XVI
Dante: Bring it on!
Una batalla estaba a punto de comenzar. En el cielo frente a mí estaba el Ángel caído Kokabiel o como se llame.
Incluso cuando apunté la punta de mi espada hacia él, no descendió del cielo. Se nota que me está subestimando.
Así que, guardando a Rebellion en mi espada, caminé tranquilamente.
Dante: ¿Por qué no bajas? ¿Temes que te despluma en el suelo, o quieres bajar con estilo? - pregunté con burla - Te puedo ayudar con eso, sabes.
De mis manos, apareció mi vieja guitarra Nevan. Una guitarra morada con un mástil con muchas cuerdas eléctricas con algunas características esqueléticas.
Logré recuperarla junto con mis otras armas de mi ex socio Renzo Ferino y de su tienda Devil Arms tras dársela como garantía para pagar mis deudas. Me tomó mucho dinero y lágrimas, pero al final los tengo de vuelta en mis manos.
Tocando un par de acordes, obtuve la atención que deseaba de él... y arrogancia en sus ojos.
Dante: ¿Te gusta? Es el avance de mi nuevo disco que creé especialmente para ti - expliqué mientras hacía desaparecer a Nevan - Se llama 'El Ángel caído besará el suelo... literalmente'.
Kokabiel solo soltó una estruendosa risa mientras descendía al suelo. Tenía una sonrisa intrépida y emitía cierta presión que haría temblar a cualquiera.
Pero no a mí.
Cuando descendió, no lo hizo totalmente, estaba a medio metro de altura y se puso frente a mí.
Dante: ¿Qué? ¿El suelo no es 'digno' de ti? - pregunté con una mirada indiferente.
De repente y en un parpadeo, invocó dos espadas de luz amarillo, lo cual empezó a balancearlo de izquierda a derecha con la intención de cortarme a la mitad.
Sin embargo, incliné mi parte superior del cuerpo hacia adelante, esquivando la espada que pasó justo por arriba de mí. Y rápidamente me levanté, invoqué a Balrog, y con mi puño derecho le di un golpe en la cara, seguido de una patada izquierda.
Pero los dos golpes no le hizo ningún daño, ya que no logré conseguir que se moviera del lugar de donde estaba flotando.
Kokabiel: ¿Esa es toda tu fuerza? - preguntó con burla.
Sin haberse dado cuenta, le dí una potente patada desde arriba de su cabeza. El golpe provocó que cayera de rodillas al suelo mientras veía tenía una expresión de conmoción.
Kokabiel: ¿Qué...?
Dante: ¿Qué pasa? ¿Encontraste una moneda de oro? - pregunté burlándome de él - Finalmente logré que tocarás el suelo. La próxima vez haré que lo beses, tal como lo prometí.
Kokabiel: Grrr. ¡Raghh!
Con un rugido malhumorado, se levantó del suelo y balanceó sus espadas hacia mí. Rápidamente cambié de Balrog a Rebellion y contraataqué.
[Pov. Narrador]
No muy a lo lejos de la batalla, Asia e Issei veían como sus amigos batallaban contra Freed y su nueva Excalibur.
En eso, escucharon el choque de espadas en otro lado. Al voltear la mirada, observaron como Dante peleaba solo contra Kokabiel, unos de los Ángeles caídos más poderosos de Grigori.
Issei: Increíble - murmuró cuando Dante esquivó el ataque de Kokabiel y cambiaba su Rebellion por Agni y Rudra.
Asia: Dan-san - murmuró el hombre del chico con sorpresa - No sabía que era así de fuerte.
Issei: O que fuera tan veloz - añadió cuando empezaron a chocar espadas simultáneamente - ¡Tú puedes, Dante!
[Pov. Dante]
Tres espadas chocaron en un sonoro impacto. Mi Rebellion contra dos espadas de luz. Pero debido a que él es más fuerte, su ataque me hizo retroceder varios metros atrás.
Todavía no terminó, Kokabiel cruzó sus espadas y liberó una rafaga de luz con la forma de 'X' con dirección hacia mí.
Dante: Ni lo sueñes - dije levantando a Rebellion en el aire y bajándola, logrando así partir su ataque a la mitad.
Kokabiel: Hmm, impresionante. Se nota que eres muy diferente a los demonios y exorcista aquí presentes.
Dante: ¿Tratas de hacerme sonrojar? - pregunté con una ceja levantada.
Kokabiel: No, solo distraerte.
