Una vez el cuerpo dejo de dar señales de vida el joven exhala profundamente mientras por unos segundos se queda mirando sus sanguinolentas manos antes de volver a sus cabales una vez más, limpiando sus manos con la ropa del cadáver más cercano pudo divisar en el bolsillo del pantalón la silueta de un celular, creyendo que era el suyo no tardo en sustraerlo y al momento en que metió su mano en el bolsillo y sujeto el celular un sonido de cristal rompiéndose llego a sus oídos.

Retirando su mano aun sosteniendo el dispositivo, este se encontraba aplastado entre sus dedos de extremo a extremo por suerte para el no era su celular pero eso lo hizo estar más consciente de la nueva fuerza que ahora ostentaba, registrando los demás cuerpos con una delicadeza casi mecánica pudo sustraer dinero, billeteras, celulares y algunas llaves, registrando el ultimo cuerpo siendo este el primero que mato su vista muchas veces se desviaba al objeto con el cual lo apuñalo, metálico, con figura cilíndrica adornada por un patrón de líneas enrolladas y en su punta una cabeza con forma octagonal si se lo veía desde arriba, en pocas palabras, un tornillo ridículamente grande.

Una vez que pudo recuperar sus celular cogió todo lo de valor de sus víctimas y lo metió en la guantera del auto, midiendo su fuerza para no llegar a averiar el volante y los pedales el chico arranco el auto con tanta delicadeza que su conducir fue lo más lento y directo que podía realizar, el plan de ir a la ciudad se fue por el caño y lo que más necesitaba ahora era pensar, después de conducir por media hora en línea recta alejándose lo más que pudo de la escena del crimen, estaciono en auto en otro callejón apartado.

Una vez el motor se detuvo y el auto dejo de temblar el joven poso su frente contra el volante cerrando sus ojos, la imagen de la matanza realizada hace unos minutos volvía a repetirse en su cabeza y una vez más el factor de su moralidad y ética atacándolo brillaba por su ausencia mientras la euforia y satisfacción lo llenaban cada vez más y si tenía que resumir esa experiencia en palabras diría "Fue divertido".

Dejando de lado esos pensamientos separo la cara del volante y volvió a ver sus manos y aunque el auto no contaba con luz en su interior sabía que aún estaban rojas debido a la sangre junto a su ropa la cual de seguro también estaría manchada con la sangre aun fresca de los pandilleros sobre todo su chompa por lo que tomaría su celular y con cuidado prendería la linterna para abrir la guantera tomando el paquete de toallitas húmedas.

Después de algunos minutos y casi medio paquete de toallitas el joven había logrado sacar todo rastro de la sangre de sus manos, a lo que se refería a su ropa por lo menos en esta ocasión estaba llevando consigo una ropa de color oscuro que disimulaba parcialmente las gotas ya limpiadas al menos lo que se refería al torso pues las mangas fueron las más ensangrentadas siendo más visibles las manchas borrosas de sangre.

Resignado a quitar dichas manchas de sangre recordó como algunas de ellas volaron a su cara al momento de reventar las cabezas de esos dos pandilleros por lo tanto puso su celular en modo selfi y se vio el rostro, al hacerlo se llevó tal sorpresa que dio un brinco en su lugar soltando su celular.

Con cuidado lo busco y sostuvo volviendo a enfocar su rostro pensando que la sorpresa anterior fue causada talvez por haber abierto la galería o tal vez el cansancio que le hacía ver cosas, pero al volverse a ver la cara constato que lo que veía en la pantalla era y a la vez no era su cara.

Con una tez más pálida, un cutis prácticamente limpio, ausente de bello facial aparente, un rostro juvenil de talvez unos 17 o 18 años de edad con claros rasgos orientales adornado con una pequeña nariz, ojos de iris azules y un cabello alargado en la punta de un color gris claro el joven contemplo en la pantalla alguien que no era.

Mierda-dijo quedándose sin palabras a ver su rostro, inmediatamente se llevó su mano libre al cuello, esto ya lo estaba intuyendo desde que saludo a los pandilleros cuando se estrelló con ellos, no solo su apariencia y psique habían cambiado, incluso su idioma natal era otro y no solo lo hablaba, sino también lo entendía hasta incluso tal vez también lo leía y lo escribía.

Dejando su celular de lado el ahora peliplata paso a una posición fetal jalando su pelo y soltando un sonoro y pesado suspiro mientras cerraba sus ojos y apretaba sus dientes con todas sus fuerzas, quedándose así unos minutos más hasta que volvió a una posición normal en su asiento, tomo todas las toallitas húmedas que su mano pudo y las empezó a restregar contra su cara en todas direcciones, ya no con la necesidad de limpiarse la sangre, ahora solo quería tener algo frio en su cara, reclinando la silla de conductor al máximo se dispuso a descansar.

