Logan

Nix llegó completamente inconsciente al hospital ni siquiera se de donde he sacado los cojones de entrar a un hospital es algo que odio, no me gusta estar aquí, pero tampoco tengo los cojones de irme sin saber que ella está bien. La he traído a uno de los mejores hospitales de Atlanta, ni sé cómo he llegado con vida y mañana lo más probable es que tendré muchas multas por exceso de velocidad.

Una hora y media exactamente tengo en el hospital junto a sus amigos y junto a Devan y su mejor amigo los cuales no dejan de darme miradas asesinas, la pelirroja da vueltas por la sala de espera al igual que Alonzo el cual solo pasa sus manos por su cabello en un gesto de calmarse, hace casi treinta minutos un enfermero paso alterado diciendo por un pequeño aparato que alguien le había dado una convulsión y está jodidamente grave, cosa que no me tiene tranquilo. Alonzo truena sus dedos una y otra vez mientras que, Jack mueve sus piernas en un acto completamente de nervios, Dereck parece ser el más tranquilo, hasta que él rompe el silencio pesado.

—Saben que si se da cuenta nos va a picar—dice en español. Todos dirigen su mirada hacia él y luego la intercambian entre sí.

—No es necesario que se dé cuenta—habla su mejor amigo—Y sino te haz dado cuenta "tu amiguito" la ha traído a un hospital muy diferente—ironiza, pongo los ojos en blanco.

—Pero es uno de sus hospitales—aclara Alonzo. Y una rápida discusión empieza sobre no se que.

—¡Joder, solo por una puta vez dejen de discutir!—exclama la pelirroja y todos se callan—¡Si le pasa algo TODOS estaremos más que jodidos, todo el avance que ha tenido en el último año está en riesgo y ustedes discutiendo por su maldita irresponsabilidad al no fijarse en el color de los putos vasos!—grita alterada y como si fuera poco ni siquiera se de que mierdas hablan.

—Familiares de la señorita Bennett—habla un doctor, ronda alrededor de los 65 años, algunas canas resaltan en su cabello castaño, me pongo de pie.

—Somos sus amigos—dice Legna, el doctor asiente antes de hablar.

—Bien...—hace una pausa y su mirada se dirige hacia mí—¿Supongo que usted es su pareja?—pregunta mirándome fijamente al igual que todos aquí.

Si.

{No.}

—No, soy su amigo—aclaro y el doctor asiente no muy convencido, pero por mí que crea lo que quiera.

—Ella está estable, le hicimos una desintoxicación causadas por las drogas ingeridas y hemos logrado estabilizara un poco, pueden irse a su casa y nosotros mantendremos un contacto directo con ustedes—sugiere el doctor y yo niego.

—No me iré hasta que la vea, y este despierta—aclaró y vuelvo a mi asiento.

—Nosotros tampoco—dicen los demás.

—Una cosa más—me giró mirando al señor—, ya nos hemos comunicado con su psicóloga—dice, frunzo el ceño al escuchar cómo maldice Jack. El doctor se marcha.

—Estamos muertos—dice Legna en voz alta.

—Quizás nos podamos ir antes de que ella llegue—sugiere Devan.

Me pierdo unos segundos en mi cabeza hasta que...

—Sorpresa, ya llegue—ironiza una voz que conozco bastante.

—No fue nuestra culpa—dice Devan.

—¡¿Y de quien mierdas si no?!—grita, ni siquiera sabe que estoy aquí.

Danna es la hermana mayor de Alonzo, me sorprende mucho que sea la psicóloga de Nix, Danna tiene veintiséis y tiene varios hospitales, pero no sabía que estaba en Atlanta. Su cabello es rubio y sus ojos cafés, labios finos, largas pestañas y cejas finas, tiene mucho carácter de hecho.

—Según él, yo tengo la culpa—hablo, levantándome de mi asiento y la rubia clava sus ojos cafés en mí, sus labios se abren y se cierran.

—Logan—susurra con sorpresa y camina envolviéndome en un abrazo cálido.

—Hola, Danna—digo correspondiendo su abrazo, luego se aparta y me golpea en el hombro, hago una mueca y ella me mira furiosa.

—Tu y yo vamos hablar seriamente, Jones—me lanza una mirada amenazante.

—No pienso hacer una escena aquí—dice suavemente —¡Así que TODOS afuera!—grita mirándonos mal a todos.

—No me pienso mover de aquí, Danna—aclaró mirándola a los ojos.

Se voltea hacia mí, me dedica una mirada asesina.

—Todos—aclara nuevamente y sale del hospital, sin titubeó todos caminamos detrás de ella.

Cuando estamos a una distancia prudente de la entrada del hospital Danna explota...

—¡¿Que mierdas se les pasa por la cabeza?, les dije que NO podía volver a las carreras maldita sea!—está furiosa—¿Pusieron las rampas? —pregunta y todos se quedan en silencio.

—Si—respondo con normalidad.

—¡Cállate Logan!—grita la pelirroja, pongo los ojos en blanco y me encojo de hombros.