En menos de un parpadeo, Kokabiel ya estaba frente a mí y balanceando su espada hacia mi cuello.
Apenas reaccioné a tiempo. Retrocedí y contraataqué con una estocada al pecho. Solo para que detenga mi espada con sus manos desnudas.
Dante: ¡Kugh!
Kokabiel: Vaya arma que tienes ahí, muchacho - dijo mientras intentaba liberarla de sus manos - Me parece haberla visto en alguna parte.
Dante: ¡Pues ve también... esto! - exclamé antes de invocar a Yamato en mi mano izquierda y apuntarlo en la cara.
*SLASH*
Kokabiel: ¡¡RUAAHHH!! - gritó de dolor cuando le corté la mitad de la cara, de una mejilla a otra.
Debido a eso, aflojó su agarre de mi espada, por lo que aproveché y volví a la estocada. Sin embargo, fui demasiado lento. Disparó una enorme bola de energía que no tuve tiempo para esquivarlo, por lo que lo recibí de lleno y fui lanzado muy lejos cuando explotó, causándome mucho daño.
Dante: ¡Ackgh! - solté un quejido de dolor cuando mi espalda golpeó el suelo.
Kokabiel: Maldito - murmuró mientras intentaba tocarse la herida que le dejé.
Dante: ¿Quién lo diría?... Al parecer... los ángeles sangran - dije mientras me ponía lentamente de pie, sintiendo como mis heridas empezaban a sanar.
Ese último ataque si que era fuerte. Apenas lo recibí, fui lanzado lejos. Y estoy seguro que ese no era su ataque más fuerte.
Kokabiel: Esa espada... - dijo con una expresión hosca, como si la hubiera reconocido - Reconozco esa espada - sus ojos se abrieron de sorpresa - Ah... ya veo. ¡Eres el hijo de Sparda!
Dante: "Oh genial... otro 'admirador secreto' del viejo" - pensé volteando los ojos con fastidio.
Kokabiel se elevó al cielo lo más alto que podía. Levantando sus manos al aire, una lanza de luz apareció. Sin embargo, en vez de la típica lanza que he visto en otros como Raynare, esta aumentó su tamaño cada vez más hasta que llegó a una altura de dos o tres pisos.
Silbé sorprendido, y asentí levemente.
Dante: "Sip. Está tratando de compensar una falta" - pensé.
Kokabiel: ¡Rah!
Con un grito, soltó la lanza hacia mí, por lo que empecé a prepararme para esquivarlo. Sin embargo, me di cuenta de algo.
Detras de mí están los salones de clases, y detrás de los salones de clases estaban el Consejo estudiantil e Irina. Por el tamaño de la lanza, diría que tiene la capacidad destruir la barrera y en consecuencia, matarlos hasta quedar un cráter en el lugar..
No tenía más opción que protegerlos.
Dante: Me lleva la...
Rápidamente extendí mi Devil Bringer hacia la lanza.
[Pov. Narrador]
Irina: Así que... si ustedes mueren... ¿se van a otro Infierno? - preguntó con timidez - ¿O tal vez se van al Cielo? Ya que son demonios, ¿no?
Sona suspiró por decimoquinta vez por la pregunta sin sentido de la chica exorcista. Los miembros de su nobleza estaban igual de agotados mentalmente.
Sona: No, nosotros no nos vamos a otro Infierno o Cielo, o algo así - respondió con pesadez - "Juro por Lucifer que dejaré caer la barrera si ella no se calla" - pensó.
De repente el edificio central que estaba frente a ellos se destruyó. Todos se pusieron en alerta cuando vieron una lanza gigante aparecer de la destrucción y con dirección hacia ellos.
Saji: ¡¡Oh MIERDA!!
Todos cerraron los ojos esperando el impacto contra la barrera.
Un impacto que nunca llegó.
Cuando volvieron a abrir los ojos, vieron con gran asombro a Dante sostener la punta de la lanza con un brazo espectral de su Devil Bringer.
Irina/Sona: ¡Dante!
Dante: ¡Nnngghhk! Hola, chicos - saludó con esfuerzo - ¡¡AAHH!!
Con un grito, puso más fuerza en el agarre de la lanza y lo aplastó con todo su poder, logrando destruir el arma hasta que se convirtió en una estela de polvo brillante.
Exhausto y sin fuerzas, cayó de espaldas al suelo. Y al no tener energía, su Devil Bringer se desactivó, volviéndose un brazo normal.