Temprano en la mañana siguiente y tras dormir como un bebe el joven decidió retomar el plan de ir a la ciudad he informarse mejor de donde diablos estaba, la idea inicial era ir en el auto y recorrer cada calle de la ciudad hasta tener más o menos idea del lugar pero la descarto, si pudo dormir tan plácidamente la noche anterior sin escuchar ni una sola sirena policiaca o incluso terminar encarcelado, era claro indicio de que los cuerpos aún no habían sido encontrados pero aun así era demasiado arriesgado ir a la ciudad y mostrar el auto de los recién fallecidos.

Ir a pie se volvió la única acción fiable por el momento por lo tanto saco todo el dinero de la guantera junto al dinero de las billeteras, en una ellas leyeron la identificación de uno de los pandilleros, aunque el nombre no le importo sino el país siendo este Japón, por lo menos ya sabía en que parte del globo se encontraba y también haciendo uso de uno de los celulares puso en hora el suyo propio, finalmente dejando atrás el auto, billeteras, celulares y llaves se puso en camino a la ciudad solo cargando consigo sus pertenencias junto al dinero.

Gracias a la luz mañanera de la ciudad el peliplata pudo verificar con mayor detalle que no solo su rostro era lo que cambio, ahora era mucho más delgado y bajo lo cual provoca que su ropa fuera mucho más floja, pero no tanto como para no disimularlo, usando una ruta que era mucho más alejada del callejón inicial y el parqueo el peliplata paso por la zona residencial sin mayor problema.

En su pasar veía como las personas, adultos en su mayoría salía de sus hogares abordando sus autos, motos, bicicletas o también a pie para dar inicio con su jornada laboral, posteriormente también abandonando sus casas veía salir jóvenes chicos y chicas también de su "edad" con variados uniformes escolares.

Siguiéndoles el paso de manera disimulada el peliplata fue conducido hasta la parada de un auto bus donde algunos de estos jóvenes se acumularon esperando el transporte que no tardó en llegar, aunque tentado a subirse al transporte y acelerar su investigación paso del mismo, aun no sabía del todo como usar el dinero recolectado la noche anterior por lo que solo le dio un vistazo rápido al mapa de la parada.

Siguiendo la ruta de aquel auto bus al cabo de unos minutos llego a lo que parecía una plaza, transitando por la misma una mescla de adultos, adolescentes y niños, por lo menos se había acordado el guardar su chompa ensangrentada en su mochila así no llamaba de más la atención.

Por unos momentos su vista se vio desviada por el sonido de unas sirenas pasando a un lado de la plaza que no se percató de la persona que al igual que él caminaba distraído sumido en sus pensamientos.

Segundos antes

Anoche tenía un único trabajo, una segunda oportunidad de remendar mi estupidez de ayer y... ¿Qué hago yo? ...Me quedo toda la noche hasta la madrugada mirando Mahou shoujo site con el cliente incumpliendo con el contrato establecido- se reprocha a sí mismo un joven en sus años de adolescencia con un cuerpo promedio, de pelo corto castaño con varios flequillos que cubren parcialmente sus cejas y dos extensiones de cabello que cuelgan paralelamente a su nuca y ojos marrones, vestido de una chaqueta negra sobre una camisa roja carmesí, un pantalón negro a juego y zapatillas deportivas blancas y azules.

Haaaa Buchou me va a matar- resignado el castaño siguió su camino prestando más atención a su imaginación que al camino en si lo cual provoco que chocara de frente con otra persona.

Sorry-se disculpa el peliplata dando unos pasos atrás abriéndole el paso al castaño.

No, yo lo siento, ando algo distraído- se disculpa igualmente el castaño sin darse cuenta que el peliplata ya se encontraba al otro lado de la plaza corriendo- seguro que ya está atrasado en algún compromiso y hablando de eso- dándole una mirada a su celular el castaño también sale corriendo en dirección contraria.

Contrario a la predicción del castaño, el peliplata había salido corriendo debido a que aquellas sirenas eran tanto de autos policiales como también de ambulancias dirigiéndose de seguro al parqueo o talvez al callejón, como sea el joven solo quería estar lo más alejado posible de donde el despertó la noche anterior por lo que corrió controlando apenas su velocidad.

Tras correr unas cuantas cuadras esquivando gente, saltándose algunos semáforos en rojo y demás el joven se detuvo cuando un fuerte gruñido proveniente de su estómago lo hizo recordar el no haber desayunado hasta ahora, aun así, el joven finalmente había llegado a la ciudad, pero no sabía que hacer a partir de ahora.

Creo que debí haber planeado mejor esto- se reclama así mismo el peliplata mientras una vez más el gruñir de su estómago lo llamaba- ok, creo que con el estómago lleno podre pensar mejor, pero ¿a dónde voy? - una vez más, la falta de planeación se dio a relucir.

