Poción Multijugos

Esta sin revisar, no he tenido tiempo y la acabo de escribir a esta hora. XD espero que lo disfruten y cualquier error de ortografía o coherencia lo siento. Lo arreglaré lo antes posible.

Saludos
/////////////////////////

Max sintió su nariz sangrar, estaba mareado...

"Esto te hará más fuerte, pronto vendrás ante mí".

Escuchaba voces, aquella voz aterradora que escuchaba en sueños o cuando sentía una fuerza maligna..

Max no aguantaba mas, aquella mujer o la cara de sapo se estaba pasando. Ella tomó con fuerza su varita y puso una cara de preocupada.

—Oh, cariño. Lo siento tenias que aprender a no hacerle eso a los mayores— fingía preocuparse, pero no era así. Estaba asustada, si el niño la acusaba era su fin. Así que tuvo un plan.—Imperio

Max solo escuchaba que tenía que obedecer y tenía que olvidar todo lo que había pasado... Algo extraño ocurrió, salió del salón olvidando a que había ido.

Salió por el aula de defensa contra las artes oscuras sin fuerza, aturdido.

—Necesito, agua.—susurraba. Parecía que ya era algo tarde porque nadie aparecía por el gran castillo. Sangre salía de su nariz y sentía una costilla rota.

Max no se dio por vencido. Venía de la calle, había pasado hambre, sed, frío... Había pasado de todo, no podía ser el débil ahora. Vio que tenía su varita en su pantalón y la sacó. Fue a una de las habitaciones más cercana y entró. Habían varios utensilios y cosas...

Se dirigió a un pequeño frasco y agitó su varita diciendo: "aguamenti".

Una pequeña corriente salió de la punta de ella y tomo un gran trago de aquella agua mágica. Ya se sentía un poco mejor, aunque su costilla y su nariz no lo estaban.

Caminó como pudo y sacó una sonrisa, había hecho un hechizo. Esto era nueva para él... Luego recordó.¿Para qué hizo el hechizo? ¿Por qué estaba en esas condiciones? Trataba de recordar, pero no caía en cuenta.

Los minutos pasaron y llegó a las mazmorras. Allí dio la clave y entró, al ver en aquellos sillones y sillas se encontraban Snape, Draco y sus guardaespaldas y Sabrina. La cual a Max le extrañó y se recordó del trato que tenía con Draco.

Todos miraban asustados y sorprendido, Max se quedaba quieto con su túnica manchada de sangre y su cara hinchada.

—Max está sangrando sangre—dijeron Crabbe y Goyle a la misma vez.

—No me digas—comentaron los demás.

Snape se le acercó y Max quiso evitarlo. Camino por la sala común para sentarse en un sillón, quería disimular el dolor.. No lo logró.

"Por qué tenía que ser tan débil". Se preguntaba, Snape entendió su indirecta de que no quería verlo. Así que se fue buscando a la enfermera.

Minutos pasaban y todos los chicos se quedaban mirando. Max sentado, Draco con sus guardaespaldas pegado a unas mesas que habían y Sabrina en otra silla al frente.

—Ya te puedes ir a acostar, gracias—Draco dijo rápido, Max no entendía porque se llevaba mal con ella. Si a él lo ayudó con lo de Snape.

¿Snape? ¡Snape! Se le había olvidado del plan que tenía, no podía hacer nada en esas condiciones. Se iba a levantar para buscar las cosas en su bulto, cuando iba a llevarse la poción llegaron..

Max escondió de nuevo la poción multijugos y se llevó su bulto..

...

Había llegado a la enfermería, tuvo que aceptar la ayuda. Snape lo había ayudado a caminar, no podía ser tampoco tan malo con él. Solo que saber que era su papá y que él no le dijera le dolía. Hace tiempo necesitaba uno, aunque no pareciera, con el tiempo se fue acostumbrando a estar solo y sin nadie.

Max pensaba que nadie podía estar solo en la vida. Era un dolor fuerte, uno tenía un vacío... No podía hablar con nadie, compartir y demostrar amor. Él tenía mucho que demostrar, pero si no lo ayudaban a seguir adelante como lo podía expresar.

La enfermera Pompfrey sacó a los profesores y se quedó con el chico herido. Lo verificó y rápido hizo unos hechizos con su varita, Max sintió su nariz hacer un "click".