Dante: Ah... ahorra te desactivas - dijo, maldiciendo a su mano.
Irina: ¡Dan-san! - habló a través de la barrera.
Sona: Dante, ¿estás bien? - preguntó preocupada.
Dante: Sí, solo... déjame descansar unos minutos - dijo respirando con dificultad.
Irina: ¿Y los demás? ¿Quién detendrá a Kokabiel?
Dante: Es todo suyo... pero que no se acostumbren - respondió antes de cerrar los ojos.
[}-O-{]
Mientras tanto, Kokabiel miraba con satisfacción su victoria contra el hijo de Sparda. Puede que no lo haya matado, pero está fuera de combate, eso es algo.
Así que, viendo hacia los demonios restantes, miró que Kiba logró derrotar a Freed y destruir la Excalibur con su nueva espada demoníaca-sagrada que logró crear cuando desbloqueó su Balance Breaker.
Valper: ¿Una... una espada demoníaca y sagrada? - preguntó en estado de shock - Eso es imposible. ¡Los poderes opuestos no pueden fusionarse.
Kiba: ¡Valper Galilei, prepárate! - dijo apunta su espada hacia Valper.
Valper: ¡Ah! ¡Ya veo! ¡Ahora entiendo! - exclamó con los ojos abiertos y una sonrisa lunática - Si la luz y oscuridad están desequilibradas... ¡eso lo explica! No solo los grandes Maous, sino también-¡kagh!
Antes de que Valper pudiera terminar, una lanza de luz atravesó su pecho y vomitó sangre para luego caer muerto al suelo.
Kokabiel: Fuiste un gran hombre, Valper - dijo el responsable de su muerte - Es más que impresionante que fueras capaz de averiguarlo al final. Pero debí haberlo eliminado desde el inicio y continuar solo. Entonces vamos terminar con esto.
Con una sonrisa desquiciada en su rostro, Kokabiel siguió en el aire.
Rias: ¿Dante? - preguntó al no verlo en ningún lado - ¡¿Dónde está Dante?!
Kokabiel: Está ahí - respondió señalando el montón de escombros que antes era la escuela - No logré matarlo, pero si se vuelve a levantar, no dudaré en hacerlo.
Rias frunció el ceño con enojo. Su Dante había sido derrotado y posiblemente esté muy herido en este momento. Y aunque quisiera ir a ver si estaba bien, tenía que detener a Kokabiel.
Kokabiel: Continúa y transfiere el poder del Dragón Emperador Rojo a alguien. Rápido - dijo desafiando a todos los presentes ahí.
Issei: ¿Cómo puedes estar tan confiado? ¡No nos subestimes!
Kokabiel: Tú eres el único que no entiende la diferencia de poder aquí - dijo con burla - Lo admito, tu pequeño amigo logró lastimarme... pero comparado con él, ustedes son solo insectos a punto de ser aplastado por mi bota.
Rias: Tks. Issei, dame transfiere tu poder a mí.
Issei: ¡Sí! - asintió poniendo su mano en su hombre para transferir su poder que acumuló durante la batalla.
[TRANSFER]
Un aura verde apareció en el cuerpo de Rias, seguido de un círculo mágico rojo con forma de contador en el suelo. El nivel mágico aumentó dramáticamente que todos lo pudieron sentir.
Kokabiel: ¡Esa es una increíble cantidad de energía! Es comparable a algunos de los demonios de clase alta - rió de emoción - ¡Parece que eres un genio igual a tu hermano!
Rias cruzó los brazos en forma de 'X' y dos orbes de destrucción se formaron en sus manos.
Rias: ¡Desaparece! - exclamó juntando los orbes para crear una enorme ráfaga de poder que disparó hacia él.
Kokabiel extendió sus manos hacia adelante, en un intento de detener el ataque.
Kokabiel: ¡Nada mal hermana del Rey Demonio! ¡Hermana de Sirzechs! - exclamó sonriendo con placer - ¡Jajajaja!
Pronto, toda la energía de Rias se acabó, lo que la hizo caer al suelo y quedar agotada de poder.
Sin embargo, Akeno voló hacia Kokabiel para un ataque sorpresa.
Akeno: ¡Trueno! - exclamó, lanzando una gran descarga a eléctrica a Kokabiel.
Sin embargo, éste usó sus alas para envolverse con ellas, protegiéndose del ataque.
Kokabiel: Tú, la que tiene los poderes de Baraqiel. ¿Te atreves a interponerte en mi camino? - preguntó a través de sus alas.
