Capítulo 6.



Días después. 


Mi perla se adaptó a estar en la tribu, lo ha hecho muy bien y eso me hace sentir feliz. Ella es fuerte, me he dado cuenta de eso, por la forma en que se esfuerza por aprender me gusta mucho. El cómo toma el arco y las flechas, claro, ella se lastimo muchas veces pero ahora lo hace con mas precisión y calma. 

Todos estos días se volvió menos dependiente de mi, al inicio me molestaba por que quería cuidarla todo el tiempo, pero después me di cuenta de que ella podía hacerlo bien sin mi. 

Ahora ya ha asumido que es mi compañera y ya no se asusta con ello, pero si sigue preocupada por su padre, a veces llora y eso a mi no me gusta por que no puedo hacer mas por ella, pero dentro de estas tierras no hay nadie mas, solo ella. 

Lo que espero es que su padre no aparezca queriendo matarnos a todos. 

No se quien es, pero espero no poder encontrármelo jamás. 

—Atuq —mi padre me llamó y camine hacia el— ¿que tal se adapta la blanca?

—Freya padre, ya deja de llamarla blanca. 

—Pero si es la blanca, no me hables así Atuq recuerda que...

—Que eres el líder de la tribu y mi padre, eso lo se. Pero quiero que la respetes así como yo te respeto a ti —el no dijo nada—. Mi mujer se adapta bien, pero aun no sabe cazar. 

—Dudo mucho que pueda —la miro—. Solo mirala, es demasiado frágil, no creo que sea capaz de matar a un animal. 

 —No la voy a obligar a hacerlo, es buena pescando, pero la caza es otra cosa padre. 

—Estas prendado de ella —me miro—, es increible lo rapido que paso. 

—Lo se y me gusta estar prendado de ella, por que es mía, mi compañera y se que ella dará la talla para ser una líder. 

—Lo dudo, tu madre si tenía madera de lider. 

—Son personas diferentes, madre era de aquí, Freya es de otro lado —dije entre dientes—. Lo único que quiero es que la respetes, eres mi padre y te respeto, pero sabes que cualquier Inca mata por defender a su mujer. 

—¿Que estas queriendo decir? 

—Lo puedes interpretar como quieras padre, pero te estoy dejando las cosas en claro. Yo si quiero a Freya conmigo, te guste o no, la vas a respetar. 

Entiendo que no la quiera por ser blanca, mi madre fue asesinada por uno de ellos, pero no por ello va a tratar a Freya de esa manera. 

Lo deje parado ahí y me fui con Freya quien estaba tejiendo sus prendas, aprendió a hacerlo bastante rápido y me encanta las prendas que hace, todo lo que ha hecho ha quedado bonito. Las mujeres de la tribu la aceptaron como una de ellas, les han enseñado cómo tejer, como cocinar entre otras cosas. 

Aquí las mujeres tienen una obligación como dueña de sus chozas, cada una hace su comida y los hombres son los que tienen que ir por la comida para que ellas puedan cocinar. Solo una vez todos nos unimos para comer juntos en la fogata. 

—Hola mi perla —me senté a su lado— ¿que es eso? 

—Un protector para tu hacha —me lo mostro—, aun no se como se hace pero estoy aprendiendo. 

—Esta lindo —le dije y ella asintió—. Atuq ama estas cosas hechas por ti. 

—Gracias —sonrio— estoy haciendo mas ropa para mi, hice todas estas. 

Me mostró todas las prendas que hizo, todas esas prendas eran muy bonitas. Ya hasta usa la pluma que uso yo en el cabello, eso es como una marca y así se les hace saber a los demás que ella es mia. 

Me he dado cuenta que aprecia más la naturaleza de lo que creía, le gusta despertar temprano para mirar el amanecer, le gusta ir al bosque a ver las aves, cada vez que hace eso, sonríe con emoción y eso a mi me hace sentir feliz. 

Sus manos tenían ampollas y estaban rojas, yo me tome el tiempo de curarlas por que no me gusta que este lastimada. Me preocupa un poco que no esté rellena, ella está muy delgada, aunque le diga que coma y lo haga, ella no esta rellena, esta muy flaca y pesa como una pluma, nada. 