Caminando por algunas calles en búsqueda de un lugar donde comer se encontró con una policía de tránsito o eso le parecía pues la vio indicando algo a una pareja de adultos, guiado más por el hambre el peliplata se acerca a la mujer no sin antes revisar detenidamente su ropa-Buenos días- saluda el joven llamando la atención de la mujer la cual voltea mirándolo curiosa y a su vez con seriedad.

Buenos días, ¿Qué se le ofrece? -....

Vera soy nuevo en la ciudad y no se dónde ir a desayunar por aquí ¿Tiene algún consejo? - pregunta el joven intentando sonar lo más convincente posible.

Pues si sigues caminando en esta dirección a unas tres calles te encontraras con un barrio a mano izquierda allí hay un montón de negocios, sobre todo restaurantes, cafés entre otros- indica la mujer apuntando al este de su ubicación- pero si buscas algo más económico dentro el mismo barrio ahí un supermercado tamade.

Muchas gracias- agradece el joven inclinándose instintivamente siguiendo el camino indicado por la policía, no paso mucho más de 20 minutos caminando hasta llegar a aquel barrio que era un pasillo largo techado con múltiples negocios en cada una de sus esquinas como le había indicado la mujer, al ser relativamente temprano la cantidad de gente en el lugar no era tan abundante por lo que se pudo pasear por dicho lugar con libertad buscando aquel supermercado que la policía le indico.

Siguiendo un camino puramente recto no le tomo casi nada de tiempo el encontrar dicho mercado, adentrado en el mismo busco guiándose por los carteles la alguna sección con comida ya hecha.

Desde los sencillos sándwich de pan blanco hasta el infaltable sushi, el peliplata buscaba en ese pasillo algo más acorde a lo que solía comer, aun si el mercado parecía tener la fama de ser muy barato, quería ahorrar el dinero obtenido lo más posible, su suerte le sonrió cuando se encontró con una sección de pura comida empanizada por lo que se llevó una cantidad decente de los mismos.

Una vez fuera del mercado busco con la mirada algo parecido a una plaza de comidas o un lugar apropiado para sentarse a comer, siguiendo el camino que tenía el barrio-mercado pudo encontrarse con un café al aire libre por lo que ya sentado procedió a desayunar mientras hacia un acopio de la información ya obtenida.

"Veamos, actualmente me encuentro en una ciudad japonesa de la que nunca he escuchado su existencia, mi cuerpo actual no es mi cuerpo original y aparte estoy exhibiendo un comportamiento violento digno de un psicópata"- piensa el chico mientras se lleva lo que parecía un camarón a la boca para luego pellizcarse el tabique cerrando los ojos – "Puedo hacerme a la idea de lo que realmente está pasando, pero tengo que intentar esto último".

Sin esperar ni un minuto el peliplata guarda lo que le queda de comida yendo al primer establecimiento que se encontró acercándose al propietario- ¿Disculpe, sabe dónde se puede realizar llamadas internacionales?

Minutos después

Narra #######

Estuve buscando por casi media hora algún puesto telefónico que me permitiera llamadas al exterior o incluso un ciber, cualquier cosa que me permitiera guardar tanta batería en mi celular como sea posible, pero al parecer este barrio-mercado solo se dedicaba al comercio de productos hogareños y uno que otro puesto de comida.

Siguiendo el concejo de varios puestos visitados fui aconsejado ir a un al centro de la ciudad y buscar una cabina a probar suerte allí o incluso para estar más seguro ir al hipermall también por la zona e intentar encontrar algo parecido, no tarde ni diez minutos en llegar.

Fui directo al hipermall para guiándome con algunos policías y una vez en el enorme complejo me guie por medio de los mapas del mismo llegando a un ciber increíblemente diferentes a los que había en mi país, pero eso no me importaba realmente lo que si lo hacía eran las cabinas telefónicas instaladas al otro lado del ciber.

Disculpa las cabinas como...-

Solo entra y marca el número el resto se hace solo- me corta el encargado del ciber sin despegar la mirada de su ordenador con cara y actitud de "No me jodas y has lo que tienes que hacer" por lo que sin darle más vueltas me adentre en la más cercana, cojo el teléfono y leo el cartel pegado a la pared con los prefijos telefónicos de los países, marco el de mi país y tomando en cuenta la diferencia horaria entre países llamo a mi casa.

Mientras suena el pitido de llamada, intento imaginarme el tipo de conversación que se llegaría a dar ¿Cómo explico que estoy en Japón? ¿Cómo explico mi nueva voz? ¿Cómo explico mi apariencia? ¿Me lograran entender? ¿Yo los entenderé a ellos? ¿Por qué diablos se me viene un episodio de South Park a la cabeza? como les digo [¿Quién soy yo?] en eso escucho como alguien contesta.