Akeno: ¡No te atrevas... A COMPARARME CON ÉL! - gritó, arremetiendo con furia.
Issei: ¿Baraqiel? - preguntó al aire.
Xenovia: Él es uno de los líderes de los Ángeles Caídos. También conocido como El Destello - respondió - Se dice que es un Maestro del trueno.
Issei: ¿Maestro del trueno?
Pronto Akeno se quedó sin energía, por lo que dejó de disparar más rayos y empezar a respirar pesadamente.
Una risa salió de Kokabiel mientras volvía a abrir sus alas y tenía los brazos cruzados.
Kokabiel: ¿Quién hubiera imaginado que te convertirías en un demonio? Ciertamente tienes un equipo muy divertido, Rias Gremory - dijo mirando a los presentes - ¡El Dragón Emperador Rojo, el desertor del Proyecto Espada Sagrada, el Cazador de demonios, y la hija de Baraqiel!
Eso último sorprendió a todos, que miraron con sorpresa a la chica.
Kokabiel: Jejeje. Rias Gremory... parece que tus gustos son tan peculiares como los de tu hermano.
Rias: ¡No dejaré que insultes a mi hermano, nuestro Rey Demonio! - se puso de pie - ¡Por otra parte, insultar a mis siervos y a mi Dante es un crimen castigado con la muerte!
Kokabiel descendió al suelo con fuerza, provocando una estela de polvo que se despejó en poco tiempo.
Kokabiel: Entonces adelante, intenta destruirme, hermana del Rey Demonio, dueña del Welsh Dragon, ¡princesa del Cabello Carmesí de la Perdición! - exclamó para provocarla - ¡Te enfrentas a uno de los archi-enemigos de los Demonios! Esta es una gran oportunidad. ¡Sí no lo ves como tal, entonces eso demuestra lo mediocre que eres!
Kiba le dio una señal a Xenovia, lo cual entendió y ambos empezaron a correr.
Xenovia: Ataquemos juntos - sugirió y Kiba asintió.
Para ayudar, Koneko también fue a la pelea.
Xenovia dio un salto y levantó una nueva espada suya, Durandal. Kokabiel sonrió antes de notar que Kiba usó su velocidad para poder atacarlo desde su punto ciego. Rápidamente hizo aparecer dos espadas de luz y bloqueó ambos ataques sin mucho esfuerzo.
Kokabiel: ¿Oh? Un ataque simultáneo usando una Espada Sagrada y una Espada Sagrada-Demoníaca, ¿eh? Interesante.
Arriba de él, Koneko saltó para un ataque sorpresa.
Koneko: Te tengo.
Las alas de Kokabiel emergieron de su espalda y atacó a los tres, hiriéndolos y sacándolos a volar.
Issei: ¡Koneko-chan! - gritó corriendo con Asia para ayudarla.
Kokabiel: ¡Jejeje jajaja! - rió desquiciadamente.
Volvió a atacar. Kokabiel cruzó sus espadas y disparó un ataque mágico en forma de 'X', obligado a Kiba y Xenovia bloquearlo con sus espadas. El ataque fue tan fuerte que ambos respiraron con pesadez.
Xenovia: Aún no terminamos.
Kokabiel: ¿Crees que puedes seguir? Muy bien, entonces. Ven a mí con todo tu poder.
Kiba: ¡¡SWORD BIRTH!!
Círculos mágicos de color rojo aparecieron en el suelo alrededor de Kokabiel, quien se cubrió con sus alas cuando varias Espadas Sagradas-Demoníacas salieron para apuñalarlos.
Kokabiel: ¿Eso es todo lo que puedes hacer? - preguntó antes de cortar y destruir las espadas con sus alas.
Usando su velocidad, Kiba se lanzó hacia él con una estocada, pero Kokabiel atrapó la punta con los dedos. Eso no fue todo, Kiba creó otra espada con su mano libre y volvió a atacar. Solo que Kokabiel volviera a atraparla.
Kokabiel: Jejeje. Idiota.
Kiba: ¡Aún no! - exclamó creando una espada en su boca.
Lamentablemente Kokabiel también vio eso. Antes de que Kiba pudiera atacar, Kokabiel levantó la pierna y le dio una fuerte patada que lo envió volando lejos.
Kokabiel: Lamentable - dijo antes de enviar un orbe de magia hacia Kiba.
Sin embargo, Xenovia apareció y bloqueó el ataque.