(...) 


Desde el árbol podía ver a Freya dentro del río, se estaba dando un baño, no podía dejar de mirar su blanca piel, su espalda era preciosa al igual que su largo y oscuro cabello. Su cuerpo era delgado, pero bonito. No había nada de ella que no fuese bonito. 

Al voltear me sonrio y se sumergió en el agua para después salir completamente descubierta. 

—Ven aquí. 

—No —negué—, bañate sola. 

—¿Me dejarás sola? 

—No estas sola, estas con Atuq. 

—Pero bañate conmigo. 

—No necesitas de Atuq para eso. 

Ella no respondió, solo se volvió a sumergir mientras que yo seguí afilando mi hacha, mire hacia el rio y ella no salía, junte las cejas y deje el hacha en el suelo, me puse de pie al ver que ella seguía sin salir del agua. 

Corrí hacia el río y me metí a buscarla, pero dentro no había nada, cuando salí ella estaba riéndose. 

—No hagas eso —le lance agua—, mi corazón late fuerte. 

Se acercó a mi y me abrazo. 

—Lo siento, quería que te quedaras aqui —nos miramos. 

La tome de la cintura y la alce, ella se aferró a mi como suele hacerlo. Se veía tan hermosa mojada y desnuda. Sus manos tocaron mi cuello con delicadeza y subió esas manos por mi cabello. 

—Escuche algo sobre una unión ¿que es? 

—La unión es cuando uno de nosotros encuentra a compañera —asintió—. Hacemos ceremonia en la cascada de las montañas, yo al ser hijo de Inca, es mas importante, por que tendre a mi Reina, debes presentarte al Dios de la Luna y del Mar, ambos seremos bendecidos por los Dioses para que jamas nos separemos. Es una ceremonia muy bonita. 

—Oh... ¿Podríamos hacerla? 

—¿Que? ¿Quieres hacerla? 

—Si, ya he aceptado que somos compañeros, te has portado bien conmigo, además de que me has cuidado mas de lo que cualquier persona ha hecho por mi —me tomo del rostro—, quiero unirme a ti y ser tu mujer. 

—Pero ya eres mi mujer —la pegue mas a mi cuerpo—. Le diré a la chamana que queremos ceremonia, eso hace feliz a Atuq. 

Claro que me hace muy feliz. 


(...) 


—Coloca la flecha así —le mostré cómo y ella lo intento—. Bien hecho, ahora respira y suelta flecha. 

Me gusta verla así de concentrada y queriendo aprender a como usar el arco y la flecha, ver ese hermoso rostro me hace sentir orgulloso y afortunado de la mujer que enviaron para mi. 

Siempre veía a mis hermanos con sus mujeres y teniendo hijos, yo quise tener eso, anhelé eso y ahora lo tengo conmigo. Todos los días le pedía a la luna y a mi madre que estaba en las estrellas que me enviara a una mujer como ella, valiente y con ganas de aprender cosas nuevas. 

—Quiero aprender a usar el hacha. 

—No —negué—, eso no. 

—¿Por que no? 

—Por que eso es filoso... Y puede hacerte daño. 

—Pero yo quiero aprender —dejo el arco sobre el suelo y se acercó a mi—. Tu vas a enseñarme. 

—Después. 

—He sido una buena aprendiz —dijo ella un poco molesta— ¿o no?

—No he dicho eso, pero Atuq no quiere que te lastimes, eso me duele a mi tambien. 

—En algún momento me tienes que enseñar —volvió a tomar el arco—. Sigamos con el arco. 

Se ve un poco graciosa cuando está molesta por que sus orejas se ponen rojas al igual que su nariz. Siguió con el arco hasta que lanzó las flechas, logrando darle al blanco una y otra vez. 

Para nosotros es primordial enseñarle a las mujeres como usar un arma, ya que muchas tienen que saber defenderse, algunas de ellas usan el hacha, otras las lanzas y otras prefieren los cuchillos. 

