11. Deseo rechazado

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La lluvia cae y mi cara está completamente sudada no se que pasa veo a mi alrededo y ya siento que los nervios salen a flote, en eso una mujer y una niña se adentran, ella esta asustada, les hablo pero creo que no me escuchan, es como si no estuviera ahí, de repente golpes suenan sobre la puerta.

—Abre Ver, solo quiero hablar  —dice un hombre golpeando con mucho enojo la puerta. Veo la mujer quien sostiene con fuerza a la niña, yo no se que hacer de la nada mis ojos comienzan a picar ¿qué carajos pasa? El hombre habré la puerta y se le acerca a la mujer a quien deprisa sostiene del cuello, yo me quiero mover pero no puedo, tira la mujer al suelo para después ver a la niña a la cual le da un puñetazo, mis ojos están completamente nublados —. Por tu culpa perra nuestra vida se fue a la mierda —dice a la niña. Después se detiene y voltea a donde me encuentro, no me puedo mover, me señala, por tu culpa perra, grita.

Me levanto con los ojos llorosos ¿Pero qué fue eso? Me fijo y aún esta oscuro, me levanto de mi cama y me dirijo al baño, me quedo viendo fijamente el espejo, mis ojos quieren llorar y no se porque.

Ahora ya no entiendo nada, ni mis propios sueños, porque habré soñado eso ¿qué tiene que ver conmigo?

—¿Mi familia? —digo en voz baja.

No puede ser eso, o si, no no no eso no, ni siquiera me acuerdo de ellos para decir verdad ni siquiera me di la molestia de saber quienes eran, nunca me importó.

Tranquila Sophia mañana tendrás tiempo de analizar mejor las cosas —pienso. Me regreso a mi cama y me vuelvo a dormir.

♧◇♡♤

—¿¡Donde carajos dejé mi coleta!?

Me muevo por todos lados, tratando de encontrar la coleta que siempre me pongo para ir a trabajar, me fijo en el tiempo y ya va hacer hora de empezar ¿y ahora que hago? ni modo ire así.

Por suerte ayer me arreglé un poco el pelo y no se me mira tan mal.

Me movilizó a mi puesto para esperar a que el señor delicado salga para poder empezar mi labor, al llegar una joven se encuentra en donde yo comúnmente me pongo ¿será que ya me cambiaron? No creo.

Al verme me sonríe —. Hola señorita el joven la espera en su habitación —dice y yo solo cierro los ojos ¿y ahora que querrá?

—¿Le dijo para que?

—No, solo dijo que la esperara aquí y que le diera el comunicado.

—A bueno, gracias —digo, sonríe y se retira.

toco la puerta y solo escucho el pase del engreído de mi jefe, al dentrar lo miro recostado en su cama —. Hola joven, me comunicaron que me necesitaba —digo.

—Claro que sí señorita, usted me debe algo o acaso ya se le olvidó  —dice sonriente.

Lo quedo viendo, es enserio, solo por un castigo, solo fue un error, todo mundo los comete —. Joven, pienso que tiene razón, no tuve que entrar a el cuarto ese día pero es que yo solo hacía mi trabajo —digo a mi defensa.

Se levanta de su cama y solo queda viendo un jarrón que contiene flores y plumas de pavo real —. Señorita lo que yo pienso es que usted me debe un castigo, el cual tiene que cumplir —dice tomando una pluma en sus manos.

Me voltea a ver y solo ladea una sonrisa, me le quedo viendo seria no quiero que piense que me esta dominando —. Como usted quiera joven, después de todo lo que piense o diga no tendrá aceptación alguna —digo y después pienso que no fue buena idea haber dicho eso.

Se me acerca a modo que queda a centímetros de mi —. ¿Que le hace pensar así señorita? —comenta, casi encima de mis labios.

—Usted es mi jefe y yo su sirvienta, con eso es más que suficiente —digo con veneno en mi boca.

¿Por que estoy hablando así? ¿Que me tiene enojada?

Sonríe y me queda viendo, toma mi mentón —. Me encanta como lo dice señorita Sophia —dice pasando la pluma por encima de mi brazo.

—¿Cuál será mi castigo joven?  —digo apartándome un poco de él. Se me acerca de nuevo y esta vez pone su boca cerca de mi oído.

—Quiero tenerla señorita Sophia, quiero que usted sea mía —dice y siento mi piel engrifarse de enseguida, mis manos empiezan a sudar, y mi respiración se comienza a agitar —. Pues conmigo pierde, porque no obtendrá nada de eso —digo apartándome de él poniendo mi rostro cerca del suyo, enseñando que no soy una puta más, con las que se acuesta.