Xenovia: ¡Haaa! - gritó cortando el orbe a la mitad.
[}-O-{]
Issei: Mierda. Él solo está jugando con nosotros - murmuró con frustración.
Asia: ¿Issei-san? - preguntó mientras curaba a Koneko.
Issei: ¡Con Dante ponía más fuerza! ¡Incluso estaban a la par! Ahora solo nos ve como juguetes.
Asia entendió. Dante duraba más tiempo peleando contra Kokabiel, quien tenía más prisa por eliminarlo del planeta. Comparando esa pelea con la actual, había una clara diferencia de poder.
[}-O-{]
Kokabiel: Me sorprende que puedas pelear así después de perder a tu líder.
Xenovia: ¿Qué?
Rias: ¿De qué estás hablando, Kokabiel?
Xenovia: ¿Qué quieres decir con 'perdido a tu líder'? - preguntó, pero el otro rió - ¡Respóndeme, Kokabiel!
Kokabiel rió más fuerte. Rió tanto como un maniático desquiciado.
Kokabiel: Oh, si, es verdad. Estoy intentando iniciar una guerra, así que no hay ninguna necesidad de mantener en secreto esto - dijo antes de responderle - No solo los Cuatro Grandes Reyes Demonios fueron los que murieron en la última Gran Guerra. ¡Dios también murió!
Una gran revelación se soltó, dejando a todos en shock.
Xenovia: E-eso no es cierto.
Rias: ¿Dios está muerto? No puedes hablar en serio. ¡Es la primera vez que escucho sobre eso!
Kokabiel: En esa guerra, el lado oscuro perdió a sus Reyes Demonio y a cientos de Demonios de clase alta. Y aparte de sus líderes, los Ángeles y Ángeles Caídos perdieron la mayoría de sus ejércitos. Para los Ángeles ahora les resulta imposible dar nacimiento a pura sangres. Y estoy seguro de que también hay una escasez en el mundo demoníaco.
Asia: No... ¡No puede ser!
Kokabiel: Cada facción sufrió tanto daño que fueron forzados a recurrir a los humanos para sobrevivir. Los Ángeles, Ángeles Caídos y Demonios. Los líderes de las tres facciones mantuvieron esta información en secreto porque necesitaban a los humanos temerosos de Dios.
Xenovia cayó de rodillas al suelo, incapaz de creer lo que acaba de oír.
Xenovia: Mientes. Esto no puede ser cierto.
Kokabiel: Bueno, esto realmente es de poca importancia. Lo que no soporto es el hecho de que cuando Dios y los Grandes Reyes Demonios murieron, el resto de los líderes decidieron que continuar la guerra sería inútil. No puedo soportarlo. ¡Realmente no puedo soportarlo! - exclamó con ira - ¿Bajar mi puño una vez que ya lo he levantado? ¡Hubiéramos ganado si la guerra hubiera continuado! ¡Y ese maldito Azazel incluso declaró que no habría una segunda guerra! ¡Bien, al diablo con eso!
Asia: El Señor ya no existe. Entonces, ¡¿qué hay de sus Bendiciones?!
Kokabiel: Hmph. Michael está haciendo un buen trabajo. Él se está haciendo cargo de los Ángeles y humanos en lugar de Dios.
Xenovia: ¿El Arcángel Michael está actuando como sucesor de Dios? ¿Y qué hay de nosotros, entonces?
Kokabiel: El sistema en sí está intacto, así que los exorcismos, bendiciones y oraciones no se han afectado mucho.
Esa era mucha información que procesar para Asia, que se desmayó en los brazos de una recién curada Koneko.
Issei: Asia.
Xenovia: Es natural reaccionar de esa manera. Me sorprende que siga manteniendo el control de mí misma.
Kokabiel: Dicho esto, ha habido una disminución considerable en el número de devotos. Y ahora que la gente que mantenía el balance entre la Luz y la Oscuridad se ha ido, es sorprendente que fenómenos extraños tales como la creación de esa Espada Sagrada-Demoníaca ocurran. Normalmente, sería imposible que la Luz y la Oscuridad se mezclaran - explicó - En fin, tomaré sus cabezas. ¡Continuaré donde lo habíamos dejado, incluso si tengo que hacerlo solo!
¿¿??: ¡¡AY YA CÁLLATE!!
Un grito resonó de repente, tomando a todos con la guardia baja.
Kokabiel: ......¿Disculpa? - preguntó con desdén mientras giraba su mirada hacia atrás de él.