-Buenas noches, con quien ha...- al instante colgué, miro la pantalla digital del teléfono verificando si no me habría equivocado de numeración, una vez más descuelgo y marco cada número con sumo cuidado de no equivocarme en el proceso y una vez hecho eso, espero la respuesta.

Aló, quien hab...-una vez más cuelgo, el hombre al otro lado de la línea, puedo entender su castellano, tal vez pueda hablarlo, pero ese no es el problema, su voz no es ni la de mi padre o la de mi hermano, más bien, nadie en mi familia tiene esa voz.

Marque una tercera vez al mismo número, esta vez no me respondieron, no me sorprendería si los del otro lado de la línea lo hubieran interpretado como una broma de mal gusto, descartado ese número intento hacer memoria del teléfono de otro familiar, recordando el numero de la casa de mi tía, marco y espero una vez más.

Estimado usuario, el número es incorrecto, cuelgue e intente nuevamente- el tono mecánico de la contestadora fue lo que me respondió esta vez.

Rápidamente saco mi celular y busco los demás contactos de otros familiares míos, marco a cada casa y cada una o me responde una persona que no conozco o simplemente nadie contesta, en las que si me responden pregunto por mis familiares intentando articular lo mejor que podía un castellano medianamente entendible recibiendo siempre negativas.

Disculpe, ¿puedo realizar llamadas a celulares? -pregunto al encargado sacando mi cabeza de la cabina recibiendo un pulpar arriba de aquel zombie, con esa positiva llame a cada uno de mis contactos y del mismo modo que con las llamadas a los teléfonos fijos nadie me contestó.

No sé cuánto tiempo me pase en la cabina llamando una y otra vez a los números de mi familia e incluso ha amigos o conocidos, nunca contestaron las llamadas y en una última instancia y con mi celular en la mano marque un último número...el mío propio.

El tono de marcado una vez más invadió mis oídos durante tal vez unos 30 segundo en las que el número marcaba mientras esperaba que mi celular vibrara y la música saliera de él.

Mensaje gratuito, el número que usted ha marcado está equivocado o no exis...-el mensaje de la contestadora no llego a terminar, inmóvil mi vista se dirige a mi mano derecha encontrando el teléfono destrozado entre mis dedos, con lentitud cuelgo lo que queda de teléfono, me quedo mirando el marco de números que también terminaron destruidos para luego mirar mi reflejo en el cristal de la cabina, sobre todo, la sonrisa en mi cara que desde anoche no se borra.

Narra Autor

Tras salir de la cabina telefónica e ignorar los reclamos del encargado por la paga, el joven se dirige con calma a la salida esquivando a toda gente delante suyo, ya una vez fuera este se dedica a caminar sin rumbo fijo, solo...quería caminar, sin medir en ningún momento el tiempo en que estuvo perdido en sus pensamientos por algunas horas más hasta que el hambre volvió a invadirlo.

Buscando un lugar donde poder terminarse lo que se compró el peliplata se encontró una vez más en la misma plaza de la mañana y una vez más caminando en búsqueda de un banco para sentarse a degustar, vuelve a chocar con el castaño uniformado.

Lo siento yo...es enserio ¿otra vez? - pregunta el castaño con cierto toque de gracia en su voz al percatarse con quien se había chocado nuevamente.

Jeje lo mismo digo, estamos más en las nubes que en la tierra- responde con el mismo tono el peliplata debido a la irónica situación.

Y que lo digas- contesta el castaño para quedarse un segundo mirando detalladamente al joven de su misma edad- ¿Eres nuevo por aquí?

El peliplata mira raro al castaño enarcando una ceja por la pregunta - ¿Qué te hace suponerlo?

No soy conocedor de todos los habitantes de la ciudad, pero no hace mucho termino el horario de clases y tu realmente ni siquiera parece que te hayas cambiado de ropa en todo el día ¿Andas perdido? -

En realidad, es más...-

¡Hwaau! - cortando la conversación de los jóvenes una repentina voz detrás suyo combinada con el sonido de cosas cayendo hizo a los chicos ver en su dirección encontrándose con el interesante escenario de una chica tirada en el suelo con la cara pegada al piso abriendo los brazos de par en par con su trasero al aire, pero sin duda lo más resaltante era que debido a aquella pose su falda termino levantándose dejando ver sus bragas.

[Que bonito color]- fue lo único salido del peliplata mientras él y el castaño se quedaron mirando tal escena que solo salieron de ese trance cuando la chica se volteo sobando su cabeza mientras se quejaba de su torpeza, vestida con lo que parecía un habito de monja la chica posa su mirada en ambos jóvenes que no dejan de mirarla.

