-Tú no puedes solo llegar y preguntar eso fernanda, no son cosas que te sucedan y tengas previsto algo así.

-Solo piensa la posibilidad, ¿está bien?- mis mirada conecta con la suya por unos segundos ya que el los aparta rápidamente.

-¿Tú piensas aceptarlo?-pregunta con la mirada perdida-En dado caso que pase.

-No podría dejar a un bebé abandonado sabes, no es algo que tenga pensarlo dos veces, si algo le llega a pasar a Arthur yo cuídate a Zenda con o sin tu ayuda.

-Vamos, no es para que te enojes-Aarón me voltea a ver mientras se pone de pie, acto que copeó.

-¿Crees que no me doy cuenta que no quieres a Zenda?, bueno, a cualquier bebe, está bien lo acepte al principio porque nunca creí que pasaría esto, pero ahora un bebé está apunto de quedar huérfano y tenemos la posibilidad y recursos para tenerla, no voy a dejarla, dime Aarón, ¿si yo quedaría embarazada también pensarías si te harás responsable?-mi mirada viaja a la suya con miedo a que vuelva a rechazarme pero esta vez la sostiene.

-Yo no se, es demasiado para mi, entiéndeme esto está pasando tan rápido -Aarón lleva sus manos a su cabello y lo remueve con frustración.

-¿Es un no?-mi voz se quiebra.

-No te puedo contestar ahora, déjame asimilar todo.

Asimilar que idiota.

Estoy apunto de aventarle uno de mis zapatos pero me doy cuenta que toma sus llaves.

-¿A donde crees que vas?

-Tengo una junta en Nueva York-responde Aarón sin voltear a verme.

-¿Estas jodiendome Aarón?

-No es algo que planeará, esta mañana nos avisaron y no hay nadie más que vaya, lo siento-trata de avanzar a mi pero yo retrocedo.

-Tú papá es el dueño de la empresa explícale la situación y te quedas-la mirada de Aarón va al suelo y niega.

-No puedo.

-Entonces no lo sientes-siento como mis ojos se llenan de lagrimas pero las contengo-me estás abandonando cuando mas necesito tu ayuda.

-No te estoy abandonando, solo necesito pensar la cosas, ¿está bien?

-No, no está bien-niego repetidas veces, siento como una lagrima resbala por mi mejilla, así que me doy vuelta hacia la habitación-Si crees que es lo que necesitas hacer adelante, yo no puedo detenerte, pero también ten en cuenta que si cruzas esa puerta esta noche nada volverá a ser como antes.

Sin mas que decir parto camino hacia la habitación, donde encuentro a Zenda removiéndose, camino hacia ella para darle algunos golpecitos en su espalda, haciendo que vuelva a dormir.

***

En definitiva unas de las noches más largas de mi vida, Zenda se levanta cada hora y se pone a llorar hasta que la cargo para dormirla de nuevo, es como si tuviera un reloj interno para saber en qué momento empezar a llorar.

Hace unos minutos me encontraba en la casa de mis vecinos, tuve que entrar por algunas cosas de Zenda, no lo voy a negar, sentí escalofríos al entrar.

Justo ahora estoy tirada en el suelo de mi habitación, Zenda se acaba de dormir y no quiero despertarla, mis ojos se empiezan a cerrar pero escucho el sonido de mi celular, rápido me pongo de pie buscándolo en todas partes, me meto por debajo de la cama cuando veo una luz asomarse, sin mirar contesto.

-¿Hola? ¿Aarón?

-No soy Aarón ¿cómo estás luciérnaga ?-la voz de Connor se hace presente, no voy a negar que sentí un dolor en mi pecho al saber que no era el.

-Oh Connor, sigo viva si eso preguntas.

-Me entere lo que estás pasando, lo siento mucho.

-Gracias, pero me ayudaría más una mano que unas palabras-suelto una pequeña risa, un poco falsa si me lo preguntan.

-En ese caso voy directo a tu casa.

-Oh no Connor estaba bromeando-hablo rápidamente pero escucho como niega.

-No es molestia, no estoy haciendo nada productivo justo ahora, a demás nos podemos poner a corriente, tenemos mucho sin hablar.

-Te tomare la palabra, necesito un poco de ayuda aquí.

-No se diga mas, voy en camino luciérnaga.

-Te veo al rato.

Al colgar salgo debajo de la cama y me pongo de pie, me fijo si Zenda sigue dormida y al ver que lo está me voy directo al baño.

Me deshago de mi ropa dejándola a un lado de la puerta, la cual está abierta para escuchar si se llega a despertar, al meterme a la ducha el agua tibia empieza a empaparme, por un momento me sentí relajada pero luego me empezaron a llegar escenas de lo que me a pasado estás últimas horas, mi vecina falleció, su esposo está en estado crítico, su bebé está a mi cargo, a demás está el hecho que Aarón me abandono cuando más lo necesitaba.

Pero no lo culpo, pude haber reaccionado igual, pero... ¿acaso estoy justificándolo?, tal vez estoy exagerando las cosas y si tuvo una junta de última hora. Vamos solo estoy buscando una excusa para llamarlo, voy a ser sincera con él y decirle que lo necesito a mi lado, yo estuve con él cuando lo necesitaba, ahora es su turno de estar conmigo, ¿no?

Al terminar esa pequeña platica conmigo salgo de la ducha y me envuelvo en una toalla, camino hacia la habitación y tomo el celular para después marcar el número de Aarón, una música empieza a soñar para después escuchar una voz.

-Hola, ¿quien habla?

¿Esa es una voz de mujer?

¿Quien será? Chan Chan Chan....