(Cap 24) HOBGOBLIN

¡¡¡KABOOM!!!

Varios automóviles habían estallado mientras que individuos con máscaras se abrían pasó con armas que lanzaban rayos negros; estos intentaban dispararle a los otros sujetos que vestían máscaras de calabaza, quienes con sus lanzagranadas hacían la situación más complicada.

Eco Arroyo, una vez un pequeño pueblo pacifico donde los estragos eran casi nulos; hoy, se había convertido en un campo de guerra, debido a dos bandas que batallaban por el dominio del territorio; Mr. Negative y el Hobgoblin.

Martín: ¡¿Cuánto tiempo se tardará la bestia?! —preguntó mientras acababa con la vida de un secuaz del duende.

Demonio: El camión ya está en Pennsylvania, no tardará más de 30 minutos.

Martin: ¡¿Crees que tengo 30 minutos?! —gritó enojado para luego empujarlo—. ¡Nos están ganando con la artillería! —dijo mientras veía cómo Shocker, R.H.I.N.O., Mysterio, el escarabajo y los matarañas acababan con sus demonios.

Martin cargó su energía negativa y lo liberó alzando un camión y tirándolo contra los matarañas, mientras que mataba a otros secuaces más.

El duende, por otro lado, volaba con sus alas y lanzaba bombas calabaza causándole muchas bajas a Martín; hasta que pudo encontrarlo y voló hacia el esquivando los disparos de algunos demonios y sacando su nueva espada de fuego.

Duende: ¡Dulce o truco, tontos! —dijo y los asesinó a sangre fría con su espada —aterrizó cerca de Li y lo apunto con su espada—. Tú eres el siguiente.

Martín: Tú... ¿Quién te crees que eres para atrasar todos mis planes? —dijo llenándose de energía negativa.

Martin creó una espada de energía y corrió hacia el duende y empezaron a pelear, donde ambos estaban muy parejos debido a sus poderes y habilidades. Mientras que en el campo de batalla, varios hombres caían muertos y estructuras eran destruidas.

••••••••••

*En Oscorp*

Silveria: Estamos en línea —habló ella encendiendo las computadoras.

Otto: Perfecto, ahora podemos empezar con el siguiente paso.

Nick: ¿Y cuál es, doctor?

Harry: Usted ya sabe... Ese proyecto que estuvo realizando en secreto —dicho eso, el director quedó en silencio un poco asombrado.

Silveria: ...

Marcia: ...¿Qué?, digan algo, no tenemos tiempo que perder.

Marco: ¿Nick?, ¿qué pasa?

Nick: —Fury caminó hacia las computadoras y dio un suspiro—, parece que el proyecto omega se renueva.

Nicole: ¿Y eso qué es?

Silveria: SHIELD inicio una investigación para tratar de convertir el nuevo recurso en una fuente de poder para armamento militar.

Adrian: ¿Armas?, ¿lo primero en lo que invirtieron fue en armas? —preguntó asombrado.

Nick: Esa organización se encarga de brindar seguridad a nuestros ciudadanos y brindar la paz en otros países. Temo que no es muy efectivo usar el modo pacifico.

Harry: Y conociendo a nuestro actual presidente, ¿no creen que aprovecharía este nuevo armamento para tener más ventaja sobre los demás?

Silveria: SHIELD es una organización separada del gobierno, pero nos mantenemos en contacto.

Otto: Hmmm, todos sabemos que eso es imposible, los de la élite lo controlan todo —habló dejando a Nick un poco molesto.

MK: ¡Ya basta!, quién controla a quién o qué es para qué, no importa ahora, allá afuera es todo un caos y podría extenderse a otros lugares; así que un problema a la vez.

Marco: «Creo que Madame Web tenía razón» Luna tiene razón, concertémonos en el problema primordial ahora, ¿quieren?

Otto: —suspira— Tienes razón... Muy bien, mi hijo y yo podemos terminar de programar el cañón omega; solo denme más contraseñas del proyecto.

Nick: De acuerdo. Silveria, ve con ellos.

Silveria: Entendido —fue y se acercó a los Octavius.

Marcia: ¿Qué haremos nosotros?, no tenemos nuestros trajes, Nicole aún sigue delicada y... Jackie no tiene poderes.

Harry: Casi lo olvido, síganme todos —dijo Harry que fue seguido por todos; incluyendo la felina, que había permanecido en silencio todo el rato.

Todos bajaron un piso inferior, en donde Harry ingresó un USB y mostró una gran cantidad de archivos; muchos con imágenes del dúo arácnido, Nicole, la gata negra, entre otros.

Harry: SHIELD los ha estado siguiendo a todos; y empezó un proyecto que trataba de replicar sus habilidades; lo más lejos que llegaron fueron unos trajes especiales exclusivos para ustedes. Pues llegaron a la conclusión de que lo mejor era afiliarse con ustedes... Así que... Voilà... —dijo enseñando trajes para cada uno de ellos.