¿Te encuentras bien? - pregunta el castaño saliendo del trance acercándose a la chica seguido por el peliplata ofreciendo su mano ayudándola a levantarse.

Oh, lo siento, muchas gracias-Agradece la chica con una suave y dulce voz tomando la mano del castaño incorporándose, gracias a una repentina brisa el velo de la hermana sale volando revelando a una bella joven que no parecía superar los 16 o 17 años, de cabellos rubios brillantes y hermosos ojos verdes.

El castaño se había quedado embelesado por la monja que al peliplata le dio tiempo a ir a recuperar el velo -Tenga más cuidado la próxima vez-advierte una vez el castaño suelto a la monja.

Agradezco la gentileza de ambos, en verdad soy demasiado torpe cuando estoy en lugares desconocidos – se reprocha a sí misma la monja mientras se acomoda el velo para luego recoger una maleta justo al lado donde parece tropezó.

¿De viaje? – Curioso el castaño pregunta

No, no es eso, fui asignada a la iglesia de esta ciudad...deben ser residentes de esta ciudad, encantada de conocerlos- ella inclina la cabeza a modo de saludo recibiendo un gesto similar del castaño mientras de parte del peliblanco gira su cabeza de lado como si no la hubiera entendido por completo-he estado en problemas desde que llegue ya que hablar japones no se me da tan bien, me perdí y otras personas no podían entender lo que trataba de decir.

Entiendo, creo que se dónde está la iglesia, si gustas te enseño el camino- comenta el castaño consiguiendo que la monja sonriera mientras unas cuantas lagrimas se le escapaban, atribuyendo su encuentro a la gracia de dios sumado a que se hacia la señal de la cruz.

Antes de partir el castaño fue sujetado del hombro por el peliplata volteando a verlo- ¿Sucede algo?

Podría acompañarlos por favor, yo también soy nuevo en la ciudad, he estado caminando por horas y aun no soy bueno ubicándome, solo quiero que me heches una mano, [si quieres incluso te pago]-eso ultimo lo dijo mostrando todo el dinero que este traía encima.

Wow tranquilo, con gusto te hecho una mano, no hay necesidad de que me pagues nada, así que guarda eso por favor- pide el castaño sorprendido por la cantidad de dinero que le estaban ofreciendo solo por unas simples indicaciones.

Ya veo, gracias- dicho eso guardo el dinero para percatarse ambos que la rubia se les había adelantado y ya estaba en la otra esquina de la plaza esperando al castaño a lo cual ambos jóvenes partieron a su encuentro-por cierto, ¿cómo le hiciste para entenderla?

Oh, emmm en la preparatoria me ensañaron lenguas extranjeras, por eso pude entenderle- respondió rápido y algo nervioso el castaño apurando el paso adelantando al peliplata.

"No sabía que el italiano se enseñaba aquí en Japón como materia regular, aunque durante la conversación el nunca hablo el italiano, usó una rara mescla de japones y castellano y aun así la chica le entendió ¿Por qué?"- se preguntó mentalmente el joven mientras se incorporaba al grupo y siguiendo el camino marcado por el castaño.

Narra #######

El camino hacia la iglesia fue uno silencioso y de seguro hubiera sido así todo el camino de no ser por un parque por donde pasamos y de donde los fuertes llantos de un pequeño llamo nuestra atención, sobre todo a la hermana la cual casi como si le fuera instintivo entró al parque a atender al niño seguida de cerca por mí y el castaño.

Cuando ubicamos al niño tirado en el suelo al lado de su madre auxiliándolo la monja ya estaba arrodillada delante suyo aportando su ayuda, después de acariciar su cabeza y decirle unas cuantas palabras para calmarlo posa su palma donde el niño se había herido.

Al siguiente momento, un orbe de luz verde apareció desde la palma de la monja y parpadeo hacia la rodilla del niño, desde mi perspectiva puedo ver como el raspón en la rodilla del enano va desapareciendo sin dejar rastro, mi vista pasa al rostro de la madre que estaba en shock ante tal escena, aunque puedo apostar que mi cara no es tan diferente a la suya, por otro lado, miro al castaño y este se encuentra sosteniendo su brazo izquierdo mientras esboza una expresión adolorida.

Ya está, tus heridas están curadas por lo que el dolor ya debió haberse detenido- comenta la monja al momento en que termina de curar al niño acariciando una vez más su cabeza para luego voltearse para mirarnos a mí y al castaño-Discúlpenme, pero tenía que hacerlo- se ríe mientras sacaba la lengua.

La madre del niño tras salir del shock sacudió su cabeza y tomo la mano del niño para poder irse rápidamente, no sin antes el niño gritar un ¡Gracias Onee-Chan! tras una rápida traducción de parte del castaño el camino prosiguió con una relativa normalidad.