—¡ESTÁN LOCOS! ¡¿Y SI LE HUBIESE DADO UN PUTO ATAQUE DE ANSIEDAD EN ESE MALDITO MOMENTO?!—mi cabeza empieza a generar preguntas y pensamientos negativos en ese momento.

—¡PUDO HABER MUERTO Y USTEDES SOLO PENSARON EN LA PUTA APUESTA QUE TIENEN ENTRE USTEDES!—grita con más fuerza y ninguno tiene los cojones de mirarla a los ojos, ella empieza a dar vueltas en círculos nerviosa.

—¡SE SUPONE QUE SON SUS AMIGOS Y LA PONEN EN PELIGRO DE MUERTE! ¡Y PARÁ COLMO DEJAN QUE CONSUMA DROGAS! ¡DEJARLA INGERIR DROGAS PUDO HABERLA MATADO!

—Pero no lo hizo—susurra Dereck, ella ríe irónica.

—¿¡Y SÍ LO HUBIESE HECHO!?—exclama furiosa.

—¡TODO LO QUE TRABAJÉ CON ELLA SE PUEDE IR A LA MIERDA!—señala a Legna y a la vez a su mejor amigo— ¡USTEDES MÁS QUE NADIE SABEN QUE SE CIERRA Y ES IMPOSIBLE LLEGAR A UN ACUERDO PARA QUE SE EXPRESE NUEVAMENTE!

—Lo sentimos—susurran todos y yo me mantengo neutral y en silencio.

—¡UN MALDITO LO SIENTO NO VA A DEVOLVER EL TIEMPO Y REPARAR EL DAÑO QUE POSIBLEMENTE LE ACABAN DE CAUSAR!—les reclama.

—¡AHORA TODOS SE IRÁN A SUS CASAS Y NO DISCUTIRÉ ESO CON NADIE!—sentencia y todos dicen un pequeño si, ella nos da la espalda y se marchan.

—No me voy a ir, Danna—aclaró dándome la vuelta para irme nuevamente al hospital.

—¿Te gusta?—pregunta cuando estoy a unos metros lejos de ella.

—No, y no vengas con tus putas cosas para tratar de descifrar nada donde no lo hay—respondo fríamente.

—Estás en un hospital y no entras des...—me tenso, ella lo nota y se aclara la garganta—desde eso—finaliza y suelto una pequeña maldición.

—No es algo que te interese y no te metas—sentenció, dando grandes zancadas hacia las puertas corredizas del hospital, subo al ascensor y presionó el quinto piso, las puertas se abren y me siento nuevamente donde estaba hace un rato.

Unos minutos después Danna entra y se sienta a mi lado en silencio, ninguno de los dos dice nada, cierro los ojos recostando mi cabeza en la parte de atrás de la silla. El ruido de las enfermeras de un lado a otro no me deja dormir, y es cuando las puertas del ascensor se abren y le dan paso a lo que supongo es una familia, se acercan con cara de preocupación a Danna y es cuando entiende que se trata de su familia.

—Danna ¿Cómo está mi bebe?—pregunta la mujer pelinegra con total preocupación, sus ojos son una mezcla de verdes con gris, labios finos y mínimamente le saca una cabeza a la pequeña diosa.

—Ella está bien—les informa Danna y la postura tensa de ella y el señor se suaviza notablemente.

El señor rubio de ojos negros, es alto , de tez clara y corpulento, no veo ningún tipo de parecido con Nix, mientras que la niña si se parece un poco solo en el cabello que es castaño oscuro, su piel clara, y labios pequeños, sus ojos azules oscuros, esta completamente abrigada, la pequeña me mira tímidamente, le dedico una pequeña sonrisa.

—¿Y el quién es Danna?—pregunta la niña, los señores me miran.

—Él ha traído a tu hermana hasta aquí cariño, gracias a él ella está bien—le explica Danna, me pongo de pie y extiendo mi mano hacia ellos. La señora en lugar de aceptar mi mano, me abraza, la envuelvo en mis brazos correspondiéndole el abrazo. Por pura educación.

Ella se aparta, me mira apenada y luego me sonríe antes de hablar:

—Gracias...—extiende la oración y le digo mi nombre.

—Logan, un placer—digo y esta vez es ella quien extiende su mano hacia mí.

—Soy Alister Leister y él es mi esposo Devan Esposito—se presenta el señor me saluda con un leve asentimiento de cabeza.

Valla... El suegro se llama como la persona que actualmente odias

Ignoro mi conciencia...

—Ella es Eris, nuestra hija—me explica la señora y me agachó a la altura de la niña.

—Hola, bonita—la saludo y ella me mira con timidez antes de susurrar un pequeño hola.

♪♪♪

Las horas pasan y a decir verdad, necesito aire, me pongo de pie y camino hacia el ascensor, cuando una pequeña voz se hace presente en el lugar.

—¿A dónde vas?—pregunta la niña.

—Por un poco de aire ¿Quieres venir conmigo?—le pregunto y ella titubea antes de girarse sobre sus talones e ir donde están sus padres, les dice algo y me señala.

—Cuidala—dice el señor y asiento, cuando ella viene hacia mí, la levantó entre mis brazos y ella rodea sus pequeñas piernas alrededor de mi cadera sosteniéndose.

