Capítulo 6: Un nuevo día

Ya han pasado nueve días. En la casa de Álvaro, él y tera están dormidos juntos en la cama, son las seis de la mañana, Álvaro se despierta y se sienta en la cama.

–ji –rió Álvaro feliz, luego de ver a tera, antes de salir de la cama sin despertarla, tomar toalla e irse al baño.

Álvaro se ducha, después se viste y baja a la cocina, allí nota que en la mesa del comedor estaba el desayuno servido junto con una nota de tera que decía, «Me adelanté y te hice el desayuno», con el dibujo de un corazón al final, él sonríe y se sienta a comer, cuando termina se va a trabajar a la tienda.

Son las siete de la mañana, tera se despierta, ella sale de la habitación, mira el baño, después mira la cocina, el comedor, la sala y el resto de la casa, luego regresa a la sala.

–bueno, hora de limpiar –dijo tera, antes de dar un aplauso, generando un destello que deja toda la casa limpia.

Ella regresa al cuarto y nota que había mucha ropa sucia, por lo que desaparece y reaparece en un vertedero de electrodomésticos. Tera ve una gran cocina eléctrica que no estaba tan dañada, camina hacia ella, luego fusiona sus dos colas formando una más grande a la que le sale la misma boca de antes, ella la usa para engullir por completo la cocina, el interior de su cola se empieza a llenar de un líquido azul traslúcido que disuelve rápidamente la cocina hasta no dejar nada.

–necesito más.

Tera comienza a devorar con su cola refrigeradores, televisores, microondas y similares, hasta que se hacen las ocho de la mañana.

–con esto es suficiente. Ahora, ¿qué haré para el almuerzo?... –se preguntó, antes de ponerse a pensar mientras caminaba sin rumbo.

Ella camina por unos segundos, cuando de la nada se abre un portal enfrente, pero lo ignora por completo y lo atraviesa, llevándola a un gran desierto en el digimundo, tera sigue caminando mientras pensaba. Detrás de unas rocas, cerca del portal estaba un niño de diez años acompañado de una gatomon.

–¿esa es teramon? –susurró el niño, observando oculto desde las rocas.

–eso parece –respondió gatomon un poco preocupada.

–okay, entonces vamos –dijo, pero antes de salir de las rocas gatomon le sujeta la mano y lo detiene–. ¿qué pasa?

–por favor volvamos a casa –respondió preocupada.

–¿qué?, ¿por qué?

–esto es muy raro, todos los otros digimons se asustaron al oír su nombre.

–de seguro es muy fuerte, pero el poder que te da esta carta es suficiente para que derrotes a cuatro digimons de nivel mega –dijo, sacando una tarjeta digimon, igual a la azul, pero era de color negro y rojo intenso

–pero aún así no deberíamos enfrentarnos a ella.

–piénsalo, si la capturamos nos pagaran 500 millones de dólares. Con eso podré comprarte la casa para gatos que tanto quieres, con televisor e internet incluidos.

–estoy tan feliz de que pienses así, pero...

–no te preocupes, sé que ganaremos, ¿confías en mí?

–s-sí.

–¡muy bien!

El niño y gatomon salen de su escondite y corren tras de tera. Cuando ya están muy cerca el niño saca su digivice.

–¡ahora gatomon! –dijo el niño.

Él usa la tarjeta negra, mientras la pasaba, esta emitía rayos negros de contorno rojo, al terminar de pasarla la pantalla de su digivice se torna roja, mostrando entre fallas la frase «Dark Evolution» mientras que una voz robótica algo tenebrosa la decía.

Gatomon queda envuelta en rayos rojos intensos, luego libera un gran rayo oscuro, del cual se podían ver dos ojos rojos brillantes, el rayo desaparece después de que saliera a gran velocidad hacia tera, ella ahora era de color negro y rojo intenso, tenía unos brillantes ojos rojos, garras rojas y emitía los mismos rayos negros de contorno rojo.

Gatomon golpea a tera por la espalda, generando un gran estruendo que deja un gran cráter, ella es enviada tres kilómetros hasta estrellarse contra una montaña y detenerse, destruyéndola al hacerlo. De pronto hacia los restos de la montaña, van a gran velocidad seis ondas rojas de gran tamaño, las cuales destruyen todo a su paso, estas generan una explosión colosal que aparta las nubes y hace temblar la tierra.

–ah ah ah, esto debe ser por gatomon –dijo el chico, luego de sentir el gran temblor.

Gatomon estaba golpeando a tera a una velocidad colosal, luego la envía al cielo de un golpe y se va hacia ella en un instante, allí dispara con sus garras en forma de equis las mismas seis ondas rojas, estas golpean a tera y la arrastran hasta la tierra, generando otra explosión colosal, antes de que ella volviera a tocar el suelo, todo se torna gris, y ella junto con todo lo demás se detienen y quedan congelados en el aire.