Si antes el silencio era una calmo o incluso ameno, ahora se encontraba cargado de incertidumbre y dudas que la monjita no tardo en cortar- credo di averli sorprendido- una vez mas su acento italiano no me deja entenderla del todo.

Bueno ese poder tuyo nos dejo a todos sin aliento- respondio por parte de ambos el castaño a lo que yo solo puedo asentir para corrovorar la respuesta.

Sì, è il potere de sanar, un maravilloso potere concesso da Dios- aunque al principio esas palabras salian con una sonriente expresion que poco a poco se fueron entristesiendo- !Oh, alli debe de ser¡- dirijo la mirada siguiendo el de la monja, en una colina casi cubierta por el bosque la iglesia se alza a la distancia con la tipica cruz coronando el edificio, mas claro no puede ser,tras sacar un mapa de su maleta y comprobar nuestra ubicacion muestra un suspiro de alivio- se los agradezco a ambos.

En realidad , el merito lo tiene este chico, yo solo estube de colado nada mas- le aclaro a la monjita apuntando al castaño el cual parecia estar atontado mirando el edificio a la distancia mientras parecia estar temblando levemente.

Aun asi, Sono felice di haberme topado con personas così gentili subito dopo de llegar a Japón- una vez mas agradece la chica y en ello el otro chico sale de su trance.

B-bueno yo ya me tengo que retirar, recorde que tengo un compromiso pero desde aqui seguro llegas- se despide el castaño visiblemente nervioso e incomodo por algun motivo.

¡Por favor espera!-detiene la chica- Vorrei preparare un poco de tè in segno di gratitudine por traerme hasta aqui- parece sugerir la chica pero recibe una nueva negativa departe del chico.

Lo siento pero tengo prisa pero de seguro el podria acompañarte-me señala el castaño- amigo lamento no poder ayudarte pero realmente tengo que irme- se disculpa mientras junta las mano e inclina sus cabeza- nuestra amiga nos esta invitanto un té a modo de agradecimiento y quisiera saber si ¿estarias dispuesto a ir con ella hasta la iglesia?

Oh era eso, dile que no me hago ningun problema, ire con gusto- realmente no tengo ningun motivo para negarme a aceptar y mas sabiendo ahora de mi situacion.

Despues de una rapida traduccion y antes de separarnos la monja detuvo al castaño una vez mas- Me llamo Asia Argento, pero pueden llamarme Asia- tras presentarse el castaño siguio el hilo de las presentaciones- Mi nombre es Hyodou Issei- tras presentarse las miradas se posan en mi esperando una respuesta- Me llamo A..A...A- intente darles mi verdadero nombre pero uno totalmente distinto se forma en mi cabeza que termino por ser pronunciada- [Soy Kumagawa, Kumagawa Akihiro].

Entonces, Hermana Asia, Akihiro, reunamonos otra vez- Issei se despide de nosotros agitando sus manos dejando el lugar, yo y asi estubimos parados devolviendo el gesto hasta que el chico estuvo fuera de nuestro alcance, momento en el cual retomamos el camino hacia la iglesia.

La caminata volvia a ser silenciosa pues sin Issei para poder traducirnos entre nosotros, limitaba nuetras opciones de conversacion hasta que note como Asia no dejaba de mirarme o mejor dicho, no dejaba de ver mis piernas- [¿Que sucede?] – cuestiono llamando su atencion.

¿Estas herido?- siendo una oracion simple pude entenderla, lo que ayudo a que me cuestione a que se referia ¿herido?, no siento ni dolor o molestia alguna pero aun asi rebiso mi curpo sobre todo mis piernas percatandome de un cojeo que hasta ahora ignoraba por completo.

¿No te duele?- Esa nueva custionante respondo con un sencillo movimiento de cabeza negandolo- detente por favor- obedesco su peticion y de la misma manera que con el niño en el parque ella arroja su luz verdoza sobre mi pierna derecha durante unos segundos- ¿Mejor?- realmente, no senti nada, si no habia dolor mucho menos habria alivio- Si muchas gracias- pero aun asi no habia razon para no agradecer.

Despues de unos minutos logramos llegar al santo edificio, lavegetacion trepaba por los muros, sus bancos exteriores corroidos por el tiempo, incluso los vidrios de las ventanas estaban tan llenos de polvo que no podrias visualizar nada en su interior.

[Segurita, segurita que es aqui, pues estoy seguro que ni el diablo a tocado las instalaciones]- cuestiono sin resibir respuesta, no creo que Issei nos alla mentido por lo que con un ademan para que me siga, subo las gradas en direccion a la enorme puerta de madera y la empiezo a golpear.