Había olvidado por completo que ella tiene que hacer un ritual de iniciación. 

—Freya —me miro—, tienes que hacer un ritual de iniciación el dia de ceremonia. 

—¿Ah si? ¿Como seria eso? 

—Pues —no supe como decirle—, pelear con una mujer. 

—¿Que? ¿Lo dices en serio?

—Si, tienes que demostrar valor, ver si eres digna de ser mi compañera... Yo debo pelear también. 

—O sea que debo pelear por ti —asentí—, esto es increible, yo creo que no podré hacer eso... Jamás he peleado con nadie en mi vida. 

—Yo puedo enseñarte, calma —me acerque a ella—, solo debes pelear un poco. 

—¿Y con quien debo pelear? 

—Con Aruma... 

—¿Con la que pudo ser tu compañera? —se alejo de mi— Estas loco si crees que hare tal cosa. 

—Entonces no quieres a Atuq, si no peleas, no quieres. 

—Lo que dices es ilógico para mi, jamás escúchame, jamás, me he peleado con alguien en mi vida y pelear por un hombre es tonto. 

—Yo peleare por ti —me miro—, Atuq mataría por ti ¿por que tu no? 

—Por que eso es un tema distinto y delicado Atuq... Es mas ¿con quien pelearías por mi? 

—Con Anok de la tribu del fuego. 

—¿Que pasa si pierdes? —me miro con miedo. 

—No perdere —dije seguro—, por que la fuerza de Atuq es grande, voy a defenderte y demostrar que puedo ser un lider... Yo si demuestro que quiero, tu no. 

Creo que fui un poco duro con mis palabras, ella me miró con tristeza y bajó la cabeza, luego me moleste conmigo mismo por ser así de duro con ella. Pero me siento mal por que desde que esta conmigo le he demostrado que me importa más que cualquier cosa y que no hay nada mas que no desee en estas tierras es estar con ella. 

Yo demuestro cuanto la quiero y cuando me importa. 

—Yo te quiero —dijo en voz baja.

—Lo dices, pero quiero que demuestres eso, yo confío en ti, confía en Atuq, por favor. 

Aruma es fuerte, pero confío en mi perla y se que hara un buen trabajo peleando, puede que parezca frágil pero eso no es nada comparado con lo fuerte que es, tiene ganas de aprender y eso es lo que importa ahora. 

Ella tiene ese fuego dentro de ella, es como una Leona que cuida a sus cachorros, como una gacela corriendo y como el fuego del volcán, solo falta que ella lo descubra y yo mismo se lo hare saber. 

Ella no tiene nada que temer si me tiene a mi, nada le va a pasar si me tiene a mi. 

—Ven conmigo —tome el arco y su mano.

Ambos caminamos hacia el risco que estaba sobre la tribu, ella se quedo mirando el atardecer y yo a ella. 

—No dudes de ti —me miro—, Atuq no duda de ti y lo siento si fui malo con mis palabras, pero quiero que demuestres un poco que te importo, se que puede ser duro para ti y entiendo. Solo quiero que te quedes a mi lado, para mi seria un castigo que te aparten de mi... Te lo dije, quiero amarte, quiero que me ames también pequeña perla. 

—Me asusta no ser suficiente. 

—Eres mas que suficiente, Atuq lo sabe y mi perla tiene que saberlo —tome su mano—. Por favor esfuérzate un poco, que Atuq se encargará del resto. 

Ella me dio un abrazo, yo acaricie su cabello con suavidad, jure que iba a protegerla y que nadie me separaria de ella, yo cumplo mis promesas y no pienso fallarle a la mujer que enviaron para mi, por que ella lo es todo, ella es mi todo en este momento.



Hola holaaa!! Espero que esten bien y que hayan amado el capítulo. Ya saben que no pueden olvidar sus votos y comentarios, eso me ayuda mucho. 

Hice imagenes con IA como siempre jeje espero que les guste. 🔥

No olviden dejarme sus votos y comentarios. 

Besos, Rosslix. 

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