••••••••••

*En la batalla*

¡CLAM! ¡CLAM! ¡CLAM!

El sonido de las espadas chocando sonaban fuertemente, ambos rivales eran habilidosos; y con cada choque, leves destellos de energía y fuego se generaban.

Martin: ¿Quién eres para atreverte a enfrentar a un miembro del círculo del fuego eterno?

Duende: Jejeje, yo soy solo un pobre pordiosero que sirve a quien le salvo la vida.

Martin: ¿De qué hablas?

Duende: Bueno, dudo mucho que conozcas mucho de Mewni; así que no conoces mucho su historia... Solo te diré que, necesito esa fuente mágica para él —terminó apuntándole su espada.

Martin: Entonces no quieres apoderarte de la fuente para tu propio beneficio... ¿Por qué?

Duende: ...¡Ahhh! —gritó y se lanzó nuevamente hacia Martín.

••••••••••

—Narra el Hobgoblin—

Algo que me di cuenta cuando era niño, es que la vida tiene sus favoritos; mientras que a unos les toca la gran vida, otros tienen que luchar por sobrevivir.

Ya ni recuerdo mi nombre ni el de mis familiares; solo recuerdo que nací en una aldea de septarianos, debíamos trabajar desde temprana edad para poder comer y beber. Mi padre me contó que todo se debía a los Mewmanos, quienes nos habían quitado todas nuestras tierras.

Crecí con rencor hacia los Mewmanos, y de joven yo y mis amigos a veces íbamos al reino para robar algunos cultivos; incluso pasamos por la guerra que se había desatado entre Mewmanos y monstruos, pidieron nuevos reclutas para las tropas, y me aliste sin dudar. Si tenía la oportunidad de clavar mis garras en las Butterfly, lo haría.

Nuestro general, Toffee, fue quien nos lideró y debido a nuestra raza los monstruos tenían una gran ventaja. E incluso, pudimos emboscar a la reina y acabar con su vida; sin embargo, la princesa fue quien lo arruinó todo.

Jamás olvidaré ese día; fue cuando conocí el infierno. Una salvaje cacería inició, la nueva reina junto a la alta comisión incendio nuestras aldeas y mató a todos los septarianos que veían; mis padres, mis hermanas, mis amigos, los recién nacidos y los más ancianos.

"¡¡¡AAAHHH!!!, ¡¡Vas a pagar por eso!!" —me llené de rabia y me lancé hacia la reina, pero fue inútil.

A las justas pude esquivar su rayo oscuro que me destruyo todo mi hocico y mi cola; creí que iba a morir, pero uno de los nuestros se sacrificó para salvarme, se llamaba Rasticore, que peleó para darnos tiempo a mí y a los que quedaban.

Fueron muy pocos los que alcanzaron a los botes y escaparon al mar abierto; llegamos a una isla en donde encontramos refugio por unos días. Nos llevamos con la sorpresa de que Rasticore había sobrevivido, pues regresó pero en muy malas condiciones y faltandole partes de su cuerpo.

Sabíamos que tarde o temprano nos encontrarían, pues ellas tienen la magia de su lado, así que decidimos separarnos. Éramos 11, entre machos y hembras; tomamos diferentes caminos, y aunque algunos se fueron en parejas, yo decidí irme solo.

Vagué por los desiertos, dormí en cuevas, me enfrenté a otros monstruos por comida y bebida; me alejé todo lo posible de los reinos, diría que tuve suerte, pues nunca más me topé con Mewmanos; espero que los demás hayan corrido con la misma suerte.

Pero hubo un punto en el me perdí, no encontré refugio ni alimentos la sed me mataba; pude ver cómo unos buitres me seguían, así que sabía cuál era mi destino. Caí de espalda al suelo y cerré los ojos, esperando a que todo terminara; ya estaba delgado y sin fuerzas.

Desperté luego en una cabaña, me levanté y estaba asustado; ¿quién me había traído aquí?; salí de ahí y vi que estaba en una aldea de monstruos.

¿?: Que alegría saber que sigues vivo, chico.

Él: ¡¿Rasticore?! —dije con gran asombro.

Rasticore: Ha pasado mucho tiempo, es bueno poder encontrar sobrevivientes aún.

Él: ¿Qué haces aquí? ¿Qué es este lugar?

Rasticore: Una aldea pequeña... Y el inicio de nuestra venganza.

Rasticore me explicó que habían pasado casi 30 años desde ese día, lo cual me dejó en shock; me contó acerca del regreso de Toffee y que casi conseguía la victoria al matar a la nueva princesa. De sus aventuras que tuvo al encontrar refugio en una Butterfly de tréboles que no sabía que era una Butterfly, y de cómo está lo traiciono. Me habló acerca de los conflictos que hubo en el reino Butterfly y de su caída por parte de esa Butterfly de tréboles.

