10. Primeros problemas
Ya después de clases, Bell se reúne con Avan sobre la situación de la clase. Se ve preocupado que la mayoría de los compañeros solo piensan en fracasar con el tema de torneo sin dar lo mejor de uno mismo.
- ¿Cómo podemos hacer que tengan más optimismo? - pregunta el peliblanco.
- Hmm... No tengo idea. ¿Que podremos hacer? -
- No servirá de mucho hablar con ellos, recuerda a Blixen-san -
- Esa tipa... - el pelirrojo la menciona algo molesto.
- Bueno bueno, cálmate.
- Bien... ¿Qué tal si los investigamos a escondidas? -
- No sé. No soy bueno para eso -
- Es la única forma.
- Si tú lo dices... -
Así fue el acuerdo entre los dos que saben que será una tarea muy complicada.
A la mañana siguiente, después de las clases que han realizado, el pelirrojo tiene hambre.
- Nngn... - suena el estómago de Avan - Taaaaan hambriento. ¿Hay lugar en el campus donde venden comida? -
- ¿Alguna vez has parado de comer? - pregunta Zeri.
Otro estómago suena por hambre.
- Ha ha. Supongo que estoy muy hambrienta también - habla Cosette.
- Ugh... -
- Bueno, conozco una tienda por ahí, ¿Desean mirar? -
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En la tienda
Los tres llegaron a la tienda y miraron todo el lugar.
- ¡Wow! ¡Ellos tienen todo tipo de cosas aquí! - Cosette expresa muy asombrada.
- Desde libros de texto hasta aseo personal... Impresionante - opina Zeri.
De repente, aparece una mujer castaña que cargaba una caja de pan.
- ¡Hola niños! Un lote fresco de pan recién salido del horno. ¿Tienen hambre? -
- ¡Oh, eso huele increíble! ¡Apúntame! - acepta la rubia.
- ¡Augh! ¡Esto es INCREÍBLE!! ¡Me estás matando ahí! - el pelirrojo no puede mostrar más su satisfacción.
- Hee hee. Simplemente tengo mi certificado, pero me quedo con mi pan -
- No sabía que la tienda la abriría un panadero. ¡Es genial!
- Solo abrí la tienda hoy. Vengan en cualquier momento por un bocadillo -
- Oye, Alicia. Aquí están los rollos de masa fermentada - un hombre llega para avisar a la castaña.
- ¡Oh, bien! Esto tomó un tiempo, Welkin. ¿Qué estabas haciendo? -
Welkin Gunter y Alicia Gunther (Anteriormente Alicia Melchiott)
- Fui asaltado por una golondrina cola de rubí. Ellos solo viven en el sur... -
- ¡Oh, tiene sentido! Cariño, mis primeros clientes están aquí esperando -
- Oh, hola. Deben probar su pan. Es fantástico -
- Espera... ¿Alicia y Welkin? ¿Por qué suena familiar? - Cosette se pregunta a sí misma.
El peliazul se da cuenta al escuchar los dos nombres.
- U-Ustedes son... Los héroes de la última guerra. ¡Ustedes rechazaron al Imperio! ¡El teniente Welkin Gunther y la sargento Alicia Melchiott!
- ¡Ha ha! Creo que estás exagerando un poco, pero sí, yo soy Welkin Gunther. Aunque me retiré de la milicia, ya no soy teniente -
- Y mi nombre es Alicia Gunther, ahora -
- ¿Gunther? Los dos están- - la rubia intenta deducirlo.
- Sí, nos casamos. Si contáramos el tiempo diría que cuatro meses atrás -
- ¿Y cómo vinieron dos héroes decorados a Lanseal? -
- Empezé a enseñar - responde Welkin - Mi primer lugar fue una ciudad no muy lejos de aquí. Alicia y yo nos movimos hacia el sur desde Bruhl -
- Y el director me está permitiendo vender el pan aquí en la tienda -
- Ustedes sí que tienen suerte aquí. Incluso contando escarabajos, la diversidad... El otro día estaba mirando escarabajos por la tarde y lo que supe después es que ya estaba oscuro -
- ¡En ningún momento te detuviste para pensar en tu esposa, que estuvo muy preocupada! -
- ¡Ha ha! Lo siento por ello. Por cierto, el siguiente lote ya debe estar listo -
- Cierto. Bueno, entren aquí pronto, niños. Los esperaré con pan fresco - Alicia se dirige hacia el horno.
- Y si tienen alguna pregunta, estaré feliz de responderla -
Cuando Welkin estaba a punto de irse, entraron otras tres personas.
- Oh bienvenidos, qué se les- -
El antiguo teniente quedó paralizado al ver a cierta persona.