Gatomon aparece todavía con sus colores, golpeando a tera con sus garras, los cortes se quedaban grabados en el aire en color rojo, ella la golpea cientos de veces, y cuando todo se vuelve a mover, tera recibe todos los golpes y es mandada a volar, estrellándose a un kilómetro del portal donde estaba el niño.

Gatomon aparece en el suelo, sobre el cráter donde estaba tera, desde ella sale una onda que vuelve todo rojo, su pata derecha se vuelve completamente negra, antes de empezar a caer a gran velocidad, preparando un golpe, cuando ya estaba muy cerca, tera reacciona. Un gran rayo negro es liberado seguido de una colosal onda oscura que destruye todo a su alrededor.

–gatomon debe haber ganado –dijo el niño, refugiándose detrás de las rocas.

Cuando todo se calma y el polvo se asienta, muestra un gigantesco cráter que era muy profundo, en el fondo estaba tera de pie, sin ninguna clase de herida, ella había detenido el golpe con la mano.

–¡Eso es, para el almuerzo haré lasaña! –dijo tera–. ¿hum?, ¿tú quién eres? –le preguntó a gatomon, después de notarla.

–¡grrr ñaaa! –gruñó gatomon, antes de golpearla en la cara con sus garras, pero no le hace nada.

Tera le da una bofetada, enviándola arrastrando el suelo hasta donde estaba el portal, dejándola mal herida, ella vuelve a la normalidad.

–¡¡Gatomon!! –exclamó el niño asustado, corriendo hacia gatomon.

–ella... ella es muy... fuerte... lo lamento –le dijo gatomon herida al niño.

–hay que irnos –dijo asustado, cargándola en brazos, pero antes de empezar a correr hacia el portal, tera aparece enfrente de él.

–entonces, ustedes son los que me atacaron –le dijo tera algo seria a los dos.

–a-¡aléjate! –le dijo asustado.

–eres muy joven, espero que aceptes las consecuencias.

Tera camina hacia el niño, pero gatomon se tira al suelo y se pone de pie enfrente de ella.

–por favor, lo sentimos, fuimos engañados –le suplicó gatomon a tera.

–pero me atacaron.

–no es su culpa, por favor lo le haga daño.

–mmmm, está bien –dijo, antes de aplastarla con el pie, matándola.

–¡¡No, gatomon!! –gritó el niño, empezando a llorar–. ¡¡¿por qué?!! –le lloró devastado a tera.

–eso es lo justo, una vida por una vida, espero que aprendas de esto, ahora lárgate.

Tera abre un portal de salida del digimundo al lado del niño, luego ella desaparece.

–!!Buaaaa, Buaaaa gatomon!! –lloró, tirado en el lugar donde gatomon murió.

Pasa una hora, el niño está atravesando el portal, este lo deja en el parque y luego desaparece,mostrando que detrás había un digihuevo, el cual tenía una nota colgando de un moño azul, él mira la nota, «Espero que hayas aprendido que no debes confiar en desconocidos. Este digihuevo eclosionará en tres días, por lo que volverás a ver a tu compañera, para que no digas que soy mala», decía la nota. El niño empieza a llorar de felicidad mientras abrazaba el digihuevo.

Son las once y cuarenta de la mañana, Álvaro está llegando a la casa.

–sniff sniff, huele bien –dijo Álvaro, antes de abrir la puerta y entrar–. Tera, ¿estás en la cocina?

–llegaste –dijo tera, saliendo de la cocina, para luego camina hacia él, ella llevaba su delantal–.Bienvenido de vuelta –dijo feliz, abrazándolo, él también la abraza.

–¿qué cocinas? –preguntó, luego de que ambos se dejaran de abrazar.

–es una sorpresa.

–no puedo esperar a ver lo que es.

–ji ji ji, ya casi está listo. Si me disculpas, tengo de volver –dijo, antes de darse la vuelta y caminar hacia la cocina, dejando ver que no tenía su traje tipo piel, haciendo que Álvaro se sonroje un poco.

Pasan unos minutos, Álvaro está sentado en la mesa del comedor, luego tera coloca en la mesa una bandeja con la lasaña.

–¡¿hiciste lasaña?! –preguntó feliz.

–sí, espero que te guste.

–¡a mí me encanta!, ¿cómo sabías?

–je je, recuerda que miré tus recuerdos.

–es verdad.

Ambos almuerza, cuando terminan, tera guarda el resto de la lasaña en la nevera, después regresa con Álvaro.

–¿vemos la televisión?

–me encantaría, pero tengo que volver al trabajo.

–está bien.

Ambos salen de la casa.

–volveré a las cinco.

–te estaré esperando.

Ambos se besan, y al dejar de hacerlo Álvaro se marcha. Tera vuelve a entrar en la casa y cierra la puerta, después se va a la sala.

–ahhh, y yo que quería mostrarle el regalo que le hice –dijo algo desilusionada.

La sala tenía un gran televisor de pantalla curva 4k y un equipo de sonido de alta definición.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top