De cómo el reino fue reconstruido, de cómo los monstruos se habían establecido en aldeas separadas y sobrevivieron; además, me contó del nuevo líder de la aldea y de la venganza que se estaba planeando.

Conocí al líder, quien fue el que me encontró moribundo y me salvó; era un anciano septariano, el cual era el mismo anciano que conocí hace 30 años. Después del reencuentro me contó sobre su plan, pero desgraciadamente no podía ejecutarse pues él estaba muriendo; me contaron todo sobre los tres tesoros sagrados, sobre la fuente de magia y el círculo del fuego eterno, pues llevan años espiando a los Mewmanos y tienen infiltrados; me encargaron la tarea de usar esos 3 para destruir la magia... Pero debía hacerlo en una dimensión que no tuviera contacto con ella, para no ser detectado.

Y así lo hice, me dieron tecnología que nunca antes vi y ahora tengo en mi poder la armadura del caballero y la araña celestial, los cuales me dan el suficiente poder para extraer la magia y salvarle la vida al anciano que me salvó; para después robar la varita mágica y exterminar la magia para completar nuestra venganza.

••••••••••

—Narro yo—

El duende, que ahora es el nuevo nombre del septariano, estaba poniendo en aprietos al señor negativo; quien estaba en desventaja debido a los nuevos poderes del monstruo. El duende junto a su espada de fuego incendiaban todo el suelo y se preparaba para el golpe final; sin embargo, fue sorprendido por otra bestia.

¡¡¡ROOOAH!!!

••••••••••

*En Oscorp*

Marco: Luna, necesito hablar contigo.

MK: ¿Qué sucede?

Marco: Bueno... Cuando estábamos en el avión, tuve una especie de viaje astral donde conocí a una tal Madame Web.

MK: Al fin la conoces, que bien.

Marco: Si, pero... Me dijo que podía preguntarte acerca de la verdad de Nicole, sobre quién es en realidad.

MK: Emmm... No es un buen momento para eso, Marco, debemos concentrarnos en lo que es importante ahora —contestó apartando la mirada y yéndose luego.

Marco: Espera... ¿Entonces si sabes en realidad? —lo siguió pero él se había ido.

Marco se fastidió un poco, pues la duda lo inquietaba demasiado; intentó relajarse al visitar a Harry, solo para ver cómo Nicole estaba junto a él ayudándolo con las computadoras.

Nicole: Estaba preocupada por ti, ¿sabias? —dijo con un tono burlón.

Harry: Lo siento... Deberías odiarme, fue parte del plan convertirte en mariposa y crear a ese monstruo que casi te mata —respondió apenado.

Nicole: Es cierto... Pero no lo hago, no después de haber sido mi casi única compañía por un largo tiempo.

Harry: ...Marco es muy suertudo por tener a alguien tan especial como tú —habló un poco decaído apartando la mirada.

Nicole: ...¿Eso crees? —le contestó un poco alegre.

Harry: ...Seeeh, eres linda, simpática, lista y... Poderosa —respondió rascándose la nuca.

Ambos se rieron y continuaron con las computadoras, aunque echándose algunas unas miradas; Marco, por su parte, estaba recostado en la pared, un poco triste pues sabía lo que estaba ocurriendo ahí perfectamente.

«Tal vez yo sea muy feliz junto a ella; pero, ¿sería ella aún más feliz con otra persona?», fue lo que se dijo el castaño.

Marco: —recostado—... Supongo que se acabó... —dijo para después pararse y buscar otra compañía.

El castaño deambuló un par de minutos, hasta que escuchó su nombre provenir de un cuarto, el cual acudió rápidamente, debido a que era su hermana la que lo llamaba.

Marco: ¿Jackie?, ¿Marcia?, ¿qué están haciendo aquí?

Marcia: Ok, estuvimos deambulando por aquí y entramos a esta sala de archivos.

Jackie: Adivina que encontramos.

Marco se sorprendió al ver unas imágenes de sus tijeras dimensionales, más otros archivos que hablaban acerca de ello.

Marcia: Al parecer, SHIELD fue la que compró las tijeras que vendiste en Ebay ese día.

Jackie: Y hay más —añadió dándole unas carpetas—, parece ser que SHIELD replicó todo el armamento de tus antiguos villanos e intentó recrear a Electro, al lagarto, al chacal... Y a ti.

Marco: ...Eso explica el ataque a Oscorp de hace tiempo; querían robar estas réplicas idénticas.

Marcia: Y tus tijeras...

Todos: ...

Marco: —da un suspiro—, eso no importa ahora... Como dijo Luna, un problema a la vez.

Jackie: Tienes razón, nada de esto importará si esos locos hacen explotar este lugar con nosotros aquí.

Marcia: Entonces... Acabemos con este maldito problema de una vez por todas.

••••••••••

Continuará...

LSZ-V3B

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