- ¡¡¡S-S-S-Selvaria!!! -
- ¿Qué hace un miembro del escuadrón 7 aquí? - pregunta la mujer en parte sorprendida.
Alicia, por su parte, ya viene cargando el pan.
- Oye, Welkin, ¿me podrías ayudar en- - la mujer mira a la peliplateada - ¡Selvaria! -
- ¡Alicia! ¿Qué haces aquí? -
- Abrí mi tienda aquí. ¡Me alegra verte de nuevo! -
- Un momento, ¿Acaso son Welkin y Alicia Gunther? - pregunta en este caso Bell.
- Efectivamente - responde Zeri.
- ¡U-Un honor conocerlos, mi nombre es Bell Cranel! He leído libros acerca de ustedes acerca de la guerra de hace dos años - se presenta el peliblanco haciendo una reverencia.
- Emilia Percival, un honor conocerlos - la rubi hace también una reverencia.
- Es un gusto conocerlos - responde Welkin - ¿Son compañeros de Selvaria? -
- Así es - responde Emilia.
- Los veo a ustedes dos juntos, ¿Es posible que estén casados? - pregunta Selvaria.
- Sí - responde Alicia.
- Ya veo -
- Por cierto, ¿Por qué viniste aquí? - pregunta la castaña con curiosidad.
- No tengo todavía una razón. Solo estoy acompañando al peliblanco de ahí - la mujer señala a Bell.
- Hoooh, ¿Ustedes dos están saliendo? - pregunta Alicia mostrando una sonrisa maliciosa.
- ¡¿Q-QUÉ ESTÁS DICIENDO?! - reacciona Selvaria muy sonrojada.
Alicia no evitaba de hacer risillas.
- Bueno, ¿Qué se te ofrece? -
- En realidad, Cranel vino a buscar a Hardins -
- Entiendo -
- Selvaria-san, ¿Quieres pan? -
- ¿Eh? - la valquiria mira el pan de Alicia y asiente - No veo la negativa -
Bell compró el pan para él, Selvaria y Emilia y junto con Avan, Cosette y Zeri salieron de la tienda.
Al día siguiente, Bell y Selvaria salían de la biblioteca con varios papeles.
- Ya tenemos los apuntes, espero que Emilia-san consigue las herramientas para la asignación -
- Eso espero. De todos modos, ya no tenemos mucho que hacer -
De repente, oyen a alguien gritar.
- ¡¡¡AAAARGH!!! ¡¡¡MI DIENTHE... ME ROMPISTE MI DIENTHE!!! -
- ¿¿¿Pero qué??? - reacciona Bell en shock.
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En otro lugar
- ¡Hmp! Lo tienes merecido por hablar de un juego más grande del que puedes ofrecer. Bueno, ¿Quién es el siguiente? Apuntaré más alto - Erik empieza a preguntar - ¿Alguien quiere un tratamiento de nariz? -
- ¡C-Corran! ¡Nos matará a todos! - grita un alumno desesperado.
- Pérdida de mi maldito tiempo... Si no pueden luchar deberían estar en casa -
- ¡Erik-san! ¿Qué se supone que haces?
- Ah, Cranel. Eres tú -
- ¿Qué se supones que estamos haciendo genio? - habla un alumno de otra clase.
- Un momento, Avan-san me dijo que eran los de otra clase. Dime, ¿Por qué peleas con ellos? - pregunta Bell en un tono algo preocupado.
- Puedes parar con tus sermones. No es algo que te conviene, este es el motivo -
- ¡Eres uno de nosotros, por eso es que nos conviene! -
- ¿Uno de ustedes? -
- ¿A quién le importa? Solo porque estamos en la misma clas- -
- Yo sí, Avan-san igual. Uno tiene que cuidar a sus muchachos que le cubren la espalda -
- Gran discurso, señor asistente. Pero olvida el alboroto sentimental, ¿Sí? Odio las tonterías de amigos y llenar el espíritu de lucha. Escuchar de gente predicar sobre eso me da ganas de romper cosas. Si no deseas tener algo roto, no fastidies de nuevo, Cranel -
- ¡Espera! No he terminado de- -
- ¡Ya cállate! - Erik lo manda a callar - ¡No tengo una maldita cosa que hablar ni contigo ni con Hardins! - el rubio se va muy molesto.
- Vaya lío... Gracias por contenerte, Selvaria-san -
- ¿Cómo sabías que yo- -
- En un segundo vi por tus ojos y deduzco que ya querías matarlo -
- Está bien - Selvaria suspira en derrota.
