieran 🌚😏 Jajajaja