Me adentro en el ascensor y salgo del hospital, me acerco a mi auto recargandome de este.

—¿Es tuyo?—pregunta la pequeña y asiento, la dejo en el suelo y sostengo su mano.

—Es muy parecida al que caramelo llevó a casa.

—¿Quién es caramelo?—pregunto curiosamente.

—Mi hermana—dice admirando el auto que Nix condujo... {hice que Neo lo trajera y se llevara el otro}, formó una "O" en mi boca y ella sonríe.

—¿Pasas mucho tiempo con ella?—le pregunto a la niña y ella asiente entusiasmada.

—Ella juega conmigo cada vez que tiene tiempo—le sonrió y la levantó sentandola encima del auto, me siento a su lado y la sostengo para evitar que se resbale.

—¿A ver cuéntame más?—le pido.

—Su fruta favorita son las manzanas verdes, le gusta hacer docenas de bizcochos—mueve sus manos en el aire y sonríe—no le gusta la lluvia...a veces hornea pasteles conmigo y me enseñó a correr en bici, ¿pero te cuento algo?—pregunta y asiento, ella hace una seña de que me acerque y lo hago.

—Ella no sabe correr en bici—susurra la niña y aprieto mis labios para no reírme, pero es imposible ya que inmediatamente me apartó de Eris estalló en carcajadas. La niña frunce el ceño.

—No digas nada, ella no sabe que yo sé—dice y asiento aun riendo.

—Promete que no le dirás a nadie—se cruza de brazos y yo dejo de reír.

—Bien, prometo que no le diré nada a nadie—le prometo y ella me mira.

—Con el meñique—dice, extiende su mano y eleva su meñique.

—Con el meñique—imitó su acción. Hacemos la promesa y nos quedamos en silencio.

—¿Tienes hermanos? —me pregunta y asiento.

—¿Cuántos?

—Solo uno—respondo ignorando a la vez la punzada que viene a mi pecho. La niña asiente y mira al cielo.

—¿Cómo se llama?

—Neo—le respondo y ella asiente nuevamente.

—¡Logan!—exclama Danna y me levanto, tomando a Eris entre mis brazos. La niña juega con mi cabello a medida que nos acercamos a Danna.

—Acaba de despertar—me informa y camino con más rapidez hacia el ascensor.

{Tengo la necesidad de saber que está totalmente bien}.

Cuando llegó al piso con cuidado dejó a Eris en el suelo y ella corre hacia sus padres, Danna pone su mano en mi hombro deteniéndome.

—Es mejor que cuando estemos allí dentro, no hables hasta que ellos hablen con ella—me pide y asiento.

Cuando abren la puerta mi corazón late desenfrenado al ver como esconde su rostro entre sus piernas y tiene ambas manos en los costados de su cabeza mientras niega una y otra vez, pero este ataque no es como el que presencié hace un día, viendo su rostro rojo, sus lágrimas bajar por sus mejillas y la desesperación y miedo reflejado en su rostro me hace quedarme en un total mundo paralelo, totalmente absorto del llanto roto que abandona sus labios, quiero abrazarla, pero al primer amago de caminar hacia ella, Danna habla.

—Es mejor que la dejemos a solas—pide{no me había dado cuenta que ella estaba junto a su camilla}, sus padres se miran preocupados pero asienten. Salimos de la habitación y por el rabillo de mi ojo veo como se vuelve un ovillo en la camilla.

—Logan, podemos hablar—me pide Danna, asiento y me limitó a caminar junto a ella.

—No es necesario que te quedes aquí, te mantendré informada—dice y niego.

—No me importa que me lo pidas, no me pienso ir—sentenció y ella bufa, antes de asentir. En silencio nos volvemos a acercar a su familia, Danna se acerca a su habitación y unos minutos después sale.

Clava su mirada en mí y luego dice;

—Quiere que te quedes con ella—me quedo mirándola fijamente miro a sus padres y ellos solo me miran y para luego asentir dándome consentimiento de entrar a su habitación.

Me pongo de pie y me acerco a Danna.

—No puedo decirte, ni mucho menos responderte la mitad de preguntas que tienes en estos momentos—dice, asiento y ella continúa—evita abrazarla sin que te lo diga...se que "no te gusta", pero...ella es la persona más importante en mi vida fuera de que soy su psicóloga...trata de no herirla...te lo suplico—dice mirándome a los ojos. Los suyos están enrojecidos, solo la he visto llorar la última vez que pise un hospital...hace casi tres años.

Me acerco a ella y la abrazo, unos segundos después me separo de ella y me adentro en su habitación.

—Pequeña diosa—susurro después de verla en la misma posición de antes, solo cierro la puerta detrás de mí...

Y es cuando levanta la cabeza clavando sus ojos cristalizados en mí.

♪♪♪

Holaaa ¿Como andan?

¿Les gustó el capítulo?

¿Sospechas? ¿Dudas? ¿Curiosidades?

Ajá... Pero, y esos "no me gusta" de Logan??.

JKJKJKJK son tan falsos como que Nix no tiene traumas...ok no

Bueno, bye se les quiere manzanitas❤️