Su rostro cambia a uno de confusión.

Me volteo y en eso me toma de la mano para después pegarme a su cuerpo —. Yo obtengo todo lo que quiero señorita —dice y en eso estampa sus labios en los míos, trato de safarlo de su apego, pero se me hace imposible, mi mente comienza a tener recuerdos de aquella vez que aquel hombre abusó de mi, mi mente se empieza a revolver y en eso mi ansiedad explota.

Él se despega de mi, yo estoy llorando tirada en el suelo, estoy temblando, tapo mis ojos con las manos, no quiero que piense que me derrotó.

—Lo lamentó señorita, no quería hacerle daño —escuchó que dice. Me levanto enojada, no se que piensa, que soy una puta, es un completo hijo de perra.

—Pues ya lo hizo —digo y me aproximó a la puerta para salir de aquí, en eso vuelve a tomar de mi mano ¿que carajos querrá este malnacido?

—Perdóneme señorita —veo su rostro y esta preocupado, no caeré en su maldito juego.

—Quiere sexo, entonces busquelo en los prostíbulos en donde está a acostumbrado a ir, porque yo no pienso dejar ni que me toque un solo pelo —me trato de soltar de su agarre, pero no puedo —. Dejeme ir por favor —digo con rabia en mi voz.

—Señorita disculpe, solo quería acercarme a usted —dice él muy cínico.

—Es que usted es un gilipollas de primera, mejor dígale a su padre que me cambie de puesto, por que para mí sería excelente.

—Pues no le daré el gusto señorita, usted seguirá trabajando para mí, su trabajo es impecable —dice.

—Entienda que de mi no va a obtener absolutamente nada —digo casi cerca de sus labios.

—Pues haré lo posible para que me perdone —dice y yo solo lo quedo viendo hecha una furia.

—Por favor suelteme —digo.

Hace lo que le digo y yo solo salgo de la habitación, pero que se cree, se que es el jefe de esta mierda de ciudad pero a mi eso ni me sube ni me baja, me da completamente igual, puede ser el rey del mundo y a mi me va a dar completamente lo mismo. Es una persona, no un Dios aunque tiene el cuerpo de uno y cara de uno, sigue siendo una persona, ni menor y ni mayor que otro.

Me pongo en mi lugar de trabajo, en donde tengo que esperar que salga para poder ejercer mi labor, para poder arreglarle el cuarto al niño de papá ¡no queremos que se le ensucien las manos, va!

Río de mis pensamientos y no me fijo de que él me esta viendo, lo volteó a ver y después solo sigue con su camino, así me gusta que entienda que no soy una cualquiera el cual se va a dejar de que la toquen como quieran.

—Conmigo perdiste jefecito —digo para mi misma.

Al acabar el día, gracias a Dios no volví a ver al jefe, mi día fue como siempre, asear, tener todo completamente arreglado y que todo este en su lugar. Me fijo en la hora y ya va a ser tiempo de irme, me fijo en que todo este bien y salgo de la habitación y sin querer choco con alguien.

—Lo lamento mucho —digo y me fijo que es la hermana de mi jefe, esta chica si que es hermosa.

—No te preocupes —dice amable —. ¿Esta Ibrahîm en su cuarto?.

—No señorita, el joven no ha venido desde la mañana en que se fue.

—Ok, si lo ves, comenta le de que lo estaba buscando.

—Si señorita —me sonríe.

Se retira y yo solo quedo boba viéndola, es una chica muy linda, al desaparecer por las paredes de la casa, me movilizó a mi cuarto. Lo único que quiero en este momento es comer y después irme a dormir, este día fue muy intenso para mi, y que mejor que relajarse y darse una buena siesta. Ya bien cenada y bañada, me entierro en la sabanas de mi cama, quiero dormirme lo más rapido posible, siento como que si he trabajo un mes seguido.

Mi mente empieza a volar a la situación de esta mañana, enserio que me enoje, solo con la idea que tenía de mi, de que yo era una fácil, de que iba a quedar rendida en sus brazos, eso hizo que me emputara muchísimo. Cuando me agarro a la fuerza y puso sus labios contra los míos (sus labios) eran suaves, no les voy a mentir, tenía un sabor como a frutilla con menta pero igual lo que hizo no tiene justificación, la verdad es que no me gusto nada.

Ibrahîm.

¿Porque será que su estúpido rostro no desaparece de mi mente?

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Hola chicos, me gustaría agradecer a aquellas personas, que se dan el tiempo de leer la historia, enserio mil gracias.

Comenten y voten♡ me ayudarían mucho.

¡Los quiero!

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