Todos miraron a Dante, que volvió a la batalla por un segundo round. Caminaba tranquilamente mientras sostenía a Rebellion cargado en su hombro.
Kokabiel: Miren quien llegó.
Rias: Dante.
Dante: Todo lo que escuché me dio ganas de vomitar - inició mirándolo con asco - Iniciar una estúpida guerra por solo una pataleta tuya. Y no solo eso, lastimaste a mis amigos. Jeje... je... hoy te mueres, perra.
Issei: ¡Estoy contigo, Dante! - exclamó poniéndose en posición de pelea - ¡No voy a permitir que este imbecil explote la ciudad y comience una guerra! ¡Seré el Rey del harem y nadie se interpondrá en mi camino!
Todos: .........
Xenovia: ¿Qué?
Kokabiel: ¿El Rey del harem? ¡Jajaja! - se burló de Issei - Si eso es lo que deseas, ¿por qué no te unes a mí? Serías Rey del harem antes de que te dieras cuenta. Harías todo tipo de cosas cuando quisieras.
Dante: Sí, como no. Issei no es tan estúpido como para caer en... - se detuvo cuando miró que Issei estaba perdido en sus pensamientos - Bueno, si es estúpido.
Sacando a Ebony, le disparó a Issei, con la bala rozando su mejilla.
Issei: ¡Ay! ¡L-lo siento! - sonrió con torpeza - La palabra 'harem' es mi debilidad, y lo sabes.
Dante se golpeó la cabeza con la mano.
Dante: Escucha, Issei - dijo serio - ¿Así es como quieres tener un harem? ¿Obligando a las mujeres a hacer cosas suciamente deliciosas contigo en contra de sus voluntades... o como lo haría un verdadero hombre? ¡Ganándote el afecto de ellas!
Issei miró a Dante por unos segundos antes de sonreír.
Issei: Je. ¡Tienes razón! ¡Un verdadero Rey del harem se gana el corazón de sus mujeres!
Dante: ¡Bien! - sonrió al saber que su amigo no se unirá al lado oscuro - Ahora dejame esta pelea... a mí.
Con una mirada seria, caminó hacia Kokabiel, que seguía dándole la espalda, pero que giró su mirada para verlo.
Kokabiel: Dante, hijo de Sparda... Mitad humano y mitad demonio... Y traidor para los dos lados - dijo dándose la media vuelta - ¿De verdad piensas que puedes detenerme?
Dante: Haaah... - suspiró con irritación mientras se pasaba la mano por su cabello - Viejo, ya para de hablar - dijo antes de sostener a Rebellion y ponerse en pose de pelea - ¡Terminemos con esto!
Corrió hacia Kokabiel y lanzó una estocada hacia él. Sin embargo, Kokabiel fue más rápido. Apuñaló a Dante en el pecho con una espada de luz.
Dante: ¡Kagh! - escupió sangre.
Los demás miraron horrorizados y en shock como Kokabiel atravesó a Dante con la espada de luz. No satisfecho con eso, volvió a apuñalarlo con otra lanza de luz que atravesó su cuerpo.
La fuerza de Dante poco a poco se apagó hasta que cerró los ojos y su cuerpo se volvió inerte, por lo que Kokabiel lo lanzó lejos hasta caer al suelo.
Rias: No puede ser. ¡¡DANTE!!
Kokabiel: ¡Jajajaja! ¿Qué se siente, Media sangre... al saber que has fracasado? - preguntó dándose la vuelta e inflando su pecho con desdén.
De repente, chispas rojas y potentes aparecieron del cuerpo inerte de Dante, lo que obligó a Kokabiel darse la vuelta. Todos vieron en shock como empezó a levitar del suelo y su cuerpo cambiar de forma.
Dante: ¿'Fracasado'? - preguntó con un cambio de voz.
Dante: ¡¡JAJAJAJAJAJA!! - rió volando cerca del suelo.
Rias: ¿Dante?
Xenovia: ¿Qué es esa cosa?
Issei: ¡Te ves como uno de los Power Rangers! ¡¿Cuántos trucos bajo la manga tienes?!
Dante ignoró a todos y solo se concentró a mirar a Kokabiel, que estaba sorprendido, pero luego se calmó.
Dante: ¡Esto es solo el calentamiento!
Kokabiel: Tu arrogancia será tu perdición, Media sangre.
El round dos está a punto de comenzar.
CONTINUARÁ
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