¡HEY HEY HEY QUIEN ESTA ROMPIENDO MI PUERTA!-los histericos gritos al interior del edifio por lo menos nos respondio la duda si estaba desabitada, no paso mucho hasta que alguien entre abrio lapuerta -¿Que quiere?-Asomando solo la cabeza el hombre que me habrio tenia cabello blanco, tambien parecia estranjero y no salia de la adolecencia ademas de tener cara de pocos amigos.

[Yo nada, es ella la que nesecita su sagrada ayuda]- con el pulgar señalo a la monjita detras mio la cual tenia la mirada agachada mientras sostenia su maleta con ambas manos.

El canoso se quedo mirando por un momento a la chica-Sei tu quella Asia Argento?-Ante la cuestionante Asia levanta la cabeza visiblemente animada- Sí, sono stato assegnato qui e...- antes que ella siguiera el chico abrió la puerta por completo abriéndole paso a la chica- Rendo grazie a Dio-esas palabras Asia las acompaña con una señal de la cruz en lo que noto como la expresión del canoso, aunque sonriente se le notaba lo forzado.

Akihiro- san, pase- el llamado de la monja hace que me acerque, Apenas si pase el marco cuando mi caminar es detenido por el sacerdote que posa una mano en mi pecho- Qualcosa non va, ¿signor Sellzen? -la voz de Asia suena angustiada mientras parece cuestionar al canoso.

Asia, non abbiamo tempo per fedeli o peccatori in questo momento, vai a sistemarti una volta per tutte- no los entiendo realmente, pero por la cara que puso Asia me da a entender que el té se cancela, en lo que veo a Asia el sacerdote me va empujando hacia atrás incluso mucho más de donde estaba cuando golpee la puerta- Lo siento amigo, no estamos de servicio el día de hoy por recibir nuevo personal, le recomendaría el retirase- esta vez sí puedo entender lo que dice mientras una sonrisa de diversión se va dibujando en su rostro.

[¿Y cuál sería mi castigo si decidiera ignorarte?]- cuestiono mientras hago algo de fuerza para detener el empuje del sacerdote.

Ohh realmente estas dispuesto a quebrantar las reglas solo para meterte en un santo edificio y bañarte en la gloria de Dios- esto me lo dice mientras su sonrisa crece y aplica más fuerza en su empuje sin lograr detenerme del todo.

[Je, para nada, solo quiero tomar el té con una amiga ¿Ahí algo malo con eso?]- en esta ocasión ya me encontraba a escasos pasos del sacerdote estando casi cara a cara con el.

Realmente no tiene nada de malo, pero personalmente me gustaría que te largaras- la fuerza de su empuje se redujo, pero aún tenía su mano en mi pecho mientras su sonrisa seguía creciendo hasta incluso mostrar sus dientes.

[Oblígame]- llegados a este punto ya tenía mi puño derecho preparado para golpearlo mientras el con su mano libre parecía buscar algo en su espalda.

¡ALTO! - sin darnos cuenta la pequeña monja se había puesto entre el sacerdote y yo llamando nuestra atención tras el fuerte grito y luego dirigir su vista al canoso- Signor Freed, Dio non vedrebbe bene una rissa in casa sua ti prego, lascia che mi licenzi e poi farò quello che vuoi- Ante la petición de la rubia el sacerdote se me quedo mirando unos segundos mas para luego separarse y dirigirse al interior de la iglesia refunfuñando en el camino.

Soltando un profundo y muy cargado suspiro Asia dirige su triste mirada hacia mí para luego inclinarse hacia mí en una reverencia-Aquí nos despedimos Akihiro- san, le mie responsabilità con la iglesia me obliga a cancelar nostro incontro, una vez más, muchas gracias por acompañarme.

No hay de que Asia, y no estes triste, ya escuchaste a Issei, un día de estos de seguro nos volvemos a ver- como respuesta recibo una aun triste sonrisa de parte de la monjita acompañado con un asentir de su cabeza- Bueno, me despido yo también, cuídate- procedo a voltearme y a alejarme del edificio escuchando el cierre de la enorme puerta a mis espaldas.

Narra el Autor

Ya en las gradas por un momento el peliplata miro hacia la puerta notando como la marca de sus puños se llegaron a marcar en la madera de la misma sin darse cuenta que aún tenía el puño formado durante el intercambio de palabras con el sacerdote, al relajarse y deshacerlo de este cayo un pequeño tornillo cuyo ruido no llamo la atención del peliplata que prosiguió con su camino en dirección a...

Esa misma noche

Nunca mas vuelvas a acercarte a una iglesia otra vez-estas palabras a modo de sermón y advertencia eran dichas hacia el castaño de parte de una hermosa mujer de piel clara con ojos azul celeste casi verdosos y un característico cabello color carmesí que le llegaba hasta los muslos vistiendo una camisa blanca de manga larga abotonada con una cinta negra en el cuello de la camisa, también lleva una chaqueta sobre la camisa que le tapa los hombros y llega hasta tan solo algo más arriba de la cintura dejando así la camisa blanca sobre el pecho al descubierto, usando una falda magenta con acentos blancos y zapatos de vestir marrones con calcetines altos, en si una versión femenina de la vestimenta del castaño.