Estaba sorprendido por la "tecnología" de este lugar. La medicina no era así en el mundo muggle..

—Tomate esto, te hará dormir y te sentirás mucho mejor—Max obedeció y formó una cara de asco al probarla.

Le agradeció y cerró los ojos, esperando despertar lo antes posible para seguir con el plan.

...

La noche estaba fría, había una fuerte lluvia con grandes rayos. Estaba un poco aterrador, y más para Max que estaba solo en aquella gran habitación con los rayos cayendo.

Un gran trueno se escuchó, el chico dio un brinco del susto despertándose. Estaba desorientado, un poco cansado. Ya se sentía de maravilla... Trató de mirar si alguien más estaba en la habitación, pero no había nadie.

Se levantó de la cama y se puso sus zapatos, miro un pequeño reloj que marcaban las cuatro y dos de la mañana. Se imaginaba que todos estarían durmiendo, así que estaba listo para empezar su plan.

Camino lentamente hacia su bulto y busco las cosas que necesitaba para sacar información. Consiguió la poción que le habían dado los gemelos Wealeys y el pelo que le había arrancado a Snape en la clase de pociones. Lo introdujo y la meneó... Un extraño ruido salió de ahí, la poción olía extraño, Max cerró los ojos y se la tomó.

La presión era tanta que se cayó al piso. Nunca antes había sentido algo así, no sentía dolor. Sino que su cuerpo estaba cambiando de una forma que nunca el había visto, no se lo creía. No creía todavía que todas estas cosas eran posible.

Busco el espejo más cercano y se sorprendió al verse. Reía al mirarse, quería ver cómo se veía Snape sonriendo. Cuando hizo la sonrisa vio los filosos dientes y paró de sonreír.

—Ya se porque Snape no sonríe— se dijo a si mismo mientras buscaba otra ropa que ponerse. Así se iban a dar cuenta que no era el verdadero Snape. Camino por los pasillos sin que nadie despierto lo viera.

Buscando ropa subió al quinto piso. Necesitaba la ropa urgentemente la poción no duraría todo el día solo una hora o dos.

Una luz brilló al caminar por aquellos pasillos algo oscuros. Al ver, una gran puerta se encontraba ahí. Este la abrió un poco nerviosos y lo vio.

Había miles de ropa y accesorios de todos los estilos y tamaños. Max buscó una negra y se la puso rápido, luego así corrió para la oficina de Dumbledore.

Estaba al frente de la gárgola. Respiró profundamente y dio sus pasos decididos, tenía que hacerlo por su bien. ¿Cuántos otros secretos más le iban a esconder?

Max trató de imitar la voz de Snape antes de subir, lo había conseguido más o menos. Toco la puerta y escucho un "adelante". Se sorprendió al saber que un viejo señor como Albus madrugaba.

Snape o mejor dicho Max, se dirigió hacia él.

—Señor,tengo que hablar de Max. No aguanto más tenemos que decirle el secreto—camino de lado a lado nervioso. Pensaba en que Albus lo podía descubrir fácilmente.

No fue así, Dumbledore solo lo miró.—Cuantas veces hemos hablado de esto. Sé que quieres cuidarlo y defenderlo, pero si así lo quiso el destino hay que decírselo— respiro—. Es duro, lo sé. Pero qué pasa si el chico se entera de otra forma, que pasa si descubre que...

Max estaba listo para escuchar el secreto. Estaba esperando a que Dumbledore le dijera, pero no lo hizo.

Max estaba furioso, lo que no se daba cuenta era que estaba cambiando.

—Me tengo que ir—dijo asustado cambiando la voz a la de él mismo.

Corrió y al ver, se encontró a la persona que estaba disfraza. Este estaba cambiando a su cuerpo original no le faltaba nada.

Estaba frente a frente tuvo suerte que no lo vio convertido igual a él. El ambiente seguía tenso, un silencio enorme se había formado. Snape miró extrañado al joven, no vestía con la ropa del colegio, sino, con una parecida a la de él. Muchas cosas pasaron por su mente, pero ya no importaban. 

Decidió hablar, tenía muchas cosas que decir...

—Sígueme, te tengo que decir algo.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top