- ¡Vaya, Bell-chan! ¿Sobreviviste a un encuentro con el lobo solitario? -
- Vaya Lotte-san, ¿Sobre el lobo solitario te refieres a Erik-san? -
- ¡Claro! Él es un regular hombre de saco según las historias. Un matón notable. Él obtuvo ese nombre porque hunde sus colmillos en cualquiera que se le cruza -
- Ya lo vimos venir -
- En cualquier caso, él es un chico malo. Ha mandado una carga de chicos al hospital. Eso, y una carencia total de cooperación que tiene la clase con pérdida -
- Entiendo... Hay una razón por la que arremete, ¿Verdad? Ya veré que hacer -
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Mientras tanto
Oficina del director
- ¡Oh viejo, tenemos suerte que obtuvimos la oficina del director por tarea de limpieza! Usualmente tendrían que meterse en problemas para estar aquí. ¡Wow! ¡Mira este trono! - habla Joachim asombrado por el entorno.
- Ugh. Aun así, es un dolor. Solo quiero ir a casa. Ni siquiera está tan sucio. ¿Quién sabría si la dejamos así? - habla Sofia muy aburrida.
- C-Chicos, vamos... Tendremos problemas si no lo hacemos bien - habla Morris algo preocupado.
Alguien vino donde estaban los tres y le dio un golpe en la cabeza de Joachim.
- Ugh, ¡¿Franca?! No, viejo, lo hemos hecho. ¡El piso está impecable! -
- ¿Están ciegos? ¡Deberían estar avergonzados! Hay telarañas en ese rincón, hay huellas en el jarrón. ¡Pelusa de alfombra, gente! -
- ¡N-No hay necesidad de hacer esta limpieza loca! - interviene la pelimorada.
- ¡Suciedad en un cuarto es suciedad en el alma! ¡No me iré de aquí hasta que este lugar brille! -
- ¡Aaaaaa...!
- ¡Olvídalo! -
- Les dije que estaríamos en problemas -
Tuvieron que quedar muchas horas mientras que Bell reportó a Avan sobre Erik para luego hacer la asignación junto con Selvaria y Emilia.
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Al día siguiente
Se dictaba el curso de historia, no es un mal curso, sin embargo, puede ser algo fastidioso para uno que proviene del extranjero y peor aún, que su país era enemigo con el que está alojándose actualmente.
- "E.C. 1935 La Alianza Imperial de Europa Oriental cruza la frontera de Gallia. La superpotencia militar rápidamente ganó terreno en las hostilidades iniciales..." Helmut, ¿Probablemente te gustaría leernos el resto? -
- Está bien... "Pero un cambio dramático vio al Imperio expulsado de regreso a la frontera por..." -
- ¡Lo hizo de nuevo! - expresa Cosette algo molesta - ¿Cómo puede ser un profesor tan cruel con su estudiante? -
- ¿Eh? ¿A qué te refieres? ¿Y qué es lo que hizo? ¿Por qué Helmut no debe leer eso? - pregunta Avan confundido.
- ¿No sabes nada? - la rubia suspira - Deberías estar más atento a la clase! Cada vez que nos toque sobre las derrotas del Imperio, él hace leer a Helmut. ¡Él es del Imperio! ¡Vaya cosa! No hay razón de frotarlo en su cara -
- ¿De verdad? Ahora que lo pienso, hay veces que también hace eso a Selvaria -
- Él vino aquí después de firmar el acuerdo de paz, aparentemente. En pocas palabras, él está en seguros - opina el peliazul.
- ¿Qué, como un rehén? ¿A qué te refieres? -
- Para el Imperio, este tratado solo empuja su agenda hacia atrás por un tiempo. Así que es natural que queramos algún apalancamiento para mantener la paz, ¿Cierto? Bueno, ese es Helmut -
- Espera, ¿Solo un estudiante de intercambio? ¿Cómo hace eso parar a dos países de pelear? -
- No se podría, si él fuera solo un estudiante de intercambio. La palabra es, su familia tiene vínculos directos con la sangre imperial. Él es la opción perfecta para un rehén -
- ¿Eh? ¿Y todos saben de este arreglo? -
- Probablemente, escuché algunas personas hablar de esto hace poco - responde Cosette - Me pregunto si esa es la razón por la que toda la clase lo trate fríamente -
- Ahh, bien. Ahora estoy totalmente interesado en conocer a ese chico. Hablaré con él a la próxima- -
- ¡Ustedes, en el fondo! ¡¿Les importaría compartir el asunto urgente del que están discutiendo?! -
- ¡Gah! ¡L-Lo siento, profesor! - Cosette se disculpa con el profesor.
Avan ya conoce dos temas del que irá a investigar con Bell, tal vez les aparezcan más asuntos así.
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Fin del capítulo
Mas no de la historia...
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