Para nosotros, los demonios, la iglesia es territorio enemigo, el sólo poner un pie dentro de una de ellas puede causar un conflicto entre demonios y Dios, ya que era un acto de bondad el llevar a la monja a la iglesia, ellos no te hirieron, pero los ángeles están siempre a la caza, estabas en una situación en donde no sería extraño para ellos el golpearte con una lanza de luz- la seriedad de la pelirroja era palpable no solo en su voz, sino también en el ambiente.

No te vuelvas a involucrar con personas de la iglesia, en especial con exorcistas que son nuestros más grandes enemigos, ellos pueden eliminarnos fácilmente porque sus poderes están apoyados por la oración de Dios, aún más si es un Exorcista con un Sacred Gear, eso sería lo mismo que estar parado al borde de la muerte, Ise pues una vez exorcizados somos completamente exterminados, te vuelves nada, no queda nada y no sientes nada. ¿Entiendes lo serio que es eso? - eso ultimo lo dijo mirando a los ojos al castaño esperando que este le hubiese comprendido.

Ara Ara ¿Ya terminaste de sermonearlo? – parada detrás del castaño sale una sonriente y hermosa mujer de cabello azabache atado en una cola de caballo que casi llegaba al suelo con una cinta anaranjada vistiendo el mismo tipo de ropas que la pelirroja con la diferencia en que su busto era considerablemente más grande que el de la pelirroja.

Akeno ¿Paso algo? - la pregunta de la pelirroja hizo que la sonrisa de la mencionada pasara a desapareciera.

Recibimos una orden de cacería de parte del Archi duque-la respuesta de la mujer hizo que la pelirroja asintiera para luego posar su vista en el castaño.

Issei ve afuera del edificio y espera allí con Kiba y Koneko, tengo algo urgente que discutir con Akeno-ante la solicitud el castaño respondió con un "Si, Buchou" abandonando la habitación.

¿No crees que fuiste muy dura con el Rias? - pregunta la azabache.

Solo lo estoy haciendo ver la nueva realidad que le a tocado vivir Akeno- la identificada Rias respondió con la misma seriedad a la azabache que solo se encogió de hombros ante las palabras de su amiga- pero cuestionar mis métodos de decir la verdad no es lo que nos trajo aquí ¿Qué lograste descubrir? ¿Es posible que este demonio renegado sea el responsable?

A primera vista parecería que es el mismo, pero cuando pones más atención nada cuadra-dice la azabache mientras toma asiento en el sillón donde anteriormente el castaño era reprendido- la información dejada por el Archiduque reza que el renegado es una come carne despiadada, no hace distinción alguna con sus presas y las termina sin dejar nada más que un rastro de sangre, visite las escenas y por más que busque nada dio indicio de que el renegado haya sido el artífice - dice la azabache mientras se rascaba la mejilla.

¿Cuál era el estado de los cuerpos? - cuestiona la pelirroja.

Envié a mi familiar al hospital donde los llevaron, 8 víctimas, todas con lesiones mortales que van desde daños en la columna hasta el desmembramiento y a falta de mejor termino, destrucción de órganos y huesos ¿Crees que hayan sido los ángeles caídos que atacaron a Issei la anterior vez? - propuso la azabache.

No, ellos tienen su "territorio" cercano a la iglesia abandonada junto a sus calles aledañas y no se atreven a salir de aquella zona y esta matanza sucedió al otro lado de la ciudad, además, columnas dañadas, miembros arrancados, este no es el método que ellos usan, si se trata de humanos solo se limitarían a un certero ataque al corazón con una lanza de luz- aclaro la pelirroja.

Y exorcistas callejeros, esos tipos siempre están bajo órdenes de ángeles caídos y son lo suficientemente desequilibrados como para irrumpir en territorio demoniaco y dejar escenas de esta índole-vuelve a sugerir la azabache llamando la atención de su amiga.

Es una buena teoría, pero los callejeros al realizar sus matanzas siempre intentan dejar algún tipo de simbolismo religioso en las escenas de sus crímenes o algún mensaje de dicha índole- volvió a refutar la pelirroja.

Tienes razón, no encontré nada en la escena que se lo atribuya a un callejero, pero entonces ¿Qué crees que haya sucedido en aquel callejón y parqueo? - pregunta una vez más mientras ella y la pelirroja abandonan el sitio.

No estoy segura, aunque tampoco podemos descartar el hecho de que haya sido obra de un humano- respondió la pelirroja abandonando aquel cuarto.

Continuara......